Una herramienta de reinserción
CECAP de La Paz eligió sus delegados entre estudiantes,
docentes y actores sociales
Quedó instalado en la jornada el
Consejo Participativo del Centro de Capacitación (CECAP) de
la ciudad de La Paz. Está integrado por representantes del
estudiantado, docentes y por actores sociales. La
Coordinadora del CECAP, Analía Acevedo, explicó que esta
instalación legitima el emprendimiento de educación no
formal que apunta a absorber a jóvenes y adolescentes que
–por diversas causas- no participan de la educación formal.
Acevedo explicó que la implementación de esta
herramienta de participación posibilitará una gestión
basada en la democracia y en el sano debate de los
intereses de todas las partes. Destacó la importancia de la
actuación de los padres como integrantes del Consejo
–dentro de los representantes sociales- y resaltó que en
el Centro se cuenta con un gran apoyo por parte de las
familias de los chicos.
Señaló que la propuesta educativa se diferencia de la
curricular, ya que es más flexible y acorde a las
necesidades individuales a la vez que representa un desafío
para la reinserción de estos jóvenes en el mundo educativo
o su inserción en el mercado laboral.
Añadió que se trata de una iniciativa integral, ya que
la propuesta abarca diferentes ejes de acción. Desde
talleres experimentales tales como reciclaje en papel o el
de belleza, hasta talleres de plástica, música, educación
deportiva y conocimientos básicos de las diferentes
asignaturas.
También se imparte “educación laboral” que aborda
temáticas tales como la confección de un Currículum Vitae,
cómo presentarse a una entrevista y qué debe conocer todo
joven que se vuelque al mercado del trabajo.
El Centro tiene una capacidad locativa para 68 jóvenes.
En la actualidad, las plazas están cubiertas y las
inscripciones para el segundo semestre (julio-diciembre)
cerradas.
Ante esto, Acevedo explicó que el Nodo Educativo de La
Paz, con todas las instituciones educativas de la ciudad,
se propone saber a cuántos jóvenes de la zona se llega
mediante la educación formal y la no formal. Añadió que
obtener un diagnóstico de situación y conocer a qué perfil
de jóvenes y adolescentes se aborda, representa un desafío
para la educación.
Por su parte, el Director de Educación del MEC, Luis
Garibaldi, explicó que a partir del pasado Gobierno los
CECAP adquirieron otra dimensión. Añadió que se basó en la
necesidad de atender a la población de jóvenes y
adolescentes que no estudian ni pertenecen al mercado
laboral, con un objetivo de inclusión social en una doble
dimensión: de inserción educativa y laboral. Garibaldi
explicó que con la intención de apoyar la adquisición de
conocimientos generales y de promoción de educación para el
trabajo, se propuso la semestralización y se le dotó de una
dimensión nacional al proyecto.
Señaló que los primeros CECAP, instalados en Montevideo
y Rivera, datan del año 1981 y que durante mucho tiempo
poseían propuestas desarticuladas. En contraposición a esta
forma de trabajo, afirmó que a partir de 2005, se trabaja
en un plan nacional de educación y trabajo en vínculo con
las intendencias y con el INDA. Apuntó que en el marco del
Plan de Equidad se incorporó una línea de creación de
nuevos Centros solicitados por los ciudadanos de diferentes
zonas del país. En este sentido, explicó que las comunas
son las que determinan la ubicación de los nuevos Centros.
En Canelones se definió su locación en Barros Blancos y La
Paz; en Río Negro, se definió la ciudad de Young; Maldonado
se inclinó por San Carlos y en el Departamento de
Tacuarembó se escogió un barrio carenciado.
El Director de Educación subrayó que en el acto de
instalación del Consejo Participativo estuvieron presentes
representantes de la comuna canaria, los nuevos alcaldes,
policías comunitarios, representantes de Salud Pública y
del INJU, entre otros actores comunales.
Dijo que en estos emprendimientos se trabaja con una
franja etaria ubicada entre los 15 y los 20 años porque se
tiene en cuenta que existen otras propuestas que captan a
otros públicos objetivo. Explicó que –según relevamientos-
el país tiene un 9% de jóvenes en ese rango de edad, que no
estudia, no trabaja y ni ha culminado el Ciclo Básico. Ese
porcentaje se traduce en unos 20.000 chicos. Garibaldi dijo
que en el quinquenio pasado se trabajó con 3.700 y la idea
es llegar a los 6.000 al final de este período de Gobierno.
Remarcó que el objetivo que guía este tipo de
emprendimientos es la inclusión social y educativa y
destacó que muchas veces, los jóvenes no retornan al
sistema educativo pero sí se insertan al mercado laboral
con competencias superiores a las que poseían al inicio de
su participación en el Programa. |