18/12/03
EL DESEMPLEO ES NUESTRO PRINCIPAL ENEMIGO
“El desempleo es
nuestro principal enemigo, es el principal enemigo de toda la sociedad, es
el principal enemigo de la democracia, es el principal enemigo de la
justicia social, de la paz de la familia, de la paz de la sociedad”, dijo
el Presidente Jorge Batlle al realizar un balance del
año, en el almuerzo mensual de la Asociación de Dirigentes de
Marketing (ADM).
PALABRAS DEL PRESIDENTE
DE LA REPÚBLICA, JORGE BATLLE, EN EL ALMUERZO DE TRABAJO DE LA ASOCIACIÓN
DE DIRIGENTES DE MARKENTING. 18/12/2003
PRESIDENTE BATLLE:
Señor Vicepresidente, señor presidente de ADM, señoras y señores, amigos
todos.
Naturalmente
que ustedes de seguro han tomado conocimiento de las declaraciones del
equipo económico del día de ayer. Y, por tanto, ello hace que sea
innecesario que yo trate los mismos temas que ellos trataron,
fundamentalmente aquellos que tienen que ver con lo que el Ministro Alfie
calificó como características de la salida de la crisis. Él, en estos
papeles que tenía ayer y que me los pasó para mi hoy, a los efectos que yo
no cometa errores ni diga cosas de más; él estableció que como
características de la salida de la crisis en primer lugar estaba ubicado el
respeto de los derechos de propiedad, el respeto de las reglas de juego en
materia legal, en materia de moneda, en materia tributaria, el respeto por
la independencia del Banco Central. Y cuando habló de las características
de la salida de la crisis, habló de un manejo fiscal ortodoxo, un manejo
monetario ortodoxo, de las finanzas de las empresas públicas bajo control,
un camino de solución a la crisis bancaria y también en este caso no un
camino sino una solución, sí, a la deuda pública del Estado.
Luego se
extendió sobre los distintos temas, para, finalmente, dar las proyecciones
del 2004. Y las bases del programa para el 2004, que yo quiero simplemente
reiterar aunque han sido ya difundidas y conocidas, bases del programa para
el 2004: crecimiento del Producto 5%, inflación de 7 a 9%, incremento del
salario real de 1 a 2 %, las tarifas según los costos, y las proyecciones
las estableció en un incremento del empleo similar al de este año, o sea
50 mil empleos nuevos, un incremento de las exportaciones del 15 al 20%; yo
agrego que este año las exportaciones están ubicadas un poco por encima
del 2001, más o menos en el orden de los 2.200, 2.300 millones de dólares,
y que el año que viene vamos a estar contra los 3.000 millones de dólares
de bienes. Un crecimiento de la industria -sin la refinería- entre el 12 y
el 14 %, un resultado primario del 3.2 del Producto, un resultado global del
2, menos, déficit 2.9 del PBI, y yo agrego simplemente un número,
que me parece que es interesante consignarlo, de que este año el producto
agropecuario ha crecido una enormidad, que el año próximo va a volver a
crecer una enormidad; que el año que viene vamos a exportar 600 millones de
dólares de carne, vamos a faenar 2 millones de cabezas de ganado, y la
perspectiva es que tenemos que organizarnos para faenar de futuro 3 millones
de cabezas de ganado por año.
Hemos,
hemos visto, por tanto, las políticas globales que nos permitieron salir de
la crisis. Quisiéramos pasar rápidamente revista a algunas medidas que se
suman a las medidas mencionadas, que son medidas más globales y más
importantes. Yo quisiera repetir con el Ministro Alfie cuando él dijo que
la falta de empleo, el desempleo, es nuestro principal enemigo. Es el
principal enemigo de toda sociedad, es el principal enemigo de la
democracia, el principal enemigo de la
justicia social, de la paz de la familia, de la paz de la sociedad.
El gobierno en la materia,
más allá del crecimiento de este año, más allá de los 50 mil empleos
del año próximo, el gobierno ha tratado en materia de empleo y en materia
fiscal de hacer algunas cosas que me gustaría, por lo menos, recordar. Más
allá también de que estamos preparando un grupo, un paquete de medidas
vinculadas al área de empleo juvenil, a la Ley de Empleo, al Seguro de
Desempleo, al uso adecuado de los créditos obtenidos en Italia para las
PYMES, entre el Ministerio de Agricultura y el Ministerio de Trabajo, a las
actividades comunitarias que se están haciendo con mucho éxito en el
interior del país entre los municipios y los Ministerios de Trabajo y de
Vivienda, yo diría que nosotros hemos podido llevar adelante un conjunto de
medidas muy concretas y especificas a lo largo de todo este proceso de la
crisis; proceso que empezó a partir del 24 de abril del 2001, con la
primera aparición de la aftosa que se consolidó en esa materia poco tiempo
después, y hemos armado algunas cosas para tratar de promover el empleo y
tratar de ayudar a la producción.
Hemos derogado los aportes
patronales en la actividad agropecuaria, hemos derogado los aportes
patronales a la industria, disminuyendo a la mitad el aporte a DISSE, hemos
derogado el aporte patronal al transporte de pasajeros, al transporte de
carga, el aporte patronal, la derogación del IMUSIVI, la derogación de los
impuestos a los ejes con un nuevo régimen de contralor.
Exoneramos de IVA, y de
IRIC a la exportación de software y de servicios, de IVA a los hoteles en
baja temporada, desmonopolizamos las llamadas de larga distancia y la
transmisión de datos. Disminuimos el 75% el aporte patronal para obras
comenzadas, o reactivadas, a partir del 1º de noviembre del 2000.
Exoneramos de IVA sobre los intereses de la financiación en moneda
extranjera, que esta en proceso parlamentario; no sé si ha concluido ya.
Hemos exonerado de aporte
patronal para empresas nuevas, o que amplíen la cantidad de personal; hemos
exonerado de aporte para empresas unipersonales de hasta 29 años de edad,
exoneramos de recargos a la importación de todo bien de capital. Promoción
de empleo, Ley de Fomento del Empleo, reducimos al cero por ciento el monto
de los aportes patronales, reduciendo los costos de contratación de
personal en un plazo de 12 meses. Establecimos la reducción al cero por
ciento del complemento de la cuota mutual por seis meses, por los
dependientes referidos.
Bueno, yo creo que esto se
hizo en el momento peor, cuando realmente no teníamos dinero absolutamente
para nada, para atender los recursos básicos del país, decidimos bajar
impuestos.
Se habla de que hay que
hacer políticas anticíclicas porque nuestro país tiene un sistema fiscal
tributario procíclico; el IVA a las importaciones, cuando caen las
importaciones, como cayeron en toda esta cuenca durante los primeros meses
de este año, naturalmente el director de la DGI empezó a sentir que le
faltaba dinero. Recién por setiembre las importaciones empezaron a subir.
Lo cierto es que en el momento peor, el país hizo un esfuerzo consistente
para bajar costos, que eran costos que afectaban directamente a la
producción, bajando aportes patronales en prácticamente todas las
actividades, menos la actividad comercial a la cual se le dio luego alguna
ventaja ulterior.
Y pienso que ese fue un
conjunto de medidas, que cuando uno las vea a la distancia y las mira hoy
todas juntas, y piensa lo que supuso haber tomado esa decisión
cuando el país estaba en el peor de los momentos, creo que muestra
con toda claridad que el país, sin ninguna duda, sintió que la crisis le
daba una oportunidad para transformar, para transformar una cantidad de
actividades, una cantidad de cosas.
No hay que mirar a las
crisis solamente en su aspecto negativo, que lo tuvieron y que fue muy
grande el aspecto negativo de la crisis; generó mucho dolor a muchísima
gente, que todavía hoy siente las heridas profundas de cuanta cosa le
aconteció sin poder impedirlo, sin poder defenderse, sin poder tener
recursos de ningún tipo para poder resolver los problemas.
Pero en medio de esa
circunstancia la sociedad reaccionó de forma tal que fue la sociedad toda
la que aceptó, como una cosa necesaria, los cambios que el país se ha dado
en no más de seis meses, en este año del 2003.
Y todo está en línea
entonces con el anuncio hecho por el Ministro Alfie, de que este crecimiento
de la economía, de 50 mil empleos para el año próximo, va a ser la
consecuencia no sólo de este tipo de medidas, sino de que el Poder
Ejecutivo, y todos los organismos del Estado, y toda la sociedad, en este
año electoral, sean más estrictos que nunca en el cumplimiento ortodoxo de
las metas fiscales.
AUMENTO DE GASTOS NO DA VOTOS
Si nosotros
cometiéramos el error de creer que aumentando el gasto, vamos a aumentar
los votos del que aumenta el gasto, estamos perdidos y estamos haciéndole
un daño enorme al país.
El gobierno está
comprometido a esa tarea, y lo
quiere anunciar con toda tranquilidad, porque es lo que el gobierno ha
tratado de hacer y trata de hacer todos los días, absolutamente todos los
días, ordenar el gasto y ordenar la administración.
Pero yo
quisiera además agregar acá algo, que me parece que es bueno que se
refiera el Presidente de la República a ello, que es lo que tiene que ver
con el así llamado peso del Estado. Ha sido un reclamo permanente de la
sociedad: tratemos de disminuir el peso del Estado, que ha sido además una
expresión que refleja una verdad. El peso del Estado ha sido, digamos, muy
grande, en cuanto que la economía disminuyó y el peso del Estado no lo
hizo en la misma medida, en tiempos no actuales sino pasados, y eso nos ha
quedado como una cosa difícil, difícil de solucionar.
Pero en esta
materia, yo quisiera también hacer alguna recopilación de alguna
información. A lo largo del gobierno hemos tratado de impulsar una cantidad
enorme de desregulaciones, de las que se ven: la desregulación de seguros,
la desregulación de las comunicaciones internacionales, y desde las que
aparentemente no se ven, desde las farmacias hasta cualquier otra cosa, pero
hemos estado permanentemente detrás de la búsqueda de las soluciones, para
ir desregulando y todos los días nos encontramos con algo nuevo. El Estado
es un bosque intrincado, es una maraña de cosas de las cuales surgen desde
lo inesperado todos los días alguna cosa que podemos resolver.
Hemos tratado
además de darle mucho más transparencia a la actividad del Estado, en la
información sobre las compras, en la unificación de las compras y los
pagos al contado de los medicamentos, en la unificación de las compras para
el Instituto de Alimentación; le hemos facilitado a los funcionarios el
retiro anticipado, pero hemos aumentado el plazo por el que el Estado no
está en condiciones de incorporar funcionarios nuevos hasta el 2015.
En este período
de gobierno, se ha podido realizar la subasta de la Playa de Contenedores,
la concesión del Aeropuerto, está ya abierta la licitación para las vías
férreas. Se agrega a todo esto, antes de fin de año, la nueva instalación
portuaria en Palmira y en La Paloma.
Hemos podido
conseguir la aprobación de la Caja Notarial y Universitaria y está a
consideración del Parlamento, la Policial y la Militar. Hemos podido
reformar absolutamente el Banco Hipotecario, estamos haciendo otro tanto con
el Banco de la República. Hemos podido resolver las dificultades
financieras que se le presentaban a las inversiones en la infraestructura
vial, a través de la Megaconcesión. Hemos podido crear unidades como la
URSEA y como la URSEC, modernizando el funcionamiento de los elementos que
ellos tratan y consideran. Se promovió un cambio sustancial en la ANCAP,
para asegurar la vida futura, cambio lamentablemente frustrado. Se ha
logrado un formidable avance en materia energética, al que nos referiremos
más adelante. Estamos en condiciones de buscar nuevos socios para PLUNA.
El
esfuerzo fue por la modernización y adaptación del Estado a la nueva
realidad, ha sido constante y se mantendrá así. Estamos absolutamente
decididos a continuar en la misma línea de actividad, tratando de que el
Estado ceda a terceros -bajo normas totalmente abiertas y transparentes-
funciones que hasta ahora no han podido hacer con eficacia y para las cuales
no tienen capital propio, y en ese camino el gobierno va a seguir
caminado por el mismo
rumbo y con el mismo sentido.
El
gobierno, para llevar adelante estas transformaciones, debo decir que ha
contado con la colaboración de los legisladores de la coalición, a contado
con la colaboración de legisladores del Frente Amplio, ha contado con la
colaboración de los legisladores del Partido Independiente, sin lo cual la
mayor la parte de estas cosas no se hubieran podían hacer. Tengo para mi,
que no existe antecedentes en el pasado de la historia administrativa del
Uruguay, en
donde en tan poco tiempo se hayan podido hacer tan profundas
transformaciones en prácticamente todos los sectores de la actividad
empresarial, comercial, industrial, y financiera del Estado.
Todo
esto se ha hecho además sin disminuir la presencia del Estado, atendiendo
sus obligaciones para con aquellos sectores, lo más débiles, de la
sociedad.
Ayer
lo explicó con claridad el señor Director de la OPP, el contador Ariel
Davrieux, en donde por el contrario dio las cifras en donde en áreas
especificas como la alimentación, tanto infantil, de tiempo completo, como
el Instituto Nacional de Alimentación, como en el INAME, como en el
Programa de Infancia y Familia, como en otros programas, y como el programa
que estamos haciendo con el Ministerio de Vivienda y las Intendencias, y el
Ministerio de Trabajo, hemos aumentado los gastos, y cuando hemos contraído
los gastos en todo el resto de la Administración, en ese sector lo hemos
aumentado los gastos y vamos a mantener esa política a lo largo del 2004,
asistiendo a todos aquellos sectores que expresen, a través de las
encuestas e investigaciones que hagan los institutos correspondientes,
necesidades que debamos atender.
Creo
que eso le ha dado al país una respuesta muy positiva. Pienso que cuando en
medio de la crisis mas profunda y cuando mucho de nosotros no sabíamos qué
iba a pasar al día siguiente, desde el punto de vista del manejo de las
finanzas públicas, la red social que el Uruguay tradicionalmente tiene, que
sigue siendo al más importante de toda América del Sur, ayudó enormemente
a que el país pudiera enfrentar esas circunstancias, sin tener que vivir o
sufrir escenas
que otros países lamentablemente han vivido y muchas veces aun viven, porque han pasado o
están pasando por crisis similares por a las que pasamos nosotros.
Con
todo esto que he reseñado, y que ustedes conocen, pero que tenía para mi
enorme importancia hacerlo, porque como hemos estado todos los días
tratando de promover todas estas medidas, cuando llega un momento en
donde el Ministro de Economía nos dice “Bueno, puede descansar
tranquilo, dos o tres días hasta ponerse a trabajar de nuevo, porque le
vamos a dar buena noticias”, uno tiene un instante para detenerse para
mirar hacia atrás
y ver cómo a lo largo de toda esta tormenta y al tiempo que
tratábamos de sortearla, el Uruguay fue capaz de hacer una cantidad enorme
de cosas que parecían imposible de hacer. Si ustedes piensan cómo se votó
la reforma de la Ley del Banco Hipotecario, y tratamos de poner esto dos o
tres años para atrás en la agenda política, eso era absolutamente
imposible de realizarlo, imposible llevarlo adelante. En esta matera la
sociedad ha sido sensible, el costo del Estado no solo ha disminuido por
otras circunstancias, sino que ha
disminuido por acciones concretas que el Estado viene realizando para
modernizar su actividad, para transformar su estructura y para acercarse a
mejores niveles de calidad en sus servicios. Sin dejar de tener en cuenta
que en algunos sectores, como por ejemplo de Salud Pública, hemos tenido
que aumentar también los gastos, porque cosa que hoy ya no sucede, durante
un tiempo las mutualistas perdieron afiliados, que nos ha llevado no
solamente a atender más enfermos en Salud Pública, sino que nos ha llevado
ahora a crear un fondo especial para poder ayudar a las mutualistas a pagar
los salarios atrasados, que generaban una terrible situación de
inestabilidad social en un sector básico para la Salud Nacional.
LA
NUEVA MATRIZ ENERGÉTICA
Yo
quisiera, antes que todo,
ahora hablar un poco del porvenir, y hacer alguna referencia al tema
energético, porque considero que va de suyo que no teniendo el Uruguay ni
petróleo ni gas, y estando
limitado el Uruguay en sus posibilidades de aumentar sus fuentes de energía
hidráulica, el tema energético para el Uruguay es un tema central. Estamos
en buenos niveles de precios en cuanto a la energía eléctrica que le
estamos comprando a la Argentina,
pero naturalmente si no teníamos una fuente de aprovisionamiento estable de
gas, eso no lo ibamos a poder consolidar.
En
el año 2000, al iniciar este período de gobierno, estaban totalmente
empantanadas las negociaciones con la organización extranjera que fue la
que luego transportó el gas debajo del Río de la Plata. Trabajamos
entonces con el Presidente de la UTE, con ese organismo y con el Ministro
Villar, en Buenos Aires, y pudimos el día 28 de setiembre, fecha que me
persigue; ayer me persiguió de
la mano de los miembros del equipo económico, y hoy de la mano del señor
Scaglia, porque dice que no sé qué cosa fecha es de Peñarol. El 28 de
septiembre de ese año, pudimos firmar el acuerdo para transportar el gas.
El caño de gas lo inauguramos en octubre, allá en Colonia.
Hoy, empresas como
Metzen y Sena, Fanapel, Laysa, Parmalat, CONAPROLE, frigoríficos, ANCAP,
las cervecerías, están en proceso de sustituir sus aprovisionamientos de
fuel oil, o de otros elementos, por gas.
Además
de eso, en el día de ayer, la UTE anunció -convocando a los interesados,
que son varios- los elementos para la construcción y entrega llave en mano,
de una usina en
San José, con la cual
usina vamos a generar 300 a 400 mega y eso le va a permitir al Uruguay tener
un horizonte de tranquilidad en cuanto a una energía más barata, más
limpia, accesible, para atender una demanda que es creciente y que sigue
creciendo, sobre todo en sectores industriales la demanda sigue creciendo.
La oferta supone un compromiso de financiamiento del 80% del valor de lo
instalado por 7 años, lo que le da a la UTE -que está en condiciones de
repago porque está terminando para el 2006 todo su endeudamiento- una
accesible y comprensible capacidad de asumir esta nueva obligación.
En
materia de gas existen algunas cosas pendientes. La extensión de la
cañería hasta Florida y también la otra cosa pendiente que hay en materia
de gas, es volver a estudiar la posibilidad de que realmente pueda ser
rentable y físicamente funcionable, si se puede decir esa palabra, o
adaptable, el reservorio eventual que puede haber de gas en Santa Lucía,
que sería para el Uruguay un gran pulmón e inclusive también para Buenos
Aires un gran pulmón. Sobre ello se trabajó en tiempos del ministerio del
contador Slinger, vamos a volver a trabajar sobre el mismo tema.
Como hemos
dicho, hemos lamentado el rechazo a la ley que autorizaba a la ANCAP a
asociarse para poder competir a partir del 2006. Lo lamentamos por el país
y particularmente por la empresa ANCAP y por sus funcionarios.
Con
fecha de 1999 se inició el contrato de la ANCAP para transformar su
refinería por un monto de 120 millones de dólares, con el propósito de
aumentar un poco su dimensión y de eliminar la nafta con plomo,
naturalmente que lo mismo no se pudo hacer con el gasoil porque la ANCAP no
tenía capacidad financiera ni crédito suficiente. Es una cosa que queda
pendiente, que cuesta más de 60 millones de dólares y que es necesaria por
las medidas ambientales que se está produciendo en el mundo entero y
también en la región. Se advierte que la ANCAP tiene que atender su futuro
de forma inmediata porque tiente una situación compleja, una situación
financiera compleja y una situación de competencia compleja.
Me permito pues en forma
muy amable y tranquila, reiterar que el gobierno va a respetar como
corresponde el resultado del referéndum, pero al mismo tiempo el gobierno
señala que está abierto a todas las sugerencias y espera que quienes
dijeron que para el día siguiente del 7 de diciembre tenían una ley
alternativa propuesta, para resolver el problema, la planteen. Yo creo que
ese es un problema central, y que es una obligación que tenemos todos
nosotros, como corresponde en un país democrático, aceptar y de buen grado
el resultado del referéndum, pero aquellos que lo promovieron y que se
comprometieron a una respuesta clara, también tienen la misma obligación
moral de cumplir con lo que han dicho que iban a hacer.
REINSERCIÓN
EN EL MUNDO GLOBAL
Cuando
el general Seregni puso en marcha su excelente plan, para considerar los
temas nacionales, uno de los últimos encuentros tuvo que ver con las
opciones para la reinserción del Uruguay en un mundo global. El moderador
de ese encuentro fue el contador Iglesias. Yo me voy a permitir leer lo que
dijo el contador Iglesias, como centro de su disertación; él dijo que
había tres elementos para esa inserción: “el primero, es que las
economías abiertas son las que han logrado las tasas de crecimiento
mayores, la solución más rápida de los problemas sociales, e incluso un
proceso convergente hacia una profundización de la democracia; el segundo,
que surge de la observación histórica es que los países que navegan en
este mundo internacionalizado son aquellos que tienen estructuras
económicas más flexibles; en tercer lugar, la mejor defensa para navegar
en este mundo de incertidumbres, estás dada por políticas domésticas
inteligentes. Y por supuesto a partir de esas buenas políticas internas,
buenos procesos de negociación internacionales”. Repito, buenos procesos
de negociación internacional.
El
gobierno a lo largo de los años de trabajo ha sido reiteradamente criticado
por este tema. Se ha dicho que el gobierno ha tenido idas y vueltas, marchas
y contramarchas, y que a veces -digamos- no ve claro el público a dónde se
dirige. Nos interesan analizar los resultados, a cuatro años del gobierno,
sobre todo luego de recientes afirmaciones de que el Uruguay entorpecía la
marcha del MERCOSUR; fruto seguramente ellas no de mala intención, sino de
notorio desconocimiento del tema.
El
MERCOSUR, creado en 1991, generó un crecimiento fuerte del comercio entre
sus miembros. Primero al amparo de los beneficios arancelarios y
luego, cuando en el período entre el 97 y el 98, el valor sobrevaluado del
peso argentino y del real brasilero, le permitieron a la economía uruguaya
llegar a esta cosa que históricamente no se dio nunca y no se dará jamás,
a tener un superávit con Brasil de 400 millones de dólares. Eso no era el
reflejo de la verdad, era el reflejo del valor artificial de la moneda.
Cuando eso cae, en el 99 en Brasil y en el 2002 en la Argentina, nuestra
relación de comercio exportador entre el MERCOSUR del Uruguay, pasa del 52
- 53% a lo que es hoy 23% - 24%. Por tanto, si nosotros no salíamos a
buscar afuera un lugar para poder vender lo que teníamos que vender, porque
en esos mercados no los podíamos vender, no íbamos a tener el resultado
que tenemos hoy, que tenemos una exportación por encima de la del 2001,
cuando estábamos prácticamente dependiendo del MERCOSUR.
Y eso no nos pasa
a nosotros solos, les pasa a todos los países del MERCOSUR. Brasil con 65
mil millones de exportaciones, precisa el doble. Como lo que tiene México.
La Argentina con 26, 27, hoy un poco más por la soja, precisa el doble. Y
el Uruguay también precisa el doble, y ese crecimiento no tenemos derecho,
no tenemos derecho a pedírselo a Brasil o a pedírselo a la Argentina, lo
tenemos que salir a buscar al mundo, y es con el mundo con el cual nos
tenemos que asociar.
Esa fue nuestra
estrategia. Por eso fuimos al Japón. ¿Qué conseguimos? Nada. Y nada,
porque fuimos a ver si colocábamos la carne y el día que estábamos en
Japón, vino la aftosa; mejor que no viaje más.
Después fuimos a
la China, donde tuvimos resultados óptimos que se están viendo, no
solamente en la lana que ya estaba instalada en el mercado, sino en muchos
otros rubros.
Estamos yendo en
abril del año que viene a la India. Con la India, creo que tenemos un
porvenir formidable, pero en un área muy particular. La India está
instalada en la zona franca con Tata, el señor RatánTata, que es uno de
los más importantes industriales de la India, y por ende del mundo, viene
ahora en enero, para continuar haciendo –digamos-
actividades en el Uruguay.
Está acá estos
días, un grupo mayor que Tata, el grupo Relains, que está viendo cosas en
el área petroquímica, en el área textil petroquímica, y está viniendo
además en enero el otro grupo que se dedica a la biotecnología orgánica,
que ha estado ya en el Uruguay trabajando sobre ese tema.
Yo creo que todas
estas actividades, que son actividades industriales pero de alta
tecnología, son esenciales para el Uruguay. Porque ahí el Uruguay tiene un
capital a invertir formidable, con muchísima gente muy capaz.
Yo quiero dar una
noticia hoy, que creo que es una noticia formidable para el Uruguay, el
director del Pasteur anunció hoy, oficialmente, que el Comité Ejecutivo
del Instituto aprobó la iniciativa uruguaya de instalar al Instituto
Pasteur en el Uruguay. Con el ministro de Educación hemos estado hablando,
con el director del Instituto Max Planck, que estuvo acá en el Uruguay.
Es evidente que el
Uruguay tiene un potencial enorme en el área científica y técnica, y que
tenemos hombres capaces. Hoy a las cuatro y media de la tarde vamos a
condecorar al doctor Casas Olascoaga y al licenciado Gambini, por sus
logros en materia científica en el área veterinaria y en el área física.
Que es importante que empecemos a decirle al mundo que tenemos gente de
primer nivel, que es reconocida como tal en el mundo entero, y por tanto a
las cuatro y media en el Edificio Libertad están todos invitados, porque
son uruguayos que merecen ese reconocimiento.
ACUERDOS
COMERCIALES
Yo
quisiera decir además a propósito de nuestra inserción en el mundo,
algunas otras cosas. Lamentablemente el ministro de Relaciones no ha podido
venir, porque ha tenido que ir a la Argentina a una serie de actividades
propias de su actividad jurídica, pero él podría relatar lo que fue la
reunión en Bruselas, hace dos semanas. Fue una reunión en dónde se
estableció una hoja de ruta trimestral. Tenemos la expectativa de poder
llegar a un acuerdo antes del fin 2004. Tenemos que hacer un esfuerzo por
tratar de que eso se lleve adelante, porque después del 2004 van a entrar
10 países más en Europa, muchos de ellos competidores nuestros; países
agrícolas como Polonia, cuya
explotación agrícola va a crecer de manos de los productores holandeses,
belgas, alemanes, franceses e italianos, que van a transportar su capital y
su tecnología a Polonia, que aportará su tierra y su gente, y podrá
entonces crecer exportando libremente a ese gran mercado europeo del cual no
tienen ni distancia. Por tanto, tenemos que tratar de apurar esto antes.
Yo sé que los
problemas son difíciles, sé que para países tan grandes como Brasil, que
tienen una realidad completamente distinta a la nuestra, que tienen derecho
y obligación de defender esa realidad, los planteos no pueden ser los
mismos que para el Uruguay. Nosotros tenemos que respetar ese sentido
histórico del Brasil, tenemos que ayudarlo a que se posicione en donde le
corresponde, pero también tenemos que defender nuestras pequeñas
posibilidades de crecer, desde nuestro trabajo.
Lo mismo nos pasó
con México, lo mismo nos pasó con EEUU. Por cierto que intentamos los
bilaterales, el 4+1 y el ALCA; intentamos todo, y su hubiera una cuarta vía
la intentamos también.
Lo cierto es que
fuimos en setiembre a EEUU con 70 empresarios, y yo voy a dar un numerito,
porque en esta materia los numeritos son interesantes. ¿Quién es nuestro
socio numero uno? Brasil, 468 millones de dólares de exportación al día
de hoy. ¿Quién es nuestro socio número dos? Los EEUU, 227 millones de
dólares de exportaciones al día de hoy; con cinco meses de carne ya nos
compró 110 millones, y la carne que nos compra no es la carne de las 20 mil
toneladas esas, de la carne para la hamburguesa. Esos 110 millones provienen
de la carne de calidad por la que al entrar pagamos los aranceles, e igual
la colocamos, lo cual quiere decir que el año que viene, con este volumen
mensual, vamos a estar colocando 250 millones de dólares de carne.
Entonces, ¿cómo no vamos a cuidar nuestra
cuestión sanitaria? ¿Cómo no vamos a vigilar si entra un ganado en pie, o
no en pie, de un lugar en donde nos sabemos si hay o no hay enfermedades?
Porque eso es el trabajo de nuestra gente, y ahí el año que viene vamos a
vender 575 millones de dólares de carne. Y eso es lo que tenemos que
defender. Lo mismo pasa con México, lo mismo pasa con Canadá.
Ahora, yo me
quiero referir al MERCOSUR y a los acuerdos con la CAN, que creo que es
importante que haga un racconto de lo acontecido, así todo el mundo se
informa y todo el mundo esta tranquilo.
Empezamos en el
mes de octubre en Perú, era más o menos 50 a 0; mejoramos bastante en
Miami, mejoramos un poco más en Montevideo, mejoramos un poquito más de
nuevo en Montevideo, y mejoramos del todo en forma espectacular a las tres
de la tarde de la reunión del MERCOSUR.
En primer lugar,
el Uruguay es el único que a firmado un acuerdo bilateral con un país de
la Comunidad Andina de Naciones, es el único; o sea, nosotros que somos los que impedimos, somos los
únicos que firmamos con alguien, firmamos con Perú; nada más que
nosotros.
En segundo lugar, firmamos
acuerdos sin cláusulas de salvaguardia, y sin reconocimiento a los
certificados de origen de los productos producidos en las zonas francas, y
reconociendo el patrimonio histórico de nuestras relaciones comerciales. Lo
mismo estamos haciendo con el resto de los miembros de la Comunidad Andina
de Naciones, porque para firmar un acuerdo hay que firmar un acuerdo que
funcione, no un acuerdo por el título, sino un acuerdo por el texto. Y este
acuerdo le sirvió a todos, está prácticamente cerrado y le va a servir a
todas las naciones que forman parte del MERCOSUR.
Pero, en el ínterin,
mientras conversábamos con eso, al Ministerio de Relaciones Exteriores se
le ocurrió que podríamos conversar algunas otras cosas, y conversamos de
algunas otras cosas que son mieles para los oídos de los señores
integrantes de la Cámara de Industrias; al punto que por primera vez en los
últimos 24 años, lo sentí al señor presidente de la Cámara de
Industrias, contento. Los plazos que terminaban en el 2004 se extienden
todos hasta el 2010. Tenemos un horizonte muy importante para poder
trabajar.
Pero al mismo tiempo de
eso hemos conseguido muchas cosas más, que ustedes las conocen, sobre todo
en cuanto a certificados de origen de productos que proviniendo de los
países del MERCOSUR, y de los países de la Corporación Andina de Fomento,
se pueden incorporar como si fueran nacionales a la cadena de producción;
la posibilidad de atender servicios en la Argentina y en Brasil, en las
mismas condiciones que los brasileños y los argentinos, observando las
ventajas que tenemos nosotros entre nosotros, y otra serie de disposiciones
en cuanto al número de ítem que podemos establecer nosotros como
reservados para el país en las negociaciones futuras. Mantener, además, la
admisión temporaria, mantener la desgravación del 2 por ciento para los
bienes de capital, de electrónica, de comunicaciones; mantener los
beneficios para la hotelería, los beneficios de exención de impuestos a
los elementos que integran un proyecto que se declare como de interés
nacional. En una palabra, yo creo que este postre que apareció a las tres
de la tarde en el Parque Hotel, mientras nosotros estábamos allí
escuchando los discursos de los distintos señores legisladores, en una
reunión que contó además con la presencia de África, de Europa y de
Rusia, del señor Ivanov, nada más ni nada menos que el Ministro de
Relaciones Exteriores ruso.
Yo quiero decir, entonces,
que realmente no solamente el país a sorteado la crisis, sino que mucho
más, el país se ha demostrado a sí mismo que puede crecer; que puede
salir de la crisis con fuerza, que puede enfrentar los problemas más
difíciles, que tiene un camino para seguir adelante.
Quiero terminar
diciendo una pequeña cosa, en donde naturalmente tengo que hacer un poquito
de política, ustedes perdonarán; confieso que voy a hacer poca política
pero necesaria. Porque más allá de lo que todos nosotros pensamos, cada
uno de nosotros de cómo nos va a ir, la preguntas es: ¿es qué existe otro
camino? ¿Es qué existe otra solución? Cuando uno ve que el Brasil se
empeña y lleva adelante una reforma previsional parecida a la nuestra;
cuando modifica el factor tributario para ensanchar la base, cuando eso le
genera inclusive dificultades en algunos sectores de su propio partido.
Confesemos en voz alta, quienes escuchamos durante mucho tiempo a un
presidente que muestra gran equilibrio, gran sentido práctico y gran
sensatez, nunca hubiéramos que pensado eso iba a pasar, como está pasando.
¿Y por qué ha hecho un acuerdo con el Fondo? ¿Por qué haya perdido
sentido de soberanía o de nacionalidad? Pero no, porque siente que es el
camino más adecuado para consolidar los elementos que precisa para que su
país crezca y para que su gente tenga trabajo y tenga destino en libertad.
Entonces a nosotros nos pasa lo mismo, nos pasa lo mismo,
absolutamente lo mismo, y eso es lo que tenemos que discutir por encima de
los candidatos y por encima de los partidos, es, ¿qué rumbo vamos a tomar?
Y eso es lo que a veces a uno le angustia. ¿Por qué? Porque ya, bueno, uno
ya tiene 76 años, está en los últimos doscientos, y apenas si levanta las
patas, ¿no es verdad? Pero nuestros hijos y nuestros nietos necesitan saber
que el país pueda todos los años generar 50 mil empleos, que no es por
casualidad que se hace eso ni por rebote, el año pasado y este año y el
año próximo, y el que vendrá.
Por eso yo
quisiera terminar haciendo un recuerdo de Vargas Llosa; Vargas Llosa
escribió un librito llamado “La utopía arcaica”, que comentó
largamente, recientemente La Nación, ese gran escritor mexicano Krause, y
otro intelectual de fuste como Marcos Aguinis escribió artículos muy
interesantes a propósitos del populismo, analizando las situaciones de
distintos lugares. Y yo no puedo resistir de leer una cosa que apareció en
un semanario hoy de mañana. Un ciudadano joven, ilustre, capaz,
inteligente, que ha sido siempre asesor principal de una gran fuerza
política, participa de un seminario llamado “Repensar el Estado”, y
sostiene que hay que estimular que los inversores privados orienten sus
inversiones hacia los sectores que cumplen criterios como la contribución a
la suficiencia alimentaría, a la repartición equitativa en el territorio
del país de la producción, el estímulo a la innovación tecnológica. Y,
agrega, no alcanza con eso, no alcanza con regular la orientación, en
algunos casos el Estado debe ser productor directo. Yo digo por ejemplo que
el Uruguay debería tener una empresa pública en área forestal o lo
debería haber tenido cuando decidió emprender ese sector; ahora no sé. Si
decidimos que es una buena idea empezar a promocionar algún otro tipo de
actividad, ahí debería incluirse una empresa pública, como lo fue la
empresa pesquera pública, el SOYP, agrego, cuando se decidió promocionar
la pesca. Cuando históricamente hablamos de la nacionalización del
comercio exterior, yo creo que la mejor forma de intervenir debería ser la
constitución de una empresa pública cuya función sea la comercialización
externa de los bienes producidos en el país.
Yo pienso que eso
es una visión arcaica y que lo que tenemos que discutir es eso. Porque es
posible, es posible que haya un grupo importante de ciudadanos en el país,
que sean inclusive mayoritarios, que crean en estas cosas. Y, entonces, la
pregunta que tenemos que hacernos todos, que tienen que hacerse ellos,
¿si llevamos adelante estas cosas, ¿qué nos va a pasar? Es el
caos, es sembrar la miseria, es la utopía de lo que no funciona, y eso es
lo que me parece que es el tema más importante que el Uruguay tiene que
analizar y que discutir este año. Inclusive discutirlo dentro de todas las
colectividades políticas, porque en todas las colectividades políticas hay
arcaicos y en todas las colectividades políticas hay modernos y hay gente
capaz de mirar el porvenir con objetividad, por encima de sus destinos
personales.
Y esa es la gran
cosa que el país tiene que resolver el año que viene, no quién va a ser
Presidente; pobre del que sea Presidente, el trabajo que
tiene por delante simplemente para atender a todos los uruguayos, que
todos piden todo para ayer. Creo, entonces, que este es el tema central que el país
tiene que analizar. El tema central que el país tiene que analizar es cuál
es el camino que vamos a seguir, transparente, honorable, correcto, para
poder generar todos los años 50.000, para poder crecer, para poder llevar
nuestros bienes y productos a todo el mundo, para no estar solo en el
MERCOSUR y en la Comunidad Andina; en China, en México, en Canadá, en
Estados Unidos, en Europa, en el Irán, en la India, en la China, en todos
lados.
Y señores sigamos
el consejo de Iglesias, solamente las economías abiertas han podido
resolver estos problemas, y lo han podido resolver en paz, porque eso es lo
que fundamentalmente debemos preservar. Cuando la democracia se debilita,
las sociedades pierden la estabilidad y al perder la estabilidad pierden la
paz. Muchas gracias.
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