10/06/02

CAÍDA DEL PBI

El PBI del primer trimestre de 2002 descendió 10,1% respecto a igual período del año 2001 y 3,6% respecto del cuarto trimestre de 2001, en términos desestacionalizados. La tendencia recesiva observada desde tiempo atrás se manifestó nuevamente en este primer trimestre del año, en el cual sólo la actividad agropecuaria tuvo moderado crecimiento, en tanto las otras actividades profundizaron su comportamiento contractivo, informó el Banco Central del Uruguay .

El sector Agropecuario aumentó 0,5% en el primer trimestre de 2002. Esta variación obedeció a un crecimiento de la actividad pecuaria y una merma en la actividad agrícola. La producción pecuaria creció en el primer trimestre, aumentando las producciones vacuna, de leche, aves y huevos, en tanto disminuyó la de lana. En vacunos el stock ha crecido, dada la menor extracción por efecto de la aftosa y la reducción de las exportaciones, y por un aumento importante en los nacimientos de la pasada primavera, cuando se alcanzó una cantidad record de terneros. También hubo mayor producción de leche continuando con el ritmo creciente de los últimos trimestres, después de superar algunas dificultades económicas y adversidades climáticas diversas. Se estima una merma en la producción de lana debido a la reducción de las existencias de ovinos. En el subsector agrícola influyeron negativamente las producciones de arroz, trigo, maíz y sorgo. La producción de arroz se redujo como consecuencia de la disminución de los rendimientos dado que la superficie sembrada se mantuvo constante. La producción de trigo tuvo también una disminución importante, aunque su incidencia en el trimestre fue menor. En los cultivos de verano se observó disímil desempeño, con bajas en las producciones de maíz y sorgo en relación a la buena zafra anterior, y alza en la producción de girasol.

En Industrias manufactureras la actividad disminuyó 17,8%. Si bien la demanda interna continuó con la tendencia negativa de los últimos trimestres, en los primeros tres meses del año la caída en las exportaciones fue un factor relevante para la explicación de la menor actividad de la industria manufacturera. Las ventas al exterior medidas en dólares estadounidenses corrientes registraron una caída del 25,6% con relación al primer trimestre del año pasado. La mayoría de los sectores presentaron tasas de variación de la producción negativas. Los que mayor incidencia tuvieron en el descenso manufacturero global, fueron: Alimentos, bebidas y tabaco, Productos metálicos, maquinarias y equipos y Textiles, vestimentas y cueros, todos ellos con una participación importante de la demanda externa en sus ventas. Asimismo, presentaron tasas negativas la Industria Química, Minerales no metálicos y Papel e imprentas, más orientados al mercado interno. Las ramas que más incidieron en la caída del sector Alimentos, bebidas y tabaco, fueron la frigorífica, que había tenido un buen primer trimestre el año pasado a la salida de la primera crisis aftósica, las productoras de bebidas sin alcohol, de azúcar y la molinería. En el sector de Productos metálicos, maquinarias y equipos, fueron las ramas productoras de material de transporte, que vieron disminuida su demanda externa regional, las que influyeron principalmente en la caída del nivel de actividad sectorial. A su vez, en el sector de Textiles, vestimentas y cueros, casi todas sus ramas tuvieron menor actividad, por la reducida demanda externa, con excepción de curtidurías que registró aumento en el primer trimestre del año. En la Industria Química, si bien la refinería de petróleo, la producción de químicas básicas y de abonos y plaguicidas crecieron, las altas tasas negativas presentadas por las ramas productoras de plástico, caucho, artículos de limpieza y tocador y otros químicos, determinaron la contracción del sector. La disminución de Minerales no metálicos fue consecuencia del descenso en la actividad de construcción que es su principal demandante.

El sector Electricidad, gas y agua descendió 3,7%. La generación de energía eléctrica total disminuyó comparada con la generación del primer trimestre del año pasado;principalmente se redujo la generación hidráulica de Salto Grande, provocando un aumento considerable de las importaciones y de la generación térmica; no se registraron exportaciones y el consumo interno de electricidad presentó un descenso, a raíz de la menor utilización hecha por los usuarios industriales y comerciales. Hubo reducción en la producción de gas, atribuible también al menor uso por parte del comercio y la industria. La merma en la producción de agua potable obedeció a la retracción del consumo en todo el país.

La actividad de Construcción descendió 14,0%. Este resultado fue consecuencia de los desempeños negativos, tanto de la construcción pública como de la privada. La construcción pública presentó la mayor contracción, con descensos pronunciados en las obras de la Administración Nacional de Telecomunicaciones (ANTEL), el Ministerio de Transportes y Obras Públicas (MTOP), el Banco Hipotecario del Uruguay (BHU) y la Intendencia Municipal de Montevideo (IMM). Estas caídas fueron parcialmente compensadas por subas, de menor importancia relativa, en las obras de Usinas y Trasmisiones Eléctricas (UTE), de la Administración Nacional de Puertos (ANP) y de las concesiones de obras públicas. La disminución de la construcción de ANTEL se debió al enlentecimiento de las obras vinculadas a la instalación de la red de fibra óptica. La caída de la construcción del MTOP fue producto de la menor ejecución de obras por contrato, en concordancia con los recortes definidos en la inversión que realiza este Ministerio. El descenso de la construcción de la IMM fue consecuencia fundamentalmente, de la menor realización de obras de saneamiento y de vialidad. En UTE, la variación positiva estuvo determinada por las obras de los sistemas de distribución en Ciudad de la Costa. Por su parte el aumento en ANP obedeció a los trabajos llevados a cabo en los puertos de Montevideo, Colonia y Fray Bentos. En cuanto a las obras por concesión, el aumento provino de las obras en Ruta 5. En la construcción privada, su reducción se debió a similares comportamientos negativos de las obras en Montevideo y en el Interior, salvo Maldonado. En Montevideo se destaca la contracción operada en las grandes obras. A la culminación de obras importantes que estaban en curso en el primer trimestre del año anterior, se sumó el menor ritmo de las que aún continúan y la falta de obras nuevas. En el Interior también se observó un retroceso muy importante en la actividad de las obras de grandes dimensiones. Asimismo se verificó en todo el país una importante disminución de la construcción privada financiada por el BHU. Finalmente, en la zona de Maldonado se observó un pequeño aumento en la actividad de la construcción, al comparar con los niveles muy deprimidos del primer trimestre del año pasado. 

El sector Comercio, restaurantes y hoteles descendió 20,0%. La reducción general de la actividad económica estuvo presente en el comercio y en los restaurantes y hoteles. En el comercio, dentro de un panorama general negativo, la mayor incidencia se debió a la fuerte disminución de los productos importados y de los productos manufacturados nacionales, tanto para la comercialización interna como para la exportación. La actividad de restaurantes y hoteles registró caída en el primer trimestre del año, como reflejo de la disminución general de la demanda doméstica y de una merma importante en la presencia de turistas, los que además se alojaron preferentemente en casa propia, de familiares o amigos. Si bien la estadía promedio y el gasto por persona fueron algo superiores a los de la temporada anterior, el hecho de que la corriente turística disminuyó casi a la mitad fue decisivo para los resultados claramente negativos de estas actividades.

El sector Transportes y comunicaciones disminuyó 6,4%. En transportes se produjo retracción en: el transporte ferroviario, donde descendieron los volúmenes transportados de arroz, cemento, combustibles y madera, entre otros; el transporte terrestre de pasajeros por la reducción de los servicios urbanos, interdepartamentales y de taxímetros; el transporte automotor de carga, como resultado de las variaciones negativas del transporte de bienes importados y exportados, de bienes industriales nacionales y de bienes agropecuarios (ganado, lana y cereales y oleaginosos); el transporte aéreo, cuya tasa negativa reflejó las dificultades económicas que están afectando a la región, no obstante lo cual debe destacarse que la línea aérea de bandera nacional alcanzó una tasa moderadamente positiva debido a que tuvo menor competencia en alguna de sus rutas y a que fortaleció su oferta de plazas; los servicios conexos al transporte, que variaron a la baja como consecuencia de la menor actividad de despachantes de aduana, entre otras. La actividad de almacenamiento se contrajo debido a la menor demanda de la industria. Las comunicaciones disminuyeron su actividad, tanto en correos como en telefonía. El tráfico telefónico nacional cursado a través de la telefonía básica descendió, lo que no fue neutralizado por el incremento de la telefonía celular.

El agregado "Otros", que incluye al resto de los sectores de actividad1 y los ajustes por la remuneración imputada de las instituciones financieras y los derechos de importación, descendió 7,4%. En esta disminución incidieron variaciones negativas de la mayoría de las actividades incluidas, especialmente los servicios prestados a las empresas y los servicios comunales, sociales y personales, y los ajustes aludidos.

1 Establecimientos financieros y seguros, Bienes inmuebles, Servicios prestados a las empresas, Servicios del Gobierno General, Servicios Sociales, Servicios de esparcimiento, Servicios personales, Canteras y minas y Pesca.