Subasta en Bolsa de Valores

El 17 de marzo ANP adjudicará la concesión para la nueva terminal de contenedores

La Bolsa de Valores de Montevideo será el espacio donde la ANP adjudicará el 100% de las acciones de una sociedad anónima para la construcción y gestión de la nueva terminal de contenedores en el Puerto de Montevideo. El valor inicial se fijó en USD 1.200.000. El objetivo es ampliar la actividad portuaria y atraer más clientes, en el marco de la política que lleva el Gobierno para que Uruguay sea polo logístico regional.

El Subsecretario de Trasporte y Obras Públicas, Pablo Genta, enfatizó que esta iniciativa se enmarca en la necesidad de dotar al Puerto de Montevideo de la infraestructura que permita continuar el proceso de consolidación del país como centro de distribución de la región. Explicó que antes de la crisis financiera internacional de los últimos años, se preveía que para 2015 el puerto iba a estar congestionado -fundamentalmente en relación al movimiento de contendores- y que, si bien la actividad disminuyó durante 2008, se está registrando un fuerte crecimiento, por lo cual es importante dar un paso adelante antes que otros puertos regionales que ya tienen sus capacidades colmadas.

Desde el punto de vista legal se autorizó su viabilidad de acuerdo a la Ley 18.530, que fue aprobada el 31 de julio de 2009, donde la obra es declarada de importancia política nacional, constituyéndose en un objetivo esencial y prioritario para el desarrollo económico y social del país.

Genta explicó que previamente se envió el anteproyecto al MVOTMA y obtuvo una calificación en categoría B por parte de la Dirección Nacional  de Medio Ambiente, lo cual significa que se trata de un proyecto viable desde el punto de vista ambiental; que puede producir impactos, pero que son manejados en el plan de mitigación. Para ello, se tuvo que establecer la locación de la nueva terminal, dado que incide en el estudio de impacto ambiental. En tal sentido, la terminal se ubicará a 75 metros al norte del dique de cintura actual, demoliéndolo y oficiando como tal. Esto le dará al Puerto de Montevideo un diseño moderno con un muellaje fundado a 14.50 metros de profundidad para el arribo y operación de buques de última generación.

La inversión para la nueva terminal de contenedores está pautada en etapas, con una exigencia de inversión mínima antes del inicio del 7º año de la concesión. Esta inversión implica el desarrollo del área de la terminal, ganarle espacio a la bahía, demoler partes del dique de cintura, dragado, construir al menos 600 metros de los muelles para el atraque de los buques (el total será de 1.200 metros), conformar la playa de acopio y contar con el equipamiento para mover los contenedores. Si el operador realiza las inversiones mínimas y desarrolla completamente la terminal, se estaría rondando una inversión total de 300 millones de dólares.

Tanto la nueva terminal como la ya existente tendrán las mismas características, con un área de 1.200 x 500 metros, el mismo equipamiento y longitud de muelles de atraque. Se diferencian en el diseño del muelle, dado que el nuevo será en línea, mientras que el muelle de la Terminal Cuenca del Plata tiene la misma longitud, pero fraccionada en dos partes.

Términos de la licitación

La concesión plantea la firma de un contrato de gestión integral de la terminal, por un período de 30 años, que implica la toma de posesión del área y que se cumplan todos los requisitos de la licitación (ofrecer garantía, constituir una sociedad anónima, capitalizarla, acreditar experiencia en la operación portuaria por más de cinco años). Una vez cumplidos todos los requisitos, el contratista se transformará en el operador de la terminal, construyéndola y operándola posteriormente.

Puede comenzar la operatividad de la terminal una vez realizadas las inversiones mínimas que obliga el contrato, antes de iniciado el 7º año de la concesión. Genta explicó que la concesión se estructura de esta manera, dado que un doceavo del precio de la subasta -fijado en un mínimo de 1.200.000 USD- será un canon fijo que deberá pagar mensualmente a la ANP y otro monto variable (fijado en una cien-milésima-parte del precio de la licitación) se deberá pagar por TEU movilizado. En tal sentido, el interés del operador será tener actividad lo antes posible, para no atrasarse con los pagos mensuales.

La licitación se realizará a través de una subasta de acciones en la Bolsa de Valores de Montevideo, el próximo 17 de marzo a las 10:00 horas. A la mayor propuesta económica se le solicitará la presentación de la capacidad económico-financiera y ser un operador especializado en contenedores con más de cinco años de experiencia. Una vez cumplidos los requisitos, se efectivizará la adjudicación de la concesión. Si sucediera que el que ganó la subasta no logra acreditar los requisitos previos, se adjudicará al próximo interesado y así sucesivamente.

La Ley 18.530 establece que ni el operador ni ninguno de los accionistas pueden ser accionistas de otra terminal especializada en contenedores en el Puerto de Montevideo. De manera de no afectar la futura competencia que se espera generar para fomentar el crecimiento de la actividad portuaria.

Genta resaltó que esta subasta es distinta a la que se realizó para la Terminal Cuenca del Plata, la cual no paga un canon mensual a la ANP, sino una tarifa fija por movimiento de contenedor. La primera subasta se concretó por un monto de USD 17.000.000 (con una base de USD 13.000.000). En esta ocasión, la base será de un USD 1.200.000 porque el canon fijo es mensual y está basado en el monto de la subasta, por lo que se estima que no se superará mucho el valor estipulado.

Las expectativas que se tienen desde el Gobierno frente a esta subasta es que habrá una cantidad considerable de interesados que pujarán por ganar la licitación. Junto con las autoridades de ANP se realizaron sondeos sobre quienes puedan participar y existe la certeza que habrá al menos tres interesados. Asimismo, el Subsecretario del MTOP sostuvo que el objetivo del Gobierno en cuanto al desarrollo del puerto de Montevideo coincide con las expectativas de los privados y que esta oportunidad puede transformarse en un negocio que coincide con la estrategia del país.