08/12/04
ESPERANZA Y DESEOS DEL MEJOR
DESTINO PARA EL PAÍS
Al hacer uso de la palabra en la Asociación de Dirigentes de
Marketing, el Presidente Batlle subrayó hoy que entrega el gobierno a
la nueva administración "con las cuentas claras" y con la
economía "en pleno crecimiento en todos sus sectores, haciendo del
año que corre el de los mejores indicadores conocidos." Batlle
trazó un balance de su gestión y apuntó al futuro sosteniendo que el
Uruguay crecerá "si se anima a integrarse al mundo."
PALABRAS DEL PRESIDENTE DE LA REPUBLICA, JORGE BATLLE,
EN EL ALMUERZO DE LA ASOCIACIÓN DE DIRIGENTES DE MARKETING (ADM).
08/12/2004
PRESIDENTE BATLLE: Señor Presidente de la Asociación de
Dirigentes de Marketing, señores Ministros, señores Embajadores, señores
dirigentes de empresas, mujeres y hombres que participan del quehacer de la
vida del país, nuestros invitados especiales, el Embajador de los Estados
Unidos, Bill, Terry: En primer lugar, quiero agradecer a la Asociación de
Dirigentes de Marketing, porque ella se ha trasformado en forma definitiva,
en un ámbito desde que la ciudadanía uruguaya va recogiendo los puntos de
vista y las opiniones de mujeres y hombres que tienen que ver con el
quehacer nacional tanto en el sector público nacional o extranjero, como en
el sector privado. Creo que este es un Foro que adquiere cada día más
trascendencia y más importancia, al que de futuro en los próximos años de
seguro se le podrán ir agregando otras actividades, para consolidar lo que
se ha venido haciendo tanto en la Universidad de la Empresa, como en los
centros de discusión y análisis de los problemas. Pendiente en el futuro a
la necesidad de seguir abriendo estos Foros, para poder invitar a
personalidades del mundo entero, que por tener una representación superior
al promedio de los seres humanos en el conocimiento y en el manejo de las
cuestiones científicas y tecnológicas, administrativas, operativas, deben
aportar al Uruguay lo que el Uruguay necesita recibir como un alimento
esencial a su alma y a su cultura para poder crecer, su conocimiento
indiscutido y su sabiduría. Es el nuevo gran paso que este Foro debería
organizar en beneficio de los intereses colectivos del pueblo uruguayo.
Quiero agradecer además, en forma particular y familiar la forma como nos
han recibido siempre. Naturalmente como le pasa a casi todos los seres
humanos del sexo masculino -en mi casa mando yo- y por tanto no podríamos
haber hecho absolutamente nada bueno sin Mercedes.
Mercedes ha sido nuestro apoyo permanente, y a tomado la
decisión personal de salir a trabajar para ayudar a la gente como ella
dice, "aprender a pescar y no a regalar pescado". Alcanza con
recordar las buenísimas cosas de "Hecho Acá", de las Orquestas
Juveniles, de las mujeres rurales, de los encuentros con la música del
Uruguay en todo el país, y todo eso supone agrandar el espíritu de los
ciudadanos, mejorar su cultura.
Pero también quiero agradecer en forma muy particular
porque yo también fui hijo de Presidente en su momento, a tres ciudadanos
que no están acá, que no saben nada de los que les iba a pasar, que son
nuestros hijos. Tanto Beatriz como el Mono y como Paula, son ilustres
desconocidos, ha sido la mejor manera de contribuir a ayudar a la familia de
un gobernante, que tiene que tener a lo largo de toda su existencia y todas
las cadenas de sus integrantes una conducta intachable y por cierto que
estamos orgullosos, y por cierto que estamos orgullosos de los críos y por
cierto mucho más de los nietos.
Podemos
pues entonces a comparecer ante esta Asociación amiga, de Dirigentes de
Marketing hoy, por última vez, en mi condición de Presidente de la
República. Es este un Presidente que se despide para dar paso a otro
Presidente, que llega al gobierno ungido por el pueblo de la República
apoyado por una fuerte mayoría luego de un acto eleccionario libre,
ejemplar, que robustece y hace honor a nuestras instituciones. Lleno de paz
y de esperanza para todos aquellos que le dieron su voto. Esperanza y deseos
del mejor destino para el país de quienes perteneciendo a otros sectores
políticos abrigamos por cierto los mismos sentimientos. Asistimos además a
una circunstancia histórica en la vida del Uruguay. Por primera vez una
fuerza política de fundamento filosófico diferente en su base conceptual
al que representan los Partidos Fundacionales del Uruguay, al decir del ex
senador Santoro, llega al gobierno. Toca pues, al gobierno que tengo el
honor de presidir, además de cumplir con las tradiciones del país, a
cumplir con sus obligaciones morales, de facilitar al gobierno electo no
solamente toda la información necesaria, sino también de entregar la
Administración Pública con la transparencia y honorabilidad con la que la
ha conducido durante estos cinco años de gobierno.
Ha sido asimismo, nuestra principal preocupación de que
la nueva administración reciba el país, no solamente con la cuentas
claras, sino con una economía en pleno crecimiento, en todos sus sectores,
haciendo del año que corre, el de los mejores indicadores hasta ahora
registrados. Entendemos que de esta manera, el próximo gobierno de la
República puede recibir la posta y puede seguir corriendo para hacer crecer
al país, sin encontrarse con la dificultades tradicionales de tener que
hacer ajustes fiscales, renegociar deudas, resolver problemas que
lamentablemente en estas economías aún muy débiles, aún aquellos de los
países más grandes de América, hemos tenido recurrentemente en el pasado.
Concluye el año 2004, con un crecimiento del PBI,
equivalente al 11%, con una inflación del 8%, con una tasa de desempleo que
alcanza en el trimestre móvil ultimo 12,5, que seguramente será menor al
fin del mandato. Debe haber alcanzado y trepado al 20%, record histórico al
final del año 2002., Con un superávit primario de 3.7, con un déficit de
2.1 que nos ha permitido cumplir con todos los extremos acordados y
negociados con el Fondo Monetario Internacional. Con un record histórico de
exportaciones, más o menos estaremos con las cifras a esta semana de
diciembre, llegando a un guarismo 2.970 millones de dólares en bienes. Con
una relación de la exportación sobre el producto, incluyendo bienes y
servicios superior a un 30%, que constituye de nuevo otro record histórico,
y que establece este guarismo el grado de apertura de una sociedad, con una
inversión imaginaria de activos fijo en un cien por ciento mayor que el
anterior, con una producción industrial mayor que la del año 1999, y con
un absoluto record histórico en la producción agropecuaria y en la cadena
agro industrial.
Es necesario consignar, que en estos últimos tres años
la producción agropecuaria creció un 40%, que equivale a las dos terceras
partes de lo que ella había crecido en los 50 años anteriores de la vida
de la República. Debo decir -reiterando viejas expresiones- que el sector
agropecuario recobró su sitial de liderazgo en la economía uruguaya y que
por cierto la "vaca les gana"
Quisiera hacer una pequeña reflexión no habitual, a
propósito de la así llamada "carga del Estado" en los
funcionarios públicos. El país llegó a tener en 1990, 270 mil
funcionarios públicos. Hoy tiene 212.326, y cuando uno dice 212.326 en un
país pequeño uno dice qué barbaridad, quisiera por tanto desagregar la
cifra.
ANEP, o sea la Educación Primaria, Secundaria y
Técnica, 50 mil; Universidad 11.700, el INAME 3.900. Total vinculado a la
Educación: 65.600 personas.
Intendencias de todo el país, inclusive la de
Montevideo, 36.975.
Policía de todo el país, 31.700.
Fuerzas Armadas de todo el país incluyendo el Hospital
Militar, la sanidad militar y todos los servicios administrativos, 27 mil.
Salud Pública 16.500. Esto hace un total de 177.775
funcionarios.
Lo que deja para toda la Administración Central, para
todos los Entes Autónomos, la cantidad de 34.500.
Estas
cifras de 177.775 son prácticamente y en buena medida -salvo áreas muy
concretas y menores- son cifras que es muy difícil disminuir, muy difícil
reducir. Es más, considero que la Educación siempre demanda más y más
participante para mejorar su calidad, su extensión, y las distintas
disciplinas nuevas a incorporar. Todo esto, además de regulaciones que
comenzaron ya al principio del gobierno con el Ministerio de Alberto
Bensión: compras en red, abatimientos fiscales en la industria, al agro, a
los transportes, a la hotelería, cosa que se ha logrado sin debilitar las
importantes ayudas sociales, que aumentaron para atender la crisis vivida a
través del seguro de desempleo y otras carencias provocadas por las
dificultades financieras. Ustedes tienen que saber que más del 52% de los
niños, que en total suman 445 mil de la matrícula de las escuelas
primarias del Uruguay, o sea arriba de 220 mil, reciben cotidianamente
alimentación pública. En algunos casos en las escuelas de tiempo completo,
que están más arriba allá ya de la cifra de 100 y que se vienen
extendiendo en todo el país durante todo el día. El Instituto Nacional de
Alimentación aumentó sus servicios durante la crisis, hoy atiende a 25.000
personas por día y distribuye mensualmente 102.000 canastas, entre familias
con carencias, en pensionistas con debilidades económicas notorias, y en
enfermos crónicos que limitan sus capacidades de sostenerse por sí mismos.
Hemos pues hecho un esfuerzo tan importante, que contratamos con el Banco
Interamericano de Desarrollo, un programa de Infancia y Familia, que
invierte 45 millones de dólares, para atender los CAIF, madres y niños de
situación de calle, madres jóvenes, fortalecer el INAME, dar un modelo de
asistencia integral para las familias con niños de 4 a 12 años, que
involucrará no menos de 150 mil personas. Entendemos que la próxima
administración que ha anunciado su propósito de invertir 100 millones de
dólares en programas de ayuda a los sectores más débiles de la
población, cuenta con este programa de Infancia y Familia estructurado, que
ha comenzado este año, y que se extiende por los próximos cinco años.
Una vez más el Uruguay ha recibido de los organismos
internacionales, la CEPAL, el Banco Mundial, el reconocimiento que es el
país de América que cuenta con la mejor distribución del ingreso. Y
nuestro índice de pobreza, que sufrió un evidente deterioro como
consecuencia de la crisis regional que el país soporta desde 1999, empezó
a revertirse ya en el último trimestre del 2003 y continúa mejorando
durante el 2004. El gasto público social del Uruguay sigue siendo el más
elevado de América, y además tiene la particularidad de que está muy bien
focalizado, puesto que atiende principalmente al 20% más débil de la
sociedad uruguaya. Bien saben ustedes que el Uruguay superó con éxito la
más importante crisis financiera de los últimos 100 años. A la que se le
agregó –por si fuera poco, como el viejo proverbio- al que se le agregó
la invasión de la aftosa que comenzó el 21 de abril del 2001, de la que
salimos recién en mayo del 2003, perdiendo durante dos años niveles de
precios, niveles de ocupación, niveles de actividad, niveles de ingresos,
en una palabra el deterioro del más importante rubro exportador y de
trabajo del Uruguay.
Todos estos cambios de la economía a los que me he
referido anteriormente, comenzaron luego de que el Uruguay concluyera su
acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, que luego de determinados
trámites se puede ubicar en la fecha del 10 de julio del 2003. Fue una
tarea larga, fue una tarea difícil, nos tomó el año entero del 2002 y
buena parte del 2003. Hoy, superadas aquellas instancias, es bueno recordar
y agradecer a todos aquellos que colaboraron con los Ministros de Economía
y con los miembros del Banco Central y con los técnicos del país en la
solución de nuestro problema. Existen hechos a lo largo de este tiempo, que
nunca podré olvidar y que vuelven sobre mí como si sucedieran nuevamente.
A veces me pasa como les pasa a todos los que nos hemos recibido, por lo
menos de abogados, que soñamos que todavía nos falta algún examen para
recibirnos y sufrimos pesadillas. Yo sufro pesadillas volviendo a escuchar
las conversaciones que tuve que escuchar y los planteos que tuve que
escuchar que todos conducían al desastre en el Uruguay.
El
24 de enero del 2002, recibí una llamada telefónica desde Zurich, donde
estaban reunidos los directores propietarios del Banco Comercial, se me
anunció por parte de su interlocutor el señor Mullford, que conocida las
dificultades del Banco Comercial habían resuelto cumplir con sus
obligaciones y apoyarlos. Respondí que no esperaba otra cosa, dado que los
tres grandes bancos propietarios del Banco Comercial, con el sólo anuncio
de su decisión de cumplir con sus obligaciones resolvían el problema
planteado. Este fue el compromiso que me transmitió el señor Mullford,
asumido ante el Presidente de la República por todos los bancos
propietarios del 66% del Banco Comercial el día 24 de Enero del 2002. Al
día siguiente, recibí una nueva llamada del mismo señor, en la que me
comunicaba que habían cambiado de decisión porque habían sido
traicionados por una persona que era como de su familia y que por ende, le
quitaban su apoyo al Banco Comercial. Le respondí que hacía 10 años que
habían llegado al país por voluntad propia, que el país los había
recibido, que habían comprado un banco de tradición importante, que
habían puesto su nombre para comunicarlo a los ahorristas y depositantes
que le estaban entregando su dinero a tres grandes bancos internacionales,
el Dresdner Bank, el Crédit Suisse y el Chase. Les dije que no se habían
quejado durante los 10 años del tratamiento recibido, de que habían hecho
buenas ganancias, de que ellos habían sido los que habían elegido a los
señores administradores conservando la nueva propiedad y la decisión
final, y que no tenían ningún derecho sin causa alguna motivada por el
Uruguay, por su gobierno y por su sociedad, de ponernos un revólver en la
nuca y matar al país, y que iba a hacer lo posible por ponerlos presos y
anuncio que el gobierno del Uruguay lo va a hacer. Porque no hay derecho a
jugar con un país no cumpliendo con sus obligaciones como las que se ha
jugado con el país. No hay derecho hacerle pasar a una nación el
sufrimiento que esta nación pasó, los momentos de caos y de incertidumbre,
la pobreza que se abatió sobre tanta gente humilde sin recursos simplemente
porque no tuvieron la hombría y la moral de cumplir con sus obligaciones,
tendrán que dar explicaciones de esto ante los juzgados de los Estados
Unidos. La crisis se precipitó y nos obligó a medidas extremas para poder
sobrevivir. Fue en ese contexto que el Uruguay recibió la ayuda del
gobierno de los Estados Unidos, dispuesta personalmente por el Presidente
Bush, que puso de frente 1.500 millones de dólares. Que en constancia y
operación sin antecedentes políticos, y apenas escondidas en algunas
disposiciones legales de un ciudadano que será condecorado en los Estados
Unidos por el embajador Fernández Faingold y el embajador Silverstein, el
Undersecretary of the Treasury señor Taylor. Un viernes por la tarde se
remangó, trabajó sábado y domingo con sus técnicos por el Uruguay, y
encaminó la solución descubriendo el mecanismo legal para ayudarnos a
salir de la circunstancia trágica que el país vivía. La tarea del señor
Taylor fue fundamental, y a ella se ha sumado siempre con decisión, con
inteligencia y con devoción por el país, nuestro gran amigo el embajador
Martín Silverstein, con el que hemos trabajado juntos y donde además de
resolver nuestro acceso al mercado cárnico americano, hoy nuestro mayor
comprador; en concluir nuestro acuerdo de cielos abiertos y además, el
recientemente firmado de Garantía Recíproca de Inversiones.
Embajador Silverstein, ha sido usted el mejor embajador
del Uruguay y de los Estados Unidos.
Entre los recuerdos para empardar de los malos y de los
buenos, nunca podré olvidar la llamada de un alto funcionario del Fondo
Monetario Internacional. Un sábado al mediodía, estábamos sentados con
Mercedes en la buhardilla, donde me sugirió el camino del default para el
Uruguay. Y dijimos que no. Inmediatamente después, pocos días después
recibí otra llamada -cuando Davrieux fue como adelantado para ir arreglando
las cosas a Washington- del embajador Fernández Faingold diciéndome
"se ha producido el milagro", al anunciarme el préstamo del
gobierno Americano que nos salvó del caos. Que nos salvó del caos. A todo
esto se agrega la permanente, incansable e invalorable colaboración que
recibimos de la Reserva Federal de New York, de nuestros amigos Bill
McDonough y Terry Checki, que ayer tuvimos el honor de condecorar y que hoy
nos acompañan acá. Párense, párense.
Conocimos a Bill cuando en la década del 60 integraba
como joven secretario la Embajada de los Estados Unidos en el Uruguay, nos
hicimos amigos, nuestras familias, nuestras hijas. Bill por su forma de ser
cosechó entre nosotros importantes lazos de amistad con el Uruguay y con
los uruguayos.
Tuvimos el privilegio de continuar vinculados a él
durante los años de su permanencia en Chicago, a él y a su señora Susan,
en el First National Bank of Chicago y en el Ravinia Festival, que él
presidía entonces por su notoria e importante inclinación a la música.
Más tarde, cuando se desató la crisis lo volví a
encontrar, era el presidente de la Reserva Federal de New York. La
providencia, la suerte, no sé qué, pero estaba allí. No había olvidado
al Uruguay, lo ayudó como un uruguayo más. El Uruguay lo recordará
siempre.
Aquí
al lado tenemos a nuestro nuevo amigo, Terrénce Checki, vicepresidente
Ejecutivo de la Reserva Federal de New York, miembro además del Comité de
Administración del Banco. Una larga, exitosa e importantísima actividad
dentro del sistema bancario de los Estados Unidos. Terry Checki ha
desempeñado una labor fundamental en todo nuestro proceso durante la
crisis. Nuestro amigo Carlos Sténeri conoce esto con detalle, y aprovecho
que tengo tanto testigo para reiterarle a señor Carlos Sténeri y al señor
Hugo Fernández Faingold que de todo este itinerario cuasi trágico, hay que
hacer un racconto preciso para la posteridad, para que todo el mundo sepa
como fueron las cosas y quienes fueron nuestros amigos. Su conocimiento y su
prestigio en el mundo financiero hizo de él uno de los pilares
fundamentales en el éxito de nuestra tarea. Terry Checki creyó en el
Uruguay y por eso nos defendió cuando todo parecía perdido, a él llegue
nuestro agradecimiento, el más profundo y el más sincero. Hoy podemos
hablar así de los acontecimiento vividos, en forma descarnada y clara, como
hemos hablado siempre, como no sabemos hablar de otra manera. Quizás dentro
de algunos años, la dimensión del cataclismo evitado se pueda aquilatar
debidamente. Terry Checki y Bill McDonough contribuyeron a evitarlo. Son
nuestros amigos.
Las crisis también supuso oportunidades, mucho ha
cambiado en la sociedad uruguaya como consecuencia de ella, muchas cosas se
han hecho y muchas cosas más inexorablemente se tienen que hacer, sea cual
sea el perfil del gobierno, porque la economía y los acontecimientos
sociales tienen muchas más fuerzas, muchas veces que las intenciones o
opiniones de los gobiernos. Está en marcha una modificación del sistema
financiero y bancario en el Uruguay aún no concluida, que el país debe
procesar integralmente para consolidarla.
Hemos podido operar una apertura notoria en los servicios
portuarios, aeroportuarios y de comunicaciones. Pero hemos retrocedido en
combustibles y en los servicios de Agua Potable y Saneamiento.
Dado el anuncio hecho por el próximo Ministro de
Economía favoreciendo la asociación de ANCAP con productores privados,
insistiremos en el proyecto que fuera rechazado con las modificaciones
adecuadas para hacerlo más liberal y más conveniente. Hemos mantenido –en
lo que es personal, junto con el Ministro Villar- encuentros con la empresa
brasilera PETROBAS, que ha manifestado intereses serios en operar en nuestro
país. Sería muy beneficioso si así lo hiciera y se pudiera resolver
favorablemente..
En materia de agua y saneamiento, el Gobierno tomó la
única decisión posible que se podía tomar, cumplir con el texto
constitucional reformado en reciente consulta popular, impulsada por el
gremio de funcionarios de la OSE. La reforma es muy clara y rotunda en sus
disposiciones, no necesita intérpretes cuando el texto es claro. No puede
quedar ningún servicio en manos privadas, cualquier sea la naturaleza
jurídica del titular del mismo, vecinos, cooperativas o personas
jurídicas. Repercusiones aún no evaluadas, ni consideradas, se extienden a
otras aguas subterráneas, termales, de riego, o aguas naturales de consumo
humano. La Constitución reformada prohíbe la exportación de agua natural,
siendo este un importante rubro para las empresas, incluso la OSE, cada día
más valioso. El próximo Parlamento debería considerar una ley
constitucional que modifique este atraso que tanto daño le hace a la
República.
El Gobierno ha recibido el informe final sobre energía,
encargado a consultores especializados, siendo que aún no conocemos, la
existencia de petróleo o gas en el Río de la Plata en las aguas
territoriales, es necesario proseguir las tratativas ya iniciadas con el
Brasil para establecer una conexión con Garabí, sobre el Alto Uruguay y
poder tener acceso –junto con la República Argentina- a 1.000 mega, como
respaldo a nuestra demanda creciente. El Gobierno a través del Ministerio
de Relaciones y de Industria, ha establecido contacto firme con el de
Bolivia para el suministro de gas, que hoy depende de una resolución
legislativa del Parlamento boliviano. Esperamos y deseamos, que el
Directorio de la UTE, pueda concluir luego de una demasiado larga
tramitación, la licitación para construir en San José una usina a gas de
ciclo combinado que genere 400 mega.
Si
uno advierte la actitud de las organizaciones gremiales de ANTEL, de ANCAP,
de la OSE, los permanentes impulsos de ex-funcionarios del Gas, las ideas
que sustentan algunos sectores bancarios, llega a la conclusión que estamos
a merced de las corporaciones, sindicales, patronales, profesionales,
parecería que viviéramos en un mundo cuasi-medieval, donde se da la
paradoja que en un mundo global, y cada día más global, nuestros esfuerzos
mayores se orientan a ir en contra de esa realidad. El tema consiste en que
los integrantes de las distintas corporaciones, tienen que llegar a
comprender que el camino más seguro para su debilitamiento y desaparición,
es precisamente el que sostienen. Existen dos ejemplos claros de lo
contrario, el Puerto de Montevideo es uno, el más evidente, el Banco de
Seguros es otro.
La Administración de Puertos ha consolidado el
crecimiento de su actividad, de su eficiencia, generando empleo, generando
riqueza para el país, coexisten el sector público y el privado. Es claro
la Administración de Puerto tiene 900 funcionarios no 5.000, y con 900
funcionarios le da más riqueza al país y así misma. Con 5.000
funcionarios no dábamos ni saneamiento, ni agua potable, y no cumplimos con
las obligaciones con aquellos que más lo necesitan y lo precisan para
mejorar la calidad de vida de la cual tanto se reclama y por la que poco se
hace. Todo el mundo tiene derecho y además la obligación de defender sus
intereses, los que son sus puntos de vista, pero nunca al grado de con ello
perjudicar al país y finalmente hacerse daño así mismo. Y es en ese
sentido que nosotros sentimos y entendemos y no hemos podido todavía hacer
por las dificultades que el tiempo nos ha quitado, de que los Entes
públicos tienen que tener acciones, tienen que emitirlas, tienen que
participar de la Bolsa para que todo el mundo conozca con más claridad cual
es su operación y la naturaleza de su funcionamiento financiero y por ende
de su trasparencia. Esta apertura que preconizamos hacia adentro también la
sostenemos hacia fuera. El Gobierno por cierto ha recibido muchas críticas
de quienes lo señalan como contrario al MERCOSUR, no somos contrarios a esa
idea, hemos ayudado a fortalecerla. Particularmente el Ministro de
Relaciones Exteriores ha sido piedra fundamental en la constitución de los
Tribunales necesarios para que ellos por su estabilidad puedan cumplir con
las tareas que hasta entonces no estaban debidamente acordadas, lo sostiene
además esta idea una tradición histórica del país
Lo dice Artigas en las Instrucciones del año XIII; lo
establece la Constitución de la República, en disposiciones que contribuí
a redactar, pero sucede que aún estamos lejos de alcanzar los objetivos
comerciales que nos permitan a todos desarrollarnos por igual, siendo como
somos tan diferente.
Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay, tienen como
artículos líderes de exportación los productos de la cadena
Agro-Industrial, de ello se desprende, que salvo casos especiales como el
arroz, nuestro crecimiento solo se logra fuera del MERCOSUR. Lo mismo le
sucede al Brasil y a la Argentina. Los 90 millones de toneladas de soja que
ambos producen no se consumen en el MERCOSUR. Y los 150 millones de cabeza
de ganado de Brasil, se ha transformado en el mayor exportador de carne, no
se venden en el MERCOSUR.
El Uruguay, por la dimensión mínima de su mercado
interno, sólo crece si exporta; y sólo exporta si tiene acuerdos
comerciales con grandes mercados. ¿Por qué vendemos el 73% de lo que
producimos de carne a los Estados Unidos sin acuerdo bilateral, siendo
libres de aftosa con vacunación? Por la muy simple razón de que el
Presidente Bush así se lo ordenó a sus ministros responsables. Y delante
nuestro, en su español, dirigiéndose a Condoleezza Rice, le dijo,
"Señorita Arroz: fix that". Y ese fue el mecanismo a través del
cual el Uruguay está colocando 200 mil toneladas de carne en los Estados
Unidos y es el tercer exportador después de Australia y de Nueva Zelandia.
¿Por qué alcanzamos un acuerdo de libre comercio con
México? Porque el Brasil solicitó la suspensión de la Cláusula 32, que
él mismo había propuesto para negociar su acuerdo con México, lo que nos
permitió concluir el nuestro. Creo, por lo tanto, que son legítimos los
intereses de los dos grandes países -Brasil y Argentina- en las
negociaciones con Europa y con el ALCA, así se lo he manifestado al
Presidente Lula, así se lo he manifestado al señor Celso Amorím, que ha
llegado a decirme que yo soy más radical que él, porque yo le he dicho que
no se puede admitir que nos vendan teléfonos para venderles naranjas.
Pero eso no quiere decir que los países pequeños, como
Paraguay y como el Uruguay, podamos plantearle al MERCOSUR ciertas formas de
libertad para acordar y negociar acuerdos bilaterales con independencia, en
rubros que por otra parte, no mortifican a las grandes naciones que lo
integran este MERCOSUR.
Pensemos, ¿en qué medida el acuerdo con México ha
perjudicado a la Argentina o ha perjudicado al Brasil? En ninguna medida.
Para nada lo ha perjudicado. ¿Y qué significa para el Uruguay? Significa
colocar, entre México y Estados Unidos, nada más ni nada menos que el 50%
de toda la producción láctea del Uruguay. Los cambios ocurridos en la
distribución de nuestros mercados, muestran claramente que al abrirlos los
productos nuestros son mucho más fácilmente colocables en el mundo, por su
calidad y competitividad. No sólo mejoramos nuestra economía por la única
vía posible y real, sino que además afianzamos nuestra independencia, como
lo hemos hecho con China, con Irán y con la India. Dado que es un hecho
irreversible la forma por la que las comunicaciones han transformado la
realidad, globalizándola en tiempo real, haciendo que cada cosa suceda en
todo el mundo al mismo tiempo, resulta de ello que la competencia que se ha
instalado en toda cosa, supone la necesidad de excelencia para mantenerse en
el mercado y ser exitoso.
La excelencia no se logra sin un conocimiento cada vez
más importante, ello exige centros de formación superiores altamente
desarrollados que apunten a crear conocimientos. En oportunidad de la
reunión de Brasilia, cuando se festejaron los 500 años del descubrimiento
de esa nación, el Uruguay, a través del Canciller y del Ministro Cáceres,
propusimos la constitución de dos entidades. La primera, la de crear
centros científicos comunes, poniendo como ejemplo lo que podríamos hacer
en el orden alimentario, donde el MERCOSUR se ha transformado en un
formidable generador de alimentos sanos, lamentablemente, no tuvimos éxito.
Hoy ofrecemos al MERCOSUR, con la colaboración de Francia, el primer
Instituto Pasteur a instalarse en América, cuya piedra fundamental se
colocará el próximo sábado, junto a la Facultad de Ciencias.
En nuestro Continente tenemos una creciente suma de
instituciones, todas con el título de cumbres, y no nos hemos dado el
tiempo para desarrollar nuestro propio conocimiento. Formamos la gente,
pagamos los créditos y luego nos llevan el capital humano. A nosotros, ya
nos han sacado dos ministros en los últimos cuatro meses. La crisis,
íntegramente que se llevó buena parte de nuestro tiempo, no nos permitió
cumplir a cabalidad con esos propósitos.
El Instituto Pasteur es sólo un ejemplo de que el
MERCOSUR podría hacer con mucho más provecho para nuestra independencia,
para nuestra identidad, que las numerosas declaraciones que he firmado al
cabo de estos cinco años.
En este esfuerzo de apertura hacia las áreas
tecnológicas, la India está presente entre nosotros a través de la
Empresa Tata Consultancy que opera desde la Zona América, y cuyo
representante, el señor Rosman, nos acompaña aquí, y que tanto está
haciendo por la creciente participación y adelanto científico y
tecnológico del Uruguay. Estamos colaborando con esa empresa, con el
Ministerio de Educación, con todos los centros de enseñanza nacionales, un
programa que alcance la educación de sistemas y formación de sistemas a
los niveles de Primaria, Secundaria y Enseñanza Superior. La capacidad
técnica disponible a nivel de las necesidades del mercado no es suficiente,
fundamentalmente en cuanto al número de jóvenes que la futura demanda
reclamará. Si en el futuro se continúa este esfuerzo, el nivel general del
conocimiento ofrecido mejorará sensiblemente, cambiando los parámetros
ocupacionales y de productividad en el país.
Finalmente,
se ha hablado con insistencia en el país de cambio, y nosotros también lo
hemos hecho alguna vez en esta sala, diciendo que lo único permanente es el
cambio. Quizás la expresión más adecuada es la adaptación permanente de
la sociedad a las nuevas realidades, más que el cambio, la adaptación a
las nuevas realidades. Para ello el esfuerzo más importante que debemos
hacer es dejar de mirar el pasado. El ejemplo más evidente y más simple, y
más al alcance de todo el mundo para analizar esta situación, nos lo da
cuando miramos los partidos de fútbol que se juegan en el Uruguay, no nos
hemos adaptado a las nuevas formas para hacer lo mismo, no nos hemos
adaptado a las nuevas formas para hacer lo mismo. Seguimos rehuyendo al
presente, seguimos buscando culpables, de por qué no nos va mejor, seguimos
calculando cómo les va a ir a los otros en sus encuentros para ver si nos
dejan alguna chance. ¡Oh, cosa triste! Nos negamos a reconocer esa
necesidad de adaptarnos a las nuevas prácticas que nos permitan competir.
Estamos permanentemente asomándonos a ese mundo mágico del ayer que no
conocimos, que imaginamos como el mejor, con el que soñamos y que
permanentemente se nos ofrece, y detrás del cual marchamos llenos de
ilusión y esperanza que se transforma finalmente en frustración.
La prosperidad de fines del siglo XIX y de comienzos del
siglo XX se logró en un mundo globalizado y abierto, con una economía
totalmente integrada y de cara a Europa, de mucho más libertad económica
que la actual, con un Estado mucho menor, con una mínima participación del
mismo en los servicios públicos esenciales que funcionaban y llegaban a la
hora.
Se constituyó con una economía regida por los mismos
elementos que nos han permitido crecer: una férrea disciplina fiscal y una
clara política monetaria. Necesitamos desenvolver, pues, una economía
abierta que compita. Las corporaciones, los monopolios, los espacios
cerrados, tanto intelectuales como materiales, son agentes de pobreza, de
atraso, y contribuyen a la frustración de los pueblos y por cierto al
debilitamiento y descreimiento de la democracia.
El Uruguay no tiene, hasta ahora, ni petróleo, ni gas.
El Uruguay no le ofrece al mundo 55 millones de toneladas de soja como
Brasil, ó 100 millones de toneladas de granos como la Argentina. El Uruguay
sólo se tiene a sí mismo, amén del enorme capital de amigos y del respeto
que ha sabido generarse por su conducta. El Uruguay sólo crecerá y será
un mejor destino para los que aquí viven y para los que volverán, si se
anima a integrarse al mundo. Cinco años de crecimiento en el camino que
hemos emprendido, en el sólido camino que le damos al próximo gobierno, no
sólo nos transformará en un país más rico, sino, lo más importante, en
un país más justo, con más oportunidades para todos.
El Uruguay debe apostar a la excelencia de su conducta, a
la calidad de su conocimiento, al cumplimiento de sus obligaciones, a la
certeza de sus reglas, a la vigencia de sus leyes, al respeto de la
Justicia, a la suma de valores que dieron origen a nuestra civilización, y
con ello al fortalecimiento de nuestra identidad, para poder decir con Don
José Batlle y Ordóñez "Podemos hacer del Uruguay un pequeño país
modelo". Muchas gracias.
RESPUESTAS DEL PRESIDENTE DE LA REPUBLICA, JORGE BATLLE,
A LAS PREGUNTAS REALIZADAS POR LAS PERSONAS PRESENTES EN EL ALMUERZO DE LA
ASOCIACIÓN DE DIRIGENTES DE MARKETING (ADM)
8/12/04
MODERADOR: Hay muchas que hablan de la crisis, comienzan
preguntándole como hombre inteligente. Usted ha reflexionado, sobre lo que
ha ocurrido durante la crisis, durante estos cinco años. Le preguntan: ¿si
pudiera ir cinco años atrás, qué cambiaría de lo que hizo o decidió, aquello
que estaba lógicamente -acá aclara la pregunta- bajo su control?
PRESIDENTE BATLLE: En primer lugar los hubiera llevado
Mulford antes de salir del Uruguay. Después no había mucha cosa más para
hacer, el Banco de Galicia cumplió con sus obligaciones, depositó, entregó,
devolvió 500 millones de dólares y cuando quiso traer el dinero que tenía
depositado en los Estados Unidos, el señor César Rodríguez Batlle habló con
Remes Lenicov para poder traer el dinero y la Argentina no lo pudo facilitar
por circunstancias de su situación personal, de la Argentina, naturalmente,
absolutamente comprensible y el Banco dio quiebra. Pero, el Banco dio
quiebra no por que no quisiera cumplir con sus obligaciones, el Banco de
Galicia, que hoy está de nuevo trabajando, sino que dio quiebra por esa
imposibilidad de devolver todos los depósitos que en la corrida se le
plantearon, cosa diferente con el Banco Comercial.
MODERADOR: Presidente, hay muchas personas que preguntan,
lo consultan esta tarde ¿por qué estas cifras que usted manejó, cifras que
las califican de positivas en su gestión de gobierno, no fueron difundidas
ampliamente a todo el pueblo ante la continua campaña negativa que su
gobierno recibió?
PRESIDENTE BATLLE: Los gobierno hacen lo que deben hacer,
no para hacer bulla, para cumplir con sus obligaciones.
MODERADOR: ¿Eso incluye más allá de la crisis todo el
periodo, Presidente?
PRESIDENTE BATLLE: Perdón....
MODERADOR: ¿Eso incluye más allá de la crisis todo el
periodo? Es decir, el hecho de comunicar algunas de las acciones que el
gobierno llevó adelante.
PRESIDENTE BATLLE: Mire, sabe una cosa, cuando un enfermo
tiene 38, y usted le dice que bajo el impuesto del BPS a la industria, para
mejorar la situación de la industria, y al día siguiente el enfermo tiene
39, entonces usted le dice que bajo el impuesto a los fletes, el impuesto a
los taxímetros, el impuesto a la hotelería y el enfermo tiene 40. Y después
le dice que usted resolvió el problema de la fruta y la verdura para que
pudiera venderse más, el enfermo tiene 41, la repuesta que le da el
individuo es: "para que me sirve lo que hace si cada día estoy peor" Ahora,
si no hubiéramos hecho lo que hicimos, no estaríamos contando el cuento.
Nosotros lo que hicimos fue apagar incendios, todos los incendios posibles
mientras tratábamos de tramitar con la ayuda de quienes dije, la soluciones
de fondo. O sea, poníamos cataplasmas todos los días para tratar de resolver
las soluciones de fondo. Y eso nos obligó a hacer cosas que no hubiéramos
querido hacer, porque a nosotros la gente del Banco Comercial nos chantajeó,
sino no hubiéramos tenido que firmar lo que firmamos. Nos chantajeó porque
nos puso el revolver en la nuca y nos pegó un tiro, y eso es una cosa que
tenemos que saberlo en el Uruguay para no olvidarlo.
MODERADOR: Cuando le preguntan en su análisis de la
crisis, usted ha destacado reconocer la labor y apoyo de distintas
personalidades uruguayas y extranjeras. Un participante de este almuerzo lo
consulta ¿que rol entiende usted ocupó? y ¿qué importancia jugó? en este
partido para salvar la crisis el ex Ministro de Economía, el doctor
Atchugarry.
PRESIDENTE BATLLE: ¿El doctor...?
MODERADOR: Atchugarry....
PRESIDENTE BATLLE: El doctor Alejandro Atchugarry, como
el doctor Alberto Bensión y como el señor Isaac Alfie, cumplieron cabalmente
con su cometido. Atchugarry tuvo una gran tarea para la que era
absolutamente insustituible, hacia el marketing político. Atchugarry le dio
al país un ámbito de confianza, un ámbito de tranquilidad, le permitió,
entonces, a Davrieux, a Alfie, a Julio de Brum y a Delamea, a Hugo Fernández
Faingold y a Carlos Sténeri, trabajar incansablemente en los Estados Unidos
con los amigos que he referido, para resolver la crisis. Su participación
desde ese punto de vista, no solamente era invalorable, sino era
insustituible. Y así yo lo manifesté a Alejandro, porque nos reuníamos todos
los lunes con él, para comentar las cosas económicas, y cuando a raíz de la
resolución del Directorio del Partido Nacional, el día que iba a salir para
los Estados Unidos, Alberto me comunicó que él no podía ser más Ministro,
porque no tenía confianza del Partido Nacional, yo lo llame a Atchugarry y
le dije: "Atchugarry es usted" Y cuando llegó el momento de que Atchugarry
en un entendimiento tácito con todos nosotros iba a ser nuestro candidato a
la Presidencia de la República, nos juntamos con Atchugarry y resolvimos
entre los dos que fuera Isaac, que fuera el Lito mejor dicho. Entonces sin
que el Lito supiera, Atchugarry lo mando buscar al Lito desde su celular,
vino a casa, nos sentamos, estaba Atchugarry allí, yo acá, al Lito lo
sentamos en la silla esa de enfrente y le dijimos: "Lito hemos decidido que
usted es el Ministro próximo de economía" Entonces nos dijo voy a hablar con
mi señora. Y yo le dije: "está equivocado, comuníquele a su señora que usted
ya es el Ministro y punto"
MODERADOR: Presidente ¿que análisis y que balance a la
luz después de estos años tan difíciles de la crisis, le cabe hacer de
cuando el Partido Nacional abandonó la coalición?
PRESIDENTE BATLLE: Yo creo que situación del Partido
Nacional en cierta medida fue una situación meramente de carácter electoral.
Yo debo decir que la peor parte de la crisis el Partido Nacional la bancó
con el gobierno en el Ministerio. Así que todos los ajustes que hicimos,
todos los ajustes, venía .... este primero aterrizó Alberto con un ajuste
del 10%, después aterrizó Alejandro con un ajuste del 15%, y después
aterrizó Lito con otro ajuste que no se cuanto por ciento. Durante todo ese
tiempo los Ministros del Partido Nacional cumplieron a rajatabla, todos,
absolutamente todos. Y cuando se alejaron del gobierno, muchos de ellos se
alejaron sintiendo que habían hecho, participado del tiempo del esfuerzo
mayor y cuando venían la "vacas gordas" en vez de las "flacas", no podían
salir a recoger los beneficios a lo que ellos habían aportado su presencia y
su desgaste natural. Porque cuando un gobernante tiene que hacer cosas para
resolver problemas, lo que tiene que hacer es subir la cuesta, no bajar con
viento en popa. Así que se portaron y cumplieron como corresponde a
ciudadanos que sienten y respetan los problemas de la República.
MODERADOR: Usted habló en él almuerzo entre otros asuntos
del MERCOSUR, hay una apuesta de las autoridades del gobierno electo de
darle un poco más de fuerza al Mercado Común. Le pregunto: ¿volver a volcar
la mayoría de la exportaciones a la región? ¿cómo lo ve?
PRESIDENTE BATLLE: Absurdo. No hay posibilidad alguna. No
existe posibilidad alguna de forzar a una economía libre como la brasilera y
como la Argentina que nos compren bienes que no precisan. Además, supóngase
que todos nosotros del MERCOSUR, queremos crecer, que crezca el Uruguay,
crecer el doble del Uruguay, es crecer de tres mil millones de dólares a
seis mil. ¿En que puede crecer el Uruguay de tres mil millones de dólares a
seis mil? Qué es lo que cualquier uruguayo que agarre usted por la calle que
no sepa nada de economía, si le pregunta: ¿usted cree que el país puede
crecer? y le dice sí, puede crecer. ¿En qué puede crecer de tres mil a seis
mil millones de dólares por año? ¿en qué productos? en los productos del
agro. Y usted cree que le vamos a vender a la Argentina, carne, manteca,
queso, soja, trigo, maíz, cuando produce lo mismo que nosotros, mucho más y
en muchos rubros mucho mejor. Compañero.
MODERADOR: Presidente, me queda poco tiempo para todas
las preguntas que hay, le hago simplemente dos puntuales.
PRESIDENTE BATLLE: Usted ponga el tiempo necesario porque
yo me estoy yendo y tengo tiempo por cinco años más.
MODERADOR: Usted habló de cambios, de oponerse a los
cambios o de vivir en el pasado. Allí encuadra por ejemplo la...
PRESIDENTE BATLLE: No, yo no hable de oponerme a los
cambios. Yo dije que había que cambiar la denominación de cambios por
adaptación. Porque cuando se habla de cambios y se ha dicho "cambios" y al
mismo tiempo se dice por el señor Ministro Astori, que va a seguir todo como
está, yo no creo que haya él pensado en que el cambio no significa algo
diferente a lo que la palabra "cambio" en el diccionario quiere decir, él
quiere decir "adaptación" y estoy facilitando la tarea.
MODERADOR: Donde... cómo encuadra por ejemplo el tema de
las protestas....
PRESIDENTE BATLLE: De qué.....
MODERADOR: ¿Como encuadra el tema de las protestas de
SUTEL...?
PRESIDENTE BATLLE: De qué....
MODERADOR: De las protestas de SUTEL contra el desembarco
de América Móvil en el Uruguay.
PRESIDENTE BATLLE: Es una propuesta a favor del monopolio
de MOVICOM.
MODERADOR: Presidente no tengo más tiempo. Usted ha dicho
en más de una oportunidad que no va a asumir la banca.
PRESIDENTE BATLLE: No voy a asumir la banca.
MODERADOR: ¿Qué va a hacer Presidente?
PRESIDENTE BATLLE: Tengo 77 años y cuatro nietos que hace
cinco años que no veo.
MODERADOR: ¿Se va a la Estación Carnelli?
PRESIDENTE BATLLE: No señor. Sabe porque en la Estación
Carnelli, lo que pasa que he averiguado ahora: no se sabe para donde sale en
tren, capaz que sale para Rivera.
MODERADOR: Muchas gracias.
PALABRAS DEL PRESIDENTE DE LA ASOCIACIÓN DE DIRIGENTES
DE MARKETING DEL URUGUAY, JORGE ABUCHALJA
8/12/2004
Señor Presidente de la República, doctor Jorge Batlle,
bienvenido; señores Ministros de Estado que hoy nos acompañan,
bienvenidos; autoridades nacionales; Señora Mercedes Menafra de Batlle,
bienvenida; un gusto, un honor; señores Embajadores y representantes de los
países amigos; señores invitados especiales. Vicepresidente de la Reserva
Federal de Estados Unidos de Norteamérica, señor Terry Checki;
ex-Presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, señor Bill
McDonough, bienvenidos también. Señores presidentes y representantes de
las cámaras sectoriales y asociaciones profesionales que nos acompañan;
señores de los medios de comunicación; autoridades de la Universidad de la
Empresa; queridos socios; señoras y señores: reciban por mi intermedio, en
nombre del Consejo Directivo de la Asociación de Dirigentes de Marketing
del Uruguay, una cálida bienvenida y un fuerte abrazo, fundamentalmente
porque hoy es el último almuerzo de trabajo de este Ciclo 2004, y además,
en este almuerzo de trabajo también es el cierre de todos los eventos
conmemorativos de nuestro 60º Aniversario.
Así que nos vamos a despedir transitoriamente ya pasando
esta fiesta anual, así que hasta el próximo año. Pero un año 2004 muy
importante para nuestra Institución, muy importante para el país, muy
importante para todos nosotros.
Respecto a nuestra institución, no puedo decir la
cantidad de eventos que se han realizado, las misiones al exterior, los
contactos; sólo puedo decir sin temor a equivocarnos, casi 25.000 personas
pasaron por todos nuestros eventos.
Lo otro importante de este año en particular fueron los
festejos de 60 años de historia, 60 años de historia que han demostrado
muchas cosas que se han hecho a través de esta institución. Y además,
este año que culmina, culmina también con elecciones nacionales, lo que
consolida y ratifica la condición democrática de nuestro pais, lo que nos
enorgullece plenamente, no sólo como institución sino como ciudadanos de
este pais.
Por lo tanto, para cerrar nuestro ciclo, lo que sí
queremos manifestarles es a las autoridades nacionales, muchísimas gracias
en nombre de nuestra institución por el apoyo recibido, incondicional en
todo sentido.
Señores embajadores y miembros del cuerpo diplomático:
reciban también nuestro agradecimiento por acompañarnos, por recibirnos, y
por apoyarnos.
Señores presidentes y representantes de las cámaras
empresariales y asociaciones profesionales, reciban también nuestro
agradecimiento por el apoyo recibido.
Los medios de comunicación están adentro de nosotros
mismos. Ustedes son los que divulgan y comunican nuestros eventos y todo lo
que pasa a nuestro alrededor. Por lo tanto, para ustedes también un
especial agradecimiento. Y a todos los socios y a todos quienes nos
acompañan, todo lo que hacemos, es por ustedes, es por nosotros, pero es
fundamentalmente por el país.
Este 2004, también, el próximo marzo culmina un
quinquenio del gobierno. Por lo tanto, si tenemos buena memora, la peor
crisis de nuestro país la vivimos en este quinquenio. La peor crisis, o una
de las peores crisis también de la humanidad, se vivió en este quinquenio,
el 11 de setiembre y el 11 de marzo, y todos los otros aconteceres están
presentes.
Sin embargo, y felizmente, hubo quienes tambien apoyaron
la recuperación de nuestro país, y esos señores fueron condecorados por
el Presidente de la República, y si hoy nos acompañan bien vale la pena
tener buena memoria y sumarnos a ese reconocimiento. Por lo tanto, al señor
Vicepresidente de la Reserva Federal, el señor Terry Checki, al
ex-Presidente de la Reserva, Bill McDonough y al señor Embajador de los
Estados Unidos, Martin Silverstein, nuestro reconocimiento publico por haber
sido condecorados y por el apoyo recibido.
Y ahora sí me corresponde decirles a todos ustedes que
cuando ingresamos en plena crisis, cuando nadie sabía hacia dónde ir,
cuando nadie sabía qué nos venía por adelante, nuestra institución
levantó su bandera de "Poder es querer", no "Querer es
poder". Dice "Poder es querer" porque para poder hay que
poner mucho esfuerzo, hay que poner mucha creatividad, hay que poner mucha
inteligencia. Y sobre todo, integridad y dedicarse a un objetivo, que era
mantener el país con ánimo. Y eso lo logramos: estamos muy contentos. Pero
además, felizmente, orgullosamente, nuestro actual Presidente de la
República, el doctor Jorge Batlle, al que conocimos como persona, al que
conocimos como legislador, al que conocimos como candidato a la Presidencia
de la República y hoy es nuestro Presidente, felizmente gracias a su
esfuerzo, al poder es querer, de él y de todo su equipo de trabajo, hoy
podemos decir, y cerrar un año, que no sabíamos a dónde íbamos, pero
señor Presidente, nos deja un país que lo podemos seguir soñando, un
país que lo podemos seguir construyendo, un país que nos sentimos
orgullosos de formar parte de él.
Por lo tanto, y además, tiene la caballerosidad y la
dignidad de venir a cerrar este evento, porque después, en marzo se va a
entregar el gobierno. Señor Presidente: mi orgullo, mi agradecimiento y la
bienvenida para acá de los micrófonos, no sin antes, como es nuestra
costumbre, con algo muy pequeño, para que no se enoje, testimoniar su
presencia.