22/09/03

MENSAJE A LA COLECTIVIDAD JUDÍA

El Presidente Jorge Batlle dirigió a la colectividad judía y a todos los seres de buena voluntad del Uruguay un fraternal mensaje con motivo de celebrarse el Año Nuevo Judío, el próximo viernes 26.

PALABRAS DEL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA, JORGE BATLLE, DIFUNDIDAS EL 21/09/2003 EN EL PROGRAMA "SHALOM URUGUAY" EMITIDO POR CANAL 5 TVEO, CON MOTIVO DE LA CELEBRACIÓN DEL AÑO NUEVO JUDÍO

El próximo viernes 26 de setiembre el pueblo judío festeja los 5764 años de su ya milenaria historia. Una historia que ha recorrido a través de milenios los avatares de un pueblo que, surgido y nacido de las entrañas de lo que era la medialuna de las tierras fértiles, según lo cuentan los libros históricos, se fue asentando en lo que es hoy el territorio de Israel.

En esos 5764 años este pueblo desarrolló toda una civilización, una formidable cultura. En una historia, además, que al hecho de ser enormemente prolongada, está jalonada por una enorme cantidad de hechos de trascendencia que podían haber determinado hasta la desaparición de ese pueblo.

Su exilio en Babilonia, su presencia en el Egipto, su instalación en los territorios de hoy Israel, su emigración a distintos lugares del mundo, la incorporación de lo que Arturo Koestler llamó “la décimo tercera tribu”, su presencia en España en el ala andaluz junto a los árabes, su convivencia con todo ese mundo, su fundación religiosa de la cual, y concomitantemente y dentro de ella, surgen la cristiana y la mahometana, todo ello hace de este pueblo uno de los pueblos más singulares y más importantes de todos los que habitan arriba de la tierra.

Ha sido una vida muy azarosa y muy difícil, y hoy lo es por cierto en la búsqueda de ese mapa de ruta -como se ha dado en llamar- para alcanzar la paz.

Lo que los uruguayos tenemos que decir a esa comunidad, que tanta capacidad de sufrimiento y tanto valor para sobreponerse a él ha tenido y mostrado, es que hoy más que nunca tenemos que seguir haciendo esfuerzos por la paz.

Confiemos en que el buen sentido de la inmensa mayoría de los seres humanos, inclusive de ese mundo en donde hay gente que se inmola para alcanzar por la vía de la violencia lo que es un camino absolutamente vedado a cualquier solución equivocadamente, aún cuando existan esas cosas, sigamos todos creyendo en que el camino real para todos los que están arriba de la tierra es que prevalezca la sensatez y el sentimiento común que sólo a través de la paz en dónde todos encontraremos libertad suficiente para crecer, para convivir, y para desarrollar a plenitud las capacidades de cada uno.

Que así sea.