25/08/02

EL PROBLEMA CENTRAL ES RESTABLECER EL CRÉDITO

El Presidente Jorge Batlle aseguró que la respuesta del sistema financiero uruguayo ha sido positiva, deteniéndose el retiro de los depósitos, al punto que el gobierno estudia la posibilidad de utilizar los fondos del FMI, de U$S 1.500 millones para otros destinos que no sea garantizar el funcionamiento del sistema bancario, enfatizando que en este momento la prioridad es “restablecer el crédito para el sector productivo”.

DECLARACIONES DEL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA, JORGE BATLLE, EN FLORIDA

25 de agosto de 2002

PRESIDENTE BATLLE: Cuando el dólar estaba barato con respecto a lo que está hoy, el país no podía exportar absolutamente nada y los deudores en dólares y los deudores en pesos no podían repagar sus obligaciones. Cuando los países se paralizan, por más que las deudas aparezcan como bajas, no se puede hacer nada.  Le pasó eso al sector agropecuario durante muchos años que, con toda claridad, siempre protestó contra el atraso cambiario que hacía imposible al sector productivo nacional, al más importante sector productivo nacional, colocar su mercadería fuera del país. Si los países no generan riqueza a través de la exportación, por más aparentemente barata que sea la moneda extranjera, cualquiera  sea ella, para poder aparentemente  comprarla con facilidad termina siendo un obstáculo imposible de salvar de la mayor parte de la producción nacional, que es la que genera empleo, la que genera futuro, estaba inerme y de brazos caídos.

Hoy hay una situación nueva, una situación nueva en función de la modificación cambiaria. Usted va a ver cómo las cosas se van a  organizar y se van a estabilizar alrededor de otra modalidad. El país va poder encontrarse asimismo en condiciones de exportar, en condiciones de vender, en condiciones de dar más trabajo y más destino a su gente. Eso es lo que va a permitir a las instituciones financieras acordar con sus deudores, dar los plazos, buscar los entendimientos. El banquero lo que precisa es -ese es su negocio- es prestar y cobrar. Pero para que esas dos cosas sucedan los países tienen que estar vivos y para estar vivos tienen que vender. Hoy eso se ha comenzado a  restablecer. Yo estoy absolutamente seguro de que el sistema financiero va a ir encontrando los mejores caminos para las respuestas que usted nos plantea. De cualquier manera, señor, sepa usted que nuestras puertas serán siempre abiertas para analizar, para considerar, para -entre todos- buscar las mejores soluciones para todos los uruguayos. 

PERIODISTA: ¿La solución debe ser inminente, señor Presidente?

PRESIDENTE BATLLE: No hay nada que sea inminente. Todo es un proceso. El que le dijo a usted que la cosa se resuelve de hoy para mañana, en cualquier cosa, no está diciendo lo justo.  El que planta sabe que cuando planta inicia un proceso. La cosecha es el final de ese proceso. Inminente e inmediato los países jamás tienen soluciones. El que le ofrezca a usted una solución para mañana no le dice la verdad y en ese sentido prefiero decir siempre la verdad, porque aunque a veces esa sea un poco dolorosa, es el mejor camino para encontrar el final que a usted le interesa y que al país le interesa.

PERIODISTA: Le agradezco mucho, señor Presidente.

PRESIDENTE BATLLE. Al contrario, señor; a sus órdenes.

PERIODISTA: Usted recibió un planteo de los deudores del Banco Hipotecario, ¿cuál  es su respuesta concreta?

PRESIDENTE BATLLE: No, señor. Me entregaron una misiva en nombre de ciudadanos que deben en dólares. Yo les dije a ellos que los países cuando tienen esos tipos de cambios tan duros determinan lo que el sector agropecuario durante muchos años llamó con razón el atraso cambiario, que hace que sea imposible prácticamente la exportación y el desarrollo hacia afuera, y el crecimiento que es el único que posibilita que las sociedades puedan dar respuestas positivas a las demandas de todos los ciudadanos. O sea, cuando el tipo de cambio aparecía como muy favorable, tampoco estaban en condiciones de pagar las cuentas. La morosidad en el Banco Hipotecario ya era una morosidad alta. Quiere decir que no está en función del tipo de cambio: está en función de la actividad. Y la actividad es la que le va a permitir a la gente volver a estar en condiciones de recomponer su sistema financiero familiar, personal y empresarial. Y no está ligado a un tipo de cambio excepcionalmente alto o excepcionalmente bajo: está ligado a la existencia real del desarrollo, básicamente de las actividades productivas del país.

PERIODISTA: ¿Qué opina de la propuesta de AEBU de conglomerar en uno los cuatro bancos suspendidos ahora?

PRESIDENTE BATLLE: Señorita, un banco supone la necesidad de que el que lo quiera hacer lo capitalice. Si tienen formas de capitalización nadie va  a estar en contra. Pero, cuando nosotros recibimos una oferta para la capitalización del Banco de Crédito, en principio no fue avalada porque lo que se presentaba como recurso de capitalización no eran, a juicio del Banco Central, suficientes. Así que un banco es simplemente una organización que precisa un patrimonio inicial, luego una liquidez para enfrentar las demandas de los ahorristas en el caso que sea un banco que existe, o en el caso de un banco nuevo, una organización que tenga un sustento patrimonial  suficiente.

PERIODISTA: ¿Como idea es mala o buena? ¿Le conforma la idea?

PRESIDENTE BATLLE: El tema, señorita, no es la idea; el tema es el sustento patrimonial. Hacer un banco no es una mala idea. Lo que necesita usted para hacerlo es el sustento patrimonial.

PERIODISTA: ¿Han pasado los peores momentos para el país?

PRESIDENTE BATLLE: Yo creo que los peores momentos para el país están en función de la evolución de las finanzas. El primer tema que el país tuvo que enfrentar comenzó a principios de año. A principios de año, el corralito en la Argentina determinó que una enorme cantidad de gente de la Argentina viniera al Uruguay a retirar sus depósitos. Eso ya comenzó en el mes de enero, a principios de año. Y en el mes de febrero el primer efecto fue sobre el Banco de Galicia, puesto que el Banco de Galicia, un banco con depositantes argentinos, sintió que su casa matriz no podía ya contribuir a devolver de los depósitos que los depositantes venían de Buenos Aires a retirar, o porque los necesitaban para vivir o porque necesitaban eso para cumplir con sus obligaciones. Fue el primer  shock, el del Banco de Galicia. Que acaba de finalizar, con la firma de un concordato avalado por el setenta y cinco o más por ciento de sus ahorristas a nueve años de plazo, a dos por ciento de interés y en donde el total, perdón, el total de -según se me dijo- eran que los acuerdos alcanzaban a mil ciento veinte millones de dólares lo que aún estaba depositado dentro del Banco de Galicia.

Luego en el mes de febrero vino el problema del Banco Comercial. El problema del Banco Comercial surge como consecuencia de la situación del Banco General de Negocios de Buenos Aires, del cual era Director uno de los señores Rhom, que eran socios allí, en Buenos Aires, de los mismos socios que el Banco Comercial de Montevideo. Eso afectó básicamente al Banco Comercial, puesto que los bonos y los títulos que constituían el capital del Banco Comercial estaban ubicados y manejados por disposición de sus autoridades en el Banco General de Negocios de la Argentina. Y esa, digamos, situación de fraude hecho en perjuicio de los socios determinó la gran crisis del Banco Comercial. Esto fue en el mes de febrero. Yo personalmente recibí, en primer lugar, el mismo día en que se anunció en la Argentina la detención del señor Rohm, una llamada desde Suiza de uno de los socios del Banco Comercial, para decirme que en función de ese enorme fraude ellos no estaban en condiciones de hacer la capitalización adecuada para mantener vivo el Banco Comercial.

Nuestro gran dilema en ese momento fue si sostenerlo o simplemente dejarlo caer. La inmensa magnitud de los depósitos en Plazo Fijo, en Cuentas Corrientes, en Cajas de Ahorro, la extensión, la importancia del Banco Comercial, si hubiera caído en aquel momento hubiera significado un enorme daño para todo el sistema financiero uruguayo; tanto dentro del país como fuera del país, hubiera afectado a todo el sistema bancario, inclusive a los bancos nacionales, en mayor grado que los afectó y también al sistema bancario en general.

Decidimos negociar, estuvimos negociando duramente. Es más, hasta en esa negociación, yo tuve oportunidad -como se dijo alguna vez en la prensa- de hablar con el presidente del Dresdner Bank para que contribuyera a capitalizar el banco. El banco se capitalizó. Cada uno de ellos puso 33 millones de dólares. El Uruguay también hizo otro tanto. Apoyamos a través de la Corporación Nacional para el Desarrollo. El propio Fondo Monetario Internacional entendió que teníamos que constituir un fondo especial para sostener en su primera participación aquí, en el Uruguay, a toda esa banca nacional que estaba siendo afectada porque ya pasado el mes de abril, pasado el mes de abril, comenzó también a sentirse en el Uruguay una presencia creciente de presiones de depositantes locales sobre los bancos uruguayos.

El que sufrió más en esa presión fue el Banco de la República Oriental del Uruguay y el Banco Hipotecario.

Es más; en el diario “El País”, el día de hoy se hace una encuesta en donde se le pregunta a la gente si estaría dispuesta a volver a poner  dinero a plazo fijo antes de fin de año, y hay una mayoría importante que dice “sí”. ¿Y por qué lo dice ahora? ¿Qué ha cambiado en el país desde hace un mes a lo que es ahora? Bueno, la reprogramación de los depósitos, la visión colectiva de que hay un aumento día a día de las reservas, la estabilidad de la banca privada que sigue operando y el esfuerzo que está haciendo toda la sociedad para ver cuál de esos bancos cerrados pueda sobrevivir.

En este sentido, yo creo que el proceso está bien encaminado. Nos quedan varias cosas por hacer. En materia financiera siempre, ¿no? En otro sentido nos quedan muchas cosas por hacer. Pero, en materia financiera nos queda por restablecer el crédito. Los créditos voluntarios, o sea, los que vienen del mundo internacional, de los fondos del mundo, están para el Cono Sur todavía muy negativos.

Yo quisiera hacer una pequeña explicación, que la hice el otro día con la visita del señor Cardoso; el Presidente Cardoso, hace más de 20 años los créditos a un país los daban los bancos. Yo ya tengo bastante edad y recuerdo quiénes eran los agentes bancarios que daban crédito al Uruguay hace 30 años, 40 años, 50 años. Eran el Nova Scottia  Bank, que era el Chemical Bank, el Banco de Londres. Este sistema desapareció, y ya no son más los bancos grandes del mundo que dan crédito a los países.

Los créditos a los países se dan a través de colocación de títulos y los títulos los toman las sociedades, las AFAPs del mundo. Son las AFAPs del mundo las que dan crédito. Entonces, la AFAPs del mundo que toman títulos y tienen que instrumentar los ahorros mensuales a las personas de Francia, de España, de Estados Unidos, de Canadá, de México, de cualquier lugar, éstas son personas que son tremendamente celosas de la situación de estabilidad financiera de las economías de cuyos bonos son tenedores.

Entonces, cuando por ejemplo se cae WorldCom en Estados Unidos, todas aquellas organizaciones que tenían en su paquete de acciones un porcentaje importante de WorldCom, porque si WorldCom tenía acciones que valían equis y por su situación cayeron 10%, entonces el capital que tenía esa AFAP de Estados Unidos, también cayó en la misma proporción, disminuyendo enormemente las entregas mensuales de seguros de retiros de las AFAPs.

Esto que juega con respecto a las corporaciones privadas, también juega con respecto a los países. Porque, ¿quién emite bonos que van a las Bolsas? Los emiten las corporaciones, las sociedades anónimas, esas que aparecen en las Bolsas del mundo, las emiten también los países.

Entonces, cuando los países empiezan a tener dificultades, ¿qué pasa? Pasan dos cosas: la primera, esas organizaciones empiezan a deshacerse de los bonos de esos países. Y la segunda, si usted pretende colocar nuevos bonos, no se los toman. Por tanto, usted no tiene lo que se llama el crédito voluntario.

El Fondo Monetario ayuda para la infraestructura fundamental en materia financiera, pero no es una fuente de crédito directo para la operativa vial o productiva. Por eso hay que recurrir al BID o hay que recurrir al Banco Mundial, que el Banco Mundial fundamentalmente atiende los problemas sociales. O sea, los créditos del Banco Mundial están fundamentalmente orientados a la educación, a la ayuda a organizaciones como el  INAME, que están orientados a la salud. Pero no están orientados a aportar fondos para que los bancos tengan recursos.

Entonces, ¿qué quiere decir? Que el problema más central que nosotros tenemos ahora que enfrentar es cómo hacemos para organizar el crédito. Para que tengan una idea de la naturaleza y magnitud del problema, cómo hemos organizado el crédito para el país. Lo hemos organizado con la participación de todos aquellos que están involucrados en la producción, o sea, la Texaco, la Esso, la Shell y la ANCAP.

Entonces, ellos van a adelantar el gasoil para que el productor pueda terminar la preparación de tierras para el cultivo de verano, y luego los proveedores de insumos, de fertilizantes y de semillas, van a proveer los cultivos que se van a preparar con la cosecha, y por tanto se van a necesitar muchos menores recursos que antes entregaba el Banco República a través de sus créditos administrativos.

Lo mismo tenemos que hacer con el arroz, lo mismo tenemos que hacer con la lechería. Con la lechería estamos creando un sistema para atender lo que fundamentalmente hoy es más penoso y más difícil.

El productor lechero tiene dos problemas fundamentales. El primero, es el endeudamiento. Y el segundo, la terrible baja de los precios internacionales de lo que se produce. Para que tengan ustedes una idea, tanto de la leche en polvo como de la leche larga vida, como de todos los productos que importa la lechería nacional, está este año 2002 a la mitad del valor que estaba en el año 2001. Y es más, los subsidios que da la Comunidad Económica Europea a los productos lácteos, equivalen al 100% del valor internacional del producto.

El Uruguay tenía en Venezuela, por ejemplo, un mercado que es muy importante, para leche larga vida, muy importante para leche en polvo. Lo estamos perdiendo a manos de los subsidios de la Comunidad Económica Europea.

Quiere decir que la primera pregunta, Pablo, es que el problema más importante que tenemos que encarar, mientras siga bajando el riesgo-país y sigan subiendo los valores de los bonos, es el tema del restablecimiento del crédito para el sector productivo, tanto agropecuario como industrial.

PERIODISTA: ¿Los depósitos están llegando, está volviendo, verdad?

PRESIDENTE BATLLE: Los depósitos están volviendo progresiva, paulatinamente. Nada se hace de golpe. Es más, el Fondo Monetario Internacional, cuando reemplaza el crédito que nos da el gobierno de los Estados Unidos y nos pone los 1.500 millones, que le devolvemos a los Estados Unidos, nos dice: ese dinero ustedes lo precisan porque la gente va a retirar el dinero de los bancos. Y no sucedió. Al punto no sucedió que le estamos planteando al Fondo la posibilidad de utilizar parte de esos recursos con otros destinos. La primera semana, ya a fin de la primera semana, el Banco República no tenía más retiros de depósitos y luego el sistema comenzó a ganar y sigue, progresivamente, ganando depósitos. Pero, así como fue lento, fíjese usted, siete meses de retiros continuados, nunca en la historia  de un país los bancos tienen siete meses de corrida, nunca. Una corrida nunca, o dura diez días, al cabo de los diez días o el Banco está fundido o se detuvo la corrida, acá siete meses. Cuando se ríen un poco de mi, porque yo digo que tengo un país fantástico y lo digo con total convicción, porque no ha habido ni un solo país que haya tenido que sufrir su sistema global financiero una corrida que haya durado siete meses y el país todavía, no solamente está en pie, sino que ha merecido la confianza exterior de los gobiernos, viene restableciendo su sistema financiero y hay enorme cantidad de esfuerzo del sector privado para ver si podemos mantener los bancos abiertos. Los bancos que se han tenido que intervenir, porque no tenían forma de continuar trabajando, puesto que no tenían fondos para pagar a quiénes iban a retirar dinero.

PERIODISTA: ¿Cuándo se sabrá cuál es el destino final de estos cuatro bancos?                 

PRESIDENTE BATLLE: No es un asunto que podamos determinar hoy. Hay distintas posibilidades. Sabemos que se está trabajando en el exterior. Por más de un banco, hay interesados locales, fundamentalmente por comprar sucursales en el Interior de la República, en donde es el efecto mayor de carácter negativo, porque bien sabido es que, tanto el Banco Comercial como La Caja Obrera y como el Crédito, son los bancos que constituyen el noventa por ciento de la red privada de bancos del Interior, salvo ACAC, COFAC, que van a seguir trabajando con éxito en su gestión.

Muchas gracias. ¿Quién es el joven que es el dueño de ese aparatito? Muchas gracias.

PERIODISTA: Disculpe, que le cambie totalmente de tema. Va haber una persona que se supone, va a ser procesada con prisión mañana por haberlo insultado o presuntamente insultado a usted. ¿Usted, cuando leyó estas declaraciones en “Búsqueda”, se sintió realmente insultado?.

PRESIDENTE BATLLE: Mire, señorita, le voy a ser sincero. Yo creo que son dos cosas distintas: una es la persona y otra es la Institución. Yo como persona cuando llamo por teléfono a alguien nunca digo que soy el Presidente de la República, siempre digo soy Jorge Batlle. Yo soy Jorge Batlle antes, soy Jorge Batlle después. Así que soy una persona del común. La acción del Fiscal es una acción totalmente independiente; se refiere a la Institución, no a la persona. Yo no me siento insultado. Lo que si digo, es que todos tenemos que cuidar la Institución. Si destruimos las Instituciones, destruimos la libertad. Inclusive de aquellos que insultan. Vamos a cuidar la libertad de todos, vamos a cuidar las Instituciones. Una de las cosas más fantásticas que yo reitero, porque para mí es real de este país, es la calidad de su gente. Cómo esta sociedad ha tomado los hechos que ocurrieron, cómo lo viene enfrentando, cómo lo viene procesando, con qué claridad, con qué sensatez. Si nos ponemos todos a insultar, créame, no vamos a adelantar nada. Creo que lo más grave es que vamos destruir lo que nos preserva: las instituciones. A mí si me insultan como Jorge Batlle, me pueden insultar todo lo que quieran. El tema es la Presidencia, no el Presidente, la Presidencia. Vamos a cuidarla, como otros la tuvieron, la tendrán mañana otros también libremente elegidos por el pueblo. Pero vamos a cuidarla. Yo lo que pretendería es que fuera la cosa lo más leve posible. Si estoy a tiempo para decirlo en voz alta, si me permite y si no estoy violando la legitima y necesaria separación de poderes, pediría, por favor, lo más leve posible. Gracias.