22/06/2001
BATLLE PROPUSO INVITAR AL PRESIDENTE DE RUSIA A LA
REUNION DEL MERCOSUR EN DICIEMBRE EN NUESTRO PAÍS
La primera cosa que tenemos que saber todos es que para
resolver algo tenemos que saber que esto existe y abocarnos con nuestra
capacidad y nuestra imaginación a resolver estos problemas, manifestó el
Presidente de la República, Dr. Jorge Batlle Ibáñez, en su discurso
pronunciado en la XX Reunión del Consejo Mercado Común ante los Jefes de
Estado del MERCOSUR, Bolivia y Chile, que se celebró en Asunción del
Paraguay. El primer mandatario también propuso a sus pares, formalmente,
que le permitan, a Uruguay, invitar al presidente de Rusia, Putin, para
que asista, en diciembre, a la reunión que celebrará el MERCOSUR en
nuestro país.
Ofrecemos a continuación el discurso del Dr. Batlle:
Pido a todos nosotros saber que el camino que este
MERCOSUR tiene que recorrer es decirse siempre, entre nosotros, lo que
todos sentimos como una realidad y no escondernos ante nosotros mismos las
realidades en las que estamos viviendo. Esto no dificulta el devenir del
MERCOSUR, por el contrario se facilita porque nos permite a todos
escucharnos en la medida de lo que todo sentimos con respecto a las cosas
buenas que nos han ocurrido en estos diez años y a las dificultades que
tenemos. Y si hoy hablamos de las cosas buenos, no reconocemos nuestras
dificultades equivocamos el camino. Nosotros hemos escuchado con atención
las palabras del señor Presidente del Paraguay, del señor Canciller en
su informe, del señor Presidente De la Rúa y del señor Presidente
Cardoso. Buena tarea nos espera en los próximos seis meses para llevar
adelante todas estas propuestas, meditadas por los señores Presidentes, y
que expresan desde distintos puntos de vista las realidades que tenemos
que atender y a las cuales la Presidencia Pre Tempore deberá escuchar y
cumplir con celo. Es absolutamente cierto lo que dice el señor Presidente
de Brasil. No tendría sentido existir sin MERCOSUR. No tendría sentido.
Todos seríamos hojas en la tormenta. En un mundo en donde los vientos
soplan desde los lados de los que tienen pulmones más grandes y no son
precisamente los nuestros. Pero tampoco tendría sentido no reconocer que
tenemos que tratar de ordenar nuestros vientos. Todas las cosas buenas que
aquí se han dicho no van a prosperar si no tenemos una coordinación de
la política económica entre todos nosotros. Todos sabemos, todos
sabemos, todos somos conscientes de ello. Somos conscientes de las
dificultades de alcanzar ese objetivo que eso supone, pero también somos
conscientes de reconocer que esta necesidad es el primer paso para
resolver estas necesidades. La primera cosa que tenemos que saber todos es
que para resolver algo tenemos que saber que esto existe, decirnos en voz
alta que esto existe y abocarnos con nuestra capacidad, nuestra
imaginación a resolver estos problemas.
Ese ha sido en los últimos tiempos el problema central
de nuestras dificultades. Y yo creo que no ha sido un problema voluntario
ni querido por ninguno de nosotros. Creo que ni el Gobierno del Brasil ni
el Gobierno de la Argentina ni el del Paraguay ni el del Uruguay, tampoco
el de Bolivia y el de Chile se alegran cuando sus economías sufren las
alteraciones que provocan las diferencias cambiarias permanentes hacia lo
interno de sus propios países ni en la relación con sus vecinos. Eso no
solamente nos dificulta hacia dentro de las fronteras sino somos
conscientes, todos somos conscientes, que nos dificulta en nuestras
relaciones intra MERCOSUR y en nuestras relaciones con el mundo. Quiere
decir que este es un tema que sin ninguna duda tenemos que abocarnos a
buscar los caminos necesarios para ir resolviendo este problema, que creo
que, además, aunque no ha sido incorporado como un objetivo común del
MERCOSUR está en el corazón de la cosa, en el centro de la cosa. Y todas
las demás formas de entendimiento y de acuerdo prosperan como deben
prosperar, prosperamos en todo lo que se planteó en Brasilia en setiembre
del 2000 en todo lo que tiene que ver con la infraestructura, Comité que
ya está funcionando, que se reunió en Montevideo, que se reunió en
Santa Cruz y que tenemos que estimular que siga funcionando con la ayuda,
no solamente del BID sino con la Corporación Andina de Comercio y es
posible también que podamos plantear alguna otra situación en esa
materia, Chile que, es lo mismo que tenemos que hacer pensando en un
paraguas agrícola y lo mismo tenemos que hacer pensando en una unidad de
trabajo en el orden sanitario. Lo mismo tenemos que hacer en el mundo
cultural, científico y tecnológico para poder ser una masa crítica de
conocimiento y no ser países simplemente periféricos. No lo podremos
hacer si un día alguien de nosotros y sobre todo si tiene más peso que
todos los demás, tiene una evolución cambiaria que nos aleja de los
accesos naturales a los mercados.
Y eso es algo que no se lo podemos imputar a ningún
gobierno ni a nadie en particular porque no hay ningún gobierno que desee
que tal cosa suceda adentro de su propio país. Todos aspiramos a la
estabilidad, siempre aspiramos a la estabilidad, porque la estabilidad es
lo que asegura, además, una democracia sólida y la estabilidad es lo que
asegura el crecimiento idóneo y sustentable y la estabilidad es lo que
asegura el crecimiento real de los países, no nominal, y la estabilidad
es la única cosa que nos permite luego hacer una distribución equitativa
de los recursos a los que los países acceden en los términos a los
cuales nos estamos refiriendo.
Quiere decir que ese es el tema central que no podemos
ni debemos eludir porque sino nos estamos haciendo trampas a nosotros
mismos y lo que si resolvemos hoy se desarregla mañana.
Por tanto considero que esta reunión ha sido una de
las reuniones más importantes que ha tenido el MERCOSUR en su historia.
Las dificultades no solamente no nos deben amedrentar, nos deben
preocupar. Pero as dificultades muestran también, incluso, una forma de
oportunidad para que se vea el temple de las sociedades, la estructura de
las sociedades. Nosotros lo hemos visto en nuestro país con respecto a la
aftosa. Quienes seguimos de cerca los acontecimientos de la vida del
Brasil vemos la reacción positiva, inesperada, por el propio gobierno del
Brasil, la reacción que ha tenido el pueblo del Brasil ante la noticia
del ahorro de energía. Aquellos que todos los días estamos habituados
desde años a leer las páginas de "El Gran Pernambucano" de Don
Julio Mezquita, no está acá, entonces vemos cómo la población
brasilera ha reaccionado frente a las dificultades. Y estamos, sin ninguna
duda, en condiciones de decir que a nosotros nos pasó lo mismo con la
aftosa, nos pasó lo mismo con las inundaciones en el norte del país. O
sea, nuestras sociedades están muchas veces mucho más que nuestros
medios de comunicación, consciente de sus responsabilidades, de sus
obligaciones y están mucho más sabedoras de lo que nosotros, los
gobernantes, suponemos de lo que hay que hacer en cada circunstancia. Por
tanto es bueno que nos digamos a nosotros mismos; tratemos en estos seis
meses de imaginar una coordinación en materia de política cambiaria.
Tenemos al más grande de las personas con imaginación, a nada menos que
al frente de la economía argentina. O sea; tenemos al amigo Cavallo, que
no está presente, pero si quisiéramos tener cada uno de nosotros, para
un rato, siquiera la imaginación, creatividad y talento que tiene el
amigo Cavallo, así que vamos a mandarle el encargo de que empiece a
elucubrar un sistema de coordinación de política cambiaria que nos
libere de los tantos problemas que hemos vivido.
Le toca a la Presidencia Pro Tempore que va a ejercer
el Uruguay por tanto, implementar no solamente los mandatos que hoy son
objeto de resolución por parte de los señores que con nosotros integran
el, digamos, el MERCOSUR, sino, además, atentamente seguir las palabras
pronunciadas por los señores Presidente y por el señor Canciller del
Paraguay, para colaborar con ellos, con sus grupos técnicos, en la
implementación de todo esto, tratando inclusive de comenzar a armar una
pequeña Secretaría que, con las personas que representan a los distintos
países, con conocimientos profundos en las respectivas áreas, empiecen a
elaborar la documentación y preparen la documentación necesaria para
llevar adelante esta tarea.
La primera será seguramente nuestra reunión con la
Unión Europea. La primera semana de julio tenemos una reunión con la
Unión Europea, que nosotros mismos en la última reunión con la Unión
Europea demandamos que fuera lo más rápidamente posible. La tenemos
dentro de pocos días, tenemos que tener un criterio común. Sin ninguna
duda las cosas no se van a resolver el día que nos sentemos ni con mucho,
pero sería mucho peor, como dijo el señor Fernando Henrique Cardoso con
respecto al MERCOSUR, no sentarnos. Sería horrible no sentarnos. Si no
nos sentamos a discutir. aunque nos sentemos en el mismo día que nos
sentemos de la mesa, de cualquier manera el comienzo de un diálogo supone
la posibilidad de ir caminando en, digamos, en la orientación adecuada.
Tenemos con respecto al tema del ‘Cuatro más uno’, el tema de ‘Cuatro
más uno’ también tiene diez años, se firmó en 1991 y fue ratificado
por todos los países del MERCOSUR en el 91, salvo en Uruguay que demoró
un poquito más, fue en el 93.
Esta apertura hacia el mundo es imprescindible para el
MERCOSUR. No solamente hacia ese mundo que acabamos de referirnos, sino
también al otro mundo que nos espera. Rusia, es un área a la cual el
MERCOSUR tiene que llegar. Rusia ha vuelto a ser un país de creciente
integración hacia el interior, de creciente evolución de su economía, y
Rusia es una cosa y Europa es otra cosa. Yo hago la propuesta acá,
formal, le solicito a los señores Presidentes del MERCOSUR que nos
permitan invitarlo al señor Putin en diciembre al Uruguay, para que Rusia
y el MERCOSUR, y los señores Presidentes de Bolivia y Lagos, con
nosotros, podamos conversar con Rusia adonde la experiencia reciente del
señor Presidente de Brasil es, sin ninguna duda, un aval. Pero que Rusia
es hoy de nuevo en el mundo y es un polo central, un mercado formidable,
que no lo podemos dejar a la deriva como si no existiera más en el mundo,
cuando tiene un peso y un peso creciente. Sin ninguna duda, su
reinstalación en las relaciones conjuntas con nosotros, va a ser muy
positivo para toda América.
Consideramos, además, que tenemos un mandato, votado
en Buenos Aires, con respecto a la Corporación Andina de Naciones, con
respecto a México, y naturalmente hemos consultado con los señores
Presidentes que nos digan los pasos que ellos entienden debamos dar en la
materia. Debemos preparar aquellos elementos necesarios para, en
diciembre, poder analizar con detalles la eventual constitución de
Tribunales que nos permitan analizar y resolver nuestras dificultades en
la medida de lo posible y constituyendo una unidad común de información
y de trabajo que también nos nutra con todos los elementos técnicos
necesarios, para entre todos mejorar nuestras tareas y nuestro perfil
hacia adentro, y hacia fuera, en donde es imprescindible tener
información.
Algunas veces hemos sentido de lo que pasa en el
Uruguay leyendo la Gaceta Mercantil, ¿no es verdad? O sea, saber cuántos
cueros trajeron algunos ciudadanos del Brasil para el Uruguay y los
exportaron desde Uruguay como west look sin haber pasado por la industria,
me enteré por la Gaceta Mercantil. Y, cuántos cueros, por el contrario,
con west look se importaron para que la industria los procesara, los
exportara, luego normalmente hace que esté bien y esté mal. O sea, ni
nosotros mismos, muchas veces, tenemos nuestra información de lo que pasa
en nuestras fronteras. O cuántas cosas tenemos que defender nosotros
adentro que atacan la fiscalidad de trasmitir. Cuando hablamos, por
ejemplo, deciertos temas de otras naturaleza de lo que hemos hablando,
inclusive, con el señor Canciller Lafer en la oportunidad que tuviéramos
el honor de recibirlo en nuestra casa, en Montevideo.
Quiere decir, que las dificultades pueden anonadar a
alguien o pueden darle más fuerzas para crecer. Y considero que estas nos
han dando más fuerzas para crecer, como no podía ser de otra manera. Por
tanto, trataremos de llevar adelante los mandatos, de escuchar con
atención y seguir con detalle las expresiones dadas por los señores
Presidentes, antes de que yo hiciera uso de la palabra en esta mañana de
hoy, en que celebramos algo que va a seguir siendo cada día mejor, cada
día más fuerte y cada día más consciente de sus obligaciones y
responsabilidades, la unión democrática entre los pueblos del MERCOSUR y
de América.
Muchas gracias.