INTERLOCUTORA: ¿Qué opinión le merece "La
Mesa Criolla" que organiza su esposa?
PRESIDENTE BATLLE: Mire, yo el otro día le decía a
Mercedes y a un muchacho Márquez, que tiene un restaurante y que está
muy vinculado a estas cosas, buena parte de las comidas que se practicaron
durante mucho tiempo en el Uruguay colonial se han perdido y a veces
parecería que la mesa criolla se reduciría al asado y hoy se advierte
que hay una cultura que es una cultura muy importante en todos los
pueblos. Y el primero que nos relata esa cultura es Larrañaga. Si uno
vuelve a leer el Diario del viaje de Larrañaga a visitar a Artigas,
Larrañaga va contando en los lugares en donde se detenía a pasar la
noche, qué era que comía. Uno empieza a advertir allí que está la
comida española con los platos españoles. Pero el otro día, por
ejemplo, que fui a la casa de un amigo en el interior del país -como
usted dice y como nosotros no debemos decir- en un lugar del país, al
postre había confeccionado una serie de postres, todos postres criollos,
algunos de ellos que seguramente usted no ha tenido nunca el gusto de
poder comer. Por ejemplo ambrosía. ¿Comió ambrosía?
INTERLOCUTORA: No.
PRESIDENTE BATLLE: Es riquísima la ambrosía ¿Huevos
quimbos?
INTERLOCUTORA: Tampoco.
PRESIDENTE BATLLE: Tampoco, ¿vio? Ambrosía y huevos
quimbos. ¿Qué le parece? Riquísimos. ¿Arroz con leche?
INTERLOCUTORA: Ahí sí.
PRESIDENTE BATLLE: ¿Ahí llegó, al arroz con leche
llegó? Después, toda clase de dulces. De zapallo, de higo, de boniato, y
por supuesto para mejorar el final un buen dulce de leche. O sea que la
ambrosía, por ejemplo, es uno de los postres más exquisitos de la comida
criolla y seguramente por acá va a haber. Le recomiendo que lo pruebe.
INTERLOCUTORA: De esta manera se están conociendo más
las comidas que hay en nuestro país
PRESIDENTE BATLLE: Usted advierte que una de las cosas
que más venden los franceses es lo que beben y lo que comen. La ciencia y
el arte de saber beber, de saber comer, no beber ni comer para reventar
sino beber y comer para apreciar lo que es la cultura que representa una y
otra cosa, ¿no es verdad? Y creo que es bueno que esto se haga acá de la
mano de quienes han conservado esa tradición, que son precisamente esta
gente que está en el campo y que está cultivando entre otras
tradiciones, esta noble tradición que hacen al estilo de vida del
Uruguay. Si algún día uno piensa, bueno, cómo se vende un país o cómo
se exhibe un país ante el mundo, yo diría que el Uruguay lo más
importante que tiene para ofrecer al mundo es el estilo de vida del
Uruguay, este estilo de vida del Uruguay que la gente que nos visita
reconoce y que mucha gente, cuando puede, se queda a vivir en nuestro
país, es lo que nos distingue. Esto forma parte de eso.
Sin ninguna duda, esto es mucho más de lo que todo el
mundo pudo haber imaginado en algún momento.
INTERLOCUTORA: Es como usted decía, realmente no
creíamos que pudiéramos llegar a esto....
PRESIDENTE BATLLE: Ahora, este es un primer paso,
quedan otras muchas cosas por hacer. Y pienso que este primer paso nos
alienta a reconocer varias cosas; primero que existe la capacidad, segundo
que existe la voluntad de hacer las cosas y, tercero; que es un camino
que, sin ninguna duda y en la medida en que lo profundicemos, va a ser un
camino muy exitoso para todos aquellos que participan e inclusive para
aquellos que no están directamente involucrados. ¿Qué estamos haciendo
con esto? Pensemos un poco en nuestros hermanos europeos. Uno va a
Francia, cada lugar de Francia tiene su tradición cultural, tiene su
mesa, tiene su vino, tiene su queso. Nosotros tenemos que ir caminando en
la búsqueda de la misma forma de expresión. Tenemos que tratar de
identificar las distintas zonas por los distintos productos...
INTERLOCUTORA: Y valorar lo nuestro, porque..
PRESIDENTE BATLLE: Y valorarlos de forma de que eso
pueda ser mañana, para el turista que llega, una forma también de
conocer el país. Anoche, después de salir de la Exposición del Libro,
nos juntamos un grupo de amigos, simplemente para comer ñoquis, porque
era el día de los ñoquis, porque era 29. Y comentamos de lo que yo
sabía que iba a pasar hoy y de lo que sé que va a pasar en la
exposición de "Hecho acá" con la artesanía. Y ellos me
decían; Jorge, el Uruguay tiene que identificarse por su estilo de
vida....
INTERLOCUTORA: Pero no se pierden esas cosas
PRESIDENTE BATLLE; ... su estilo de vida ¿Verdad?
Entonces, es evidente que el estilo de vida del Uruguay es un estilo de
vida tan atractivo que yo lo veo, por ejemplo, en una cosa muy
sintomática. Los embajadores de distintos países del mundo que vienen al
Uruguay, buena parte de ellos luego se quedan a vivir en el Uruguay.
INTERLOCUTORA: Sí, se jubilan y se vienen.
PRESIDENTE BATLLE: Se jubilan y vuelven para acá y se
quedan a vivir, porque tenemos un estilo de vida que es un estilo de vida
muy atractivo. Y yo creo que todo esto forma parte de ese estilo de vida.
Y en la medida en que lo valoricemos, lo transformemos en representativos
de cada paladar, de cada zona del país, vamos a poder hacer de este país
una cosa tan civilizada, tan culta, tan atractiva, que ello mismo va a ser
quizás el mejor producto para ofrecerle al mundo. Nosotros mismos,
nuestra manera de ser, nuestro estilo de vivir. Y esto es una expresión
de lo más esencial, porque qué cosa más importante que una buena
alimentación y una buena mesa .
INTERLOCUTORA: Es cultura, como usted decía...
PRESIDENTE BATLLE: ¿No es verdad? Es cultura. Es un
gusto para mí estar acá con ustedes .
INTERLOCUTORA: Muchísimas gracias.
PRESIDENTE BATLLE: Gracias a ustedes.