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30 de junio, 2010

Consejo de Formación en Educación

Autoridades entrantes continuarán proceso hacia el Instituto Universitario de Educación
El Consejo de Formación en Educación es un órgano creado en 2005 para el perfeccionamiento docente, con miras a la creación del Instituto Universitario de Educación. Edith Moraes -quien asumió como Directora General- junto a las Consejeras Laura Motta y Selva Artigas serán las encargadas de llevar adelante el proceso iniciado en la pasada Administración para que Uruguay sea referente en materia de formación de sus profesionales.

Durante el acto de asunción de las nuevas autoridades del Consejo de Formación en Educación estuvieron presentes el Presidente de CODICEN, José Seoane junto a los consejeros Nora Castro, Teresita Capurro y Néstor Pereira.

La nueva Directora General, Edith Moraes, reconoció que la formación docente vive desafíos intensos que se juegan a nivel de las aulas de todo el sistema educativo y en ese escenario, el rol de los docentes es fundamental. En Uruguay, la formación de los docentes atraviesa un momento trascendental y requiere un encauzamiento permanente a través de una oferta continua de posibilidades para sostener el desarrollo profesional.

El horizonte de este Consejo es la futura creación del Instituto Universitario de Educación. En ese sentido, Moraes resaltó que el camino es continuar la línea iniciada por las autoridades que le anteceden. La participación de todos los actores en actividades colectivas, serán las acciones que encauzarán ese proceso, para levantar la calidad de la formación docente en toda su integralidad.

Responsabilidad, participación, trabajo colectivo en ámbitos para la reflexión y la discusión serán los pilares de esta nueva Administración, para que Uruguay sea un país referente en materia de formación de profesionales, comprometidos con la educación y con la sociedad.

Por su parte, el Presidente del CODICEN, José Seoane, señaló que la constitución de este Consejo implica un paso hacia la creación del Instituto Universitario de Educación, como organismo autónomo y co-gobernado. En tal sentido, el Consejo de Formación en Educación cumplirá múltiples tareas para impulsar la construcción y fortalecimiento de la formación docente integral que permita darle carácter de formación universitaria en el futuro y que conjugue la labor de enseñanza con la investigación y la extensión.

Asimismo, dijo que este Consejo tendrá entre sus cometidos impulsar la cooperación interinstitucional para el proceso de creación del Instituto Unversitario. En ese marco, Seoane sostuvo que el fortalecimiento de la participación se configura como “única alternativa” para construir una transformación histórica en la formación docente.  

Breve experiencia con importantes logros

Durante sus primeros cinco años de funcionamiento, el Consejo de Formación en Educación estuvo dirigido por Margarita Arlas en la Dirección General, junto a Omar Barboza y las Consejeras Cristina Hernández, Carmen Apratto y Elsa Gatti.

Arlas expresó que durante su gestión se logró la aprobación de un Plan Nacional Integrado de Formación Docente con un nuevo diseño curricular de las carreras y la reapertura del Instituto Normal de Enseñanza Técnica, la creación de nuevos profesorados de informática y portugués, y una nueva estructura para desarrollar funciones de investigación y extensión.

También se concretó un desarrollo en la formación continua de los posgrados, diplomas y maestrías en convenio con la Universidad de la República y de cursos de formación permanente con otras instituciones.

En materia edilicia y de obras de refacción, la inversión alcanzó los 150 millones de pesos, atendiendo también a la renovación de salas de informática y la compra de equipos.

Éstas, entre otras acciones, buscaron dignificar la formación docente a través de la mejora en las condiciones de trabajo y la profesionalización, abriendo oportunidades para desarrollar junto a los distintos departamentos académicos las funciones universitarias de enseñanza, investigación y extensión. En ese sentido, la participación es un pilar fundamental en este proceso, que permitirá garantizar la autonomía y co-gobierno que el futuro Instituto Universitario requerirá.
   
 
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