28/04/04
AGRO DUPLICARÁ SUS EXPORTACIONES
El Presidente Jorge Batlle manifestó que en los
próximos seis años Uruguay duplicará sus exportaciones agropecuarias, que
pasarán de 2.000 millones de dólares a 4.000, resaltando que el único
sector que "necesita ayuda es la granja".
ENTREVISTA AL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA, JORGE BATLLE,
EN LA REVISTA EL AGROPECUARIO DEL DIARIO EL PAÍS
28/04/2004
PERIODISTA: De los presidentes provenientes del
Partido Colorado, usted es el que ha estado más vinculado al campo. ¿Por
qué?
PRESIDENTE BATLLE: Mis experiencias vinculantes nacieron
de las enseñanzas de mi madre. Nosotros éramos chicos, vivíamos en el
kilómetro 15 del camino Simón Martínez, y mi madre se dedicaba entonces a
plantar y vender flores. Mis hermanos y yo la acompañábamos. Al mismo
tiempo, como vivíamos en una pequeña chacra, mi madre tenía verduras,
gallinas, algún conejito, y otras cosas. Nos fuimos criando en ese medio.
Seguramente, heredé la genética italiana de mi madre. En esa época tenía
un caballo tobiano, medio ordinario pero manso. Yo me iba de madrugada hasta
La Tablada en él.
PERIODISTA: ¿Por qué iba a La Tablada? ¿Le gustaba
el ganado ?
PRESIDENTE BATLLE: Sí. Siempre que podía iba. También
vivimos en Young, cuando éramos chicos, en un almacén de ramos generales.
Y ahí estábamos profundamente vinculados al área rural que nos rodeaba.
Íbamos a las estancias en vacaciones, con mi primo José Luis, a lo de
Cuadros, en Pampa. Y eso es natural en mí, no fue una cosa impuesta ni por
las circunstancias familiares ni por nada. Encontré un ambiente propicio en
mi madre, es cierto... Pero así como mi hermano ya empezaba a tocar el
piano y mi hermana se dedicaba a la pintura, yo estuve vinculado a las cosas
rurales. Junto con las cuestiones públicas, fueron las que ejercieron sobre
mí siempre la mayor atracción. He seguido así toda mi vida. He hecho de
todo, bien o mal, pero de todo...
PERIODISTA: ¿Por ejemplo?
PRESIDENTE BATLLE: Cuando estudiaba tenía un pequeño
vivero y vendí algún árbol por ahí. Acompañaba a mi madre en todo lo
que tenía que ver con la venta de sus productos de granja. Luego empecé a
acercarme a la actividad agropecuaria en una chacrita que papá tenía en la
ruta 45, en San José, que eran pocas hectáreas y que yo fui agrandando.
Teníamos un tambo y alguna verdura. Incluso plantarnos alguna remolacha que
llevábamos a Montes. Arrendé campo en Rocha, sobre el Aiguá, a mi amigo
Simón Dupuy, en la punta del Carretero, en la ruta 15. Ahí eran campos
bajos, que hoy tiene Bonino haciendo arroz. Nosotros hacíamos cría de
ganado. Planté arroz con mi amigo Mateo Cabrera Tarán, allá en la punta
del Cebollatí. Había tenido un pedacito de campo comprado junto con mi
amigo Ramela padre en Menafra, a Roberto Silva Sanjurjo. Eran 250
hectáreas, luego le arrendé a Perla, su hermana, y al escribano Carzoglio,
su primo. Y tenia una majada Merilin, allá en la ruta 5, con Hernández,
cerca de Goñi, comprada a instancias de mi amigo Numa Faliveni. Tuve un
equipo agrícola, una cosechadora Massey Ferguson, plantaba trigo en Colonia
Wilson...
PERIODISTA: ¿Y los tomates?
PRESIDENTE BATLLE: Ah, sí, también. Después, cuando
salí de Puntas de Valdez, que tuve que vender, como vendí el apartamento
para pagar las cuotas del Banco República por el equipo que habría
comprado para (el diario) Acción. Me instalé en Rincón de
I.atorre, con mi amigo Sócrates Piccardo, con un tambito que fue creciendo.
Hace poco vendí esa fracción y compré 25 hectáreas en el Sauce, que se
suman a 14 hectáreas que tenía. Estoy mejorando la zona para ver si puedo
armar una cosa allí que me sirva de futuro, haciendo un poco de verdura.
Y cuando tuve la suerte de vender una yegua -Labial- y
exportarla a EEUU hice una sociedad con mi señora Mercedes y compramos 95
hectáreas antes de la curva de Montarena, sobre el río, frente a la Isla
de las Dos Hermanas, a 4 kilómetros de Carmelo. Quiere decir que hoy soy
propietario, en sociedad con Mercedes, de 95 hectáreas en Colonia y, solo,
de 39 hectáreas en Sauce, Canelones. Esa es hoy mi vinculación al sector.
En Carmelo tenemos plantadas unas 45 hectáreas de soja y el resto, que es
una arena gorda que admite mejoramiento con leguminosas, fundamentalmente
con alfalfas, hay ganado, y eso hace que se puedan ir pagando los gastos, y
además, como los precios son muy buenos, tenemos una renta, a mi juicio,
muy interesante.
PERIODISTA: O sea, que a partir del 2 de marzo de 2005 va
a seguir en la actividad
agropecuaria.
PRESIDENTE BATLLE: La primera cosa que voy a hacer es
juntarme con los nietos, porque ahora los veo cada muerte de obispo. En
especial con María, que tiene dos años y medio. Lamentablemente he tenido
poco tiempo para tener una vida importante e intensa de familia, pero voy a
agarrar a los nietos todavía chicos, lo que va a ser bueno. Y voy a seguir
actuando en las cosas a las que he estado vinculado toda la vida. Mis
libros, mi actividad agropecuaria, y en política. Si es que tengo algún
resto de energía y capacidad, podré dedicarme a impulsar a las
generaciones nuevas en el único camino posible del Uruguay. Que creo que es
lo que tengo que hacer, porque no voy a ser candidato a senador, ni a
diputado, ni a intendente. No voy a ser candidato a nada. Creo que ya he
cumplido en esa área un largo recorrido en la vida, en donde además,
francamente, no he sido más que dos veces senador y dos veces diputado. Y
no he sido nunca embajador, ni he estado en un Ente Autónomo, ni ministro,
ni nada. He estado siempre vinculado a la actividad política y al Partido,
como intento de una concepción filosófica e ideológica que creo que es la
más importante para el Uruguay de ayer y para el de mañana. Ese es el
rumbo mejor para el Uruguay, el que nuestra colectividad política en el
pasado, y creo que en el futuro, le puede aportar al país. Y por tanto me
voy a dedicar a eso y a las actividades a las que he estado vinculado toda
la vida. Aparte de los caballos...
PERIODISTA: Bajo su mandato el sector agropecuario pasó
por el infierno y ahora está en el cielo. Aftosa, sequía, inundaciones,
baja de precios internacionales, y ahora una situación floreciente. ¿Por
qué esos contrastes tan abruptos?
PRESIDENTE BATLLE: Por cosas propias y ajenas. El otro
día conversábamos con el presidente de la Asociación Rural, Fernando
Alfonso, y él decía -y yo coincido- que el agro, para el 2010, estará en
condiciones de duplicar sus exportaciones. O sea, de pasar de 2.000 millones
de dólares a 4.000 millones. ¿Por qué él dice eso y por qué creo yo que
tiene razón? Porque ciertamente han cambiado cosas desde adentro y desde
afuera. Y hay cinco cosas que necesariamente deberían estar asumidas por el
país, incorporadas a las decisiones políticas del Uruguay, cualquiera sea
el partido que llegue al gobierno.
PERIODISTA: ¿Cuáles son?
PRESIDENTE BATLLE: En primer lugar, el Uruguay depende de
la exportación, por lo que no puede haber atraso cambiario. Porque, si no,
no hay exportación, no hay inversión ni rentabilidad. La segunda cosa es
que el agro, en el mundo entero, está beneficiado con ayudas. Subsidian
todos los países. Los desarrollados y hasta algunos de América del Sur.
Poniendo dinero, con aranceles altos, con cuotas de importación, con
proteccionismos falsos. ¿Cuál es el subsidio que puede tener Uruguay para
que el agro sea más competitivo? No ponerle impuestos. El agro tiene que
ser una actividad que mantenga ese beneficio que hoy le hemos podido dar.
Que pague mínimos y que el beneficio que el agro le da al erario público
sea la consecuencia de que el aumento del ingreso posibilita un incremento
de importaciones, de ventas internas y, por tanto, de la recaudación que
viene como consecuencia del lVA, del lRIC, y de otras tasas.
El tercer tema es el de las detracciones. Alcanza con ver
alrededor para observar el mal que le hacen a la exportación las
detracciones o las retenciones. El gobierno espera que pueda votarse
rápidamente el artículo único en donde se obliga a que cualquier tipo de
medida de esta naturaleza tenga que ser implementada por ley.
El cuarto punto pasa por la política de apertura
comercial. Sin mercados abiertos, no podemos exportar. Si usted no tiene las
puertas abiertas de los que compran, ¿cómo va a vivir de vender? Si el
Uruguay se reduce al MERCOSUR, no tiene la posibilidad de exportar lo que
básicamente vende. Porque los países que integran el MERCOSUR son
agrícolas. Los mercados son el mundo. Basta hacerse algunas preguntas. ¿A
dónde va la carne de Uruguay? El 62% al Nafta. ¿Quién es el mayor
comprador de cueros? Alemania. ¿Y el de lanas, en sus distintas formas?
China e Italia. ¿De los lácteos? México. Quiere decir que no es el
MERCOSUR, lo que no quiere decir estar en contra del MERCOSUR. Es al mundo
donde tenemos que orientar nuestros esfuerzos para una negociación muy
afinada. Cuando hoy vemos el nuevo valor que ha cobrado la carne, y cuando
decimos que el 62% lo compra el Nafta, al que se va a agregar ahora México,
¿qué sería del Uruguay si no tuviera acceso a esos mercados? ¿Cuál
sería el valor de nuestra carne, si no pudiéramos exportarla a esos
mercados? La buena negociación que hemos podido hacer con EE.UU., Canadá y
México, y con China ahora, es lo que habilita a tener un volumen
exportable, que si usted lo mira en los números del año pasado y en los de
este año, aprecia la diferencia.
Pero hay un quinto elemento, que es el sanitario. Todo
esto se hace en la medida en que tengamos un cumplimiento muy estricto de
todos los extremos sanitarios que el mundo cada día va a exigir más.
Cuando alguna gente se ha quejado de que no puede importar cortes de carne
de la Argentina porque el gobierno no lo autorizaba, lo que hicimos fue
defender el mercado básico exportador del Uruguay.
Y hay otro tema: el agro ha demostrado una enorme
capacidad para incorporar ciencia y tecnología a sus actividades. Eso es
algo que la sociedad tiene que facilitar.
PERIODISTA: ¿Por qué se demoró tanto en ajustar el
tipo de cambio?
PRESIDENTE BATLLE: Las cosas venían planteadas de una
manera en la cual no se podían hacer cambios bruscos antes, sin haber
generado algún tipo de perjuicios de carácter político general. Apuramos
la evolución del tipo de cambio administrado y el salto, que parece brusco,
no lo es. Si usted mira los tipos de cambio que están vigentes hoy y los
compara con aquella línea, verá que están prácticamente en el mismo
lugar. Y se dieron por circunstancias externas a nuestra realidad, que
vinieron por la crisis financiera que llegó del exterior y que forzó a
vivir circunstancias muy dramáticas. No las pudimos impedir. Era imposible,
estábamos inmersos en una situación financiera tal, que estaba más allá
de nuestras posibilidades ordenarla o manejarla. Todo lo que se produjo a
consecuencia del "corralito" en Argentina, trajo enormes
dificultades al sistema financiero uruguayo y produjo alteraciones que
pensamos que podíamos resolver con nuestras propias fuerzas. Esas cosas que
se podían haber hecho naturalmente, hubo que hacerlas más abruptamente
como consecuencia de la crisis.
PERIODISTA: Pero usted cambió un poco la percepción.
Fue muy crítico con (Daniel) Soloducho, con (Alberto) Couriel, a quienes
llamó "los grandes devaluadores". Y la devaluación no generó
una gran inflación y dinamizó al sector exportador.
PRESIDENTE BATLLE: Si la devaluación no significó una
gran inflación fue porque el gobierno tomó medidas de ajuste para evitar
hacerle, en el corto plazo, mucho daño a la gente. Porque si nosotros no
hubiéramos tomado medidas de ajuste en cuanto a la emisión, la
devaluación siempre trae inflación. Quiere decir que los que pedían una
devaluación, al mismo tiempo, tenían que decir: "usted devalúe pero
tranque", porque si devalúa pero deja que la moneda suba en cuanto a
su capacidad de hacer daño en los precios y comerse los beneficios de la
devaluación de un día para otro, devaluar no sirve para nada.
Habíamos pensado seguir un mecanismo donde iba a ir más
rápido el tipo de cambio para, así, ponernos en el plazo medio en la
situación en que estamos hoy, y al hacerlo abruptamente en función de
coordenadas que no pudimos manejar, porque provenían del exterior, la
única respuesta posible para que esto no se transformara en una inflación
loca que se comiera los tales beneficios de la devaluación, era que alguien
pagara ese ajuste. ¿Y quién paga ese ajuste? Lo paga la gente más pobre.
¿Y usted cree que el gobierno no supo que lo iba a pagar la gente más
pobre? ¡Por supuesto que lo sabía! Lo que pasa es que no tenía otra
alternativa para poder salir bien y obtener lo que el gobierno anunció que
iba a ocurrir y ocurrió. Que íbamos a concluir los acuerdos con el FMI,
que fueron muy difíciles, porque al principio el FMI tenía otras ideas. Y
los persuadimos de que Uruguay estaba en condiciones de hacer algo por lo
que hoy todo el mundo nos felicita. iQué gracioso! Pero antes todo el mundo
decía que no lo podíamos hacer. Y con eso el Uruguay ganó confianza y,
dadas las circunstancias que habíamos estructurado, comenzó un boom exportador.
Lo más importante del 2003, cuando salimos de la crisis,
es que suben 67.000 empleos, todos en el sector privado, y bajan 7.000 en el
público. Y la Universidad de la República anuncia que van a subir este
año 50.000 empleos privados y tenemos la expectativa de que vuelvan a bajar
los públicos. Lo que demuestra varias cosas: el empleo crece en el sector
privado y no en el público, en función del crecimiento de la exportación
y de la estabilidad financiera. Y eso le da al país confianza, inversión,
y la gente viene e invierte en lo que Uruguay es competitivo, que es en el
agro. El 90% de las inversiones son de capital extranjero. Lo cual también
significa que si éste no participa de la forma tan fuerte en que lo hace,
no existiría inversión. Y para que el capital extranjero participe de la
inversión, respetando las leyes y los controles uruguayos, tiene que haber
estabilidad. Es el único camino posible para Uruguay en el futuro. El
Uruguay está creciendo y debe aprovechar las oportunidades.
PERIODISTA: ¿Por ejemplo?
PRESIDENTE BATLLE: Hay condiciones externas. Recuerdo mi
primera incursión en la discusión con Europa sobre las exportaciones,
cuando acompañé a ese gran ciudadano que fue Wilson Ferreira Aldunate. Fue
en 1963 y a partir de ahí nos hemos pasado discutiendo con Europa por la
carne. Ya no discutimos más. ¿No nos quieren aumentar la cuota? Que no la
aumenten más. Porque yo diría que ahora el mundo prácticamente se llama
Asia. Y China es su nave insignia. Hay 6.000 millones de habitantes arriba
del planeta. Cuando yo nací, hace 76 años, había 2.000 y pico de
millones. Calcule lo que va a crecer en 40 años. ¿Dónde va a crecer más?
En Asia. Los 1300 millones que tiene China no son todos consumidores, pero
todos los días hay más gente con capacidad de hacerlo. Hoy los chinos
tienen un ingreso per cápita de 1.000 dólares. Calcule el día que tengan
4.000 dólares. ¿Usted se imagina lo que van a consumir? El 7% del
territorio chino tiene la calidad de ser agrícola. Y tienen que alimentar
con cereales de invierno a su población, el resto lo tienen que importar,
como el grano de verano. ¿De dónde? De América del Sur, que produce
bastante más que Estados Unidos. ¿Y quién se lo come? La demanda
creciente de Asia, con la prohibición del uso de raciones de origen animal,
para evitar la Vaca Loca.
Hoy los chinos están comprando de todo en todo el mundo.
Y ya tienen contratados los fletes, con los barcos más grandes, para llevar
a granel. Por eso hay que pensar en puertos de buen calado. Porque a China
le vamos a vender carne y soja, además de madera, cítricos y arroz.
PERIODISTA: ¿No le preocupa que la agricultura esté
corriendo a la ganadería?
PRESIDENTE BATLLE: No. La agricultura se puede hacer
sólo en las mejores tierras. Cuando usted viaja por el Litoral, y más si
lo hace en avión, ya no ve ganado. ¿A dónde va? Al Norte o al Este. Eso
significa que las tierras ganaderas cobran otro valor. Por eso el ganadero
ahora tiene otras condiciones para invertir, que antes no tenía. Hoy hay un
precio que se sostiene y que va a ir mejorando con el correr del tiempo. Con
lo que estará en condiciones de mejorar su oferta de comida.
Precisamente en El País Agropecuario se publicó que,
luego de Florida, donde hay una gran incidencia lechera, el departamento que
tiene más tierra mejorada es Durazno, con un 14%. ¡Catorce por ciento!
Cuando usted bien sabe lo explosivo que ha sido el Lotus Rincón como oferta
de pasto en todas las áreas de cristalino. ¿Por qué no se hizo? Porque no
se podía. Pero ahora la gente lo va a hacer. Si alcanza con andar por .las
buenas carreteras que tenemos hoy -que hemos podido conservar y hacer
gracias a la Megaconcesión- para ver lo que la gente está invirtiendo. Si
se va a comprar alambre, piques o postes, es difícil encontrarlos. Y eso
pasa porque la gente siente que si invierte produce más y gana más dinero.
PERIODISTA: ¿El arrastre de ese crecimiento va a
solucionar problemas que perduran, como el del endeudamiento?
PRESIDENTE BATLLE: Ah, sí, creo que sí. Hoy de mañana
hablaba con un amigo agricultor y me decía que hay que hacer que el BROU
sea flexible con la deuda si se paga al contado, porque hay mucha gente que,
con esta cosecha, está deseosa de pagar y solucionar su problema. La gente
en Uruguay siempre ha tenido voluntad de pago, no quiere tener una deuda por
10 años.
PERIODISTA: Usted habló de la expansión de la
agricultura. Dijo que habrá unas 500.000 hectáreas dedicadas a la soja
para la próxima campaña.
PRESIDENTE BATLLE: Pienso que puede darse.
PERIODISTA: En esta reactivación, ¿no han quedado
algunos sectores por el camino?
PRESIDENTE BATLLE: El único sector que necesita ayuda es
la granja. Tenemos la ley pronta, con retoques, que aportará soluciones,
porque aún depende del mercado interno. Crearemos un fondo para ayudar a
resolver los problemas de endeudamiento, ganando tiempo para que se
desarrollen estos proyectos de contra-estación que van a crecer,
fundamentalmente con Europa, donde nuestro socio natural es Italia. Está el
caso del tomate industria. Hay un esfuerzo e inversiones concretas.
PERIODISTA: En una jornada organizada por la entonces
Mesa de Entidades Agropecuarias, previa al balotaje de 1999, usted dijo que
uno de los objetivos que iba a impulsar si resultaba electo presidente era
el desarrollo del Norte del Río Negro. ¿Eso quedó en el debe?
PRESIDENTE BATLLE: Quedó por el camino, precisamente, en
cuanto al desarrollo vial. No pudimos continuar la ruta 4, no pudimos salir
con la carretera del 329 con una buena ruta para juntarnos con la ruta 26.
La crisis no nos dio la posibilidad de manejar los planes de inversión, que
tuvimos que reducir hasta un 28% en la última ley. Porque justamente la
inversión es lo que es elástico, ¿no es verdad? Usted no puede reducir
los sueldos, ni los gastos al mínimo. Reduce la inversión.
PERIODISTA: Otro tema. Los productores de todo el país
están preocupados de que no le roben las vacas ni las ovejas.
PRESIDENTE BATLLE: Toda la vida hubo abigeato en el
país. Si hasta se tenía la condescendencia de matar una oveja y dejarle al
dueño el cuero colgado del alambrado. Pero hoy es un negocio, roban para
vender, asociados con gente que luego vende la carne. Recuerdo que, antes de
que Stirling renunciara al Ministerio del Interior, tuvo que intervenir en
el Sauce para cambiar una situación policial que había, para cortar un
circuito que incluía la venta de la carne en Las Piedras. La tentación que
hay es que este trabajo, que es un delito, da más ingreso que uno regular.
Contra el abigeato actual hay que contar con el mayor celo y eficacia.
PERIODISTA: ¿Qué pasó con aquel proyecto para que
Uruguay fuera la cabaña de América, en cuanto a su potencialidad para
exportar buena genética?
PRESIDENTE BATLLE: No podría contestarle con autoridad.
Uruguay tiene condiciones para ello, en algunas áreas más que en otras.
¿No hemos sido la cabaña de América en cuanto al
ganado lechero? Lo exportamos a Perú, a Brasil, a México; ahora a
Jordania. En otros temas no me animo a opinar.
En ovinos competimos con Nueva Zelanda, por ejemplo,.en
una exportación a Perú. Tenemos el rodeo Corriedale más grande del mundo,
o el más puro Hereford del mundo.
O sea que Uruguay tiene condiciones para serIo.
PERIODISTA: Se Io recordaba porque, al respecto, había
un proyecto del MGAP que no se pudo concretar.
PRESIDENTE BATLLE: Uruguay es un país ganadero. No somos
agrícolas. Nuestras tierras aptas para la agricultura están limitadas. Por
eso siempre digo que "la vaca les gana".
PERIODISTA: ¿De dónde sacó esa frase?
PRESIDENTE BATLLE: De la barriga. La dije un día en Fray
Bentos: "la vaca les gana". Y lo dije porque lo siento. ¿Qué
quiere? El camino, a lo largo, es ese. En el fondo, la carne es hoy en todo
el mundo una delicafessen.
PERIODISTA: Pero muchas veces se habló del Uruguay
financiero.
PRESIDENTE BATLLE: No, alguno habrá hablado, pero el
Uruguay financiero no tiene esa significación. El Uruguay financiero no
sirve para este desarrollo que tenemos que hacer.
PERIODISTA: El senador Carlos Julio Pereira propone un
proyecto que prohíba las sociedades anónimas con acciones al portador. Y
lo hace con una fundamentación de soberanía.
PRESIDENTE BATLLE: Volver a discutir la soberanía de ese
asunto me parece que no es lo que el país precisa.
PERIODISTA: Será porque la tierra es un recurso escaso,
finito.
PRESIDENTE BATLLE: Fenómeno: la tierra es un recurso
escaso, pero no se la puede llevar nadie. Las sociedades anónimas que
trabajan sobre otras cosas se las pueden llevar. Si estamos hablando de
acciones nominativas, no veo por qué la tierra sí y otras cosas no.
Si usted compra tierra y la pone a nombre propio, puede
comprar toda la que quiera, no tiene límite. ¿Qué diferencia hay en que
la compre usted a su nombre o que la compre bajo una sociedad anónima con
acciones nominativas o con acciones innominadas? ¿Qué diferencia hay si
usted la tierra no se la puede llevar? Es más: tiene que producir acá y,
si produce acá, lo que usted saca es la producción de la tierra. ¿Y esa
producción de la tierra a quién beneficia? Al Uruguay.
PERIODISTA: Se habla de un mal manejo, de lavado de
dinero.
PRESIDENTE BATLLE: ¿Lavado de dinero? Muy bien, vamos a
hablar de lavado de dinero. El dinero mal habido, ¿de dónde surge? De la
droga y la venta de armas. ¿Y dónde se comercializa eso? ¿Acá en el
Uruguay? ¿En un país que no tiene prácticamente significación desde el
punto de vista de su capacidad de absorción de dinero y de recursos? ¿No
será que eso se hace como lo hizo Parmalat? ¿Dónde lavó el dinero
Parmalat? 17.500 millones de dólares... más o menos como todo el Producto
Bruto uruguayo. ¿Y qué significan 17.500 millones de dólares en el mundo
financiero de hoy, con la enorme cantidad de dinero que se mueve en cada
plaza del mundo todos los días? La nada. ¿Eso se puede hacer en el
Uruguay? No se puede hacer,.aunque usted lo quiera.
Además, las sociedades anónimas, con acciones
nominadas, o innominadas, deben tener directorios y contador. Por tanto se
conoce quiénes son y dónde está la procedencia de la propiedad. Y usted
está hablando de Uruguay, en donde se asoma al alambrado y sabe quién es
el que está al lado.
Si usted exige acciones nominativas, posiblemente lo que
conseguirá será que alguien no quiera aparecer como propietario, pero no
creo que tenga dificultad para tener un socio o un representante legal. Otra
cosa: las ventas de campos están registradas en las obligaciones legales,
porque tienen que ofrecerse antes al Instituto Nacional de Colonización.
Esas ventas han permitido que suba el valor de la tierra.
¿Cuánto aumentó el patrimonio del Uruguay y de los uruguayos?
Considerablemente. Y ha aumentado la producción. ¿Es beneficiosa, o es
perjudicial, la presencia de tantos argentinos en el Litoral? Es
beneficiosa. Le ha resuelto la vida a mucha gente que tenía altísimos
endeudamientos y que los ha podido resolver arrendando o comercializando
parte de sus activos.
PERIODISTA: Ya que mencionó el caso Parmalat, ¿es
preferible que la absorba