15/09/2003
GOBERNADORA CALDERON: Buenos días a todos. Me place
darle una calurosa y afectuosa bienvenida a nuestro país, al Presidente
de la República Oriental del Uruguay, a quien consideramos nuestro amigo,
al señor Embajador Fernández, al señor Embajador Silverstein, a los
señores ministros y un saludo afectuoso igualmente a los secretarios de
Estado y a todos los miembros de nuestro Gabinete y igual que al
Presidente de la Universidad de Puerto Rico y a todos los miembros de la
delegación del Presidente de Uruguay. Ciertamente, este acuerdo es muy
histórico, y uno que abre oportunidades insospechadas y de grandes
esperanzas y confianza para ambos países. Esta iniciativa surge de una
conversación muy productiva que sostuvimos el Presidente y yo en Punta
Cana, a finales del año pasado durante la Cumbre Iberoamericana en la
República Dominicana.
En aquel momento, hablamos de nuestras respectivas
economías, que como saben ustedes aquí en Puerto Rico, el desarrollo
económico y la creación de empleos es la primera prioridad de nuestra
administración. Y el señor Presidente sugirió la idea, de que Puerto
Rico pudiera ser punto de almacenaje y trasbordo para los productos
uruguayos para el Caribe y esta área de Puerto Rico.
Por otro lado, ciertamente los productos de Puerto Rico
y el comercio de Puerto Rico pueden beneficiarse grandemente de la entrada
al mercado del MERCOSUR, del cual Uruguay es la capital.
En este acuerdo de colaboración que el señor
Embajador y el señor Secretario de Estado han firmado, determinamos
precisar áreas concretas de acción, mayormente con el sector privado,
respaldado y avalado por nuestros mutuos gobiernos, para ese
fortalecimiento de los lazos comerciales, industriales y económicos entre
nuestros países. También queremos fortalecer los lazos educativos y
culturales y de servicios entre nuestros países.
Esta mañana en la reunión que sostuvimos con ambos
equipos de trabajo precisamos y recalcamos la importancia de ir a
determinaciones concretas y precisas, para acciones específicas que
puedan tomar nuestros respectivos sectores privados para el desarrollo
económico y comercial.
Agradezco infinitamente esta visita, les doy la
bienvenida, y agradezco esta oportunidad y esta disposición del gobierno
uruguayo que ciertamente es reciprocada por nuestro gobierno, el gobierno
del Estado Libre Asociado, para proceder con este estrechamiento –si
así se puede llamarle- de los lazos que ya nos unen con nuestra cultura
compartida y nuestra hispanidad compartida.
Quiero aprovechar para darle las gracias igualmente al
Embajador Silverstein por su presencia aquí en Puerto Rico y el respaldo
que está dando a esta iniciativa tan importante para fortalecer el
desarrollo económico de nuestros países.
Muchas gracias señor Presidente, muchas gracias
señores Embajadores, señores Ministros, a todos igualmente mi equipo de
trabajo; los secretarios han recibido ya de mí, en la mañana de hoy,
instrucciones específicas para proceder con celeridad a un primer
encuentro del cual esperamos surjan -como dije anteriormente- las
determinaciones concretas y acciones específicas a tomar para redundar en
un mayor comercio y un desarrollo económico incremental y cultural
también entre ambos países.
PRESIDENTE BATLLE: Señora Gobernadora, en primer
lugar, un saludo del pueblo del Uruguay al pueblo de Puerto Rico. Un
saludo muy cordial y muy afectuoso, muy abierto, que le tiene que llegar
desde el fondo de nuestros corazones a todos los portorriqueños.
En segundo lugar, yo quiero decirles algo muy claro:
nosotros somos -en el sentido del diccionario de la Real Academia
Española, liberales, antiguos liberales. No somos neoliberales porque neo
quiere decir nuevos, y por empezar nuevo no soy yo que tengo como 76
años, ya soy casi eterno ¿no? soy liberal antiguo, absolutamente liberal
antiguo. Soy liberal de la Constitución de Cavia de 1812. Por tanto,
nosotros creemos que el comercio es, el comercio libre, es la base del
crecimiento de los pueblos. Luego, le toca a los gobernantes en cada país
que el fruto de ese comercio llegue a todos los sectores sociales por
igual; en oportunidades de estudio y plena realización de sus destinos
individuales y colectivos, porque si no hay un comercio creciente, no hay
riqueza; y la riqueza se crea a través del trabajo de cada mujer y de
cada hombre y si no viniera de nuevo esa riqueza a cada mujer y a cada
hombre, entonces, los frutos están mal distribuidos. Pero para fijarse de
que los frutos estén mal o bien distribuidos en primer lugar -vaya
simpleza- tiene que haber tales frutos, y solamente se consiguen si existe
un comercio abierto, libre y pujante.
Esta ha sido la tarea en la que el gobierno del Uruguay
se ha empeñado desde siempre, y es la tarea en donde nosotros vamos
detrás de los empresarios privados, les seguimos los pasos, porque ellos
son los que saben mejor que nosotros dónde están las oportunidades de
comercio.
Creer que el Estado planifica, es un error. El Estado
sostiene a través de medidas macroeconómicas estables, globales,
comunes, que garantizan el buen funcionamiento de las cosas. Pero quienes
descubren las oportunidades, los enseñan los caminos, son los individuos,
los empresarios, los que producen, los que tienen ese instinto especial
para el comercio y descubren las oportunidades antes, muchas veces, que
los dignatarios.
Nuestra acción, por tanto, es ir detrás de ellos,
porque ellos son los que van oteando el horizonte y encontrando los
caminos, abriéndolos y descubriéndolos; y es así como llegaron aquí. Y
aquí y desde aquí, en el pasado, hicieron ya acciones comerciales
importantes, teniendo como centro de distribución de productos
alimenticios desde Uruguay a Puerto Ponce. Y es ahí donde surge la
acción; el gobierno se pone en contacto con la Gobernadora y hace que
nuestro Embajador ante los Estados Unidos de América llegue, concrete
este entendimiento y esta operación estrictamente comercial, que tiene
por finalidad ubicar bases de trabajo geográficamente localizadas en
Montevideo y en Puerto Rico.
Nosotros tenemos en el Uruguay un puerto libre y un
aeropuerto libre, que trabajan como parte de la zona y, por lo tanto,
sentimos que Puerto Rico hoy puede ser algo similar para los productos del
Uruguay. Nosotros no somos productores en volúmenes importantes, dada
nuestra dimensión -salvo en carne y en arroz- a nivel de la producción
mundial se entiende; somos productores de muchas cosas y entendemos que
tenemos un nivel de calidad que nos hace competitivos. Somos productores
de bienes, pero también somos productores de servicios; los servicios de
tránsito de bienes y mercaderías en general en el Uruguay de los países
de la región, dada nuestra ubicación geográfica, son más importantes
que los servicios que se refieren a nuestra propia producción –importación
y exportación- los tránsitos provenientes de la Argentina, Bolivia,
Paraguay y el sur del Brasil, a nivel de los servicios portuarios son
mayores de los que el Uruguay mueve en sus propios volúmenes de
exportación e importación; el aeropuerto de Montevideo pasa a tener la
misma circunstancia legal y, por lo tanto, sentimos que estas operaciones
que han descubierto los empresarios privados uruguayos -ahora tenemos una
reunión muy importante de empresarios uruguayos en Miami y vamos a
invitar y hemos invitado y van a concurrir empresarios portorriqueños a
esa reunión- es lo que nos ha impulsado a tener este sentimiento
práctico de tener un centro desde Puerto Rico a Montevideo, un centro de
Uruguay y Puerto Rico, y utilizar los instrumentos recíprocos de que
disponemos para llevar adelante la tarea comercial y de que ése resultado
brinde oportunidades de trabajo a los portorriqueños y a los uruguayos.
Es tanto como todo esto, que es cierto que implica perseverancia,
constancia, decisión clara, apoyo y entusiasmo, y estamos todos
dispuestos a ponerle calor a esta empresa y a llevarla adelante.
Muchísimas gracias por haber tenido la gentileza de
estar aquí con nosotros y estamos a las órdenes.
GOBERNADORA CALDERÓN: Muchas gracias, señor
Presidente, muchas gracias por sus palabras y quiero reiterar nuestra
admiración hacia usted, hacia su trayectoria que si hay alguien que es
representativo de tenacidad se piensa en usted, señor Presidente de la
República Oriental del Uruguay.
PRESIDENTE BATLLE: La gobernadora se refiere a que
tardé 76 años en llegar a Presidente... Y está bien. Es un sentimiento
que es generoso y explica -debo decirle que mi mamá era longeva, que
tenía 96 cuando falleció- así que tienen para aguantarme como 30 años
más.
PERIODISTA: Señor Presidente, ¿qué es lo que va a
pasar a través de Puerto Rico, hacia América y el Caribe, el Estado
uruguayo? ¿Y qué es lo que Puerto Rico va a pasar al MERCOSUR a través
de Uruguay?
PRESIDENTE BATLLE: Vea, en primer lugar, nosotros lo
que estamos dando son las oportunidades. Algunas cosas han pasado ya desde
Puerto Rico antes de que sufriéramos el contraste de que desde la
Argentina viniera la aftosa al Uruguay, sería absurdo no admitirlo. El
Uruguay era un centro de distribución de productos cárnicos; Puerto Rico
era un centro de distribución de productos cárnicos alimenticios para
toda la zona del Caribe. Nosotros tenemos lo que para nuestro sistema de
exportación era un volumen que se transformaba en un volumen
crecientemente importante de exportación de productos cárnicos para la
zona del Caribe desde Puerto Rico.
¿Qué otras cosas van a suceder? Ah, mire, yo no sé,
los que saben son los que venden. Y ellos saben mejor, por lo menos que
yo, porque ellos son los que en las condiciones que van a tener, van a
descubrir los negocios.
Por ejemplo, ustedes tienen aquí una enorme industria
de productos farmacéuticos y de laboratorios en general, de instrumentos,
que producen productos farmacéuticos y naturalmente el Uruguay es un
centro de distribución natural. ¿Por qué? Porque requiere
tradicionalmente condiciones de estabilidad financiera, de estabilidad
institucional, de estabilidad jurídica. Se ha permitido a muchos
operadores entrar, en la zona franca de Montevideo, actividades relativas
a tener lo que se llama el "pack office", en la zona franca, con
destino al manejo, inclusive, de las distintas actividades en todo el
continente.
Quiere decir que son los operadores los que van
descubriendo las oportunidades, y a ellos lo que tenemos que darles es,
primero, información y certeza, y con ello se crea el soporte desde donde
se crea. Y además, allá a veces decimos lo mismo que acá: "Las
gallinas comen de a un grano y llenan el buche".
GOBERNADORA CALDERON: Y yo quisiera complementar lo que
ha dicho el Presidente, diciendo que las propias fuerzas del mercado son
las que van a determinar en última instancia cuáles son los productos y
servicios que van a estar canalizando nuestros países. Mañana
precisamente tenemos -en horas de la mañana, los medios están invitados-
una reunión extensa; extensa en el sentido de la cantidad de personas que
hemos invitado, con empresarios puertorriqueños, comerciantes y
manufactureros puertorriqueños, para que tengan la oportunidad de
escuchar directamente al Presidente, en cuanto a las oportunidades. Lo que
el Presidente y nuestro gobierno, yo como Gobernadora, estamos haciendo es
facilitando y respaldando iniciativas que tomen los propios empresarios,
son las fuerzas del mercado. A nosotros en particular nos interesa
-obviamente- llevar a Uruguay y al mercado del MERCOSUR, productos
manufacturados en Puerto Rico y servicios de los cuales nosotros nos
sentimos plenamente orgullosos, con los servicios de comunicaciones, de
servicios financieros. Todo tipo de servicios que se han desarrollado en
forma sofisticada en Puerto Rico.
PERIODISTA: Me gustaría, tengo interés ¿Por qué el
Embajador de Estados Unidos está con ustedes?, el embajador en Uruguay,
el señor Silverstein, que obviamente, entiendo, que este acuerdo cuenta
con el aval de los Estados Unidos, y quisiera saber ¿si hay algún tipo
de instrucción a la Embajada de Estados Unidos para el manejo de este
tipo de tratados?
PRESIDENTE BATLLE: Quisiera agregarle a lo que dice el
señor Embajador algo que hizo referencia la señorita. En primer lugar,
esto no es un tratado. El tratado tiene una vinculación jurídica y de
carácter internacional que no está comprendida en los términos de lo
que ha afirmado en representación del gobierno del Uruguay, el señor
Embajador ante los Estados Unidos de Norteamérica. Los tratados son
ratificados por las Asambleas Legislativas en el Uruguay, o sea, no puede
haber un tratado en donde el Uruguay sea parte si no lleva el voto
afirmativo ratificado por parte del Senado y del Parlamento de la
República. Esto es en el marco de un entendimiento de carácter
comercial, como lo ha señalado la Gobernadora y como lo he dicho con toda
claridad. Absolutamente eso. Y comercial supone no solamente lo comercial
concreto y directo del operador, desde acá, sino facilitar, facilitar
instrumentos y medios. Lo dijo también el señor Embajador Silverstein.
El Uruguay lo está tratando de llevar adelante no solamente con el Estado
Libre Asociado de Puerto Rico, mediante una comisión especial, sino que
lo ha hecho también, con el gobernador Jeb Bush, y con el gobierno de
Carolina del Norte. Naturalmente, que son en cierta medida cosas distintas
y disímiles desde el punto de vista histórico, desde el punto de vista
político. Pero creo que es muy claro en que no hay que incorporar a ese
discurso situaciones que no están comprendidas dentro del discurso. Lo
que aquí estamos haciendo es tratar de que el trabajo de nuestra gente
llegue más fácilmente a ambos pueblos. Y eso me parece que está dentro
de los objetivos que a todos nosotros nos importan más que ningún otro
objetivo. Que los productos, los productos del esfuerzo y de la gente, de
los ciudadanos de Puerto Rico y de Uruguay tengan una conexión, un
contacto, que hasta ahora no han tenido. Es tan simple y tan sencillo. No
hay que buscarle cinco pies al gato.
GOBERNADORA CALDERON: Yo quisiera reiterar, como
gobernadora de Puerto Rico, lo que he dicho en innumerables ocasiones.
Toda misión que llevamos a cabo, en el desarrollo económico, cultural,
social, educativo y de servicio, como en otros países, a través del
Departamento de Estado, todas ellas -sin excepción- se hacen en
coordinación con el Departamento de Estado Federal y dentro del marco
jurídico de nuestra condición de Estado Libre Asociado.
PERIODISTA: Gobernadora, ¿la realización de este tipo
de acuerdo, según se han dicho en algunas versiones, debería contar con
la aprobación del Departamento de Estado, o no es necesaria?
GOBERNADORA CALDERON.- Precisamente, sobre eso acabo de
reiterar la política pública del Estado Libre Asociado y en ningún
momento hemos tenido absolutamente ninguna comunicación oficial, sobre
este tema en particular, con ninguna de las oficinas ejecutivas del
Gobierno Federal y, obviamente, algunas de las personas que aparecen con
versiones anónimas, a las cuales yo no les doy importancia alguna, y las
expresiones que tengan nombre y apellido serán opiniones particulares e
individuales de funcionarios o empleados específicos. Pero ciertamente,
no reflejan la política pública y la buena actuación y productiva
relación que mantiene nuestra administración con la administración del
Presidente Bush.
PERIODISTA: Presidente, ¿cuándo se pondrá en
práctica el nuevo relacionamiento entre su país y Puerto Rico?
PRESIDENTE BATLLE: Mire, básicamente, nosotros lo que
pretendemos es que los sectores privados sean los que orienten esta
acción. Quiero decir que lo que vamos a hacer es juntarnos con los
sectores privados del Uruguay y los sectores privados de Puerto Rico.
Mañana, cuando tengamos una reunión con ellos, es uno de los temas que
queremos plantear. Y me parece que esto tiene que tener este nivel, porque
solamente en ese nivel esto es eficaz. Si yo le dijera a usted que lo
vamos a hacer mañana, me parece que le estaría diciendo algo que es
falso. Estamos recién empezando a caminar. Acuérdese bien de ese refrán
popular, es un camino como de mil millas y que recién estamos viendo,
¿no es verdad? Y es mañana que vamos a empezar por los sectores
privados. Esto tiene tres niveles: un nivel de entendimiento de los
sectores privados, la disponibilidad de nosotros a acercarle a quienes
representan a los sectores privados de Puerto Rico un ámbito de trabajo
desde la capital del MERCOSUR para tener un mayor beneficio allá y acá,
planteada desde hoy mismo, pero otro tanto se plantea desde el Estado
portorriqueño. Pero nosotros creemos que estas cosas funcionan cuando los
sectores privados son capaces ellos de desarrollar sus propios intereses.
Nosotros, por ejemplo, nos sorprendimos hace poco tiempo, cuando apareció
en los diarios de Montevideo la información especializada de
exportaciones, que estábamos exportando madera aserrada a Puerto Rico y
que estábamos exportando, inclusive, varillas de hierro para la
construcción. Por tanto, así como lo hacemos en Rotterdam para
determinados productos de preferencia del Uruguay, por qué pensamos no
poder hacer otro tanto aquí, en Puerto Rico, de tener un lugar en donde
los productos uruguayos puedan estar ya presentes para poder ser
distribuidos en los ámbitos de distribución, como hoy se hace en todo el
mundo. Muchas veces, como las cosas no se han hecho antes, la gente se
sorprende y pregunta: "¿y qué hay detrás?" No, aquí lo que
hay detrás es que nos hemos pasado sin hacer nada. Eso es lo que hay
detrás. O sea, si usted, hoy por hoy, por ejemplo, le encarga siete
computadoras a alguien, no se preocupe que una parte viene por avión de
Singapur, otra parte viene por avión de Taiwán, otra parte viene por
avión de no sé dónde, y se arman en otro lugar, y se colocan en el que
las compró al día siguiente. Bueno, usted con madera no puede hacer eso,
con hierro no puede hacer eso, con carne tampoco puede hacer eso.
Entonces, lo bueno que es tener un lugar determinado. Bueno, ¿por qué
elegimos Puerto Rico? ¿Porque, personalmente, estamos diciendo
"otros lugares no"? No, no, no. Todos son buenos. Ayer estuvimos
allá, hoy estamos acá, mañana estamos en Miami.
PERIODISTA: Presidente, ¿cómo se conjugan los
acuerdos bilaterales con el MERCOSUR?
PRESIDENTE BATLLE: En primer lugar, yo quiero
decirle a usted que nosotros acabamos de firmar un TLC con México,
inicialándolo la semana pasada, que seguro el Presidente de México y
quien habla lo vamos a suscribir en Santa Cruz, cuando nos reunamos en
Santa Cruz en oportunidad de la reunión con el Rey de España, con el
Presidente de Portugal y con todos los países hispano-parlantes de
América. Yo quisiera dar una pequeña explicación, total tenemos tiempo.
Usted vio que esta jungla de acuerdos comerciales, ustedes para meterse en
esta jungla, no alcanza con ser viajantes, se necesitan conocimientos
sofisticados. Resulta que en el año 2000, en Buenos Aires, la República
Federativa del Brasil propuso una cosa que se llama Acuerdo Número 32,
que establecía que ningún país de América del Sur podía hacer ningún
acuerdo bilateral con otro país y que teníamos todos que hacer un
acuerdo en común.
Pero luego, el propio Brasil pidió el levantamiento,
la suspensión, de esta medida para llevar todos -dentro de un marco
jurídico común- un acuerdo bilateral con México. Estamos todos en ese
camino y el primero firmado es el de Uruguay-México.
Es un acuerdo muy extenso, que mejora prácticamente
todos los elementos del universo comercial y de servicios y tiene
progresivamente cambios en aranceles y en distintos elementos que
garantizan el funcionamiento del acuerdo, como sucede en todos los casos;
como sucedió por ejemplo en el NAFTA, cuando México y americanos les
establecieron plazos para la liberación absoluta de determinados
elementos comerciales.
Nosotros, además, estamos sujetos también a medidas
sanitarias de parte de México y de nuestra parte. Estuvimos presentes en
el mercado cárnico y alimenticio mexicano en forma muy fuertes, y
progresivamente lo estamos haciendo de nuevo.
Con respecto a las demás medidas comerciales, las que
tienen que ver con el ALCA, las que tienen que ver con los acuerdos con
los Estados Unidos y la política de los Estados Unidos, yo quisiera decir
aquí algo muy preciso. Por lo menos tratar de ser preciso. Es clarísimo
que el Presidente Bush ha manifestado una actitud muy positiva en favor de
los acuerdos comerciales con los países de Centro América, del Caribe y
de América del Sur, muy clara.
Hay dos caminos: el ALCA, por un lado, y los acuerdos
bilaterales por otro. Ambos están en vigencia. Se acaba de firmar por el
Parlamento americano y por el Presidente Bush un acuerdo de libre comercio
con Chile, que es enormemente importante para ambas partes. Antes del 6 de
diciembre se ha anunciado por parte del señor Zoellick un acuerdo con los
países de América Central, de similar naturaleza, y también se ha
anunciado un principio de acuerdo con Colombia. El Parlamento americano le
dio cláusulas de beneficio especial a los países andinos, Colombia,
Perú, Ecuador y Bolivia, a propósito de determinados productos textiles,
de fibras naturales locales, para entrar sin aranceles al mercado
norteamericano. Existe en camino una profundización de los acuerdos
comerciales entre los Estados Unidos y los países del Caribe, en la misma
línea de lo que es la Caribbean Trade.