PRESIDENTE BATLLE: Bueno, después de tres horas de
“footing”, admirando lo que ha sido una exposición realmente para
alguien que...que no conoce de construcción absolutamente nada, realmente
una exposición muy, muy interesante. Muy importante, no solamente por su
dimensión, muy interesante por la cantidad de aspectos tan novedosos, por
lo menos a los ojos de un ignorante, ¿no?, como es el caso mío. Y
además, sobre todo por el esfuerzo hecho, ¿no?
En un año difícil es bueno que se pueda mostrar
la fibra de los empresarios vinculados a la construcción haciendo un
esfuerzo como éste, que espero que todo el público pueda darse una
vuelta para ir haciendo otro tanto que lo que hicimos nosotros: admirar lo
mucho que se está haciendo en el Uruguay en la construcción.
Hay
un gran despliegue en cada una de las salas, con temas totalmente
diferentes, así que a las amas de casa que son especialistas en arreglar
cosas y en opinar más que los arquitectos y muchísimas veces con
muchísima razón, les recomiendo que se den una vuelta por la
exposición.
La
exposición de la construcción en el LATU, en donde siempre tenemos
buenas expresiones del quehacer nacional. Y este es un quehacer esencial a
la vida de una nación. Cuando la construcción marcha es porque el país
marcha.
Esperemos
pues, que luego de los barquinazos que hemos tenido, el barco empiece a
andar mejor.
PERIODISTA: Presidente, el gobierno que usted
dirige ha elegido parte de la construcción para paliar una situación un
poco complicada, como es la mega-concesiones y el Plan Fénix.
PRESIDENTE BATLLE: No, no. La mega-concesión no es
tanto la construcción en sí misma vinculada a lo que sacás, salvo
algunos aspectos, ¿no? Porque son, fundamentalmente, la
mega-construcción está orientada a la construcción de grandes rutas,
grandes carreteras, grandes obras viales, y en su caso, la cosa
ferroviaria. Pienso que en otros aspectos sí hay cosas muy importantes
para hacer. El Plan Fénix, el Banco Hipotecario está trabajando en eso;
nosotros hemos aconsejado, o sea a solicitud de las empresas hemos enviado
una ley para resolver el problema del IVA, cosa que se pueda salir del
stock existente, en donde mucha gente, mucha gente dejó de incorporarse
al mercado para adquirir un bien en función del
temor de que tenía de endeudarse en moneda, en moneda dura, o sea
endeudarse en dólares. Y yo pienso que progresivamente el público va
advirtiendo que eso no tiene por qué tener ese temor y lo está haciendo.
Además la ventaja de no tener que pagar el IVA impulsa más esa
decisión.
PERIODISTA: Ahora, ¿eso ha enlentecido las
cosas? Porque hoy escuchamos al Presidente de la Cámara de la
Construcción, por ejemplo, que decía que el Plan Fénix estaba lento en
su concreción. ¿Se puede apurar esto, Presidente?
PRESIDENTE BATLLE: Mire, eso más vale se lo
preguntan a los del Banco Hipotecario, porque si no dicen que también me
meto con el Banco Hipotecario y como ya en algún momento dije que tenían
que mostrar las cuentas claras, me parece
mejor que se lo pregunte a él.
PERIODISTA: Presidente, la elección argentina,
han planteado ahora, incluso, el Partido Justicialista...
PRESIDENTE
BATLLE: La elección argentina, la elección argentina ya se sabía cómo
era, porque ya se sabía que el gobierno no participaba. Por tanto, todos
los que participaron estaban en contra del gobierno; unos más y otros
menos, unos regular, otros
regular con bueno y otros regular con de suficiente, Pero estaban todos en
contra del gobierno. Anoche, quien escuchó a Duhalde y después escuchó
a Terráneo y después escuchó a la Sra. Carrió vio que todos estaban en
contra del gobierno. Pero yo pienso que cuando se está en contra de un
gobierno, más que, tanto en la Argentina como en el Uruguay o como
en la Cochinchina, más que decir que se está en contra de un gobierno,
hay que dar una solución alternativa. Y no veo que aparezcan las
soluciones alternativas.
No
pagar la deuda, no creo que sea una solución alternativa para nadie. Si
no es una solución alternativa para una persona en particular, tampoco lo
es para una empresa y tampoco lo es para una nación.
Pienso,
entonces, que todos tienen que asumir su responsabilidad y al tiempo que
critican, digan qué es lo que proponen hacer. Quizás tengan ideas muy
buenas, y sería muy bueno que el gobierno de cualquier país, en este
caso el gobierno argentino, o el gobierno uruguayo, en su caso, reciba una
idea que el pueblo considere que es una idea formidable, que es un camino
mejor que el que se ha tomado y todo el mundo lo sigue.
Y
estoy absolutamente convencido que cualquier presidente de cualquier país
no hace la majadería de no escuchar a alguien que tenga una idea
brillante.
Pero
las ideas brillantes no han aparecido. Y sobre todo cuando se trata de una
economía como la economía argentina, que es una economía sana. La
Argentina exporta granos, exporta gas, exporta petróleo, exporta
minerales, exporta maderas. Lo que la Argentina exporta en el mundo se
coloca. Lo que la Argentina produce es un gasto público demasiado alto.
Eso no se coloca en ningún lado.