15/06/2001
DIALOGO ENTRE EL PRESIDENTE BATLLE Y UN GRUPO DE
COLONIENSES
A su salida del Bastión del Carmen, tras el acto de la
firma del contrato que pondrá en marcha del proyecto para la operación
del "Four Points by Sheraton Real de San Carlos Spa and Golf"
–emprendimiento turístico de gran enjundia- el Presidente de la
República apreció que un grupo de colonienses se encontraban. El primer
mandatario se dirigió hacia ellos. Los ciudadanos y el Dr. Jorge Batlle
mantuvieron el siguiente diálogo:
CIUDADANO: Que hable fuerte, que hable fuerte.
PRESIDENTE BATLLE: La primera gran adversidad que hemos
tenido en el campo, la primera gran adversidad que tuvimos en el campo, se
las voy a contar porque la viví. En el año de 1963 yo acompañé a
Wilson Ferreira Aldunate a negociar el último contrato de carnes con
Europa, antes de que el Mercado Común Europeo clausurara los mercados. En
esa fecha, nosotros vendíamos la tonelada de carne a 2.300 dólares.
Estamos hablando de 1963. En la actualidad, en el Mercado Común Europeo y
en el mundo, la tonelada de carne está prácticamente a la mitad de
precio. Estamos hablando de dólares de 1963 contra dólares de 2001 y
cualquiera, sin ser economista, sabe que aquello valía mucho más que
esto. Hemos vivido, durante esos treinta y pico de años, cada día con
los productos no solamente valiendo menos, sino, además, con menos acceso
al mercado. Para que tengan una idea, la cuota de exportación de carne
ovina que el Uruguay tiene al Mercado Común Europeo es la misma de hace
30 años. Son más o menos 5.400 toneladas.
Los costos fiscales los hemos bajado, como nunca los
hemos bajado. No lo iniciamos en este gobierno. Empezó con el gobierno
del Dr. Lacalle, cuando se bajó el 3% de la venta al 1%. Hemos eliminado
el impuesto al patrimonio en la última Ley, hemos eliminado los impuestos
a la tierra también, nos queda solamente la Contribución Inmobiliaria,
de la cual una parte la paga el Estado y todos aquellos que tengan menos
de un área no pagan absolutamente nada. Menos de 100 hectáreas no pagan
absolutamente nada y hasta 200 hectáreas pagan nada más que por las
restantes 150. Quiere decir que el esfuerzo de bajar los impuestos se ha
hecho. Bajar los costos. Por primera vez en muchos años hemos bajado el
precio del gasoil. Yo nunca en mi vida había visto bajar el precio del
gasoil. El precio del gasoil se puede bajar más, siempre que hagamos los
acuerdos para poder tener una sociedad y no seguir pagando un costo
altísimo. Estamos teniendo 2.700 funcionarios en el ANCAP y nos alcanzan
con muchos menos. Hemos bajado el precio de la luz y vamos a seguir
bajando el precio de la luz, sobre todo con el gas, a partir del año que
viene tenemos gas, y con eso vamos a poder seguir bajando las tarifas.
Vamos a mandar buscar a quien quiera poner dinero para hacer una usina de
generación de energía eléctrica, en sociedad con la UTE, para poder
bajar las tarifas de gas. Tenemos que bajar las tarifas del puerto.
Tenemos que bajar todas las tarifas habidas y por haber. Tenemos que bajar
las tarifas de los teléfonos del Interior. El teléfono del Interior
cuesta más que en Montevideo, llamar de Artigas, que es el lugar que
tiene más debilidad económica, es mucho más caro que hablar de
Montevideo. Todas esas cosas tenemos que bajarlas, pero todo eso supone
bajar los costos de los Entes Públicos, y bajar los costos de los Entes
Públicos supone buscar mecanismos para que los Entes Públicos, como hizo
la UTE, puedan auxiliar a la gente para poder buscar otro tipo de
soluciones. Porque habrán visto en Internet lo que son los sueldos de los
Entes Públicos, los sueldos de un empleado bancario, habrán visto en
Internet lo que son. No hay ningún productor de tambo que gane ese
sueldo.
CIUDADANO: Los productores no ganamos sueldos, hace
años.
PRESIDENTE BATLLE: Querido, querido, no hay ningún
productor de tambo. Vos sos más joven que yo, y tengo 73 años. Así que
esta mercadería la conozco hace tiempo. Así que en el tambo, en el
campo, hice absolutamente de todo lo que se puede hacer. O sea, ¿qué es
la idea que tenemos nosotros? La idea que tenemos nosotros: es mantener la
inflación baja, bajar los costos fijos, por eso hemos rebajado impuestos
y por eso hemos podido modificar el sistema fiscal para poder bajar el
precio del gasoil. Sino, no hubiéramos podido bajar el precio del gasoil.
¿Cómo hicimos para bajar el precio del gasoil? ¿Por arte de
birlibirloque? No. Modificamos el sistema, para que el impuesto al final
lo pague aquel que va a comprar algo. Si tiene mucho compra mucho y si
tiene poco compra poco, pero no al principio, porque si es al principio es
en el costo que no podés errarle, porque si no le ponés gasoil al
tractor, no anda el tractor. La segunda cosa que tenemos que tratar de
hacer es encontrar negociaciones que nos permitan, como en el caso de los
textiles, que es para mí, la preocupación hoy central. En el caso de los
textiles, la preocupación central es encontrar que no se nos discrimine
comercialmente. Cuando los Estados Unidos tenían una industria textil
importante - y nosotros también la teníamos - se estableció, en lo que
se llama el Acuerdo Multifibras, un sistema de cuotas. Por encima de esa
cuota si mandabas un traje por encima de esa cuota, tenías que pagar el
impuesto. Cuando cambió el sistema industrial, en Estados Unidos y en el
mundo, los Estados Unidos dejaron de producir su ropa y empezaron a dar
sistemas preferenciales a los países de Centro América, a los países
del Caribe, algunos países del Asia, creo que a Sudáfrica, algunos
países del Medio Oriente. Esos países chicos pueden exportar a Estados
Unidos sin pagar el impuesto. Nosotros quedamos con una industria que
tiene esa dificultad de acceso y, por tanto, tenemos a todo el sector
textil por una para salir. Y esa es la otra gestión en la cual estamos
empeñados frente a los Estados Unidos y por ello es que yo digo quiero
hacer un acuerdo con los Estados Unidos. ¿Por qué?. Para acceder al
mercado.
CIUDADANO: ¿Y no será peor después que nos entren
mercaderías subsidiadas a menores precios y menos puedamos competir?
PRESIDENTE BATLLE: No es así.
CIUDADANO: Es el miedo que le tengo al ALCA, digo.
PRESIDENTE BATLLE: No es así. No se preocupe. Le voy a
dar dos números, porque no voy a hacer discursos largos porque usted no
está para discurso, está para números.
CIUDADANO: Seguro.
PRESIDENTE BATLLE: Muy bien. México vendía 29.000
millones de dólares antes del acuerdo con Estados Unidos y Canadá;
29.000 millones de dólares era lo que México exportaba. Hoy exporta
142.000 millones de dólares, y Argentina exporta 25.000 millones de
dólares, y el Brasil 55.000. El Brasil, más la Argentina, exportan la
mitad que México.
CIUDADANO: El tema es poder exportar...
PRESIDENTE BATLLE: El tema es poder exportar. Cuando mi
padre en 1955, como Presidente de la República, fue a los Estados Unidos
y tuvo un lío en Boston sin tamaño, ¿qué le fue a reclamar? Que en vez
de venderle lana sucia le pudiéramos vender tops de lana. En esa época
fue que se organizaron las industrias textiles del Uruguay, las que venden
tops, y también SUDAMTEX. El escribano de SUDAMTEX y presidente de
SUDAMTEX, era Don Raúl Negro, que fue presidente de la Corte Electoral;
mi segundo padre, íntimo amigo de mi padre. Así que esta historia la
conozco de memoria, esta historia la conozco de memoria; la conozco de
memoria. Y, por tanto, ¿qué es lo que precisamos? Precisamos libertad de
acceso al mercado. Pero, además, no se preocupe del tamaño de los
Estados Unidos, no se preocupe. Es el país que más déficit comercial
del mundo tiene. Tiene un déficit comercial equivalente a 130.000
millones de dólares al año. ¿Cómo vive? Por los royalties, porque le
vende derechos de esto, derechos de lo otro, derechos de los discos, de
los videos, de los inventos, de los adelantos, de todo ese tipo de cosas.
Los países, si usted piensa, por ejemplo, hoy acabamos de hacer, ser
testigos de un contrato para hacer un hotel. ¿Y sabe cuánto deja de
divisas al Uruguay el turismo?, Ochocientos millones de dólares, entre
pitos y flautas. O sea, la persona que viene, la que hace una casa, la que
hace un hotel, la que saca un pasaje, la que está un día en el hotel, la
que compra algo porque viene con la señora y con la tarjeta va y compra
algo. O sea, hay otras formas del comercio hoy, que no es solamente el
comercio industrial. Que con respecto a la industria textil hay, a mi
juicio, dos cosas para hacer: la primera, obtener acceso al mercado y la
segunda, interesar a determinado tipo de gente. Y por eso ahora voy a
conversar con la gente de SUDAMTEX, porque tengo que pedir una
información que me la han pedido hoy de mañana quienes van a venir de
Europa a mirar la fábrica. O sea, yo como Presidente de la República la
única cosa que procuro, yo soy un hombre que tengo 73 años, me voy a ir
del gobierno a los 77, no voy a estar nunca más en ningún gobierno, voy
a ser un viejo calandraca, ¿no es verdad? Fenómeno, me voy a mudar para
Carmelo, ¡eh!, adonde tengo un campito de 95 hectáreas, a ver la orilla
del mar y a pescar. Así que lo que yo quiero es dejar la industria como
mi padre la empujó, pero es otro mundo. Aquel era un mundo cerrado y por
eso nacieron y crecieron aquellas industrias, porque estaban todas
protegidas por una gran pared que eran las tarifas. Hoy el mundo es
distinto. Nos pasa como en el fútbol, no podemos seguir jugando al
tranquito, los que juegan al tranquito marchan. Hoy se juega con otro
ritmo.
CIUDADANO: Dejáme que quiero hacer una pregunta.
Presidente, ¿por qué los competidores europeos, en lo que es producción
agropecuaria del mundo o de la región, van cambiando o van devaluando su
moneda, para tener mayor competitividad?
PRESIDENTE BATLLE: El único que devalúa la moneda
como loco es el Brasil. En la región es Brasil.
CIUDADANO: Australia, Nueva Zelandia, Sudáfrica,
¿ellos lo van bajando?.
PRESIDENTE BATLLE: Australia y Nueva Zelandia tienen
otra realidad. Es otra realidad económica y otra realidad social. En el
Brasil, cuando devalúa la moneda, ¿quién paga la devaluación?
CIUDADANO: Nosotros, que nos están matando.
PRESIDENTE BATLLE: No, ustedes no. ¿En Brasil, quién
la paga?.
CIUDADANO: ¡Ah! en Brasil. No, pero acá nosotros
también.
BATLLE: Perdóneme, ¿en Brasil quién la pagaba? La
gente más pobre la pagaba.
CIUDADANO: Y acá se están quedando sin trabajo.
BATLLE: Perdóneme, eso es una cosa que nosotros
tenemos que plantearle al MERCOSUR, que es lo que yo estoy planteando
permanentemente al MERCOSUR. ¿Qué le estoy diciendo al MERCOSUR? No
puede haber un MERCOSUR en donde uno devalúa y el otro se queda mirando
de afuera.
CIUDADANO: Pero eso desde el arranque.
BATLLE: Señor, desde el arranque son los grandes los
que firman, señor.
CIUDADANO: Sí, sí, no me cabe duda.
BATLLE: Desde la época de Ouro Preto. Y eso es lo que
tengo que conversar con los socios de enfrente. Señores, hasta mañana.
Señores, muchas gracias, muchas gracias.