Jóvenes entre 13 y 17 años
Significativo descenso en el uso de
drogas ilegales
La Junta Nacional de Drogas dio a
conocer en la Torre Ejecutiva la 4ª Encuesta Nacional y 5ª
de Montevideo sobre Consumo de Drogas en Estudiantes de
Enseñanza Media. De la misma se desprende que la
experimentación con la marihuana descendió, al igual que la
cocaína y el tabaco. Sin embargo, el alcohol continúa
ocupando el primer lugar en materia de consumo
problemático. El consumo de la pasta base se mantiene
marginal.
El universo fue de 4.305 alumnos
pertenecientes a 119 centros educativos, distribuidos en
349 clases de institutos públicos, privados y escuelas
técnicas del país. El rango etario se ubicó entre los 13 y
los 17 años.
El Director del Observatorio Uruguayo de
Drogas, Héctor Suárez, explicó que la encuesta midió
niveles de consumo de alcohol, tabaco, marihuana, cocaína y
pasta base dentro de este público objetivo. Abarcó al 65%
de jóvenes en este rango de edad ya que la investigación se
realizó solamente sobre la población escolarizada.
También se destacó que –por primera vez-
el estudio incluyó el rol y la presencia de los familiares
de estos jóvenes. En este sentido, se tomaron siete
indicadores internacionales que describen la presencia o
ausencia de los padres en la vida de sus hijos y cómo eso
incide en los consumos. Ellos son: 1) conocimiento por
parte de los padres de lugares donde está su hijo luego de
la salida del centro de enseñanza o durante los fines de
semana; 2) control de los padres de situación o desempeño
escolar; 3) conocimiento por parte de los padres del grupo
de pares; 4) conocimiento por parte de los padres de
actividades recreativas o extra-curriculares de los
jóvenes; 5) control por parte de los padres de horas de
llegadas nocturnas; 6) control de los padres sobre lo que
miran en T.V. o páginas de Internet y 7) integración
familiar y el compartir desayunos, almuerzos, meriendas o
cenas.
En cuanto al alcohol, Suárez señaló que
8 de cada 10 han consumido alguna vez en su vida. Que más
de la mitad (52.7%) de los estudiantes consume de forma
habitual, cifra que trepa al 72% sobre los 17 años.
En referencia al tabaco, afirmó que se
experimentó un marcado descenso de su consumo desde el año
2005. El 18.4% de los estudiantes son consumidores
habituales. También se constató que la prevalencia del
consumo habitual es mayor en mujeres (21.1%) que en hombres
(15.5%).
Se remarcó que el descenso respecto al
año 2007 es mayor en hombres.
En el caso de la marihuana se advirtió
un significativo descenso respecto del 2007, por lo que se
pasó de un 19.7% a un 16.2%.
Otro dato relevante con respecto a esta
droga es que los consumidores habituales en 2009 son el
6.8% del total de estudiantes, de lo que se desprende que
de aquellos que probaron, sólo el 43% continúa el consumo.
El 41% de los estudiantes que
experimentaron con marihuana lo hizo antes de los 15 años.
El consumo de esta sustancia es superior en hombres que en
mujeres.
La cocaína mostró que el 3.9% de los
estudiantes consumieron alguna vez en su vida. Con respecto
a 2007, se experimentó un descenso de 1.2%, lo que desde el
punto de vista estadístico, se trata de una caída
significativa, explicó Suárez.
Para el capítulo pasta base y otras
drogas, la medición arroja que la experimentación con este
tipo de sustancias no supera los 3 puntos porcentuales del
total de la población estudiantil. Las drogas inhalantes
registran un consumo experimental mayor (2.6%) así como un
uso actual (1.4%).
Para el caso de aquellos estudiantes que
han consumido pasta base alguna vez en su vida, se mantiene
la misma cifra del 2007 y se ubica en el 1.3%. Esto
confirma el uso marginal de la sustancia en Educación
Media.
Percepción del riesgo
En cuanto a percepción del riesgo, se
vio que –dentro de las drogas ilegales- la marihuana es a
la que se asocia con menor riesgo. En este sentido, la
mitad de los estudiantes piensa que el consumo ocasional no
tiene riesgos o si los tiene, son leves.
La pasta base está considerada como la
más riesgosa en sus consumos ocasionales y frecuentes.
Los consumidores de sustancias ilegales
tienen menor percepción del riesgo del consumo ocasional de
marihuana que del consumo de tabaco.
Involucramiento de los padres
La encuesta también dio a conocer que el
consumo habitual de marihuana es tres veces mayor en los
estudiantes cuyos padres tienen un bajo involucramiento con
sus actividades, que en aquellos en los que existe mayor
contención. En cifras, en los primeros, el consumo es de
13% contra un 4% de los segundos.
La falta de conocimiento y control de
padres sobre las actividades de sus hijos, así como el poco
tiempo compartido, trae aparejado un mayor consumo de
alcohol y tabaco.
Los episodios de abuso de alcohol son
más frecuentes en jóvenes cuyos padres legitiman el consumo
abusivo de esta bebida, que en aquellos cuyos padres no lo
hacen.
Se constató que la legitimidad de los
padres en el consumo de alcohol, tabaco y marihuana incide
fuertemente en el consumo reciente y habitual.
A modo de conclusiones
Se observó que persiste el elevado
consumo de alcohol, tanto en magnitud como en niveles de
ingesta. Ocupa el primer lugar en mayor consumo
problemático entre los jóvenes.
El descenso de la experimentación con
marihuana puede estar relacionado con una mayor
visualización de los efectos negativos del consumo en los
pares, lo que quitaría legitimidad a la sustancia en esta
población.
Se confirmaron las drogas legales como
factor de riesgo ya que sólo el 3% de los que nunca fumaron
y el 1% de los que nunca consumieron alcohol experimentaron
con alguna droga ilegal.
Se observó también que 1 de cada 4
consumidores de tabaco consume habitualmente marihuana.
Se puede hablar de significativos
descensos en el uso de todas las drogas ilegales.
El consumo de pasta base de cocaína
mantiene su consumo marginal.
El Secretario General de la Junta
Nacional de Drogas, Milton Romani dijo que estos datos
muestran avances relacionados con la instrumentación de
políticas de gobierno y con la asunción del compromiso
social por parte de la ciudadanía.
Añadió que la reducción de los consumos
muestra los resultados positivos de la aplicación de las
políticas sociales. Resaltó que la interinstitucionalidad
entre JND, CODICEN, MIDES y Ministerio del Interior y otros
organismos, es un indicador por demás elocuente de que el
trabajo en equipo en esta temática da sus frutos.
Afirmó que no se trata de
prohibicionismo autoritario, ni de demagogia
liberalizadora. Dijo que se trata de educar para lograr
libertad y generar controles comunitarios "en territorio".
Por su parte, el Presidente de la Junta
Nacional de Drogas, Diego Cánepa explicó que existe una
confirmación de que las políticas aplicadas en los últimos
años han representado un marcado avance en la temática.
Señaló que es intención de la JND
generar una campaña de relanzamiento, a nivel nacional -en
las áreas de educación y prevención- de la magnitud
negativa del consumo abusivo del alcohol en los jóvenes y
adolescentes. Añadió que la prevalencia del consumo, desde
el año 2003, no deja dudas de que se trata del primer
problema en cuanto al consumo de drogas.
Destacó la enorme incidencia de la
contención familiar a la hora de alejar a los jóvenes de
las drogas. |