05/10/04

El Ministro Opertti ratificó la independencia de la política exterior uruguaya, afirmando que "el Uruguay está alineado con una sola cosa: en su política exterior".

DECLARACIONES A LA PRENSA DEL MINISTRO DE RELACIONES EXTERIORES, DIDIER OPERTTI, EN EL EDIFICIO LIBERTAD
05/10/2004

MINISTRO OPERTTI: Yo les explico un poco cual es el propósito de este encuentro.

En el día de ayer y ha sido ampliamente difundido en al prensa de hoy, ha tenido lugar aquí en Montevideo un seminario organizado por el Encuentro Progresista-Frente Amplio-Nueva Mayoría, en donde el doctor Vázquez -el doctor Tabaré Vázquez- ha hecho referencia muy pormenorizadas a la política exterior y a la Cancillería; en particular a la Cancillería.

Yo quisiera en mi condición de Canciller, representante por lo tanto del gobierno de la República y responsable -junto con el Presidente de la República- de la conducción de las relaciones externas uruguayas, referirme solo a tres temas: "el Uruguay en el MERCOSUR"; "las relaciones del Uruguay con los Estados Unidos"; y, a lo que se ha dado en llamar en ese encuentro o seminario al que aludo, el llamado "alineamiento".

Comienzo por lo primero, "el Uruguay en el MERCOSUR". Uruguay en el MERCOSUR ha tenido una actitud participativa, activa, responsable, de iniciativa permanente. Producto de esa iniciativa es sin duda y sin discusión, creo que de unos y de otros, la creación de la Secretaría del MERCOSUR como tal, iniciativa de cuño netamente uruguayo y la creación del Tribunal Arbitral del MERCOSUR, el Tribunal Único Arbitral del MERCOSUR con sede en Asunción. Ambos son órganos de lo que hoy está dotado el MERCOSUR, que no tenía y que hoy tiene, y ambos responden a iniciativas, a sendas iniciativas uruguayas. Por lo tanto, compromiso amplio, profundo, institucional con el MERCOSUR. Naturalmente, el MERCOSUR no constituye un modelo final, el MERCOSUR habrá que irlo mejorando y perfeccionando, y por eso hemos venido trabajando acuciosamente durante todos estos años en ese mejoramiento.

Segunda cuestión, "el tratado de protección de inversiones con los Estados Unidos".

El Uruguay tiene, ha celebrado tratados de inversiones, de protección de inversiones, con diversos estados. Lo ha celebrado recientemente con Finlandia, como es público y notorio, y acaba de ser aprobado en el Parlamento hace pocos meses con el voto opuesto del Encuentro Progresista, el voto en contra del Encuentro Progresista. Estos tratados de inversiones que el Uruguay celebra, lo hace para garantizar, para dar reglas de juego. Se ha dicho que nos hemos ido del MERCOSUR, nos estamos alejando del MERCOSUR al hacer este tratado de inversiones. Bueno, yo digo categóricamente que eso no es cierto y no lo es porque en el MERCOSUR no hay ningún protocolo, convenio, convención, tratado o acuerdo, que diga que sólo desde el MERCOSUR se pueden hacer tratados de inversiones.

Hubo dos protocolos, el de Buenos Aires y el de Colonia, para las inversiones extranjeras en el MERCOSUR, que ninguno de los dos contó con la ratificación de los Estados miembros del MERCOSUR, razón por la cual al no haberse aprobado esos instrumentos cada uno de los países del MERCOSUR puede celebrar con cualquier país del mundo el convenio de inversiones que desee o le convenga celebrar. Naturalmente, este convenio está recién inicialado, tendrá que ser firmado, luego de firmado tendrá que se pasado al Parlamento; el Parlamento ha sido informado porque yo he enviado personalmente a la Comisión de Asuntos Internacionales de la Cámara el proyecto de instrumento de este tratado de inversiones. De modo que obra en el conocimiento de los señores legisladores, por lo tanto se ha obrado dentro del derecho internacional y dentro de las normas de la trasparencia que debe primar en las relaciones entre dos poderes del Estado.

En tercer lugar me voy a referir al "Alineamiento". El Uruguay está alineado con una sola cosa: en su política exterior. Y lo he dicho y lo seguiré diciendo, cuándo y cómo y dónde corresponda, y en todo momento. El Uruguay está sólo alineado con el interés nacional. No está alineado ni con los Estados Unidos, ni con el Irán, ni con la China, ni con ninguno de los países de fuera de la región, ni de dentro de la región; ni de fuera, ni de dentro de la región, nuestra política exterior es una política independiente. Y ejemplos: poquitos días después del atentado a las Torres Gemelas, yo viajaba a Irán para celebrar acuerdos comerciales, cuando Irán estaba señalizado, era una situación internacional compleja desde el punto de vista de las responsabilidades que podían caber en el plano internacional por el atentado, el dramático y criminal atentado de las Torres. Independencia, acto de independencia, claro, definitorio.

Segundo acto de independencia, también definitorio. El Uruguay no ha firmado con los Estados Unidos ningún convenio al amparo del Artículo 98 del Estatuto de Roma, porque ha creído que nosotros por nuestro compromiso con la Corte Penal Internacional tenemos ya la base jurídica para actuar y no hay que modificarla, y nos hemos plantado en esa posición, con argumentos, con sustento, no de un modo voluntarista o caprichoso, sino de una manera orgánica, sustentable, fundada. Lo hemos hecho en todas las instancias. Alineamiento, por lo tanto, con nadie. Ni con los Estados Unidos, ni con Europa, ni con ningún país -reitero- de fuera o de dentro de la región.

Naturalmente, la política exterior como toda política es opinable y puede haber sobre ella interpretaciones y criterios diversos y no pretendemos tener nosotros el monopolio de la validez de la interpretación.

Pero hay cosas que son verdades y cosas que no son verdades. Tampoco es verdad que nuestra Cancillería esté cerrada hacia adentro y que mantenga una política de oropeles o de parafernalia, de gran boato público, cuando hemos hecho en la Cancillería el 15% de ajustes presupuestales; el único Ministerio que ha recibido, por imposición legal, una pauta de ajuste del 15%.

Pero, además, en el gasto. Hablemos de Cancillería metida hacia adentro, acabamos de celebrar hace apenas un mes un acuerdo con la Unión de Exportadores por el cual establecemos antenas comerciales en distintos consulados de ciudades en el exterior, con participación activa de la Cancillería.

Es una Cancillería presta a atender las demandas del comercio, de los exportadores, del sector productivo, del Estado.

De manera, pues, que ni metida para adentro, ni lujosa, sino austera; sin gastos excesivos ni superfluos, y ojalá que estas políticas que son de inserción de la Cancillería en el conjunto del Estado puedan mantenerse y profundizarse.

Quería solamente en este momento expresarles esto, porque siento la responsabilidad y la obligación de hacerlo, y estoy a la orden, naturalmente, de ustedes.

MINISTRO OPERTTI: Es una afirmación que no tiene ningún sustento. Nosotros no sólo no hemos sacrificado la relación con el MERCOSUR, trabajamos permanentemente en él y desde él; este sábado yo estaré -invitado por el Canciller Amorín del Brasil- en Río de Janeiro, para tratar con él y los demás colegas del MERCOSUR, nuestra negociación en curso con la Unión Europea.

Hemos participado permanentemente en todas las reuniones de trabajo dirigidas a la creación del Ouro Preto II, se habla de Ouro Preto II.

¿Ustedes saben quién comenzó a hablar de Ouro Preto II? Fue Uruguay en Puerto Iguazú; quien dijo, después de 10 años de Ouro Preto I, diciembre del 94, sería buena cosa pensar en un Ouro Preto II.

Si eso no es compromiso con el MERCOSUR, si eso no es integración, si eso no es la búsqueda de consensos razonables, sin desequilibrios, buscando que las asimetrías no nos perjudiquen, bueno, entonces yo no he entendido nada en mi vida ya un tanto extensa de lo que es la integración.

Naturalmente, repito, en estas cosas, como en otras muchas puede haber diversidad y como creo en la democracia, creo en la diversidad.

MINISTRO OPERTTI: Yo creo que las declaraciones de los Jefes de Estado del Uruguay, de la Argentina o de cualquier otro país, tienen la incidencia política que cada personalidad le imprimen a esas declaraciones. Pero el eje de nuestras relaciones internacionales, la gestión de nuestras relaciones internacionales, la negociación permanente, continua, de nuestras relaciones internacionales, en manos de la Cancillería, en manos del Ministerio de Relaciones Exteriores, en permanente consulta con el señor Presidente, no dicen eso. Dicen que tenemos relaciones fluidas, que nuestras Comisiones Binacionales funcionan, el tema de M’Bopicuá, que levantó mucha polvareda en su momento y que pudo haber puesto en riesgo una inversión importantísima finlandesa en el Uruguay de más de 1.000 millones de dólares, fue resuelto en el plano de la negociación bilateral. El tema de los neumáticos recauchutados fue resuelto con el Brasil de modo también negociado.

Es decir, tenemos simplemente los problemas del comercio propios de una relación que es profunda, que es intima, reconociendo también que el Uruguay tiene hoy un mercado externo diversificado que lo lleva a tener en el MERCOSUR, menos de 30% de su nivel de exportaciones y el resto -el 70 y pico por ciento- fuera de la región.

Es decir, las relaciones externas del Uruguay se han multiplicado, se han diversificado: estamos en el África, estamos en el Asía, estamos en Europa, estamos en América Latina, y estamos en América del Norte.

Pero eso no significa desconocer que hay una política de apertura. No habría habido un TLC con México, un Tratado de Libre Comercio, si no tuviéramos una política de exterior abierta. No habría habido este tipo de convenios con China y con Irán, si no tuviéramos una política exterior abierta. No habría habido las inversiones indias que hay en el Uruguay hoy día, si no tuviéramos una política de exterior abierta.

No hay una política encerrada, no hay una política que sufra de claustrofobia, no hay una política con oropeles o con lujos innecesarios, hay una política basada en el interés nacional y apoyada en actos concretos que estoy en condiciones de demostrar y de exhibir en cualquier circunstancia.

MINISTRO OPERTTI: Yo creo lo siguiente, porque me parece que ese es un punto importante que usted plantea y me parece que merece una respuesta acorde a esa importancia. Es un acuerdo de inversiones similar a otros acuerdos de inversiones que el Uruguay ha celebrado; punto uno. Punto dos, es un acuerdo de inversiones donde Uruguay no renuncia, no resigna ningún principio, ni ningún derecho, ni adquiere obligaciones diferentes de aquellas que se quieren normalmente por un convenio de esa naturaleza. En tercer lugar, no lo hemos hecho en forma oculta, clandestina, cerrada, lo hemos hecho con conocimiento de la propia Comisión de Asuntos Internacionales de la Cámara. Ha sido un diputado del Encuentro Progresista el que me ha planteado, con total pertinencia, su interés en conocer el proyecto y se lo hemos enviado en el estado en que se encontraba en ese momento, cuyas variaciones han sido mínimas, por otro parte. Además, este convenio ha sido inicialado, se va a firmar y se va a enviar al Parlamento, quien podrá aprobarlo o no aprobarlo; que podrá contar con el voto o no, en definitiva de lo que se trata es de sí estamos dispuestos a abrir el país a inversiones, para que haya desarrollo productivo como se dice, a veces sin demasiado sustentó o explicación o fundamento; para que haya puestos de trabajo, para que haya ocupaciones en lugares donde hoy faltan. Es decir, o si estamos en una visión ombliguista, encerrada, endógena, hacia adentro del país, que los limite en la relación externa. Por lo tanto, yo defiendo esta política, pero la defiendo no por una razón de tipo coyuntural, la defiendo porque hace siete años que estoy al frente de la conducción de esta política. Y la defiendo porque estoy convencido de que esta política se ha traducido en un relacionamiento externo plural, del que el Uruguay puede hoy a mi juicio sentirse serenamente tranquilo y contento.

MINISTRO OPERTTI: Hasta donde llega mi conocimiento sobre el tema, tuve ayer un encuentro con el ingeniero Serrato, ayer por la tarde. El tema está planteado, está vigente, no está sepultado; lejos de ello, el ex Presidente Duhalde, Presidente del Consejo de Representantes Permanentes del MERCOSUR, acaba de solicitarle a las cancillerías que acrediten un observador de cada uno de los dos países, de Argentina y de Uruguay, en la comisión del puente, para darle el impulso político- diplomático, e incluir el proyecto del puente en el plan, en el programa IRSA, en el programa de obras de infraestructura regional para Sudamérica.

Quiere decir que el tema está vivo y que el tema no pasa por el eje de relaciones entre Juan y Pedro, el tema pasa por el interés binacional de tener una mejor comunicación física, de transporte, que disminuya el recorrido de Buenos Aires a San Pablo en 200 km y que abata los precios, cualquiera sea el gobierno, cualquiera sea la óptica del gobierno.

Es decir, hay temas que están por encima de la ideología. Tenemos que entender que el fenómeno de Europa unida en la Unión Europea y unida al Maastricht y unida en la Constitución de Giscard d’Estaing, es justamente la demostración más cabal de que los países se pueden unir en la integración, aunque uno sea socialista, el otro demócrata-cristiano, el otro social-cristiano, el otro conservador; es decir, pasar la política exterior por el eje ideológico es a mi juicio una manera de recortar las posibilidades de relacionamiento de un país que, por su extensión, su localización geográfica, su propio perfil de población, a lo que tiene que aspirar es ser puerta de entrada y no puerta de cierre.

MINISTRO OPERTTI: Si el Ministerio no termina conmigo, podríamos decir lo siguiente: primero, estamos hablando de un hecho eventual, posible, al que usted en su pensamiento íntimo está aludiendo, que es la posible elección nuestra de otra posición en el plano internacional; ese hecho aún no se ha producido, por lo tanto, no me gusta especular sobre hechos que aún no se han producido.

MINISTRO OPERTTI: Lo viene analizando, lo viene observando, lo viene atendiendo con el cuidado que merece. Nuestro Embajador en la OEA, el Embajador Enrique Fischer, ha venido participando de las reuniones que el propio Secretario General, don Miguel Ángel Rodríguez, ha convocado a los distintos grupos de países; se ha ido reuniendo con los distintos grupos, ayer se reunió con el grupo de países llamado Grupo ALADI, ese grupo justamente de los que son miembros de ALADI, y que han recibido en esa ocasión una pormenorizada explicación del doctor Miguel Ángel Rodríguez. Hoy está reunido a estas horas con el grupo del Caribe. Es decir, es un tema que lo observamos desde una visión de expectativa vigilante, pero no tenemos naturalmente todavía una conclusión y esperamos que sean las autoridades competentes costarricenses las que diluciden este asunto.

MINISTRO OPERTTI: Sí.

MINISTRO OPERTTI: Sí...

MINISTRO OPERTTI: Sí...

MINISTRO OPERTTI: Cada gobierno es dueño de tener las relaciones diplomáticas y consulares, y de toda naturaleza, con el gobierno que desee hacerlo. Yo estimo que este proyecto de abrir relaciones diplomáticas con Cuba, es natural, forma parte del proyecto de cada una de las fuerzas políticas. No tengo, por lo tanto, en eso ningún comentario específico para hacer. Lo que sí tengo para decir es que si se removieran los obstáculos, que dieron lugar en su momento a la ruptura de relaciones diplomáticas con Cuba, no sería necesario esperar a que ese cambio de gobierno se produjere para que las relaciones se reestablecieren. Pero eso supone cambios, cambios al interior de Cuba, que infortunadamente aun no visualizamos.

MINISTRO OPERTTI: Palestina es todavía una Autoridad que pugna y lucha por tener un territorio. Tiene una autoridad, tiene una población y le falta una definición de su territorio; los tres elementos básicos componentes de un Estado.

El tema Palestina-Israel para nosotros es uno de los temas más sensibles del mundo internacional, sin ninguna duda, y es un tema al cual hay que apostar fuertemente para su solución. Ese es otro ejemplo de política exterior uruguaya.

¿Ustedes saben de dónde provino el llamado "Cuarteto"? Vale decir la Unión Europea, el Secretario General Kofi Annan, la Federación Rusa y los Estados Unidos, como negociadores de la hoja de ruta. ¿Ustedes lo saben? No lo saben. Bueno, yo se los voy a decir.: esa fue una propuesta nuestra hecha al gobierno de Israel y aprobada por el gobierno de Israel, e instrumentada.

Pero como aquí hay muchas cosas que no se saben, llega un determinado momento en que uno siente la necesidad de hacer una suerte de catarsis y decir las cosas que hay que decir y ésta es una de ellas. Eso muestra claramente -y concluyo la pregunta, la respuesta- nuestro compromiso con el tema de la solución de fronteras seguras entre Israel y Palestina.

La apertura de una embajada -a la que usted alude, etcétera- es un tema que habrá que verlo en virtud de la situación y de la evolución que esta situación plantea. Hoy día, hoy día al día de hoy, evidentemente no se dan condiciones suficientemente previsibles o anticipables como para establecernos allí con una Embajada.

MINISTRO OPERTTI: No, no, usted nunca estuvo en una de mis clases. Se las ha perdido.

MINISTRO OPERTTI: Pero, naturalmente que sí, por cierto; si ese seminario es un seminario que se anuncia por la prensa como un acto del Encuentro Progresista - Frente Amplio. Cómo no, entiendo perfectamente, y no estoy en contra de que se haga un acto político. Pero como en ese acto político el tema central es la integración, la política exterior, Ouro Preto, la Cancillería, etcétera, habría que tener piel de elefante para no reaccionar frente a estos comentarios y salir a decir nuestra verdad, que la opinión pública pondrán en cotejo y en definitiva tomará su posición y decidirá dónde está la razón. Yo lo que he expuesto hasta ahora no son adjetivos, lo que he expuesto hasta ahora son hechos, que cada uno mida y verifique los hechos.

MINISTRO OPERTTI. Mire, a mí me habría gustado que Aníbal Ibarra se dedique a los problemas de Buenos Aires. Porque, ¿sabe lo qué pasa?, yo le voy a decir lo que sucede. A mí me parece muy bueno que la gente tenga opinión política sobre los procesos electorales de los demás países, cada uno de nosotros los tiene ¿verdad? Cada uno de nosotros lo tiene. Ahora, venir al Uruguay a decirnos, a proclamar una determinada adhesión política en pleno proceso electoral, ¿sabe?, no es un problema referido a las demás fuerzas políticas, al Partido Nacional o al Partido Colorado, al Partido Independiente, no; lo veo como una especie yo diría -no quisiera calificarle duramente- pero diría por lo menos de señal negativa hacia el pueblo uruguayo, que aún no ha decidido, que aún no ha decidido. Por lo tanto, hablar de una transición responsable, cuando todavía no hay decisión del pueblo, me parece que es una manera de anticipar resultados aún no producidos.

MINISTRO OPERTTI: Lo observé con similar preocupación. ¿Algo más? Pueden más, si igual después ustedes ponen lo que quieren, así que...

MINISTRO OPERTTI: Mire, le agradezco la pregunta. Se suspendió la visita por razones de agenda. Evidentemente viajar a Irán, dos días para ir, dos días para volver, a mitad de octubre, cuando teníamos, claro estas fechas se convienen, a veces se anticipan durante mucho tiempo, etcétera, entonces las cancillerías las retienen; pero tan es así que los primeros días de diciembre estaremos recibiendo aquí al Ministro de Relaciones Exteriores del Irán, el señor Kharrazi, que vendrá en una gira regional en que visitará Uruguay, con lo cual está confirmando -y le estoy dando de paso a ustedes la noticia que todavía no la tiene ningún medio, salvo los que están acá- de que recibiremos al Ministro de Relaciones exteriores de Irán en los primeros días de diciembre y que eso pauta claramente que ésta suspensión de la visita, o este aplazamiento de la visita, no interfiere en modo alguno nuestras relaciones bilaterales con Irán, país con el que tenemos fluidas relaciones comerciales y ciertamente muy positivas relaciones políticas.

MINISTRO OPERTTI: No, yo no califico; no estoy acá para calificar.

MINISTRO OPERTTI: A ver...

MINISTRO OPERTTI: ¿Usted cree que la mantenemos?

MINISTRO OPERTTI: Yo estoy seguro que la mantenemos.

MINISTRO OPERTTI: Ah, bueno.

MINISTRO OPERTTI: Bueno, no es una situación de gobierno ni de Estados, son relaciones de tipo privado. Tradicionalmente ha habido inversionistas brasileños en Uruguay y uruguayos en Brasil, la zona de frontera seca usted sabe que es muy particular y muy específica. Ha habido intentos reiterados de legislar sobre este tema, ¿verdad? Prohibiendo incluso determinadas adquisiciones en zona de fronteras. Pero ese es un tema que no toca en modo alguno las relaciones internacionales bilaterales de Uruguay con Brasil, que están en un altísimo nivel de excelencia.