05/06/2000
LOS FAMILIARES TENDRÁN UN REPRESENTANTE EN LA PRÓXIMA
"COMISIÓN PARA LA PAZ"
Los familiares de los ciudadanos desaparecidos durante
el gobierno de hecho de la República tendrán un representante en la
"Comisión para la paz" que se integrarán en breve para recibir
información sobre el destino de aquéllos, señaló hoy la delegación
que visitó, a convocatoria de éste, al Presidente de la República.
El abogado Javier Miranda y las señoras Luz Ibarburu y
Luisa Cuestas departieron durante casi una hora con el Dr. Jorge Batlle y
ofrecieron posteriormente una conferencia de prensa en la que dieron
cuenta de la agenda considerada con el primer mandatario.
El Presidente les informó en primer término sobre los
pasos dados para la ubicación de los niños quitados de las manos de sus
madres detenidas y entregados a padres adoptivos, que les dieron nueva
identidad. El Presidente reseñó los casos de la nieta del escritor Juan
Gelman, del joven Gerardo Vázquez y opinó sobre las posibilidad de
ubicar a los ciudadanos de apellido Altman, en torno a los cuales, si se
obtiene nueva información, será "oportunamente" comunicada a
la agrupación de familiares.
Comentaron asimismo que el Dr. Batlle les había pedido
integrar una Comisión que tendrá como cometido recibir información.
"Aceptó el planteo de que la integrara una persona de confianza
nuestra -comentaron los visitantes- una persona de larga trayectoria en la
lucha por la defensa de los derechos humanos. Sobre el punto, la
delegación conversará con los demás familiares, pero el nombre de los
demás miembros de la Comisión, así como la fecha en que comenzará a
actuar, son datos que el Presidente dará a conocer "en el momento
que considere más adecuado". El Dr. Miranda, sobre el punto,
consideró que "aún es prematuro hablar de esto".
Señalaron, sin embargo, que no se conoce todavía
cuántos miembros tendrá, que no la integrarán militares y que tampoco
se ha fijado durante cuánto tiempo ha actuar aunque, comentaron, "no
será tan corto como para no poder recibir formación suficiente ni tan
largo como para que se agote por sí mismo".
Los delegados declinaron dar nombres y comentaron que
"no sabemos, en realidad, hasta dónde se puede llegar a través de
esta Comisión, pero lo que importa es que aquí existe una voluntad
política, por parte del Presidente, que se mantiene firme. Esa actitud
merece el más completo apoyo".
Rubricaron este concepto comentando, ante una pregunta
concreta, que "aunque ésta no es la vía que nosotros hubiéramos
elegido para buscar la verdad, es la primera vez que se acogen nuestros
reclamos y por eso estamos dispuestos a brindar toda la colaboración que
nos permiten dar nuestros conocimientos sobre las personas".
Agregaron que "aunque estas investigaciones no arrojen los resultados
esperados, o sólo los arrojen sobre determinadas personas, para los
familiares "es irrenunciable el deber de seguir luchando para que se
sepa la verdad en torno a todos los uruguayos desaparecidos y no sólo de
algunos".
Los familiares aseguraron al Presidente que se mantendrán en contacto,
a la espera de la puesta en marcha de la Comisión para la Paz y que,
mientras tanto, aportarán todo otro nuevo dato que pueda contribuir al
éxito de sus aspiraciones, a cuyo efecto puede ser útil "nuestro
contacto permanente con organizaciones internacionales de defensa de los
derechos humanos" y familiares de desaparecidos de otros países.