29/12/03

HAY QUE HACER LAS COSAS MÁS RÁPIDO

"Cada vez que hay una cosa nueva en el Uruguay nos volvemos eternos en la discusión y en la instrumentación. Eso no puede ser. Hay que hacer las cosas más rápido", dijo el Presidente de la República, Jorge Batlle, al reclamar mayor rapidez en la concreción de las cosas, destacando la importancia del Fondo de Financiamiento y Recomposición de la Actividad Arrocera. El primer mandatario además solicitó a los productores arroceros que dieran una mano a Irán ante los momentos difíciles que está viviendo ese país.

PALABRAS DEL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA, JORGE BATLLE, DURANTE LA FIRMA DE CESIÓN FONDO DE FINANCIAMIENTO Y RECOMPOSICIÓN DE LA ACTIVIDAD ARROCERA. 29/12/2003

PRESIDENTE BATLLE: Dos palabras, solamente. Voy a saludar a todos en general, voy a tener un recuerdo muy particular para don Ricardo Ferrés que si estuviera con nosotros estaría requete contento de lo que estamos haciendo, y espero que -como están celebrando tanta cosa buena hoy- hagan una "vaca" y le manden un poco de arroz al Irán, que ha sido un gran cliente de todos y que seguirán siendo un gran cliente, y está necesitando una mano en este momento tan difícil.

Yo estoy muy contento con todo esto. La única cosa que digo, que nos costó un año de trabajo. Ahora que aprendimos cómo se hace las próximas cosas no pueden costar un año de trabajo. No puede ser que estemos todos dando vuelta, como cien personas, discutiendo todo esto en siete, ocho, diez instituciones nacionales y que haya costado un año de trabajo. Cada vez que hay una cosa nueva en el Uruguay nos volvemos eternos en la discusión y en la instrumentación. Eso no puede ser. Hay que hacer las cosas más rápido, el mundo no espera que nosotros estemos discutiendo un año un convenio, que por más importante que sea, a la luz de las cosas que en el mundo se hacen en mucho menos tiempo, no tienen la importancia ni la magnitud comparativa a otras cosas. Y, ciertamente, sí yo he estado siempre insistiéndole al Ministro, ¿para cuándo? Un día eran las AFAP, otro día era el Banco República, otro día el Banco Central, otro día eran los arroceros, otro día era Ricardito; todo el mundo poniendo piedras en el camino porque cada uno quería esto, el otro quería lo otro. No puede ser, todos tenemos que sentir que en esto tenemos que andar mucho más rápido, porque esto era necesario para el sector productivo, imprescindible para el sector productivo. Ahora sabemos cómo se hace.

Tenemos la Ley de Fideicomiso, tenemos una cantidad de cosas que podemos hacer. Las AFAP tienen recursos y se han quejado permanentemente de que no sabían dónde podían invertir. Nosotros podemos darles a las AFAP cuatro o cinco ideas y soluciones a los efectos de poder resolver alguna cosa tan importante como ser la Central de Granos y alguna otra cosa más. Quiere decir que tenemos instrumentos idóneos, tenemos recursos y tenemos posibilidades de darle además a las AFAP, o sea, a todos los ciudadanos que trabajan y aportan, buenos resultados para sus recursos.

De octubre a octubre la filiación al BPS creció en 63.000 nuevos afiliados del sector privado, mientras que bajó 7.000 del sector público. Quiere decir que es una cifra que muestra el resultado beneficioso de4 un conducción económica que yo creo que ha sido acertada por parte de los ministros y de los integrantes de los sectores financieros públicos y privados que han manejado la crisis en el Uruguay.

Finalmente, quiero decir que el tema al cual se refirió el señor contador Juan Berchesi, del Fideicomiso, es un tema central. Me parece que es un instrumento que las AFAP estaban reclamando permanentemente para poder hacer una enorme cantidad de cosas, no solamente para resolver problemas de endeudamiento, sino para ayudar y resolver problemas de inversión de distinta naturaleza. Así que espero que los distintos agentes económicos, como se les llama ahora, tanto públicos como privados, en colaboración con los bancos, y celebro muy mucho la presencia aquí del señor ingeniero Villar, el señor Oten, representando al Banco ACAC, porque considero que es una buena asociación la que hemos alcanzado en el día de hoy.

Pienso, por otra parte, y finalmente, que tenemos que aprovechar una circunstancia que la tenemos que consolidar. Tenemos que pedirle al Parlamento de la República que vote lo más rápidamente posible la ley por la que no solamente se consolida una política, sino que se establece que solamente por ley se pueden poner detracciones a la producción primaria. Cuando el país mantenga una política -como la que hemos podido desarrollar- de eliminar los impuestos a la producción primaria, no fijarle detracciones a la producción primaria, mantener un nivel de competitividad en la economía nacional, bajar los costos del Estado como los hemos ido bajando, y resolviendo una cantidad de actividades que estaban deterioradas en sectores públicos para concesionarlas y para hacerlas más eficientes, entonces vamos a tener en la exportación del sector primario el motor más importante, que nos va a permitir consolidar las actividades industriales, agroindustriales fundamentalmente, y las actividades logísticas y las actividades de servicios.

El día 18 de febrero estamos abriendo la licitación para llevar adelante el puerto granelero en La Paloma, en donde no solamente se podrá sacar chips de madera, sino también arroz. Y el día 17 de febrero estamos abriendo la licitación para los 1.800 kilómetros de renovación de las vías férreas, del Mitland, del tren a Río Branco y del tren a Blanquillo; naturalmente, con las derivaciones en Chamberlain hacia Paysandú y Fray Bentos, que va a ser central para los transportes de volumen, para la madera, y para las demás cosas que el Uruguay tiene que volver a tener como las tuvo hace no menos de 60 o 70 años. Buenos servicios que le permitan al país exportar, y que nos permitan inclusive ligarnos con el Urquiza, que tiene la misma trocha, y con los ferrocarriles de Brasil, del sur, y que nos permitan poner a los puertos de Montevideo y de La Paloma a la mano de la producción de la región.

Creo que hay un porvenir formidable para llevarlo adelante, y que este es más que un instrumento idóneo, y que este ejemplo de lo que nos ha costado tanto tiempo armar, lo podemos repetir con bien para muchos sectores de la actividad nacional.

Muchas gracias, y que el 144 siga bien; no es un ómnibus.