01/10/2001

Uruguay ratificó su fe en el MERCOSUR

MALÁN: DEVALUACIONES DE BRASIL NO SON DELIBERADAS

El Ministro de Economía y Finanzas, Cr. Alberto Bensión confió en que "serán superadas” las dificultades actuales, mientras su colega del vecino norteño, Robert Malán,  señaló que las devaluaciones del real son producto de la coyuntura y no de una política concebida a los efectos. Estas declaraciones fueron formuladas en una conferencia de prensa que brindaron ambos jerarcas en el Belmont House, donde se refirieron a la problemática actual del MERCOSUR., tras   conversar extensamente en un encuentro privado

Abrió la conferencia el Cr. Bensión, agradeciendo su presencia a  los medios de comunicación que enviaron su representante y la del Ministro Malán en Montevideo, que respondía a una invitación hecha en ocasión de asistir (el visitante) a la reunión de nivel técnico que estaban manteniendo Viceministros y asesores en el área de la coordinación macroeconómica. Malán, destacó Bensión, había aceptado apartarse un momento de ese encuentro para opinar "sobre temas que nos interesan a todos, sobre todo el MERCOSUR y la preparación de la reunión del grupo Mercado Común que habrá de tener lugar, como consecuencia de la Presidencia Pro Tempore de Uruguay (del MERCOSUR), en unos quince o veinte días”. Su fecha, dijo el Ministro, no está determinada todavía, pero hemos coincidido en la importancia de realizar contactos bilateral del orden que marcamos con el Ministro Malán.

Tras solicitar excusas por “mi lamentable español”, el jerarca brasileño explicó -en muy buen español- que esa reunión a la que asiste –la del Grupo de Monitoreo Macroeconómico- se complementa  con la del Consejo del Mercado Común, que es un Consejo de Ministros. Respondía  así a la pregunta de cuál había sido el motivo de su presencia en Montevideo.

Interrogado sobre los motivos de las continuas devaluaciones brasileñas, que “no ayudan –dijo el periodista- a las relaciones con los demás socios del Mercosur, Malán reiteró que Brasil  tiene un régimen cambiario de tasa flotante, que “se deprecia y se aprecia”. “La experiencia, desde enero de 1999 –recordó- hemos venido de depreciación en depreciación con ocasiones de apreciación y es natural que sea así”, expresó el Ministro del vecino norteño. “No es correcta la percepción, que desafortunadamente existe -en algunos círculos, no en gobiernos, sino círculos- en el sentido de que Brasil desarrolla una política de depreciación deliberada. Agregó que el gobierno no hace la defensa de un determinada nivel del tipo de cambio, sino de flotación.

Dijo además que algo de lo que había “hablado mucho” con el Ministro Bensión fue que el mundo en que vivimos, el contexto internacional, “no venía bien, desde el comienzo del año, con caídas sostenidas de la tasa de crecimiento de las economías mundiales, como las de EE.UU., la Unión Europea y Japón”. Ese panorama, en algunos países, se refleja, en un primer momento, como un movimiento de devaluación, “que no vemos como permanente ni unidireccional”. “No podemos,  aseveró Malán, dejar de recordar que aún en febrero del 99 hubo días en que el dólar  había cerrado nada más que a 2,2 o 2,3 reales por dólar y el promedio del año fue 1,8 y 1,82, pero la inestabilidad que se dio en los últimos meses del año pasado no podemos desconectarla del año en que vivimos. Decimos muy claro que, sin pretender justificarnos, no hay más remedio que tomar las medidas que nos parezcan apropiadas y tomaremos otras que nos lo parezcan también, pero los que han comprado dólares a 2,8 o a 3,5 reales, deberán asumir que no han hecho la mejor inversión”.

En el contexto actual, agregó, es necesaria una consideración ajustada sobre los criterios comerciales que deben prevalecer. Es una cuestión muy compleja, para nada trivial, que debe incluir a Chile, un país que nos importa. Estamos -resumió Malán- en un mundo incierto, pero no va a ser siempre así.

Ante otra pregunta, en el sentido de cuál va a ser el comportamiento de Brasil con respecto a sus vecinos, dijo que la posición de Brasil es muy clara y fue explicitada por el Presidente (Fernando Henrique) Cardoso, visión que es compartida por los “nuestros amigos” de los demás países socios: estamos involucrados ahora mismo en una negociación con la Unión Europea, que por definición es entre dos bloques –dijo- y el Arancel Externo Común es parte de ese proceso. El “4 más 1” es, por definición, una negociación con Estados Unidos en el que el AEC es también parte del proceso. Por lo tanto, no es separable, comentó Malán, “pero no quiere decir que no haya posiciones puntuales bilaterales más flexibles, como la tuvo Brasil cuando el Ministro Cavallo pidió comprensión hace pocas semanas”.

Más adelante aseguró que el Mercosur debe tener “una cierta flexibilidad”  al encarar situaciones como ésta, que los problemas se reiteran y que en el futuro seguiremos teniendo fricciones y tensiones de naturaleza comercial, “pero ninguno de ellos puede ser solucionado de una manera que no sea el diálogo”. Dijo que el AEC no puede estar ajeno de las negociaciones actuales y futuras con la Unión Europea.

El visitante pasó la palabra a “mi amigo Alberto” (Bensión), que ratificó la incidencia plena de Uruguay con el principio de que las diferencias en el Mercosur se debe  solucionar en el ámbito interno y no con declaraciones públicas que podrán perturbar la armonía entre los socios. También afirmó que el Mercosur tiene por delante  negociaciones en extremo importantes con el 4 más 1 y la UE, lo que le obliga a mantener más que nunca su unidad y su cohesión, para aventar las diferencias futuras y abordar decisiones fundamentales para e futuro de los países miembro.

Bensión también expresó su coincidencia con Malán en torno a que Uruguay no desea un cambio sustancial del AEC, aunque “tenemos disposición a revisarlo si la situación lo amerita” y esto seguirá siendo así. Aseguró que “no tenemos discrepancias de base” respecto al Arancel Externo Común.

Finalmente afirmó que se está conversando sobre los problemas recíprocos con conversaciones ”muy francas y constructivas” que se consolidarán en negociaciones bilaterales o regionales ininterrumpidas.

Sobre las medidas exactas, dijo que prefería mantener reserva por el momento en torno a consideraciones generales en torno a las relaciones comerciales de torno a los países socios a partir de coincidencias en el campo macroeconómico.

Malán retomó la palabra para congratularse de que el Mercosur “ha hecho un gran avance”  en el último año y medio,  partir de la armonización de estadísticas,  y de  acuerdos sobre objetivos de conveniencia macroeconómica, del que ha surgido el Grupo de Monitoreo, que estudia proyecciones valiosas para los años en curso. Cuando mejor integrados estén los equipos de los “seis países” (incluyó a Chile y Bolivia), mejor será para todos.

El Ministro Malán dijo que las batallas del Mercosur se ganan o se pierden en el ámbito doméstico, y que no alcanza con instrumentar  decisiones del  Banco Central, sino las de todos los organismos económicos y de la sociedad toda. Creo que en Brasil hemos superado la crisis del 99, así como otros países  superaron las suyas, estamos superando la crisis de energía no sólo con el Banco Central sino con la reducción estructural de los déficit. El ritmo de crecimiento es sostenido y está a 3.5% en 2001 y tenemos una economía firme  y sólida.

Destacó que el parlamento brasileño ha aprobado una nueva ley de sociedades anónimas y otra para la comercialización de combustibles, todas ellas dirigidas a agilitar y modernizar la economía. Anunció otra ley sobre negocios inmobiliarios.

“Creemos que la situación va a ser revertida en breve –dijo Malán- porque los signos son alentadores.

Dijo que Brasil no está pensando en una suspensión del Arancel Externo Común, y que “flexibilizarlo no es suspenderlo”, palabras que fueron ratificadas por su colega Alberto Bensión.

Sobre qué respuesta daría el Mercosur a la reciente oferta arancelaria de la Unión Europea, el Ministro brasileño comentó que “estamos trabajando para eso, que hay muchas personas involucradas y que eso tiene que ser hecho”, pero sobre si las conversaciones van a avanzar o no, depende de muchos otros factores”. Sobre la toma de decisiones para avanzar en las negociaciones, Malán recordó que Uruguay,  en ejercicio de la Presidencia Pro Tempore, las tomará y las comunicará... “con acuerdo de todos los socios”, acotó el Cr. Bensión.

Este dijo que la convocatoria para esa reunión con la UE estaba pensada para fin de mes, pero no fue posible concretarla y ahora se piensa en veinte días. “Lo estamos conversando con el Canciller Opertti -dijo Bensión- pero todavía no hemos fijado fecha”. Finalizó señalando que sus conversaciones con todos los Ministros de los países socios son corrientes y necesarias para la marcha de los intereses regionales. Ratificó el compromiso de Uruguay con el Mercosur y su fe en que las dificultades, que existen, serán superadas. Citó, por ejemplo, que las exportaciones anualizadas del 2001 son la tercera parte de las de hace dos años. “Lo extraño sería que los Ministros no hablaran entre sí”, redondeó su colega brasileño, quien afirmó “que me gusta Montevideo, me gusta Uruguay y me gusta conversar con Alberto Bensión”.