05/11/03

EXPORTACIONES RECORD PARA EL PRÓXIMO AÑO

El Presidente de la República, Jorge Batlle, señaló que las exportaciones tendrán un año record en el 2004, al tiempo que reclamó que el país mire su desarrollo en función de multiplicar las ventas hacia el exterior.     

PALABRAS DEL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA, JORGE BATLLE, EN EL CIERRE DEL SIMPOSIO "CULTURA DE LA SEGURIDAD: UNA NECESIDAD IMPOSTERGABLE"
05/11/2003

PRESIDENTE BATLLE: Muy buenas tardes. Señor Ministro, señores Comandantes en Jefe, señor Coronel García, señoras y señores:

Ha sido siempre para mí un gusto, además de un honor, poderme juntar con ustedes para participar de estos seminarios, de los cuales éste es el tercero que tengo el honor de participar, siempre sobre temas que son realmente centrales a la vida de las naciones, en el hoy y en el futuro inmediato, e inclusive en el más largo plazo.

En oportunidades anteriores, en el año 2001, participamos haciendo referencia al tema del destino del Estado Nación en el siglo XXI, y luego, al año siguiente, el año pasado, pudimos hablar sobre la Reforma del Estado.

Estuve releyendo ambas participaciones que tuve el honor de poder hacer aquí, y realmente muchos de los temas que entonces toqué, tienen básicamente que ver con lo que en este Seminario se ha tratado y se ha considerado, puesto que es muy difícil encontrar temas aislados, salvo que sean muy específicos que no tengan una conexión íntima entre sí y que no se refieran inmediatamente al resto de las actividades sociales.

Naturalmente que yo soy cualquier cosa menos un experto en temas de seguridad, y mirando el programa que ustedes han desarrollado el lunes, el martes y el día de hoy, en donde ha habido una serie de exposiciones, que abarcan un abanico muy amplio y muy extenso de temas, yo voy a tratar de introducirme en este tema a partir del tema de la exposición monográfica hecha por la profesora Beatriz Bell, que notoriamente no conozco, pero conozco el título del mismo, que es la seguridad y las situaciones de pobreza, indigencia, exclusión social y marginalidad. Creo que es un aspecto del problema que, como bien lo ha de haber señalado la profesora, tiene una conexión intima con los temas de la seguridad.

Y tiene además una conexión muy cercana a lo que notoriamente estamos mirando que ocurre, por lo menos para hablar de algo que de alguna manera estamos ligados y conocemos un poco más de lo que ocurre en este Continente.

En este Continente en los últimos años hemos tenido situaciones de inseguridad social, de inestabilidad social, que han tenido consecuencias sociales y políticas muy fuertes y que han determinado inestabilidades institucionales, inestabilidades sociales muy profundas y muy reiteradas.

Se suman allí una serie de problemas, que no todos están ligados a los temas que básicamente señalara la profesora en su monografía, puesto que se agregan a estos temas otros que son anteriores, que subyacen, de carácter étnico, de dificultades geográficas, de historias y tradiciones centenarias, que agregan dificultad a todas las situaciones existentes que ayudan, dadas determinadas coyunturas, a agregar inseguridad a la estabilidad social. Y a agregar inclusive formas de pérdida de control que no se alcanzan a ver con claridad cómo se pueden resolver en el momento en que ellas se producen.

Parecería que fuera necesaria la presencia de un liderazgo excepcionalmente fuerte o que fuera necesaria alguna de esas cosas que atraen violenta atención, y profunda atención sobre las masas sociales para poder revertir la tendencia de los acontecimientos y volver a traer paz y por ende, en cierta manera, seguridad a las situaciones reinantes.

¿Cómo es, entonces -y siendo esto una respuesta totalmente distinta para unos que para otros países, porque sería en todo caso un grave error uniformizar las respuestas- cómo es que un país como el nuestro puede atender esas dificultades, esos centros de potencial irradiación de climas de inseguridad?

Naturalmente que los esfuerzos hechos por las sociedades en general, por la nuestra en particular, han estado referidos a las formas de atención que nosotros hemos manejado desde siempre en un país que ha sido, bajo todos los tiempos y bajo todos los gobiernos, muy sensible a reconocer la necesidad de poner buena parte del producto al servicio de la solución de los problemas sociales que generan inseguridades. Inseguridades porque hay un destino que desaparece delante de los ojos de aquellos que procuran un destino en el trabajo, inseguridades porque ello genera una especie de auto exilio del sistema social imperante, y como consecuencia una forma de reacción contra el sistema porque el sistema lo despoja a uno de su destino, inseguridades que se generan porque ello trae como consecuencia el debilitamiento de la red social, que se trasmite inclusive a las nuevas generaciones; e inseguridades porque se va expandiendo como una mancha en las sociedades que no atinan a resolver eso con rapidez, una extendida y generalizada idea, no sólo entre los que participan integrando ese sector sino en los que están en sus fronteras y progresivamente van sintiendo su presencia como una presencia que tiende a la inseguridad general de la sociedad como van expandiendo una idea o un clima como que ese clima puede ser mañana o a corto plazo un clima dominante que prevalezca en el resto de la sociedad que genere inquietud, que genere falta de confianza, que genere temor y que haga daño muy profundo y muy grande en el desarrollo y en el porvenir de todas las sociedades.

Una sociedad que tiene un 20% de desempleo, si mantiene durante muchos años un 20% de desempleo, tiene un destino asegurado: le va a ir muy mal. La gente más joven se va a sentir impedida de realizarse, y por tanto la primera cosa que va a pensar es cambiar de horizonte. Y por tanto, cambiar de país.

¿Y qué sucede? Sucede que estamos en un mundo completamente distinto al que teníamos hace 40 o 50 años, y ese mundo que es completamente distinto los perciben fundamentalmente los que tienen menos de 30, por cierto que lo percibimos mucho menos los que tenemos más de 60, y además de percibirlo mucho menos, lo que tenemos más de sesenta, los que tenemos más de sesenta estamos imposibilitados de elegir otro destino. Los que tienen menos de 30, no solamente están totalmente posibilitados físicamente sino que están posibilitados sicológicamente elegir otro destino y es la respuesta más fácil que cada uno tiene a la dificultades hoy, porque hoy como el mundo está absolutamente globalizado viven en el otro mundo por vía INTERNET. Y por tanto, es mucho más fácil hoy mudar de lugar de vivir que lo que era hace 50 años, al punto que si nosotros vemos hacia donde procuran ir los que se han ido, advertiremos que se van a sociedades que han dado respuestas eficaces ha situaciones similares que las que hoy tuvimos en el pasado reciente viviendo nosotros y de la que todavía hoy estamos viviendo nosotros. O sea, tratan de ir a Canadá, tratan de ir a España, tratan de ir a Estados Unidos, tratan de ir a Suecia, tratan de ir a un país europeo, o a Italia, en donde los modelos de sociedad le procuran y les alcanzan las respuestas que le permiten insertarse en esa sociedades y perder inmediatamente la inseguridad interna que cada uno tenía dentro de nuestra sociedad que determinó que optaran por irse.

¿Quiénes son los que se van? Y los que se van son los mejores, no porque sepan más que los que se quedan, sino que son los mejores en cuanto a la energía sicológica que se precisa para abandonar el país, para abandonar la familia y para tentar fortuna o suerte en un escenario en buena medida muy desconocido.

¿Quiénes son los que nos quedamos? Los que tenemos más edad, y los que somos más débiles, más allá de un porcentaje que se queda en el Uruguay porque tiene, bueno sí, tiene una actividad, tiene un trabajo, tiene, como los que se van también amores por el país, cariños que lo atan al país y muchas veces mujer e hijo, que hacen que sea muy difícil que se puedan alejar muy fácilmente de la Patria.

Por tanto, si nosotros queremos tener seguridad en el Uruguay, queremos tener porvenir en el Uruguay, tenemos que crear los mecanismos para resolver el tema del empleo, sino creamos los mecanismos para resolver rápidamente los problemas del empleo, vamos a tener crecientes dificultades en cuanto seguridad, que van a ser respuestas indirectas a situaciones que se plantean en la vida de cada uno de los seres humanos, cuando llegado a cierta edad aún a poca edad en determinados niveles, empiezan hacerse preguntas y empiezan a mirarse alrededor y a encontrar que no tienen respuestas como la que precisan para encaminarse. Parecería que este es un tema que tiene todo el mundo consensos sobre el tema, o sea una cosa completamente distinta, es un país que tiene un grado de desempleo del 3 o el 4 o el 5 por ciento, como tiene Estados Unidos o como tienen la mayor parte de los países desarrollados del norte europeo, o en un país que tenía en el mes de febrero prácticamente el 20 por ciento de desempleo. Notoriamente el andar de los meses nos ha mostrado que esa cifra va cediendo, y nosotros tenemos una expectativa mas que razonable de que el crecimiento de la economía tal cual ha sido anunciado por la Facultad de Economía de la Universidad de la República, no va a ser menor a 5 puntos del producto del año que viene, mes a mes vemos que el desempleo retrocede, mes a mes vemos que la inflación baja, mes a mes vemos que la exportación crece, y mes a mes vemos que los guarismos son todos más positivos y son todos mejores.

La pregunta que entonces uno se hace es, ¿eso es suficiente? ¿Eso alcanza para resolver el problema? ¿No existe ningún otro camino posible para que eso sea más rápido, para que eso se más firme, para que eso sea más sólido, para que eso se consolide, para que haya una visión más clara de todos aquellos que aún no han alcanzado esa vinculación con el trabajo necesario para desarrollarse y que aún cuando no lo hayan logrado lo vean en un horizonte cercano?

Creo que esa es sin ninguna duda la pregunta que todos aquellos que buscamos la seguridad y la estabilidad de una sociedad nos tenemos que hacer máxime desde el gobierno, sobretodo después de que el gobierno siente que vivió una tormenta que nos llegó desde afuera, que pudimos manejarnos dentro de esa tormenta, que hemos por suerte comenzado a salir de ella, que las líneas les advierten presentes y en el futuro inmediato son adecuadas y positivas, y la pregunta entonces que uno se hace es ¿esas líneas que hoy están vigentes, que anuncian ese crecimiento de 5 puntos del producto, que anunciar una inflación para el año próximo de 7 por ciento, que anuncian un record histórico de exportaciones para el año próximo, son suficientes para dar esta respuesta y para alcanzar esa expansión y para lograr por tanto por esa vía una solución básica a lo que es esencial en la vida de un ciudadano, que es lograr en libertad y a través de su trabajo inteligente asegurar su destino, alcanza con eso? no, no alcanza, absolutamente no alcanza, porque estamos viviendo una coyuntura favorable, por muchas razones, que se va a profundizar favorablemente el año próximo, pero que luego cuando llegue a su rebote al techo, o orada el techo y sigue subiendo o se estanca.

Y como lo he tratado de decir en más de una oportunidad, eso no se arregla con el tipo de cambio, eso se arregla con modificaciones estructurales que son fundamentales y cuya decisión la vamos a tener que tomar entre todos en forma muy rápida para poder asegurarle al país y a los gobiernos que vengan después, una continuidad de crecimiento en determinadas áreas o en determinadas orientaciones.

Por tanto, ha llegado un momento histórico al Uruguay, en donde las cosas de inmediatez de la coyuntura financiera que vivimos, en cierta forma han ido cediendo y dan espacio para que podamos sentarnos hacer reflexiones sobre el tiempo por venir, que es donde me parece que no es que nos haya estado faltando hacer esas reflexiones, sino que las circunstancias vividas por el país en los tiempos que han pasado en los últimos 24 meses no lo permitieron al país hacer esas reflexiones.

Yo voy a intentar dar algunas cifras, algunos números, algunas referencias que nos permitan visualizar esta situación. En primer lugar desde nuestro punto de vista, no hay, máxime para un país como el Uruguay en donde todo lo que produce para exportar es ningún factor mayor de crecimiento de las oportunidades y de las ofertas de empleo que el crecimiento de la exportación, no hay. Duplicar o triplicar las exportaciones es un factor inmediato de un aumento de la oferta de empleo y un aumento de una oferta de empleo atractiva, segura, estable.

¿Cuáles son los países que han conseguido hacerlo en su desarrollo, primero en su desarrollo industrial, en su desarrollo tecnológico, a lo largo -digamos- de 200 años? Ha sido Europa, Estados Unidos y básicamente Japón. Y han tenido un movimiento continuo en ese sentido, pese a los conflictos, que no ha tenido interrupción a lo largo de 200 años. Ha sido un movimiento extenso, profundo, y que uno lo comprende y lo entiende. Yo tuve el honor de recibir un título, de esos que a los dignatarios les dan en el exterior, y cuando estaba en la Universidad de Pisa y miré el documento que me habían dado, me encontré con que la Universidad de Pisa había sido fundada en 1343. Quiere decir que desde 1343  a la fecha están estudiando cómo mejorar. Una pequeña diferencia, desde 1343.  Lo mismo pasa en Bolonia, lo mismo pasa en París, lo mismo pasa en Oxford, lo mismo pasa en todos los centros de formación académica de Europa. Ya no digo que los romanos tenían ya un conocimiento profundo de todas las cosas, porque lo tenían y lo heredaron, hubo algunos siglos de oscuridad, pero luego volvieron sobre ello y han continuado hasta el día de hoy. Esa ventaja enorme desarrollada en todos los planos de la investigación, del estudio, de la formación, nosotros no la tenemos.

Pero existen otros países que han hecho algo diferente. Existen otros países que multiplicaron por tres, por cuatro y por diez sus exportaciones en 50 años. Esos países, que se llaman los “tigres asiáticos”, hablemos de Corea, de Singapur, de Hong Kong, de Taiwán, de Malasia. Algunos suponen quesos países multiplicaron sus exportaciones por equis veces en 50 años porque tenían salarios baratos, sin embargo, esa no es la razón por la cual un país consigue exportar sus exportaciones, multiplicar sus exportaciones porque tiene salarios baratos, porque América Latina también tiene salarios baratos. Y el Pakistán también tiene salarios baratos.  Y la India durante muchos años también tuvo salarios baratos.

Lo que pasa que me parece que hubo una diferencia de objetivos. Mientras después de la guerra tanto América Latina, como el Pakistán y como la India, miraron su desarrollo en la sustitución de importaciones, los “tigres asiáticos” miraron su desarrollo en la multiplicación de las exportaciones. Unos querían sustituir las importaciones por productos locales, mientras que otros lo que querían era multiplicar sus exportaciones como forma de alcanzar los mismos objetivos.

Yo voy a dar algunos números interesantes a propósito de dos países. Uno es Corea y otro es el Brasil. En 1954 la renta neta de Corea per cápita  era un tercio de la de Brasil; en 1980, Corea exportaba igual que el Brasil, y en 2002, Corea exporta tres veces más que el Brasil. Durante cuatro décadas de crecimiento Corea alcanzó un crecimiento per cápita de 10.000 dólares y  Brasil está en 2.200. Los salarios se multiplicaron por seis y el desempleo que arrancó en el ’54 con el 45 por ciento hoy está, en el noventa y pico estaba en el 1 por ciento.

¿Cómo hicieron estos países tal cosa? Fíjense, el mismo ejemplo referido a China. Cuando China se manejó económicamente con el mismo principio del gosplan ruso, no puedo crecer. Cuando China en 20 años se abrió al mundo y se transformó en una potencia, en un parking industrial realmente importante, hoy exporta 10 veces más que el Brasil y tiene un crecimiento que no para en un ratio de 6, 7  u 8 por ciento anual.

¿Cuáles fueron, entonces, las fórmulas para ese crecimiento? Desde mi punto de vista las fórmulas para ese crecimiento se concentraron en dos cosas: en una elección de áreas y de productos específicos, de los cuáles procuraron afianzar su inserción y en la búsqueda de una asociación con quienes estaban en condiciones de acercarles el conocimiento o el capital más el conocimiento, o el mercado, capital, mercado y conocimiento.

Pienso, por lo tanto, que si nosotros queremos hacer algo parecido en el Uruguay, a partir del momento que el Uruguay comienza a tener estabilidad, comienza a tener una situación financiera mucho más estable, comienza a tener mucho más confiabilidad hacia el mundo internacional, nosotros tenemos que seguir este tipo de ejemplos si queremos crecer y multiplicar por dos y por tres nuestro ratio exportador.

Más allá del hecho de que este año que viene vamos a tener un record histórico en la exportación, debido no solamente a las condiciones financieras, económicas y monetarias diferentes y también debido a la realidad de los nuevos valores que existen en las comodities, esos elementos que acabo de decir, no son elementos permanentes sobre los cuales se pueda sustentar un futuro crecimiento.  Y, por tanto, para crear elementos permanentes sobre los cuales se puedan sustentar futuros crecimientos y se puedan dar respuestas a las necesidades de empleo y a las necesidades de destino, nosotros tenemos que elegir objetivos y tenemos que elegir socios. Si no elegimos objetivos y no elegimos socios no podemos competir en un mundo en donde la competencia, como consecuencia de su globalización, es cada día más fuerte y exige cada día mayores y mejores niveles de calidad.

Y me parece que si no empezamos por analizar estos temas y reconocerlos y asumirlos, no vamos a encontrar en el corto plazo las respuestas necesarias para que el país en vez de exportar 2.700 millones de dólares de bienes como lo va a hacer el año próximo pueda multiplicarlo e ir a 5.000, ir a arriba de 5.000 millones de bienes cosa que lo puede hacer.

Tenemos por tanto, a mi juicio, que elegir las áreas y sobre esas áreas tratar de hacer una acción similar a lo que en su momento, para hablar en términos que aquí se conocen y se entienden mejor que en ningún otro lado, lo que se llamó la blitzkrieg, o sea, tenemos que poner  toda la fuerza  en determinadas áreas específicas para asegurar allí el crecimiento de esa capacidad de exportar y, por tanto, como consecuencia, de la generación de un empleo estable y al mismo tiempo de la generación de bienes que demanden conocimiento y demande por ende una mejor preparación de nuestra gente, que pese a que tenemos un buen nivel general educativo estamos todavía muy lejos de que ese nivel educativo se compadezca con las necesidades del conocimiento que el mundo contemporáneo exige en términos generales para recibir bienes del exterior.

Yo creo que esa es la primera cosa que tenemos que resolver si nosotros queremos asegurarnos de futuro una mayor estabilidad de la sociedad, puesto que una mayor estabilidad de la sociedad trae como consecuencia natural seguridad. Más allá de los problemas que puedan suscitarse en cuanto a áreas que padecen la influencia de factores negativos, esos factores negativos no se van a reducir en la medida que debemos reducirlos si creemos que solamente por la acción o policial en la persecución de la droga, o por la acción social en el mejoramiento de la alimentación de los niños, o por la acción de instituciones que resuelven los problemas.                

Ninguna sociedad por otra parte está en condiciones de decir que ha alcanzado el cien por ciento de la resolución de esos problemas, pero muchas de ellas se han encaminado para insertarse en el mundo de tal forma que sí le dan oportunidades a la gente a resolver sus propios problemas sin necesidad de caer en situaciones que por debilidad social, traen como consecuencias situaciones, al principio individuales y luego generalizadas de inseguridad en los países.

Piensen en lo que significa este tipo de asociaciones, qué sería el Uruguay sino tuviéramos la posibilidad de hacer una serie de asociaciones en áreas centrales de la vida nacional para poder crecer.

Nosotros tenemos setecientas mil hectáreas plantadas de árboles, sería nuestro destino seguir exportándolos como rolos de eucaliptos, o como rolos de pinos, que recibiríamos como ingreso, qué salarios podríamos pagar, qué conocimientos necesitarían aquellos que tienen que hacer esa tarea, cuál sería el grado de modernidad que surgiría después de esa primera etapa, adónde se iría digamos la inversión necesaria para tecnológicamente clonar los árboles, hacer plantaciones diferentes sino tuviéramos una cadena que nos permitiera transformarlo en pulpa de papel, quién en el Uruguay posee conocimiento y crédito para poner en un caso seiscientos millones de dólares y en otro caso mil millones de dólares para hacer una planta de pulpa de papel, quién en el Uruguay como asociación pública o privada o pública y privada en común tiene los recursos y los conocimientos adecuados y el manejo del mercado para tener ese tipo de desarrollos en un país. Nadie, absolutamente nadie.

No saldríamos del nivel de la venta de la materia prima, por más que esa materia prima fuera tecnológicamente la mejor del mundo y tendría por tanto el valor de la venta de la materia prima.

Estos días pasados, y cuando hablamos del proceso de sustitución de importaciones, que se dio al principio en el Pakistán, en América Latina y en la India, precisamente uno de los grandes cambios que ha habido en el mundo, es la India.

Estos días pasados nosotros participamos conjuntamente con mucha gente, del reconocimiento o la información, o la extensión de un certificado que se le dio a una organización de información tecnológica a Haití, información tecnológica que maneja en la Zona Franca de Montevideo  la Industria de este conglomerado, importantísimo, el más grande de la India que es la empresa TATA.

Señores la India se ha transformado en el país que solamente de servicios de este tipo, recibe un ingreso de ocho billones de dólares y estos días están reunidos en Bangalore uno de los grupos más importantes de origen americano que necesitan por su dimensión ir a buscar otros centros para seguir haciendo lo mismo, y están pensando que puede ser las Filipinas, que puede ser China, que puede ser Japón, que puede ser el Uruguay y que puede ser Hungría, que puede ser el mundo ¿qué significa eso? Significa que si nosotros tenemos interés en desarrollar específicas actividades de nivel internacional, de calidad internacional para penetrar en todos los mercados, tenemos que elegir socios y objetivos. Sino elegimos socios y objetivos y pensamos que únicamente el mejoramiento adecuado, necesario, imprescindible, de todos nuestros productos primarios, que son la base y el sustento de la economía nacional, si sobre ello no nos dedicamos a armar estructuras que le puedan dar ocupación, destino y trabajo a un país que tiene más de ochenta y cinto por ciento de sus habitantes viviendo en las zonas urbanas, entonces por más esfuerzos que le pidamos al agro, el agro no va a poder darnos la respuesta necesarias para otorgarles las seguridades del destino a una sociedad que no puede dedicarse hace mucho tiempo ya a la sustitución de importaciones como función primaria de la industria, como en el pasado y que tiene que dedicarse a encontrar en áreas industriales de alta tecnología como es esta, y como es la biotecnología, puntos especiales de crecimientos y de desarrollo de esta sociedad.

Precisamente en el día de ayer nosotros mantuvimos una muy larga conversación con otro representante de la India, cuya orientación básica es la biotecnología y que tuvo mirando un lugar del país en dónde establecer sus actividades para América.

¿Por qué? Porque el país tiene, hoy, atributos de seguridad que emanan de su estabilidad, de su confiabilidad, de su nivel social, de su nivel de conocimiento, que le permiten ser que un socio válido, para este tipo de inversiones.

El Uruguay por tanto tiene la capacidad para transformarse en uno de esos pequeños países que al igual que Singapur, al igual que Hong Kong, al igual que otros países, han podido desarrollarse y multiplicar su actividad exportadora porque han partido inclusive de niveles generales más débiles que los que nosotros hoy podemos ofrecer y por tanto al salir de la crisis, al consolidar un tiempo de estabilidad, al asegurarnos en un año próximo un crecimiento del producto no menor a cinco por ciento, al poder tener en ese sentido respuestas de las que todas las sociedades exigen para poder pensar en el futuro, es el momento de empezar a pensar en el futuro a través de esta nueva realidad.

El gobierno entiende que esto es primordial, absolutamente primordial. Se ha hablado recientemente por parte de algunos de nosotros de una agenda para el 2004 y esta es la agenda para el 2004. La agenda para el 2004 y para los años siguientes del Uruguay es esta, no es otra.

Es elegir siete u ocho áreas en las cuáles el Uruguay puede ser un país exportador de bienes, desde el conocimiento, encontrando los socios aptos para esa tarea y los socios dispuestos en el mundo para  esa tarea.

Reconociendo que no tenemos todos los medios, nosotros los uruguayos para hacerlo por nosotros mismos, porque si los tuviéramos ya estaríamos deseosos de mostrar al mundo como nosotros desde nuestro propio esfuerzo podemos hacer esa transformaciones. Pero como no los tenemos, pero tenemos la base social necesaria, que la tenemos que conservar y la tenemos que enriquecer para asegurarnos esa seguridad tenemos que salir en búsqueda de los objetivos y en búsqueda de los socios y esa es la tarea a la que el gobierno entiende debe orientar toda su actividad, o su actividad mayor en el año 2004 y el esfuerzo al cuál el gobierno entiende que tiene que proponerle a la sociedad que se incorpore a esta tarea. Porque existen, sin ninguna duda, en el Uruguay, valores de conocimiento que le permiten a los uruguayos ser buenos socios de aquellos que aún cuando hoy lo tengan en mayor área o en mayor volumen o en mayor cantidad van a encontrar aquí capacidades importantes para poder trabajar en común.

Yo no tengo ninguna duda que si el Uruguay encuentra y elige con acierto cinco o seis áreas el Uruguay en pocos años  en cuatro o cinco años puede transformarse en un país que multiplique por dos su producto bruto se multiplique por dos el proceso de exportación y se multiplique no solamente una vida más atractiva para los uruguayos, sino que pueda ser para vecinos de otros países que quieran venir a trabajar y a vivir en el Uruguay, si no nosotros creemos que por el echo de que el año que viene vamos a subir el 5% del producto, vamos a bajar la inflación y vamos a tener 2700 millones de dólares de exportación hemos alcanzado nuestro destino, cometeríamos un gravísimo error que nos generaría a corto plazo una forma nueva de inseguridad, aunque aquel 20% de desempleo se transforme en 13%, o 12% a fin de año, en el otoño del año que viene tendríamos un gravísimo error.

Y el Gobierno tiene en este acto, en esta oportunidad y en este seminario de la seguridad trasmitirle desde ustedes al país que la seguridad la vamos alcanzar con la prosperidad, ya que la prosperidad es el aumento del empleo que se logrará genuinamente en el Uruguay por este tipo de operaciones, son las opciones probadas y que por otros han demostrado su éxito y su continuidad esa es la tarea que le espera, no solamente al gobierno sino a todos los uruguayos para alegarnos de las posibilidades de crisis de las  que hemos vivido, de instabilidades que provengan de la región para alejarnos de dudas a nivel colectivo o a nivel individual y para asegurarnos de las mismas pautas que permitieron en el siglo XIX, crecer estamos en condiciones de volverlas a concluir, muchas gracias.