25/11/02   

LAS DIFICULTADES SON PARA PENSAR CON IMAGINACIÓN

“Las dificultades no están hechas para que la gente empiece nada más que a llorar y lamentarse, están hechas para ver cómo, con imaginación, como no teníamos dinero para recaudar lo suficiente para poder llevar adelante la Megaconcesión, cómo con imaginación podemos armar una cosa que le sirva al país”, dijo el Presidente Jorge Batlle en la firma del Convenio con la Corporación Andina de Fomento.

Palabras del Presidente de la República Jorge Batlle en el acto  de la firma del Convenio con la Corporación Andina de Fomento
Edificio Libertad, 25 de noviembre de 2002

Realmente para el Uruguay ésta es como el señor presidente Lacaf lo ha dicho, es una ocasión muy particular, porque estamos celebrando algo que comenzamos hace bastante poco tiempo en términos de la burocracia nacional. Decir que en once meses hemos hecho todo esto, es uno de los trabajos más importantes de Hércules. Porque no se crean.

Lo cierto es que en once meses hemos recorrido un gran camino, fundamentalmente gracias a la naturaleza de esta organización que usted preside. Ha sido usted el motor de todo esto y el que nos ha impreso a todos nosotros el ritmo con el cual hemos podido hoy concertar esta primera operación  puesto que ésta es como le digo la primera. No crea usted que se va a salvar, vendrán otras más, y de seguro serán tan fructíferas para los objetivos de la Corporación Andina de Fomento.

Es bueno que todos ustedes sepan, aunque seguro muchos ya están enterados, de la formidable labor de la Corporación Andina de Fomento y del formidable posicionamiento financiero que ella tiene en los mercados cuando hay un momento tan difícil para  los mercados. Le diríamos entonces estimado amigo que éste para el Uruguay es un paso realmente muy significativo, muy significativo.

Hemos abierto además también a la consideración de operaciones de concesión en el Aeropuerto Nacional de Carrasco, y esperamos que todo el tema de la instrumentación de la infraestructura ferroviaria podamos también abrirla a un sistema de concesión que al principio puedan ser un poco más difíciles esos emprendimientos, que estos últimos dos, pero que sin ninguna duda también formará parte de lo que es la infraestructura común que tenemos que llevar adelante.

Yo recuerdo perfectamente la reunión a la cual se refiere el Ministro Cáceres en Brasilia en el año 2001, fue una propuesta del Uruguay. Fue particularmente una propuesta del Ministro Cáceres la que determinó la constitución de ese grupo de trabajo que tuvo su primera reunión en el Parque Hotel en Montevideo, con la participación de los delegados de todos los países en donde la Corporación Andina de Fomento era uno de los elementos centrales, igual que FONPLATA, que es nuestra aspiración al final que FONPLATA se meta dentro de la Corporación Andina de Fomento para hacer una cosa grande y única con muchos recursos y que pueda hacer muchas cosas, porque tenemos la necesidad de aprovechar las dificultades.

Las dificultades no están hechas en el mundo para que la gente empiece nada más que a llorar y lamentarse. Las dificultades están hechas para ver cómo, con imaginación, como no teníamos dinero para recaudar lo suficiente para poder llevar adelante la megaconcesión, cómo, con imaginación, podemos armar una cosa que le sirva a todo el país. Como lo hemos hecho con otras cosas, como lo hemos hecho con todo el proceso de la organización cooperativa de CALNU en el norte, o como lo acabamos de hacer con todo el sector lechero del país. O sea, formulas imaginativas que existen, que nos permiten resolver y encarar problemas que de lo contrario si estamos simplemente pensando en las recaudaciones y en los ajustes, y en apretar reduciendo gasto, no vamos a obtener crecimiento.

En economías procíclicas la única cosa que sucede cuando nos dicen, “ajuste y reduzca el gasto”,  es que la económica naturalmente tiene que alcanzar un nivel de donde pueda volver a crecer, pero es el único sistema que servirá para que los números cierren, pero al  final los números cierran tanto, cierran tanto, que se transforman en el cierre final de la tapa del ataúd, ¿no es verdad?

Lo cual significa que estas cosas suponen otras visiones para encarar caminos que son imprescindibles, y que además de imprescindibles son impostergables y que son absolutamente necesarios. Porque si no tuviéramos ese tipo de soluciones, nuestras empresas que están pasando mal, porque inclusive el Estado les está debiendo dinero, estarían en muchísimo perores condiciones y tendríamos muchísimas más dificultades.

Así que, en primer lugar, le queremos agradecer a usted, a la Corporación Andina, todas las manos que nos han dado para llevar adelante estas cosas y para decirle, desde ya, que  no creo que usted demore un año en venir a hacer otro discurso.

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