10/04/2001

PALABRAS DEL PRESIDENTE BATLLE EN OCASIÓN DE LA CENA OFRECIDA EN HONOR DEL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA POPULAR CHINA

Edificio MERCOSUR

"Su Excelencia, Señor Presidente de la República de China, Señor Ingeniero Jiang Zemin; Señora Esposa; Señores integrantes de la Delegación de la República Popular China; Señor Vicepresidente; Señor Presidente de la Suprema Corte de Justicia; Señores Ministros; Señores miembros del Poder Legislativo, Señoras y Señores:

Sin duda alguna, el hecho de que el Presidente de la República de China, haya aceptado la invitación que los países de América del Sur le hemos alcanzado para que llegara por primera vez a nuestro continente, constituye un hecho político de singular importancia.

El Señor Presidente representa a un muy antiguo pueblo, con una muy rica civilización y una extraordinaria cultura que, a lo largo de siglos y siglos, ha simbolizado en la historia de la humanidad la expresión de los más destacados dones del intelecto, del arte y de la ciencia.

Y las circunstancias que este encuentro abren, no solamente para el Uruguay sino para los demás países de América, son extremadamente importantes, de alto contenido en todos los órdenes de la vida de las sociedades.

La República de China representa, sin ninguna duda, una nación que cada día jugará un rol más importante en la vida de todos los pueblos arriba de este planeta. Por su historia, tradición y cultura, por su dimensión territorial, por su volumen demográfico, por su situación geográfica, por su participación como país central en las Naciones Unidas, por lo que significa todo ello, China será, sin ninguna duda, cada día más un país cuya voz se escuchará en el mundo con respeto y con atención.

Que usted, Señor Presidente, nos devuelva la visita que nuestros Presidentes han realizado en su momento a su país significa que China, al igual que el Uruguay, desea profundizar no solamente nuestros lazos de amistad, de unión, de fraternidad en las acciones comunes, sino que además usted siente que su país, al igual que el nuestro, vive de la conmunión recíproca de intereses que entre ambos podamos llevar adelante. Por más grande que sea un país, nadie puede estar aislado.

El comercio recíproco entre las naciones nos hará no solamente mucho bien a cada uno de nosotros en el conocimiento que uno tendrá del otro, sino que además nos permitirá crecer y con ello atender mejor los derechos de los pueblos. Y sin inguna duda el camino que el Uruguay iniciara en las relaciones con la República Popular China ya muestran esa condición y estamos absolutamente convencidos que de esta visita de Su Excelencia el Señor Presidente de la República Popular de China surgirán nuevos y más profundos lazos que le harán bien a nuestros pueblos. En esta casa, Señor Presidente, sede la capital del MERCOSUR, los pueblos de América que usted ha visitado sienten que a través de este camino de relación estamos en condiciones de continuar haciendo muchas cosas en común, cosas buenas para nuestros pueblos, cosas buenas para nuestra gente, para nuestra cultura y para nuestra civilización. Brindo por la República Popular de China, por su pueblo y por su amistad con los países de América."