16/04/2001

ENTREVISTA REALIZADA AL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA DR. JORGE BATLLE EN CHICAGO, EE.UU., POR ELBIO RODRÍGUEZ BARILARI, EDITOR JEFE DEL PERIODICO "LA RAZA"

PERIODISTA:...Sin embargo, la comunidad latina en Chicago es más bien contra embargo. Porque mayoritariamente la gente opina que no ayuda para nada a la gente en Cuba. En el caso Elián González la gente pensaba una cosa y el resto de la comunidad latina estaba porque Elián González fuera con su padre no por un tema político, por un tema familiar. O sea que el tema embargo, Cuba, etcétera...

PRESIDENTE BATLLE: No, nosotros estamos en contra del embargo. Nosotros creemos que el embargo al único que le sirve es a Castro. Le da un pretexto a Castro, quizás el último pretexto que Castro tiene para no dar las libertades, para rehusar que Cuba en paz vaya abriendo su esquema político y vaya permitiendo que distintos sectores de opinión la expresen a través de su participación no solamente como organizaciones políticas sino como organizaciones en donde puedan expresarse a través de la prensa, a través del derecho de reunión y asociación absolutamente libre. Y yo creo que el embargo, reitero, al único que beneficia es a Fidel Castro. En primer lugar, el embargo no es una realidad, porque el embargo tiene una violación permanente en la medida en que está autorizada la remisión de fondos y el envío a las familias por parte de los cubanos que están fuera de su país, la mayor parte de los cuales están en Sur, en Miami. Quiere decir que por ese lado el embargo no es tal. Y en cuanto a los efectos del embargo sobre la economía cubana, yo no tengo un conocimiento preciso, pero debo decir que Cuba mantiene desde siempre con el resto de los países del mundo, no solamente en América del Sur, sino en Europa, con Japón, lo que significa que tiene posibilidades de comercial. Todo el desarrollo turístico cubano es en buena medida o español, o argentino, o europeo o canadiense. Recuerdo haber visitado una organización que manejaba el hermano de Fidel Castro –no Raúl sino otro hermano, un hermano mayor—que era una organización que tenía y explotaba una enorme cantidad de lo que se llama dairy farms y todo el ganado era un ganado importado de Canadá, un ganado canadiense, todo el ganado lechero era canadiense y las experiencias que allí se estaban haciendo en cuanto a, digamos, todo el tema de óvulos y demás y embriones se hacía bajo la base de una empresa organizada, un laboratorio organizado por los japoneses. Lo cual significa que estamos hablando de españoles, japoneses, canadienses, argentinos, italianos, este, lo que significa entonces es que el embargo hoy por hoy no le agrega absolutamente nada a los esfuerzos que todos tenemos que hacer para ayudar a que Cuba en paz –absolutamente en paz—abra sus puertas políticas a todas las expresiones y a todas las formas de asociación, y que por el contrario es un instrumento que en todo caso al único que beneficia es a Fidel Castro, al régimen de Castro.

PERIODISTA: Otra pregunta que es imprescindible hacer, porque hizo bastante ruido afuera, yo no sé hasta que punto fueron conscientes de eso, fue declaraciones sobre cómo se soluciona, cómo se enfrenta, el tema internacional de la droga.

PRESIDENTE BATLLE: Bueno, yo creo que acá es un lugar donde ese tema no se me debería preguntar mucho. Acá en la Universidad de Chicago acá cerca está Milton Friendman. Y el primero que ha dicho tal cosa fue él precisamente Milton Friedman, que es un Premio Nobel de Economía, una figura más que conocida en el mundo de la economía y en el mundo del pensamiento social y político. Sostuvo tal cosa e inclusive es el que escribe el prólogo de un reciente libro publicado por la Fundación Catos, de Washington, D.C., en donde el autor de uno de los textos centrales es el gobernador de New Mexico, que van a hacer ahora este año en Albuquerque, con la participación de Soros, un gran meting a propósito de analizar el tema de la política relativa a las drogas. En la misma posición está también otro Premio Nobel de Economía, el señor Gary Becker, que estuvo en Montevideo, y por tanto yo llego atrasado a sumarme a esta manera de pensar. Desde el punto de vista público, desde el punto de vista particular, siempre he pensado así, porque la realidad nos muestra que el proceso de lucha contra la droga no ha concluido con la droga ni nada que se le parezca. Por el contrario, la droga está afectando la vida de Colombia de una manera sustancial, al punto que nosotros en oportunidad en que estuvimos en las Naciones Unidas en la Reunión del Milenio y tuvimos oportunidad –unos segundos, casi un minuto- de estar con el Presidente Clinton, la única cosa que le pedimos al Presidente Clinton, y le hemos enviado un similar mensaje al Presidente Bush, es que le dieran a Colombia, las mismas facilidades comerciales que le han dado a México, porque creemos que el Plan Colombia, con solo una cosa interesante desde el punto de vista del desarrollo de la infraestructura, no es el camino mejor para fortificar la economía colombiana y defender a Colombia de ese proceso de, digamos, de daño creciente que produce la confrontación con la guerrilla. Notoriamente hoy la guerrilla colombiana no es un movimiento ideológico para alcanzar el poder, implantar del poder un determinado estilo de gobierno una determinada ideología, un determinado sesgo político, no tiene ese perfil. Quiere decir que se mantiene en función de otras cosas, que sin ninguna duda han motivado que en Colombia durante muchos y muchos años hubiera una confrontación muy violenta entre liberales y conservadores hace muchos años, pero básicamente aunque eso puede haber sido lo que le dio un caldo de cultivo adecuado a mantener esta confrontación, quién la mantiene es el narcotráfico y la mantiene además el narcotráfico no solamente dándole mucho dinero y muchas armas, sino además creando en la sociedad colombiana una situación que determina que mucha gente, bueno, haya preferido mudarse para Miami a para hacer sus actividades desde fuera de sus país, este, o para otro lugar, este, y afecta no solamente a Colombia sino que afecta a toda América, afecta al Ecuador puesto que es la frontera ecuatoriana-colombiana, del lado colombiana no existe presencia fuerte de la autoridad institucional colombiana, afecta al Brasil que tiene una muy larga frontera y muy difícil frontera, en donde Brasil ha tenido que ejercer vigilancia severa para defender su territorio, afecta por supuesto la frontera con Venezuela, en donde los hacendados venezolanos han denunciado una vez más la incursión permanente de la guerrilla de la FAR, secuestros de hacendados, exigencias de rescate, muertes en muchos casos y también afecta a Perú, con quién tienen fronteras y con quien han tenido también confrontaciones militares; afecta a toda América porque desde Colombia, vía los países fronterizos circulan centenares de avionetas, que bajan y suben en cualquier lugar, descargan la droga sin aterrizar, con un cesnita livianito usted puede bajar en el Uruguay en cualquier lugar. Muchas veces hemos encontrado avionetas que bajan en la mitad del campo, dejan su carga y el volumen de la misma claramente expresa que esa carga no es para el Uruguay, porque el Uruguay es en país con muy pocos habitantes y por tanto, o es para remitirle a Europa, o es para pasarla para Brasil, todo eso genera una serie de problemas, que no solamente no disminuyen, sino que por el contrario aumenta, eso es como yo lo veo en América del Sur, no conozco la realidad americana, pero después de muchos y muchos años, se ha invertido muchísimo esfuerzo por parte de los Estados Unidos, por parte de la D.E.A., en resolver este problema, y sigue siendo Estados Unidos el mayor consumidor. Por lo tanto este es un tema no solamente que tiene una base social, tiene una base económica muy fuerte. Si usted relaciona el precio que recibe el productor agrícola, que siempre es mejor, porque es un cultivo más sencillo, que se puede cosechar varias veces al año, entre ese precio y el precio final, usted advertirá que resiste cualquier tipo de confrontación dada la fuerza de tentación que tiene el precio final. Entonces, usted termina viendo que en las grandes ciudades americanas, desde New York hasta cualquier otra ciudad, en algunos barrios de New York a determinada hora de la noche, la gente desaparece de las casas y la zona se pueblan de personas que compran y otras que venden, y cuando la policía organiza una redada y retira de ese lugar porque toma preso algunos de los que son vendedores al día siguiente hay otro que lo sustituye y están esperando que eso suceda para remplazarlos. Porque es un negocio tan bueno, tan sencillo, tan fácil, porque tiene que ser muy fácil vender droga, porque sino no se podría vender la cantidad que se vende. Este, inclusive en ese interesantísimo libro de la Fundación Cato, que presisamente recibí una carta del Sr. Soros, invitándome a participar de la reunión de Albuquerque, que lamentablemente yo no voy a poder ir, porque en esa fecha comienzan las reuniones del MERCOSUR, en Asunción, bueno, ahí mismo se describe como es la situación, un hombre que toda la vida ha estado trabajando en esa área en la policía en New York, lo cuenta. Bueno, viene un joven dominicano que se dedica a vender un poco de droga, hace algunos pesos y tiene suerte con eso, luego vuelve a su país, se casa con la novia de la escuela, compra una casita, constituye una familia honorable y hace una vida totalmente alejada de la droga, o sea, lo que viene es a buscar unos pesos. Entonces que quiere decir, quiere decir que mientras que el negocio sea tan bueno, tan bueno, no vamos a encontrar a Elliot Ness.

PERIODISTA: Creo que el impacto, un poco especialmente en Estados Unidos, de que usted tomara esa posición, que en Uruguay hay otras personas que no comparten.

PRESIDENTE BATLLE: Bueno, pero el Dr. Lacalle también; el Dr. Lacalle ha manifestado, nosotros tuvimos una reunión en su momento, una reunión así, amistosa, en donde participaba el señor Bush padre y participaba el señor De la Rúa y el señor Menem, el señor Lacalle y yo, y yo planteé esto, esto fue mi planteo y me apoyó el Dr. Lacalle. Quiere decir que el Dr. Lacalle también opina igual que yo.

PERIODISTA: El tema es que, aparentemente, la opinión pública de los Estados Unidos no le sorprendería que el primer Ministro de Holanda planteara eso, les extraña, y les sorprende cuando eso viene de Latinoamérica.

PRESIDENTE BATLLE: Y no veo por qué.

PERIODISTA. Por aquello del argumento moral.

PRESIDENTE BATLLE: El argumento moral, el argumento moral. ¿Cuál es el argumento moral, que tomen vino? Porque hay una enorme cantidad de gente que se emborracha con vino y el alcohol mata muchísima gente y yo veo que abro las revistas, los diario, miro la televisión, y dicen que hay vinos buenísimos, que hay que tomar mucho vino, que es sano, que hace bien al corazón y la gente inunda el corazón de vino y no sé cuántos muertos hay de vino. ¿Y el tabaco? ¿Y por qué no prohibimos el tabaco, prohibimos el vino y prohibimos el té? El Christian Science Monitor –no sé si existe o si sigue existiendo- en Boston no publica ni avisos de té, ni avisos de café, ni avisos de alcohol, pero no podríamos tomar mate, que notoriamente parecería, además, que hace bien al colesterol, es, después de cierta hora de la tarde, un excitante; a mí me mata, de noche, no me deja dormir. Para estudiar ,¿qué hacíamos?, tomábamos mate. Entonces, que es mucho más peligrosa la heroína y la cocaína, por supuesto que es mucho más peligrosa. Por supuesto que es mucho más peligrosa. ¿Qué existió siempre? Pero cómo no, existió siempre. Los ingleses ocuparon China a través de la guerra del opio. O sea, existió siempre. No es una novedad. Los alucinógenos, todo tipo de drogas, existió en Roma, existió en el antiguo Egipcio, en las civilizaciones precolombinas, existió siempre. Ahora tiene una difusión muchísimo mayor. Entonces, o lo peleamos con educación usando los mismos recursos o la peleamos como la forma como se está peleando ahora. La forma como se está peleando ahora no nos va a mejorar la situación. Con educación, nos va a mejorar la situación, porque además va a pasar otra cosa: el precio va a desaparecer como un incentivo para organizar esa cosa brutal. Entonces, si no existe ese interés en el precio tan brutal, esas organizaciones que se sustentan sobre una cosa que le permite, una actividad que le permite, a una organización darle mil millones de dólares a otra para que se mantenga en la acción guerrillera. Me pregunto: cuando el Congreso de los Estados Unidos se dispone a darle mil millones de dólares a Colombia, hay una discusión tremenda, y se lo da por una sola vez. ¿Pero qué problema? No puede competir el Congreso de los Estados Unidos con un narcotraficante de Colombia, si le dan mil millones de dólares todos los años. Es mucho más fuerte que el Congreso de los Estados Unidos. Ese es el título, ¿vio?: los narcos son más fuertes que el Congreso de los Estados Unidos. El Congreso de los Estados Unidos, para dar mil millones discute no sé cuánto tiempo y los narcos lo consiguen todos los años.

PERIODISTA: Bien.

PRESIDENTE BATLLE: Bien, no. Mal.

PERIODISTA: Yo le aclaro que comparto absolutamente la posición; creo que es la única solución.

PRESIDENTE BATLLE: No sé si es la única solución. Lo que sí sé que ésta no es.

PERIODISTA: Lo saco de este triste tema y lo llevo a otro: MERCOSUR.

PRESIDENTE BATLLE: Cómo no. Mire, el MERCOSUR es una cosa necesaria. Es una organización necesaria; absolutamente necesaria. Tiene sus baches, ¿no? Tiene sus baches. Por ejemplo, al MERCOSUR le ha faltado institucionalizarse. Ahí tenemos supuestamente la capital del MERCOSUR en Montevideo, en el Parque Hotel. Es un edificio que usted conoce, un edificio precioso; está vacío, ¿vio?. O sea, ahí no funciona el MERCOSUR. Si usted viene de Europa y usted dice quiero hablar con el secretario del MERCOSUR, no existe. Usted tiene que hablar con los ministros de Relaciones Exteriores de los países que integran el MERCOSUR, o tiene que hablar con todos los Presidentes de los países que integran el MERCOSUR. El MERCOSUR no se ha dispuesto a darle a una institución central cierto grado de supranacionalidad para que la cosa funcione, entonces al final es una discusión entre partes. Entonces viene el Dr. Cavallo en una situación de excepción y dice: se acabó para mí la unión aduanera; yo ahora bajo los aranceles, sí o sí, y subo los aranceles, sí o sí. Viene Brasil y dice, bueno, no tengo más remedio que devaluar, devalúo y devalúo: pácate, el 70 o el 80 por ciento. Los países chicos no podemos decir lo mismo, no tenemos condiciones para decir lo mismo. Si crecemos, no molestamos a nadie y si nos va horrible, no perjudicamos a nadie. Quiere decir que es una situación en donde notoriamente las diferencias se notan mucho, y por eso la Unión Europea caminó porque el socio principal, la locomotora de la Unión Europea, que era Alemania tenía una política económica estable. Fíjese que Brasil devaluó uno a uno, ahora uno a dos y, en los tres meses que van, ya está el 20% más. Imagínese que eso genera, sin ninguna duda, disparidades entre todos nosotros. El MERCOSUR tampoco tiene tribunales estables que permitan que, cuando hay una diferencia, la diferencia se resuelva a través de tribunales estables. Lo que significa que las diferencias se resuelven por una discusión que termina siendo una conversación de tono meramente político y más que jurídico, ¿no es verdad?. Todo eso no le hace bien al MERCOSUR. Yo no creo que el MERCOSUR vaya a desaparecer, para nada, lo que sí creo es que tenemos que comenzar por reconocer cierta clase de, digamos, de porosidad, que tiene el MERCOSUR frente a estas situaciones. Básicamente hoy, y yo le diría que hoy por hoy la cosa más clara que hay es la diferencia esencial entre lo manifestado por el gobierno argentino, básicamente por el Ministro de Economía, el Sr. Cavallo, y por el gobierno brasilero, ¿no? El Ministro argentino, Cavallo, quiere volver a que el MERCOSUR sea una zona de libre comercio. El gobierno brasilero quiere mantener el compromiso de "Ouro Preto", en cuanto a que sea una unión aduanera. Cavallo ha insistido con esto, ha insistido en forma reiterada, inclusive lo ha manifestado acá, también en forma muy clara, cuando él vino, tanto él y el Sr. Mondino, su representante. Quiere decir que estamos en un momento de cierta indefinición en cuanto al rumbo que va a tomar el MERCOSUR de futuro. Las modificaciones arancelarias planteadas por el Sr. Cavallo han sido consolidadas hasta el fin del 2002. No es poca cosa que Argentina tenga durante 24 meses una ventaja para importar bienes de activo fijo de última generación sin pagar los aranceles que hoy está pagando Brasil, y en algunos casos los que paga el Uruguay. Con lo que, de seguro, el Uruguay por lo menos, lo va a plantear en la próxima reunión en Asunción, en el mes de junio. Y supongo que Brasil también estará interesado en mirar un poco eso, para poder ambos países – y el Paraguay otro tanto-, acceder a la misma posición que tiene hoy Argentina hasta el 31 de diciembre del 2002. En ese interín vamos a estar analizando ALCA, en ese ínterin vamos a estar analizando ALCA. Y yo creo que el ALCA tuvo un episodio positivo en la última reunión de la Argentina, según me han informado los Ministros del Uruguay que han participado de la reunión. Llegaron satisfechos de la reunión del ALCA, de los documentos aprobados, de los objetivos alcanzados. No hay duda que en América todos están de acuerdo con el ALCA, salvo una expresa manifestación del Presidente de Venezuela. Pero, Brasil también está de acuerdo con el ALCA. Brasil lo que ha discrepado con el ALCA es en cuanto a la fecha, pero no en cuanto al acuerdo en sí mismo. Quiere decir que es muy posible que, más allá de lo que cada uno piense con respecto a las fechas, los hechos determinen que una discusión, un análisis tan complejo, pueda llevar todo el tiempo que sea utilizado como el tiempo para poder implementar el ALCA, que es el 1º de enero del 2005. Hay otra cosa que está jugando durante este proceso. Y es de que el 31 de diciembre del 2003 se termina la cláusula de paz en la OMC. Después que se hizo la Ronda Uruguay, y con posterioridad, para consolidar cosas que habían estado asumidas en la Ronda Uruguay, se hizo un acuerdo, un acuerdo llamado el acuerdo de Marraquesh. En esos documentos se estableció una cláusula de paz, que quiere decir que durante el tiempo que mediara hasta la fecha de la cláusula de paz, o sea, hasta el 31 de diciembre de 2003, las partes integrantes de la OMC, se comprometían a no entablar procesos vinculados a, digamos, a cuestiones que se pueden alegar; o sea, subsidios, comercio administrado y una serie de normas que impiden el libre comercio. Pero eso cae el 31 de diciembre del 2003. Se acaba de resolver el problema de la banana entre Estados Unidos y la Comunidad Económica Europea, que era uno de los temas más importantes pendientes de discusión, de resolución. Pero nosotros tenemos todos los temas pendientes a las cuestiones agropecuarias, que las tenemos también pendientes con los Estados Unidos. Nosotros llegamos a los Estados Unidos con una cuota. Mientras nosotros tenemos 20 mil toneladas de cuota de carne y Argentina tiene 20 mil toneladas de cuota de carne, Australia tiene arriba de 200 mil, Nueva Zelandia tiene una cuota muy importante. Lo que significa que también pasa lo mismo con los quesos. O sea, tenemos dentro de estas negociaciones del ALCA, y al mismo tiempo, negociaciones que pasan por la OMC y por la nueva ronda de comercio de la OMC y que tienen además como referente esa fecha del 31 de diciembre del 2003. En buen romance, entre hoy y el 2003 se va a cocinar todo. Y la tendencia es, por lo menos la tendencia actual, es a tratar de abrir el comercio y no de cerrar el comercio, ¿no?. Nosotros percibimos además que en las conversaciones americano-chilenas, se han incorporado cláusulas vinculadas a la ecología, vinculadas a las reglas sobre trabajo, salario, protección al trabajo. A nosotros no nos preocupan ninguna de esas reglas. En cuanto a las reglas ecológicas, nos preocupan que los que firmen con nosotros cumplan. O sea, hay dos formas de hacerle daño a la ecología. Le hacen daño los países desarrollados, porque en su desarrollo generan, entre otras cosas, el recalentamiento de la atmósfera. Y le hacen daño los países no desarrollados, porque la pobreza es un factor que también altera, digamos, la conservación de los elementos necesarios para tener una economía sustentable sobre el planeta. Quiere decir que, en mayor o en menor grado, todos participamos del daño que se le está haciendo al planeta, desde mi punto de vista los países desarrollados en una forma muy importante. Y otros países, como fueron los países que estaban detrás de la entonces llamada "cortina de hierro", tenían un desarrollo industrial tan inorgánico, tan poco conducido, de que hicieron enorme daño a su propia ecología y a la del mundo. Con respecto a las normas laborales al Uruguay no le preocupan, al contrario. El Uruguay tiene que competir con los salarios que la China le paga a sus obreros, nada tienen que ver con la realidad cuando los salarios en el Uruguay y las normas laborales en el Uruguay resisten cualquier comparación con las de cualquier país del mundo.

PERIODISTA: La pregunta que venía justamente sobre ecología, Kyoto...

PRESIDENTE BATLLE: Nosotros firmamos Kyoto, nosotros firmamos Kyoto. Precisamente en la conversación que tuvimos con el Presidente de China, le decíamos, bueno, que si Estados Unidos no quería firmar, porque ellos tampoco querían firmar, bueno, ya que él conocía al Sr. Bush padre y, por tanto, conoce al hijo, que se agarren de la mano, vayan los dos juntos y firmen los dos juntos al mismo tiempo. O sea, si uno no firma por el otro hay dos soluciones; o que no firme nadie o que firmen todos. Y bueno, que vaya y firme.

PERIODISTA: Acá el tema es que Kyoto ha sido bastante conmocionante o bastante removedor, y ha habido bastante crítica internamente en Estados Unidos por el tema de la negativa. Pero no sólo por eso, sino por todas las políticas anti-ecológicas que Bush esta haciendo desde el segundo día que tomó el poder y la última ha sido la aceptación de una dosis de arsénico en el agua, muy superiores a las que estaban admitidas anteriormente, ¿cambia las reglas de trabajo, no?.

PRESIDENTE BATLLE: Mire, yo no tengo conocimiento técnico, y no tengo conocimiento, digamos, de estas cosas. Yo lo que veo, en el sur, es que hay algunos manejos llamados ecológicos que tienen poco de ecológico, tienen mucho de político y además, en buena medida, perjudican a los países más pobres para que puedan desarrollarse ordenadamente, ¿no? O sea, me da la impresión de que no es el caso del Uruguay, pero en otras naciones de la costa del Pacífico, esos movimientos han tenido un sesgo mucho más político que ecológico.

PERIODISTA: Vamos un poco más al Uruguay, concretamente. Un tema que está todos los días en los cables y que ha vuelto un poco en el tapete, últimamente ha sido el tema de los Derechos Humanos en el Uruguay, a partir de su asunción en la Presidencia, de cómo se ha manejado ese tema durante su presidencia. Entonces, ...

PRESIDENTE BATLLE: Eso anda bien. La Comisión, precisamente el día que yo salí del Uruguay había solicitado la extensión de su plazo. Han hecho cosas muy importantes, algunas son públicas, otras, de a poco se van haciendo públicas. O sea, ha trabajado bien, ha trabajado con seriedad, con reserva. Además de eso han contribuido a resolver algunos problemas, de gente que se presumía desaparecida y que no era tal, y que tenía otro tipo de problemas familiares que se pudieron conocer en su momento. De gente que había desaparecido en la Argentina que se ha empezado, a raíz de una muy rápida y eficaz acción de la Comisión de la Paz y del Ministerio correspondiente del Uruguay, de acercarle las informaciones antropológicas a la respectiva comisión argentina, se han comenzado a encontrar en los restos de tumbas NN, en la Argentina, personas uruguayas que fallecieron en la Argentina durante ese tiempo. Se está ayudando también a que los argentinos puedan, en el caso de que así sea probado por los análisis correspondientes en algunas tumbas NN que existen en Rocha y en algún otro departamento, creo que en Colonia, se sigue trabajando en eso. Y yo creo que es una Comisión que, como digo, ha actuado con seriedad. Ha tenido la enorme desgracia del fallecimiento del Padre Pérez Aguirre, que era una persona que estaba actuando, como todos los demás, con gran sentido humano y con gran vocación de buscar soluciones definitivas. Mantienen una relación próxima con los familiares de los desaparecidos; intervinieron en una reciente, reciente circunstancia, en la que se pretendió hacer aparecer como una persona que había fallecido en esas condiciones a un vecino del departamento de Rocha, de la zona de Castillos, y pudieron, por los análisis de ADN, ver que no era tal cosa, no había tal cosa. Quiere decir que yo creo que es una Comisión que se ha ganado el respeto de la sociedad uruguaya, actúa con absoluta independencia. Es más, yo me informo de las cosas al mismo tiempo que se informa, prácticamente, a la población. O sea, cuando se me informó a mí de que habían encontrado, habían podido identificar a algunas personas en Buenos Aires, fue el día antes en que se informó a la prensa y antes se informó además a los familiares, como corresponde, ¿no?, por otra parte. O sea que, yo creo que es un hecho positivo para la sociedad uruguaya.

PERIODISTA: ¿Y respecto a la actitud de las Fuerzas Armadas?

PRESIDENTE BATLLE: No ha habido ningún problema. En ningún momento ha habido ningún problema.

PERIODISTA: Con respecto al episodio con el anterior Jefe del Ejército, por ejemplo, que comentario...?

PRESIDENTE BATLLE: ¿Qué episodio?

PERIODISTA: Bueno, trascendió por los cables, al menos, una sanción de su parte a un comandante de las Fuerzas Armadas.

PRESIDENTE BATLLE: No, no, para nada. No, no. Fue una sustitución de un Comandante de las Fuerzas Armadas. Pero no tiene nada que ver con esto. La, el reemplazo del Teniente General Geymonat por el Teniente General Daners está, es totalmente ajeno, "ni por las tapas" pasa por ningún episodio vinculado a la Comisión de la Paz, no para nada. Al contrario, tanto el Teniente General Geymonat, como el Teniente General Daners, como los demás Oficiales Generales, en ningún momento han dejado de ser informados, plenamente por el Poder Ejecutivo, como corresponde. Pero ninguno de ellos...

PERIODISTA: ...no será que él había hecho unas declaraciones, ...?

PRESIDENTE BATLLE: No, no. No, no, para nada, no. Yo no sé qué cables serán, porque yo no los leí.

PERIODISTA: Fernández.

PRESIDENTE BATLLE: Ah, no, no. Usted está hablando del General Fernández. El General Fernández, en su momento, al principio del gobierno hizo algunas declaraciones y se le dio una amonestación, digamos, meramente de rutina dentro de los cánones de la vida militar. Hoy es un general retirado, es una persona a quien conozco, de quien soy, además, amigo de antes, o sea, lo conozco de mucho antes de ser Presidente de la República. No, al contrario, no hay ningún, ningún tipo de problema. Por suerte, no hay ningún tipo de problema de esa naturaleza en el Uruguay.

PERIODISTA: Particularmente en Chicago el año pasado, principios de este año, se registró un incremento enorme de intentos de emigrantes uruguayos de llegar a trabajar a EE.UU. y paralelamente en otras zonas de EE.UU., como que habría un incremento fuerte del intento de emigrar.

PRESIDENTE BATLLE: Bueno, es posible. Es posible que el año pasado haya habido un "empujón", en función de que notoriamente la tasa de desempleo del Uruguay subió hasta 14 y pico por ciento. Ese ascenso de la tasa de desempleo en el Uruguay es la consecuencia de que el Uruguay no vive entre EE.UU. y Canadá; vive entre Brasil y Argentina. Y entonces, las cosas que económicamente suceden en Brasil y en la Argentina, chocan de una manera muy, muy fuerte sobre la economía uruguaya. La economía uruguaya, en un mundo que no es un mundo abierto, ha tenido que crecer dentro del mercado argentino y dentro del mercado brasilero. Y esa circunstancia nos ha limitado mucho. Y por tanto, ésa es una de las razones principales por las que el Gobierno participa de una política de procurar una economía mucho más abierta, de buscar alternativas de mercados, como el mercado asiático. Las razones son las que me llevan a Japón, el mercado iraní, -en donde el Uruguay tiene posibilidades futuras muy importantes- y además, consolidar nuestra situación sanitaria, para tratar de esa manera, de tener una permanencia creciente en los mercados canadienses, americanos y mexicanos y en todos los mercados del Caribe con respecto a la venta de productos cárnicos. O sea, el Uruguay tiene que tener una política de mucho más apertura. No dudo que el Uruguay es un país mucho más abierto, porque los números así lo dicen, que la Argentina y que el Brasil, pero eso no alcanza. En ese sentido, un ejemplo claro de lo que hay que hacer en América lo dio y lo da Chile, que tiene una política de apertura mucho mayor que la que hemos alcanzado nosotros y nosotros pensamos que con ese proceso de apertura el país va a poder crecer, no digo independizándose, porque nunca lo vamos a lograr, ni es tampoco nuestro propósito, de lo que es la marcha de la economía brasilera y argentina, pero por lo menos teniendo alternativas que nos permitan tener, digamos, un poco mayor de, mayor de libertad en cuanto a las opciones, a las opciones de crecimiento que el país necesita. Advierta que, si usted mira los mismos guarismos, los mismos números económicos de 1998 y de 1999, usted verá algunas cosas que son como terremotos. Nosotros pasamos, de un año a otro, a dejar de venderle al Brasil cientos de millones de dólares y lo mismo en la Argentina, que sufrió una recesión muy grande como consecuencia de la devaluación brasilera. Y hoy la Argentina está en una situación de la que todos esperamos se aleje. O sea, una situación de cierto riesgo. Hoy la Argentina, con Cavallo, ha comenzado a tener una perspectiva, pero es muy nueva su presencia, es muy reciente, no la ha podido consolidar. Quiere decir que sí, que en el año 1999 y en 2000, hubo una corriente fuerte en procura de muchos uruguayos de ver otros horizontes.

PERIODISTA: ¿Se está revertiendo?

PRESIDENTE BATLLE: No creo que se esté revertiendo, digo que ha de estar la presión disminuyendo porque, lentamente, la economía nuestra empieza a mejorar. Este año vamos a tener un crecimientos importante en determinados aspectos de la vida económica nacional. Ese año además, a esa crisis económica se le agregaron otras cosas. Tuvimos una serie de terremotos de distinta magnitud: subieron los intereses en el mundo, hoy bajaron enormemente y van a seguir bajando; bajaron los precios de las comodities, hoy se han estabilizado y han empezado a repuntar por la propia crisis europea. Además de eso, subió el precio del petróleo y se multiplicó por 2 y por 2 y medio y por 3, hoy parecería que esta tendiendo a una cierta estabilidad. Lo cual quiere decir que, las cosas se dieron tan negativamente en el Uruguay y en el sur, con respecto al año anterior, a partir de 1999, que el aumento de la tasa de desempleo genera, procurar por parte de los uruguayos, buscar algún horizonte distinto al nuestro. Esto no es nuevo, ha sucedido en varias oportunidades en el país cada vez que hay una presión de esta naturaleza. En algún momento la gente se trasladaba a la Argentina o al sur de Brasil, donde hay viviendo muchas personas que descienden de uruguayos. Pero sucede que, la zona toda más o menos está con el mismo, con el mismo ritmo de crecimiento. De allí la idea de la necesidad de provocar una apertura económica mucho mayor. Es un esfuerzo que hay que hacer en el Uruguay, que siempre tiene algún tipo de resistencia a ese tipo de esfuerzo. Hay una contradicción muy interesante que algún día los psicólogos sociales la podrán explicar mucho mejor que yo; a la gente le gusta exportar pero no quiere integrarse con los países con los cuales va a tener socios que le puedan comprar. O sea, que es complicado al mismo tiempo pretender venderle a uno que puede comprar y al mismo tiempo decirle "pero mire yo quiero que usted me compre, pero no me quiero asociar con usted". Es una cosa que, en fin, es difícil de entender, ¿no?, pero sucede ¿vió?, en el Uruguay sucede. Pienso que sucede en muchos lados.

PERIODISTA: Si pudiera esquematizar la situación de los países del 1 al 10, ¿en qué lugar esta Uruguay?.

PRESIDENTE BATLLE: No, no, no, no, yo no creo que sea esa situación porque en algunas cosas el Uruguay está 10. Y, en otras cosas, está regular con desuficiente. Por ejemplo, usted llega a una ciudad como Chicago, y ve la limpieza ante Chicago y piensa en Montevideo y dice "acá están en 10 y allá estamos... no hay número allá. De uno a 10, estamos en menos 7". Porque vivimos en Montevideo, en un nivel de descuido y de suciedad en la ciudad que nunca en mi vida he visto antes, nunca. O sea que, en eso estamos menos 10. En otras cosas el Uruguay está muy bien. Creo que, comparativamente, en términos relativos, cualquier persona que conozca el Uruguay advierte que es un buen lugar para vivir, sin ninguna duda, por muchísimas razones que usted conoce, y que no, el Uruguay las conserva y las va, inclusive, a continuar alentando. En otras, como estas, no estamos todavía en condiciones de crecer en la medida en que podemos crecer. Pero, yo creo que, que la orientación que el país tiene, que la sociedad tiene es la correcta.

PERIODISTA: Recientemente hemos visto algunas encuestas donde hay algo curioso en cuanto a la aprobación que tiene el gobierno y la aprobación que tiene usted personalmente.

PRESIDENTE BATLLE: Y bueno.

PERIODISTA: ¿Puede atribuirle a algo esa diferencia?

PRESIDENTE BATLLE: No, yo creo que, que, yo creo que, que es... hay una... en las sociedades, no sé si en todas las sociedades, pero en las sociedades hay, hay una cosa bastante, me parece a mi, que es bastante clara, la gente cuando hace sus declaraciones, cuando da sus opiniones, no son las opiniones como...

PERIODISTA: De encuesta.

PRESIDENTE BATLLE: De encuesta sí. No son opiniones que estén totalmente alejadas de sus, de sus vivencias, de su punto de vista, de su situación social, de su situación comercial, de su pensamiento político, de su situación económica, de su situación familiar, de lo que dicen, en función de qué se lo preguntan. Entonces, hay toda una cosa que, que no nos parece que sea muy, muy, muchas veces muy lógica, no verdad. Por ejemplo, hay encuestas en donde dicen, preguntada la gente colectivamente, cuál es la idea que tiene de como le va al Uruguay, Regular o mal; preguntado particularmente cómo le va a usted, bien. Por qué dice bien y dice mal, bueno, porque es muy difícil decir que a uno le va mal. ¿Cómo le va a usted?, nadie dice "a mí me va mal", ¿no verdad?, dice "no, a mí me va bien", ¿pero al país?, ah!, al país, mal. Entonces un poco también pasa con el gobierno, el Presidente, posiblemente, se ha visto aislado del gobierno, pero a los que dicen que yo soy bueno y que el gobierno es malo, yo desde ya les digo que somos todo uno, somos todo uno. En una palabra; lo que yo trato de empujar junto con los restantes miembros del gobierno, junto con los Ministros, junto con los miembros de los Entes Autónomos, son precisamente las cosas que tienen como rumbo final, tratar de abrirlo al Uruguay, para que el país pueda, realmente, competir en el mundo y competir con éxito en el mundo. Es posible que los uruguayos a veces no adviertan, y seguramente muchos de los que toman la opción de irse del país, estando en el país, no están de acuerdo cómo al país le va. Y por eso que se van del país; y cuando eligen irse del país, buscan a una sociedad abierta, nunca han buscado una sociedad cerrada. O sea, buscan para ellos lo que, en su inmensa mayoría, en su propio país, no aceptan. O sea, salen del país en búsqueda de alguna sociedad abierta, para meterse en un mercado ampliado, en donde puedan desarrollar sus conocimientos, donde pueden prosperar, donde pueden llegar sin nada y luego transformarse en personas que hacen una carrera, que tienen una profesión, que hacen un comercio o que fundan un semanario, que se transforma más tarde en el semanario hispano más importante de los Estados Unidos y que llegaron sin nada, donde trabajan hoy un conjunto de personas. Y eso es lo que quisieran hacer en su país, pero para eso, ese, su país, tiene que hacer otro tanto de lo que han hecho estos países; abrirse. Todo eso significa que, los procesos de cambio en las sociedades, se van dando con el tiempo y, hoy por hoy, nosotros por lo menos percibimos que en el Uruguay ese proceso se da cada día con un ritmo más acelerado y que mucho más gente va comprendiendo esta necesidad. Y el gobierno lo que trata es de ver si la puede implementar lo más rápido posible, con las dificultades propias de lo que es el pesadurismo de la burocracia, de lo que son además las distintas formas corporativas en donde actúa la sociedad uruguaya, tanto el sector público como el sector privado, ¿no verdad? El ANCAP camina por su lado, la UTE camina por el suyo, el banco tal camina por su lado, otro banco camina por el suyo. Todavía no nos juntamos todos para darnos cuenta que no somos chacras separadas, que todos somos propiedad del país. El ANCAP no es propiedad, ni la UTE es propiedad ni de los funcionarios, ni de los miembros del Directorio, todo eso es del Uruguay, es de todos, es de todos. Y, tenemos un país que, todavía, tiene muchas formas corporativas, casi le diría que, en algunas cosas, hasta medievales. Pero yo creo que eso ha ido cambiando y está cambiando rápidamente, rápidamente.

PERIODISTA: Una característica que sus partidarios, sus enemigos, sus adversarios digamos, o incluso los que no son ni enemigos ni adversarios, siempre le han reconocido ha sido la sinceridad.

PRESIDENTE BATLLE: Mire, yo creo que...

PERIODISTA: ... ¿se puede ser sincero desde el poder?.

PRESIDENTE BATLLE: Sí, absolutamente. Yo creo que no es una cosa que no sea algo que es natural. ¿Qué quiere decir "no ser sincero?. Porque yo no sé qué quiere decir no ser sincero.

PERIODISTA: Se escucha hasta que es demasiado sincero.

PRESIDENTE BATLLE: No sé lo que quiere decir. No sé francamente lo que quiere decir no ser sincero. Creo que lo que sería una expresión contraria a ser sincero. Por ejemplo, yo le pregunto...

PERIODISTA: Una cosa es ser mentiroso y la otra es ser disimulado.

PRESIDENTE BATLLE: Mentiroso, no, no. Mentira es contrario a verdad, pero sinceridad es contrario a qué... a disimulo, no. Disimulo es otra cosa. Entonces yo dejaría para los que no creen en la sinceridad, preguntarles en qué creen. Yo creo que el pueblo tiene derecho, más que nadie, a saber lo que opinan auténticamente los ciudadanos que hacen política. Sean Presidentes, Ediles o aspirantes. Y yo siempre he sido así. Me ha parecido más natural, más lógico, me ha parecido además que a la persona que dice, que actúa así, le da mucho más tranquilidad en la vida. Yo siempre dije lo que sentí, y bueno, muchas veces me fue horrible. Y sí, me fue horrible, quizás estaba equivocado, pero por lo menos la gente sabía lo que yo decía y decía: "no, yo a este loco no lo voto, porque con estas cosas que dice qué lo voy a votar". Pero por lo menos sabía. Hubiera sido mucho peor que yo le hubiera dicho una cosa distinta a esa y después hubiera hecho la que realmente pensaba. Eso le ha pasado a alguna gente, por ejemplo le pasó a alguna gente en Venezuela, por ejemplo le pasó a Carlos Andrés Pérez ¿no?, que dijo una cosa y después hizo otra y fue una locura. Yo creo que es bueno. Yo creo que, por otra parte, el hecho de decir las cosas realmente como son le ha permitido al país tomar un conocimiento cada día más adecuado, no solamente de lo que opina el Presidente de la República, sino de lo que el Presidente de la República estima que deben ser las cosas. Eso determinará que la gente siempre le reclame a los gobernantes que digan lo que sienten.

PERIODISTA: Ya terminando, otra característica suya ha sido el sentido del humor, ciertas maneras de...

PRESIDENTE BATLLE: A pero eso no, eso es heredado. Mi padre tenía mucho sentido del humor. Lo que pasa que la gente se olvida, porque mi padre hace mucho tiempo que no está en este mundo y dejó la política activa en el año de 1962. El sentido del humor es una cosa heredada de mi padre. ¡Ah, sí que tengo sentido del humor y que me río de mí mismo! Ah, también.

PERIODISTA: ¿Y desde la Presidencia se puede seguir riendo de sí mismo?

PRESIDENTE BATLLE: Sí, por supuesto. Me río de mismo pero a carcajadas me río de mí mismo. Es lógico, es algo...

PERIODISTA: ¿Qué fue lo último que le hizo reír de si mismo?

PRESIDENTE BATLLE: Mire, lo último que me hizo reír de mi mismo no lo puedo decir muy fuerte, porque están próximos a mi los responsables de esas cosas locas del protocolo, ¿vio?. El otro día sabe cuantas veces al día me tocaron la corneta para que me parara y saludara: siete veces en un día. Pero al final la dije... además las cuento, las voy contando, una... cuando llegué a la séptima dije: "che loco, para, siete veces". Es brutal, claro, esta bien, hay que hacerlo, parece que sí. Y yo me río (risas). Me miro a mi mismo desde afuera (risas) y me río. Y digo: "Pero Jorge, mirá las cosas que estás haciendo ahí" (risas). Pero yo creo que está bien, parecería que es así. Ya me había dicho a mi el Dr. Sanguinetti: "Mirá que el protocolo no va con tu manera de ser, pero es una cosa que es necesaria, que es buena y que los países necesitan tener, sino sería un desastre". Y tiene razón, sería un desastre, pero eso no quiere decir que no me divierta. Pero en fin...

PERIODISTA: ¿Cómo le fue con los chinos que son tan protocolares?

PRESIDENTE BATLLE: Y no le digo, siete veces la corneta. Siete veces fueron. Y Barros se ríe, me mira y se ríe y sufre, pobre, porque lo he hecho sufrir. Pero, pobre, ha sido muy bueno y me ha ayudado enormemente. El embajador Barros es el que ha conducido todo esto con sabiduría y bueno, y le he sacado canas verdes. Ahora por suerte ya se libera de mí. (Risas) No, no me voy yo, se va él (risas). Lo digo por las dudas, porque podría interpretarse al revés, pero siempre hay gente que interpreta mal las cosas.

PERIODISTA: Ha (...).

PRESIDENTE BATLLE: Claro, siempre hay gente que interpreta mal las cosas. Pero no, tenemos que... Ahora cuando lleguemos al Japón ahí sí que va a ser bárbaro.

PERIODISTA: Más cornetazos...

PRESIDENTE BATLLE: No sé, no sé, no conozco, nunca fui a Japón en mi vida. En fin, pero acá estamos en esta ciudad hermosa, en esta formidable ciudad de Chicago. Yo había venido a Chicago en 1955, calcule...

PERIODISTA: Ha cambiado...

PRESIDENTE BATLLE: No sé, porque no salí del hotel. Pero después vine, vine dos veces porque yo tenía un amigo que trabajaba acá, el señor William Mc Donald, que hoy está de presidente del Federal Reserve New York. Y era presidente de un banco acá y además era el director del Ravignal Festival, el presidente del Ravignal Festival. Y bueno, yo vine alguna que otra vez a verle, aprovechando su condición a escuchar un poco las cosas buenas. Es una ciudad hermosísima y una ciudad de una personalidad formidable, de una fuerza quizás, sin ninguna duda, como no sé si existe otra que tenga tanta, tanta personalidad como Chicago en los Estados Unidos, inclusive Nueva York. A mí me encanta Nueva York, me parece San Francisco una ciudad hermosísima, pero ésta, yo diría que ésta es la ciudad.

PERIODISTA: Ahí coincide con Mariano Arana.

PRESIDENTE BATLLE: Perdón.

PERIODISTA: Ahí coincide con Mariano Arana.

PRESIDENTE BATLLE: No, no que voy a coincidir con Arana. No, si coincidiera con él la limpiaría la ciudad de Montevideo. Viene acá, ve esta ciudad enorme de grande, totalmente limpia. No, no coincido con Arana.

PERIODISTA: Él dijo que Chicago era "su" ciudad.

PRESIDENTE BATLLE: Ah sí, seguramente, por eso mismo. Cuando vaya a Montevideo y lo encuentre le voy a decir: "y, vio Chicago como está de lindo y limpio". No, no, no. Terrible, ni hable, ni me hable de eso, es terrible. Este, no, esta es una ciudad además que tiene todo, las universidades, tiene todo. Todo lo que uno espera que una gran ciudad tenga esta ciudad lo tiene y lo tiene con personalidad, con fuerza. Es una ciudad formidable. Bueno, ha sido un gusto. Muchas gracias.