El Presidente de la República, José Mujica, se reunió con los residentes uruguayos en Chile. El encuentro se realizó en la Embajada uruguaya, en Santiago y contó con la presencia de  más de un centenar de compatriotas, que desbordaron las instalaciones. “Tengan un caluroso abrazo de todo el Gobierno y acuérdense del Uruguay”, expresó al iniciar su alocución.   

El Mandatario realizó un esbozo de los principales desafíos que enfrentará el Gobierno durante al gestión que se inicia. En tal sentido se refirió a las obligaciones del Estado en materia de deuda pública, a la educación, a la transformación del Estado y a la profundización de la Reforma de la Salud. 

Mujica señaló que el actual Gobierno se encontró con una situación “muy superior” a la recibida por Tabaré Vázquez. “No tenemos aquellos infernales vencimientos de deuda”, precisó. No obstante, explicó que hasta el año 2011 hay que enfrentar vencimientos importantes. 

Asimismo, señaló que si bien los niveles de pobreza e indigencia disminuyeron, tienen que bajar aún más. Hay que disminuir la pobreza a la mitad y hacer desaparecer la indigencia, subrayó. 

En otro orden, se refirió  a los problemas a solucionar en educación. Al respecto, indicó  que no existe una suficiente oferta en materia de educación terciaria universitaria en el Interior del país. “Hay que morir en la capital”, enfatizó. Mujica también sostuvo que la educación media presenta importantes niveles de deserción y que falta desarrollar la formación técnica e industrial.  

El Mandatario reiteró  su interés en transformar el Estado. Dijo que -en una primera etapa-  se procurará mejorar el sistema de ingreso de los funcionarios y conformar una nueva carrera administrativa. “Todos criticamos al Estado, pero cuando nos va mal todos le mangueamos”, comentó. 

Por otra parte, dijo que el Sistema Integrado de Salud instalado es importante. “Uruguay va a tener un sistema de salud notable”, subrayó. No obstante, indicó que la prioridad actual es incorporar al sistema a los viejos. “Nos va a costar, porque incluir a todos los jubilados cuesta aproximadamente 700 millones de dólares”, explicó. 

Tenemos que afirmar las cosas positivas que hizo el anterior Gobierno y plantearnos otras”, sintetizó. Para que todo ello sea posible,  la economía tiene que funcionar: “si la economía no funciona no tenemos con qué”, concluyó.