07/06/2001

DECLARACIONES DEL PRESIDENTE DE LA REPUBLICA, DR. JORGE BATLLE, EN EL AEROPUERTO DE SALTO

El Presidente de la República, Dr. Jorge Batlle, quien viajó en la mañana de hoy hacia Artigas para conocer in situ la situación de la zona, no pudo llegar al destino previsto ante las inclemencias climáticas, debiendo aterrizar en Salto. En la oportunidad mantuvo el siguiente diálogo con los representantes de los medios de comunicación en el Aeropuerto de dicha ciudad.

PERIODISTA: ¿Cuáles son los motivos de su visita al departamento de Artigas?

PRESIDENTE BATLLE: Mire, en primer lugar, la necesidad, con todos los Ministros, el representante de MEVIR, el señor Fernando Posadas, y los demás partícipes del Comité de Emergencia, poder evaluar, ahora que las aguas del río han vuelto a su cauce, la magnitud de los daños. Tenemos, además, una evaluación ya muy precisa desde el punto de vista del estado de la caminería rural y de lo que hay que realizar en la ciudad con los valores ya ajustados, cosa que me comunicó el ingeniero Cáceres en el día de ayer. Hay, además, en este momento, un grupo de ingenieros presidido por una ingeniera, que están haciendo los análisis correspondientes para mirar con detención y con cuidado la infraestructura del puente internacional, que nos parece que no tiene problemas pero que era bueno recabar la información a posteriori de la creciente. Con el ingeniero Cat, también, tenemos por delante una evaluación muy precisa de los efectos de la inundación sobre las construcciones, pensando además con MEVIR a ver qué es lo que se puede hacer en la materia. Yo no quisiera adelantar una opinión hasta que los técnicos del Ministerio, que el señor ingeniero Cat preside, y los expertos del MEVIR miren la situación a ver que es lo que ellos aconsejan hacer. Quiere decir que nuestras dos preocupaciones primeras tienen que ver con la caminería rural y la caminería urbana y, fundamentalmente, las viviendas, que es la que más ha sufrido de todas las distintas formas de infraestructura en Artigas. Con respecto a la alimentación y a la cuestión sanitaria, ya teníamos hace tiempo noticias muy definidas. El INDA estuvo actuando muy bien y el servicio atendió a todas las necesidades, lo mismo en materia sanitaria, así que en esas dos áreas no existen problemas que no se puedan manejar.

Por tanto, si no podemos ir hoy, vamos a volver el domingo, en donde tendremos inclusive más tiempo para poder ver las cosas el mismo grupo que está hoy aquí en Salto.

PERIODISTA: ¿Pensaba trasmitir alguna propuesta concreta al Intendente Signorelli?

PRESIDENTE BATLLE: No, no , no. Nosotros no creemos que los gobiernos sean como los reyes magos. Los gobiernos tienen que gobernar con una evaluación seria de la situación y de los recursos disponibles. Por lo tanto, vamos a ver qué es lo que hay que hacer en materia habitacional para que el Ministro Cat, con sus técnicos, puede hacer una evaluación y para que MEVIR con sus técnicos, pueda hacer la misma evaluación. La parte de caminería ya está totalmente calculada. Son más o menos 486 mil dólares lo que nos costaría poner la caminería rural y la caminería urbana afectadas pro las inundaciones en orden y prácticamente el Ministro Cáceres ya tiene todos los elementos disponibles para llevarlo adelante.

PERIODISTA: ¿Qué reflexión le merece, somos, como usted acaba de decir hace un ratito, somos el jamón del sándwich, estamos entre dos grandes que están en crisis, Argentina además parece que podría tener una crisis institucional, desde el momento que aparentemente procesarían con prisión a un ex-Presidente como Menem. En Brasil el dólar se dispara, ¿cómo cree usted...

PRESIDENTE BATLLE: Usted sabe que éste es un país pequeño, que ha podido atravesar con éxito relativo situaciones parecidas vividas anteriormente en otros tiempos no lejanos, tanto en Argentina como en el Brasil, no es la primera vez que vemos estas cosas en un lado o en el otro. Y lo hemos podido hacer porque somos un país muy cuidadoso, y lo han sido todos los gobiernos, muy cuidadosos en cuanto a nuestra conducta. Tratamos de mantenernos dentro de los límites que un buen padre de familia debe utilizar para conducir las obligaciones de su propia casa, de su propia familia. El gobierno del Uruguay siempre ha estado limitado en sus posibilidades, porque es un país pequeño con un mercado pequeño y por tanto quizás eso mismo lo haya ayudado a no caer en excesos que llevan luego a circunstancias como la que estamos viendo. Si usted ve la crisis energética brasileña, que es una crisis muy profunda que no se resolverá hasta el 2003, hasta bien entrado el 2003, usted ve que del presupuesto general de gastos del Brasil apenas el 5% lo dedican a infraestructura. Y, como tienen un endeudamiento muy alto, los Estados tienen más condiciones de endeudarse para poder hacer obras de infraestructura y por tanto si ellos hubieran abierto el mercado para que operadores particulares hubieran podido incorporar su capital para generar nuevas fuentes de energía, no hubieran tenido este problema. Pero como en su momento no lo hicieron, hoy lo tienen y este problema va a afectar al Brasil en su crecimiento económico todo este año y todo el año que viene. Al mismo tiempo, como las grandes compañías que tienen que hacer inversiones, inversiones industriales de distinta naturaleza, tienen temor a cuál es la evolución del tipo de cambio, contratan seguros para asegurarse ese tipo de cambio, y ese contrato de seguros que son los hedges, llamados hedges, presionan sobre el mercado y entonces el mercado sube y sube y sube y sube y sube. O sea, que no está subiendo como consecuencia de un deterioro de la economía, está subiendo como consecuencia de un deterioro del nivel de confiabilidad, que es lo que hace que el Brasil, siendo un país tan enorme, con tanta riqueza, tenga que pagar una tasa de riesgo de 900 y pico de puntos, cuando el Uruguay paga una tasa riesgo de 270 puntos. ¿Cuál es esa diferencia abismal que determina que un país pequeño como el Uruguay, que tiene muy pocos recursos, que tiene enormes dificultades, pague 4 veces menos que el Brasil?. Y bueno, es un poco el manejo de las cosas, un manejo prudente, un manejo morigerado. Por eso que muchas veces en todas las administraciones los gobiernos dicen "esto no se puede gastar", "esto no se puede hacer". Porque sí. Porque cuando usted accede a reclamos que van más allá de las posibilidades usted rompe los equilibrios y cuando usted rompe los equilibrios entra en una pendiente resbaladiza en la que no lo ataja más nadie. Y bueno, eso es un poco lo de Brasil. Y lo de la Argentina es una situación también de déficit fiscal. Por eso lo echaron a López Murphy, porque fue y dijo la verdad. López Murphy dijo que había un agujero fiscal donde se gastaba mucho más de lo que se podía gastar. La economía argentina es sana, básicamente la economía argentina es sana. Si la Argentina no tuviera este déficit fiscal que tiene, la Argentina crecería económicamente al 5, al 6, al 7% anual. Pero tiene un agujero fiscal generado por las provincias, generado por las administraciones, en donde los parlamentos y los poderes ejecutivos y los gobernadores gastan mucho más de lo que pueden gastar y, entonces, bueno, es como le pasaría a cada uno de nosotros en nuestras familias. Si usted no tiene ingresos y gasta mucho más de lo que sus ingresos le permiten, al principio le dan un crédito, después como usted no puede pagar el crédito le hipotecan la casa, después sigue para adelante y, bueno, al final pasa lo que pasa ahora. Para poder echar para adelante lo que se debe, hubo que reconvertir la deuda que es cambiar papeles de vencimiento de hoy a papeles de vencimiento para dentro de 4 o 5 años, para lo que usted tiene que pagar mucho más intereses.

Bueno, dentro de 4 o 5 años, Dios dirá. Vendrá otro gobierno. O sea que no, no se arreglan las cosas así. Los países, en el fondo, son como las familias, son como las familias. A veces las familias tienen dificultades, se aprietan el cinturón, restringen sus gastos, ven cómo pueden salir adelante. Los países son iguales, absolutamente iguales. El Uruguay, como es más chico y ha tenido siempre menos recursos, ha tenido menos imaginación y menos posibilidades para hacer esos gastos, que luego descontrolan la economía y que a quien más daño hacen es siempre, siempre, siempre, a la gente más pobre. Porque el que tiene capital, ¿sabe la primera cosa que hace?; se lo lleva, lo saca. Y por tanto, siempre los que sufren más son los que tienen menos.

Entonces, cuando el gobierno, en el fondo vamos a hablar clarito, cuando el gobierno se pone machete, es porque siente que si el gobierno gasta lo que no se puede gastar, al final los que pagan los platos rotos son los que menos tienen.

PERIODISTA. ¿Usted desea hacer alguna reflexión con respecto a este último acontecimiento en Argentina sobre el procesamiento judicial al ex presidente Carlos Menem?

PRESIDENTE BATLLE: Mire, yo no conozco el expediente, y por lo tanto me parece que abrir una juicio positivo o negativo en lo que tiene que ver con la resolución judicial es una cosa fuera de lugar, porque no conozco el expediente para nada. Diría como cualquier ciudadano de que esto afecta, sin ninguna duda, no la estabilidad institucional de la Argentina. No, no afecta la estabilidad institucional de la Argentina. Lo que sí afecta es la confiabilidad, ¿no es verdad? Los países viven no solamente de lo que producen. Viven también de lo que generan hacia el exterior, las distintas situaciones que viven sus respectivas sociedades. Eso genera confianza, más confianza o desconfianza, y por tanto, si usted tiene más confianza tiene más posibilidades, si usted pierde confianza tiene menos posibilidades. Creo que en este sentido, el deseo de todos nosotros es que

Esto no afecte, en el grado en que podría aparecer como afectando, ese nivel de confianza que se traduce luego en marchas y contramarchas en la economía, y que afectan siempre a la inmensa mayoría de los ciudadanos.

PERIODISTA: Doctor, usted siempre da un mensaje, que yo creo que es positivo, usted siempre da un mensaje como de optimismo, como de que el Uruguay está pasando por un mal momento, pero vamos a salir.

PRESIDENTE BATLLE: Mire, le voy a decir una cosa con respecto a eso del Uruguay, también se lo quiero decir con toda claridad. Yo no le arriendo la ganancia al que llegó a Presidente, porque (...) vendimos la mitad, muy bien, siendo que históricamente nuestra balanza comercial con Argentina y con Brasil siempre fue deficitaria. Bueno, yo en primer lugar considero que la aftosa nos ha pegado fuerte en todo lo que es el circuito comercial del interior del país. Imagínese que nosotros estamos recibiendo, recién el 24 de junio, a la misión europea. Nosotros estamos terminando la vacunación y las exportaciones a Europa e Israel se van a abrir plenamente a 30 días de la terminación de la vacunación. Por lo tanto, para la primera semana de julio, vamos a estar exportando. Para que tenga una idea, esta semana pasada se faenaron 11 mil cabezas y la semana anterior 8 mil y estábamos faenando 43 mil cabezas por semana. Eso ha determinado, además, la paralización de los remates, cosa que afecta muchísimo a toda la vida comercial del interior de la República; y afecta a los productores, que no pueden hacer un peso. Y nosotros hemos tenido que paralizar los remates para evitar los movimientos, no solamente a los efectos de la vacunación, sino fundamentalmente a los efectos de conservar la opinión que de nosotros tienen los servicios veterinarios del mundo, que son los que nos han venido salvando, porque han sido los servicios veterinarios del mundo los que han aprobado los servicios técnicos uruguayos. A veces yo escucho voces en donde dicen que está muy mal el Ministerio de Agricultura y que el Ministro tiene que irse, pero al mismo tiempo esas voces son voces locales. Mientras que las voces del mundo, que son las voces que le interesan a los productores, porque son ellos los que le van a decir a los productores "usted me pueden vender carne o no", por suerte dicen lo contrario. Imagínese lo que sería para los productores del Uruguay si los servicios veterinarios del mundo hubieran reaccionado con el Uruguay de una manera distinta a como han reaccionado en forma tan favorable. Por tanto, hasta el 24 de junio nosotros estamos en la expectativa de que venga la comisión técnica europea y entonces vamos a poder comenzar a pleno las faenas. Pienso que antes de esa fecha, seguramente, el Ministerio empezará a autorizar movimientos en algunos sectores del país, pero eso lo manejan los servicios técnicos veterinarios y yo creo que tenemos que seguir confiando en ellos. Hemos recibido ya la nómina de las medidas que los argentinos reclaman, o exigen, o condicionan para poder exportar ganado en pie y puede ser una cosa muy interesante para ganados preparados que pueden estar entrando al mercado argentino a la brevedad. Eso es lo que yo veo desde el punto de vista de la actividad agropecuaria, que es una actividad central a la vida del país. Desde el punto de vista de los mercados locales, van a seguir creciendo los servicios. Para que usted tenga una idea, vea, nosotros tenemos para el 5 o el 6 de julio la inauguración del hotel en Arapey. El 14 de junio estamos participando como testigos de la firma del acuerdo entre la cadena de hoteles Sheraton y una empresa argentina, la noticia salió ayer en la prensa argentina, para construir un hotel de 100 habitaciones con cancha de golf, más o menos al lado del Real de San Carlos, en Colonia.

Esta semana estuvieron inversores americanos y la empresa que maneja el Conrad para construir un hotel de 100 habitaciones en la Barra de Maldonado y nos han visitado empresarios uruguayos que en sociedad con empresarios americanos, o extranjeros o brasileros, van a presentarse para que convoquemos a una licitación para construir un hotel 5 estrellas muy importante en Punta del Este.

O sea, que usted ve que los servicios, pese a todo, tienen alguna demanda de crecimiento real. O sea, lo mismo va a pasar con el Puerto donde va a haber una demanda de crecimiento real; ahí tenemos que tomar algunas medidas para aliviarle los costos al Puerto, para hacer además un puerto seco. Pensamos, según me dijo el Ingeniero Aguerre, que el puerto seco puede estar más o menos a 10 kilómetros del Puerto de Montevideo, porque el relleno de la bahía cuesta un disparate, es un precio que es muy difícil, digamos, reencontrarse con esos valores, ¿no?. O sea, que yo creo que el país puede crecer muchísimo en servicios, más allá de lo que sean las especialidades de la transformación de los productos primarios, que eso va de suyo que el país lo puede hacer. Pero eso ha sido una tradición histórica del país, ¿no?.

Acuerdos internacionales, bueno, veremos un poco lo que va a pasar a partir de julio con la reunión Europa-América; mejor dicho Europa-MERCOSUR. Europa dice que nos ofrece la baja de los aranceles del 90 por ciento de los flujos comerciales. ¿Qué pide a cambio?. Pide otro tanto, que nosotros bajemos los aranceles tan para los productores de ellos. ¿A quién le están dirigiendo la palabra? ¿Al Uruguay?. Al Brasil, ¿no?. Quiere decir que si Brasil no quiere bajar los aranceles, la conversación va a ser un diálogo difícil y poco exitoso, quizás. Es posible que podamos empezar a conversar, a negociar, el Uruguay lo desea hacer. El Uruguay cree que se puede comenzar un negocio, para ver cómo se puede armar en siete años un proceso permanente, continuado, de baja recíproca de aranceles con determinadas garantías. En fin, creemos que nos tenemos que sentar a la mesa. Pero, todavía no hay lugar de todos los miembros del MERCOSUR.

Con Estados Unidos, con Estados Unidos tenemos un comienzo de una negociación en un Consejo Económico que ya se reunió dos veces y que tiene una identificación en este momento de cuales son los temas centrales para el Uruguay hoy en los Estados Unidos. Nosotros hemos hecho una agenda, para ver cuáles son los distintos temas que tenemos que considerar, cuales son los temas para nosotros prioritarios. Y, yo diría, así en términos generales sin que esto implique una opinión que no es otra que esta, la de una conversación con ustedes, que para mí el tema hoy central de una negociación con los Estados Unidos es la industria textil de confecciones, en donde el Uruguay puede tener una expansión formidable en la medida que obtenga, digamos, parámetros parecidos a los que recibe de los Estados Unidos, Centro América o la República Dominicana. Pero la industria de la confección en los Estados Unidos está prácticamente tercerizada y referida básicamente a países que tienen esos privilegios llamados maquilas, o sea, que se compran las telas planas y en esos distintos países, como yo lo he visto en las zonas francas de la República Dominicana, se hace el corte y se hace la confección final y se remite a los Estados Unidos, y se accede a esos mercados liberados de impuestos aduaneros especiales que le ponen a mercaderías que provienen de otros países; o provienen, hoy por hoy, de Asia, de algunos países que en Asia tienen la misma situación o provienen de México después del NAFTA o provienen de América Central o de la República Dominicana. Creo que es una opción muy fuerte si el Uruguay pudiera no precisamos de un acuerdo bilateral global, son opciones que inclusive el Congreso norteamericano tiene que dar. No sé qué pasará ahora en función de los cambios de la mayoría que hay en el senado, pero ese es un tema que nosotros comenzamos a conversar y que vamos a tener con el negociador americano señor Selek una reunión en julio, en Montevideo, sobre estos temas luego de que él regrese de la negociación final con Chile en el acuerdo que están haciendo Chile-Estados Unidos.

Y pienso que es un tema, este, central el de los mercados. Es un tema absolutamente prioritario para el Uruguay.

PERIODISTA: Nos jugamos la vida.

PRESIDENTE BATLLE: Yo diría que no nos jugamos la vida, porque por suerte la mercadería primaria del Uruguay van a tener acceso por sí mismas, porque son competitivas y tienen demanda, pero de cualquier manera eso supondría un cambio cualitativo muy fuerte.

PERIODISTA: Presidente, de mantenerse los índices de desocupación tan altos como están hasta el momento, con los problemas conocidos o no, ¿qué medidas podría tomar el gobierno?

PRESIDENTE BATLLE: Mire, para resolver los índices de desocupación, altos o bajos, las medidas son siempre las mismas. Cuando la desocupación tiene el 9 por ciento y la desocupación esa permanente en cualquier país es el 4 o el 5, porque ¿cómo se calcula un índice de desocupación? El índice de desocupación no se calcula por las personas que tienen trabajo, se calcula por las personas que salen a buscar trabajo. La medición es cuántos salen a buscar trabajo. Que antes a veces no salían a buscar trabajo porque el jefe de familia tiene un empleo y no eran necesarios mayores ingresos. O sea, cuando la desocupación está, por ejemplo, en el 9 que es una cifra histórica del Uruguay, y que usted la tiene siempre ahí en un piso del 3, o del 4 o 5 por ciento que en estos países es el piso que no se baja prácticamente nunca, casi en ningún país del mundo, porque son las amas de casa, los jóvenes que no buscan empleo, los estudiantes u otras personas, ese plus que va del 5 al 9 por ciento es gente que está buscando empleo, gente que está desocupada, que tiene la misma necesidad si pasa del 9 al 10, o al 11, o al 12. Quiere decir, que las medidas son siempre las mismas. Siempre las mismas.