Seguirán recomendaciones del
Comisionado
Descongestionamiento carcelario:
traslado de reclusos a cuarteles y reparación de módulos
El Ministro Eduardo Bonomi, subrayó que
los primeros pasos que se darán en el cumplimiento de la
Ley de Emergencia Carcelaria transitarán por el
descongestionamiento de los centros de reclusión y la
reparación de los módulos que no están funcionando
correctamente. Aseguró que se seguirán las
recomendaciones del Comisionado Parlamentario en cuanto
eliminar las “ranchadas” y cambiar los sistemas
eléctricos y de calefacción.
El
Ministro del Interior, Eduardo Bonomi, realizó algunas
apreciaciones sobre la Ley de Emergencia Carcelaria
aprobada recientemente.
Esta
Ley, autoriza al Ministerio del Interior (MI) a disponer
hasta el 31 de diciembre de 2010 de $292.192.931 –fuera
del Presupuesto quinquenal-. Según los procedimientos
previstos por el TOCAF, este dinero deberá utilizarse
exclusivamente con los siguientes fines: modificaciones
edilicias de cualquier tipo en las instalaciones
penitenciarias que así lo requieran; contratos de
compraventa, arrendamiento o comodato de locales
destinados a prisiones o penitenciarías; adquisición del
equipamiento necesario; gastos derivados del
realojamiento de los reclusos, así como de alimentación,
higiene y salud.
En otro
orden, la Ley autoriza de modo extraordinario y hasta el
31 de diciembre del 2012, a alojar reclusos en
instalaciones militares, bajo la custodia interna del
Ministerio del Interior y externa de la Cartera de
Defensa Nacional.
Con
referencia a la asignación de personal penitenciario, el
Poder Ejecutivo podrá transformar vacantes ya existentes
en el Ministerio del Interior y además se crearán 1.500
nuevos cargos.
Asimismo, con el fin de alcanzar los objetivos
previstos, el Poder Ejecutivo a solicitud del MI y del
Ministerio de Economía, podrá disponer de ampliaciones y
reasignaciones presupuestales necesarias, incluidas
trasposiciones.
Bonomi
explicó que esta Ley fue presentada en el mes de mayo
pero recordó que se trata de un tema de vieja data, “por
lo menos desde 1985 en adelante existen los mismos
problemas que se señalan ahora”. Agregó que el pasado 2
de junio concurrió al Parlamento a exponer las políticas
elaboradas a mediano y largo plazo y de emergencia, para
contrarrestar los problemas detectados en el tema
cárceles. En la ocasión se solicitaron recursos
extraordinarios porque no era posible esperar hasta la
aprobación del Presupuesto, debido a la urgencia del
tema.
Reconoció que hasta ese momento el Ministerio contaba
con un diagrama de prioridades que no estaba encabezado
por Rocha, aunque sí se había mencionado su precaria
situación, al igual que la del penal de Lavalleja.
En este
sentido, el Ministro señaló que el trabajo comenzará por
el descongestionamiento con traslado de reclusos a los
cuarteles y reparación de los módulos que no están
funcionando correctamente, en tanto que Rocha será uno
de los primeros lugares que se priorizarán.
Según
Bonomi, lo que sí está definido para todas las cárceles
por igual, es seguir las recomendaciones del Comisionado
Parlamentario y entre ellas destacó la necesidad de
dejar de lado las “ranchadas” –utilizando otros
materiales-, corregir las instalaciones eléctricas y
proporcionar otros tipos de calefacción.
Como
parte de esta Ley, el Ministerio estudia la creación de
dos penales de alta seguridad en predios del Comcar
(Santiago Vázquez) y de Punta de Rieles.
La
Cartera entiende que las cárceles de máxima seguridad
deben alojar a unas 200 personas y que las de media y
baja seguridad alberguen a 300 internos. Para Bonomi
sería necesario separar narcotraficantes y delincuentes
vinculados al crimen organizado del grueso de la
población reclusa.
Actualmente el sistema penitenciario alberga a casi
9.000 reclusos, cifra que se cuatriplicó en 20 años.
En mayo
de este año había 8.863 reclusos en todo el país, casi
cuatro veces más que los 2.244 presos de 1989 y el doble
que en 2000, cuando ascendían a 4.369. Sin embargo, las
prisiones tienen capacidad para poco más de 6.000
personas. |