MGAP: Ministro Aguerre
Construir institucionalidad como base del Uruguay
agropecuario del mañana
El Presidente de la República, José
Mujica, impuso en su cargo al nuevo Ministro de Ganadería,
Agricultura y Pesca, Tabaré Aguerre. Sostuvo que el país
necesita cambios e identificó a esta Secretaría como una
frontera imprescindible. Aguerre expresó su satisfacción
por participar en la construcción de un proyecto nacional
de desarrollo económico y social, que se inició en el
pasado gobierno y que se aspira consolidar.
La jornada se inició temprano para el
Presidente de la República, José Mujica. Comenzó su labor a
las ocho de la mañana en el Ministerio de Ganadería,
Agricultura y Pesca en el acto de asunción del nuevo
Ministro Tabaré Aguerre, y del Subsecretario, Daniel Garín.
En la oportunidad se hizo presente también el
Vicepresidente de la República, Danilo Astori.
Mujica indicó que su presencia allí para
investir en el cargo a ambos Jerarcas es una demostración
que el Poder Ejecutivo está comprometido con el esfuerzo y
trabajo de quienes comienzan su tarea.
El Presidente saludó a los trabajadores del
Ministerio con quien los une un lazo afectivo, recordando
su pasado como Secretario de esa Cartera.
Señaló que el Gobierno es una construcción
de equipos que requiere sabiduría y tesón. Asimismo, anotó
que el país necesita cambios y esta Cartera es una frontera
imprescindible. La competitividad del país, las divisas
para comprar cosas imprescindibles tienen que ver con el
trabajo de este Ministerio, dijo.
“Todos tenemos que abrir la cabeza,
empezando por los veterinarios que son la riqueza de este
país”, aseguró Mujica quien pidió a estos profesionales que
si en un futuro se decide fundar una Facultad de
Veterinaria en el interior, no piensen que les quitarán el
trabajo, todo lo contrario, porque el país debe ir a más.
“Ojalá podamos hacerlo”, añoró.
El Mandatario instó a salir de la rutina
entre todos y explicó que la designación de Aguerre la
tenía en mente desde hace tiempo. Aseguró que si bien no
sabe a quién votó, ni se lo preguntó, lo venía “pastoreando
desde hace rato”, sobre todo por la diversidad desde el
punto de vista práctico de las actividades que realizó.
Su intención era darle una señal fuerte al
agro nacional que tiene un papel fenomenal que jugar en
este país. Por ello resolvió designarlo y no ocultó las
grandes expectativas que tiene en cuanto a la importancia
de su aporte. “Nos jugamos la ropa como país”, sostuvo.
Finalmente, Mujica se autodefinió como: “un
empecinado trabajador, formado en el trillo de la lucha por
los cambios sociales, autodidacta hasta la médula. He leído
de todo, y ahora sólo puedo decirles que casi no sé nada. Y
que gobernar es construir equipos y eso requiere soberanía,
tesón y mucha humildad”.
El Ministro Aguerre reconoció que hace 65
días no habría imaginado la etapa que hoy está iniciando.
Expresó el honor que siente por participar en la
construcción de este proyecto nacional de desarrollo
económico y social, que se inició con fuerza en el Gobierno
que acaba de finalizar y que aspira consolidar en el
futuro. El agro fue, es y será determinante en ese modelo
de desarrollo, dijo.
El mundo que le compra al Uruguay cambió,
la agricultura está en el radar de todos los políticos,
pero por sobre todo, está en el radar de los inversores
del mundo. La oportunidad que tiene el agro como negocio
por delante es formidable, analizó el Jerarca.
Uruguay tiene una capacidad de producción
de alimentos para 50 o 60 millones de habitantes. Hoy el
mundo está preocupado por alimentos, agua, biocombustibles
y por generar modelos de producción sustentables. Ahí
radica la mayor oportunidad como país, que no se puede
dejar pasar, indicó.
Se debe generar productividad con calidad,
sustentabilidad, valor agregado, diferenciación de
productos y con una profunda y convencida actitud de
inserción internacional en la búsqueda del desarrollo
agropecuario.
La competitividad de los productos
agropecuarios se puede medir en tres niveles: la empresa,
la cadena y el país. Y en los tres niveles este Ministerio
tiene un rol a jugar.
La tarea tiene que ver con tres aspectos
fundamentales. Las funciones y servicios que este
Ministerio hace hacia la sociedad y la producción. Tiene
que ver con generar políticas públicas que marquen un
camino hacia un desarrollo agropecuario y orienten y
motiven cuando sea necesario, que generen el ámbito para
que el motor del sector privado promueva la inversión, que
construyan la estabilidad necesaria, que apoyen y articulen
en aquellos sectores de la productividad que aún no
alcanzaron la competitividad, que les permita caminar por
sí mismo, pero procurando construirla. Y el tercer nivel es
el de construir institucionalidad (pública y privada), que
será la base del Uruguay agropecuario del mañana.
La revolución productiva que tuvo el agro
en los últimos cinco años muestra que se puede hacer más y
mejor país productivo.
Aguerre instó a: generar sistemas de
producción más eco-eficientes, integrar mejor las cadenas
productivas, adaptarse al cambio climático, construir agua,
generar mejoramiento genético, gestionar mejor los riesgos
agropecuarios, capacitar y educar a la gente, para cubrir
en lo inmediato las vacantes que el agro uruguayo tiene.
“Este Gobierno hizo un formidable esfuerzo
en lo que tiene que ver con la integración horizontal de
los distintos Ministerios. El Gabinete Productivo es un
ejemplo de ello y se convierte en una plataforma de
conocimiento, diagnóstico y propuesta desde la cual
construir”, argumentó.
Aguerre aseguró que procura que el país le
de a los jóvenes las oportunidades que él tuvo. Se
considera un agradecido porque se pasó la vida haciendo lo
que le gusta.
Finalmente, el flamante Ministro agradeció
el apoyo de familiares y amigos, muchos de ellos presentes
en el lugar, y los definió como “la mejor cosecha de su
vida”.