20/12/04

PALABRAS DEL SECRETARIO DE LA PRESIDENCIA, RAÚL LAGO, EN EL ACTO DE ASUNCIÓN DEL NUEVO MINISTRO DEL INTERIOR, ALEJO FERNÁNDEZ CHÁVES. 20/12/2004

SECRETARIO LAGO: Señor Ministro del Interior, doctor Alejo Fernández Cháves, señor ex Ministro del Interior, doctor Daniel Borrelli, señores Ministros, escribano Guillermo Stirling, señor Intendente, señores Legisladores, Jefes de Policía, funcionarios policiales y autoridades militares.

Este que es un acto naturalmente sencillo, como impone la austeridad republicana, y que se produce por distintas razones, muchas veces las más de ellas por razones políticas, porque el Ministro, que es dentro de las instituciones el fusible que permanentemente es el que responsabiliza el Poder Ejecutivo frente al Poder Legislativo, pero en este caso el doctor Borrelli se aleja del Ministerio del Interior por razones personales, para iniciar otra actividad a la que él estuvo ligado muchos años anteriores a su pasaje -yo diría- por el Instituto Policial, de acuerdo a su formación y a su vocación, él vuelve a la actividad con la cual se inició ya hace años.

Yo quisiera destacar que a lo largo de toda esta trayectoria dentro del Instituto Policial, como Jefe de Policía, como Subsecretario del Ministerio del Interior, como Ministro del Interior, el doctor Borrelli ha cumplido una labor digna de destacarse.

Yo creo que, además, se ha consustanciado con el Instituto Policial, que muchas veces -como hace pocos días él lo decía- realmente no lo valoramos en toda su dimensión; es como ocurre con muchas cosas, solo sentimos o valoramos esas cosas cuando las necesitamos, y ha sido -naturalmente- en la defensa de los buenos policías alguien que ha estado en primera línea.

Yo quiero, además, destacar la importante labor del Ministro Borrelli durante el periodo electoral; durante incluso el proceso y el acto electoral en sí, que es un acto electoral que se realizó con todas las garantías y que además nadie puede decir o puede objetar ninguna de las medidas que se adoptaron en ese periodo y que el acto en sí fue limpio, claro, sin violencia, como naturalmente lo realizan los uruguayos. Y esto es mérito precisamente de los ciudadanos uruguayos, es mérito de los partidos políticos y de quienes los representan. Es mérito del Instituto Policial, pero es mérito también de quien tiene la responsabilidad política de conducir este instituto que es el Ministro del Interior, y en este caso fue el doctor Borrelli.

Por eso, hoy, cuando se despide el doctor Borrelli de esta casa y de este Ministerio, nosotros le decimos que realmente puede retirarse con la satisfacción del deber cumplido, y desearle además los mayores éxitos en las nuevas tareas que emprende, también, a partir de hoy.

Asume el doctor Alejo Fernández Cháves, que también le corresponden muchas de las cosas que venía diciendo anteriormente, porque estaba en esta casa como Subsecretario del Ministerio del Interior. Y le va a corresponder, además, conducir a este Ministerio en la etapa de transición, que realmente se realiza -como puede comprobarse muy fácilmente- otorgando toda la información que se requiere, facilitando todas las dudas o todas las preguntas, o todos los análisis que quiénes van a asumir la responsabilidad de conducir al país lo han venido solicitando; y entonces, también desde esta casa, se procura trabajar por la misma forma y el doctor Alejo Fernández Cháves va a tener la responsabilidad, y nadie como él formado en las disciplinas jurídicas y de larga trayectoria en la historia política, para conducir esta etapa que aunque corta no por eso deja de ser difícil. ¡Vaya si conducir este Ministerio siempre genera dificultades! Porque, naturalmente, es un Ministerio en donde hay siempre una sensibilidad especial y en donde la actuación eficaz en todos los aspectos del Instituto Policial siempre se mira con especial detención.

Tenemos la seguridad de que por su trayectoria y su forma de ser el doctor Alejo Fernández Cháves va a conducir esta breve etapa, pero muy importante etapa, como lo ha hecho él en otras actividades de su vida.

El mejor de los éxitos doctor Alejo Fernández Cháves, queda usted impuesto en el cargo de Ministro del Interior, en nombre del Poder Ejecutivo que así lo estableció.

MINISTRO FERNÁNDEZ CHÁVES: Señor Secretario de Presidencia de la República, señores Ministros, Yamandú Fau, viejo compañero de la Cámara, doctor Didier Opertti, ex Ministro también del Interior, ex Ministros doctor Raúl Iturria, escribano Guillermo Stirling, y hoy flamante ex Ministro, mi querido amigo doctor Daniel Borrelli; señores Subsecretarios, señores Senadores, señores Diputados de todos, afortunadamente, de todos los partidos políticos que aquí están presentes; señor futuro Subsecretario del Ministerio de Defensa, señores futuros Legisladores, señores miembros del Tribunal de lo Contencioso Administrativo, señores miembros de Tribunales de Apelaciones, señores miembros del Poder Judicial; señores del Patronato del Encarcelado y del Liberado, que tan importante misión cumple en la sociedad, doctora Jacinta Balbela, ex Ministra de la Suprema Corte de Justicia; señor Director General de Secretaría del Ministerio del Interior, señor Director de la Policía Nacional, señores Jefes y Subjefes de Policía, señores Directores y Subdirectores Nacionales, Oficiales Generales Superiores, Jefes y Subalternos y personal Subalterno de la Policía Nacional; autoridades nacionales, mis queridos amigos intendentes, de Soriano, La Paz, que tantos años fuimos La Paz Correa que fuimos compañeros tantos años en otros ámbitos, mi querido amigo el Intendente Municipal de Maldonado, el ingeniero Enrique Antías, medios de Prensa y amigas y amigos:

Estos actos formales tienen realmente esta larga introducción que en definitiva uno le significa también él regocijo de saber que el camino que uno a hecho en la vida, en definitiva, le a redituado este capital, que es el único que uno lleva y por lo menos del que yo me siento muy orgulloso, que es el de la amistad, que es el de darse el uno para el otro.

Yo tendría que empezar estas palabras, diciendo lo mismo que dije cuando asumí como Subsecretario, pensando en ese instante culminar con ese cargo mi carrera dentro de la función pública; los azares de la vida y de la actividad pública me hacen hoy asumir por estos meses este Ministerio y buena parte de eso tengo que recordarlo, porque, en definitiva, éste es para mí uno de los momentos naturalmente más emotivos que puedo tener porque está significando -desde el punto de vista personal, naturalmente- haber accedido a la titularidad de este Ministerio tan importante para la vida del país.

Y es en los agradecimientos, a todo lo que uno ha vivido, a todo lo que han hecho por uno, y que comienza desde los padres, la familia, los amigos, los compañeros políticos, yo reivindico sí ser un hombre de la política y ser un producto de la política, y entonces reivindico eso y reivindico, agradezco especialmente lo que ha sido toda mi actividad política y todos los lazos que pude dejar en esa actividad política con gente de todos los partidos y con todos los partidos, en definitiva.

Agradezco, naturalmente, a mi partido y a mi grupo político que me ha proyectado hasta este cargo y señalo especialmente el recuerdo que tengo en este instante, a todos y cada uno de los amigos que por todo el país y con todos los signos ideológicos y con todas las expresiones distintas de voluntad que cada uno de los seres humanos tenemos, en definitiva, hoy están también junto a mí.

En estos meses que tendremos en el Ministerio y donde me adelanto a decir que quien me va a acompañar en la Subsecretaría va a ser la hoy Diputada escribana Diana Saravia, que justamente hoy no puede estar con nosotros por un problema de salud, pero que en los próximos días va a asumir, en lo que será sin duda la primera oportunidad en la que habrá una dama en la Subsecretaría del Ministerio del Interior. Pero ella va a ocupar ese lugar no sólo por ser dama, que ya eso es muy importante, sino que va a ocupar ese lugar por su capacidad y por lo que es su ordenamiento permanente en todas las actividades de la vida.

Decía que en estos escasos meses que vamos a ejercer el Ministerio, continuaremos naturalmente lo que ha sido el camino que han señalado previamente el escribano Stirling y luego el doctor Borrelli.

Confieso que yo, por mi trayectoria con 32 años de abogado y luego casi 10 años de diputado, trabajando en la Comisión que tiene directa relación con el Ministerio del Interior, pensaba que tenía un conocimiento absoluto y total de lo que es el Ministerio del Interior, no era así y en estos meses que he estado en la Subsecretaría, el doctor Borrelli -con la generosidad que ha tenido y el dominio de todos los temas, especialmente en los temas específicamente policiales- me ha enseñado muchísimo, tengo un agradecimiento muy especial.

Me parece que es importante decir que vamos a seguir en la misma ruta, nos tocan momentos naturalmente difíciles, difíciles no porque uno prevea ninguna crisis, difíciles porque todo tipo de trasiego de gobierno, naturalmente acá se trata de un gobierno de origen absolutamente democrático como el nuestro, que va a entregar su poder al gobierno, a otro que ha sido también elegido en forma absolutamente democrática, pero de cualquier manera toda entrega de poder ocasiona que uno tenga que tener los contactos necesarios en la transición que se produce al asumir un gobierno.

Vamos, a su vez, a insistir en lo que es toda la temática de la seguridad. No nos olvidemos que tenemos ahora, ya, desarrollándose lo que es el plan "Verano Azul" y lo que es plan "Camino Seguro" de la Caminera, que comprende buena parte de este país y que hace a lo que es el elemento fundamental en el turismo: el turista cuando piensa ir a un país no se fija si va a haber una fiesta más o una fiesta menos, de lo que sí se fija primero es que haya seguridad y eso es lo que tenemos que brindarle nosotros a todos los turistas.

Siempre tenemos la problemática carcelaria y vamos a ver si en estos dos meses podemos disponer algún tipo de centralización en la actividad carcelaria, que no sigamos con este sistema donde hay 20 o 21 autoridades carcelarias distintas en el país; tiene que haber alguna centralización que permita tener una coherencia mayor en la materia carcelaria.

En definitiva, procuraremos que sigan funcionando tan bien como están funcionando en este momento una cantidad de servicios del Ministerio del Interior, como Identificación Civil, como lo que es éste lugar donde estamos acá, conocido normalmente como la Caja Policial, que en realidad es mucho más que la Caja Policial; que funcione también la Sanidad Policial de la mejor forma posible.

Y, en definitiva, que el Ministerio del Interior, que es el corazón de un gobierno, funcione realmente de la mejor manera posible para que el nuevo gobierno tome a este Ministerio, digamos, en forma como todos aspiramos, como está en este momento, en la mejor forma posible.

Este es nuestro propósito. Yo sé que voy a tener la colaboración absolutamente de todos los miembros de este Ministerio; que voy a tener, especialmente, la colaboración de lo que son las autoridades policiales, que vamos a tener la colaboración de todos los Directores Nacionales y de todos los Jefes de Policía, que tan ejemplarmente dirigen la Policía Nacional y, en definitiva, creo que todos juntos podremos decir, dentro de poco más de dos meses, que habremos cumplido con una tarea muy breve, pero que -en definitiva- tiene esa trascendencia de ser la de un cambio de gobierno con todo lo que ella implica.

Es nuestra obligación, es mi obligación como persona, pero es la obligación de este gobierno y es la obligación de mi partido, entregar este gobierno de la mejor forma posible, entregarlo con la máxima dignidad y a ello, naturalmente, estamos todos comprometidos, y yo el primero de todos. Muchas gracias.

PALABRAS DEL SALIENTE MINISTRO DEL INTERIOR, DANIEL BORRELLI

BORRELLI: Señor Secretario de la Presidencia, señor Ministro del Interior, señores Ministros, señores Legisladores, señores Diputados, señor ex Ministro del Interior, escribano Guillermo Stirling, señores Oficiales Generales, Oficiales Superiores, Oficiales Jefes, Oficiales Subalternos y personal Subalternos de la Policía Nacional y de las Fuerzas Armadas en actividad y en retiro; amigos, familiares, invitados y medios de prensa:

Cuando uno se va no tiene que hablar mucho, tiene que despedirse, diríamos, lo más rápido posible y con el perfil más bajo. Me ha tocado estar diez años en el Instituto lo cual me ha dejado muchas cosas, muchas enseñanzas, muchas cosas buenas, algunas malas pero pocas, muy pocas que ya se han olvidado. Pero principalmente me han dejado muchas cosas buenas, muchas experiencias en años que el hombre obtiene una madurez casi completa, intelectual y moral, entre los 42 y los 52 años.

Pero, yo creo que en este caso es tiempo de agradecer, de agradecer primero al doctor Lago por las palabras que recién ha pronunciado, que mucho me halagan y que realmente me emocionan. Y luego tengo que agradecer a dos personas y a una institución; esas dos personas, en primer lugar, al señor Presidente de la República que me ha hecho el honor de haberme designado Ministro del Interior, uno de los cargos tal vez más dignos que pueda ocupar un ciudadano, uno de los cargos, sin duda, más difíciles, más complicados pero que también dejan una enseñanza importantísima. Por eso, mi agradecimiento mayor al señor Presidente de la República.

También quiero agradecer al aquí presente escribano Stirling, que me ha enseñado en casi seis años de conducción del Ministerio; que me ha enseñado cómo se debe trabajar en equipo, a mi que fui siempre un individualista y que tal vez nunca perdí esa función de individualista, y que tal vez la retomé luego cuando fui Ministro y apliqué otra vez mis conocimientos y mi formación individualista que me había dejado el Poder Judicial.

El escribano Stirling hizo todo lo posible para integrarme al equipo y lo logró, y trabajamos en equipo y me enseñó muchas cosas, entre otras y fundamentales, yo siempre digo que mis padres me enseñaron a ser honrado, a ser bueno y el escribano Stirling en su conducción tal vez me enseñó una cosa muy importante que es ser transparente, que en una función pública se debe ser transparente.

Y también quiero agradecer a otra persona, a Alejo Fernández Cháves, que en este corto período de nueve meses que he trabajado con él, lo ha hecho con una lealtad total, con un compañerismo total y que realmente me voy de este Ministerio con ganas de haber seguido trabajando con el mismo.

En realidad, le deseo muchísima suerte en esta etapa, muy corta, pero como decía el Dr. Lago, muy difícil en la transición de una etapa de un país, y sé que lo va a sacar adelante por su hombría de bien, por su persona, por su forma de encarar las cosas y por su formación jurídica.

Y por último tengo que agradecer a toda una Institución. En forma emocionada a toda una Institución. Desde el inspector general Suárez Segovia, que es el Director de la Policía Nacional, hasta el último Agente de Segunda recién ingresado, pasando por todos: los ejecutivos y los escalafones de apoyo.

Todos ellos me han enseñado a trabajar. Todos ellos me han transmitido un espíritu de Cuerpo que siempre me voy a llevar conmigo. Todos ellos me han demostrado que tienen valor cuando tienen que jugársela en circunstancias difíciles. Todos ellos me han demostrado que a veces tienen que decidir en pocos segundos sobre hacer un procedimiento donde se le va una vida a un particular, una vida de un delincuente, o la propia de ellos; y se le va, a veces si no se le va la vida, se le va la libertad, se le va su carrera y hasta se le va su familia.

Otra profesión más abnegada que ésta es muy difícil de encontrar. Otra profesión con más vocación que ésta es muy difícil de encontrar.

Hay familias enteras que a pesar de que pasan mal, que a pesar de que tienen dificultades para trabajar y a pesar de que tienen dificultades para vivir, quieren seguir siendo policías; hijos, nietos, hermanos, tíos, sobrinos, todos quieren seguir en la Policía.

Y eso es algo que hay que tomar con mucha atención y con mucha seriedad. Por algo será.

Por lo tanto, hoy voy y vuelvo a aquello que hice durante 15 años: a la tranquilidad, a la certeza de lo jurídico; al estudio tranquilo, meditado y equilibrado de un expediente; sin sorpresas, sin llamadas por teléfono a cualquier hora, sin sobresaltos, sin tener que mirar el diario a la mañana o escuchar la radio más temprano para ver qué pasó. Bueno, es otra forma de vida. Una forma de vida a la cual me había acostumbrado durante tantos años.

Hoy vuelvo a la tranquilidad del escritorio, pero esté dónde esté, todos los policías saben que allí me podrán encontrar, aunque sea para hablar algunas palabras y darles un consejo si es que lo necesitan.

De mi gestión no puedo decir nada. Fue muy corta, y, por lo tanto, solamente haré referencia -salvando las distancias, ¡por favor!- al Gral. Artigas, que el 1º de mayo de 1815 le dice al Cabildo de Montevideo: "el pueblo es Soberano y sabrá investigar las operaciones de sus Representantes". Muchas gracias.