Espacio de expresión cultural
Ex Cárcel Miguelete se transforma en nuevo reducto para
el arte contemporáneo
En el recinto que albergó durante 102
años a la Cárcel Miguelete se ubica hoy un nuevo espacio
para el arte contemporáneo. Este emblemático lugar de
Montevideo, caracterizado por la privación de la libertad,
se transforma como un “palimpsesto urbano” y da inicio a
una nueva era de celebración de la cultura, donde el pasado
y el presente se fusionan para generar una nueva expresión
artística.
El Ministerio de Educación y Cultura
inauguró el Espacio de Arte Contemporáneo (EAC) ubicado en
la ex Cárcel Miguelete. La inauguración contó con la
presencia del Vicepresidente de la República, Danilo
Astori, el Ministro Ricardo Ehrlich y el Director Nacional
de Cultura, Hugo Achúgar, entre otras autoridades
nacionales. La recuperación de este lugar se encuentra a
cargo de la arquitecta Eneida de León y consta de varias
etapas. La primera, abarca dos plantas en una de las alas
de la ex cárcel.
Este edificio, que hoy se encuentra en
pleno centro de Montevideo, fue construido en las afueras
de la capital a finales del siglo XIX y mantuvo su
actividad carcelaria hasta mediados de 1980. Desde 1988
alberga al Centro de Diseño Industrial, al cual se ingresa
por la calle Miguelete y desde ahora contará también con
este nuevo espacio artístico, cuya entrada se ubica en la
calle Arenal Grande.
El Director del EAC, Fernando Sicco,
sostuvo que todo el edificio, al igual que el arte, está
siendo escenario de un constante proceso de construcción y
al abrir las puertas de este espacio se contribuye con un
nuevo escenario facilitador para promover algunos de los
objetivos de la intervención del Estado en el campo del
arte: brindar un marco de accesibilidad para los artistas y
el público, para el encuentro entre ambos y el desarrollo
de sensibilidades y pensamiento crítico.
Por su parte, el Director Nacional de
Cultura, Hugo Achúgar, recordó que este proyecto inició en
2008 y contó con el apoyo incondicional de quien en ese
momento era la Ministra de Educación y Cultura, María Simon,
hoy Subsecretaria y del ex-Intendente de Montevideo,
Ricardo Ehrlich, actual Titular de la Cartera. Además, tuvo
el aporte de la Agencia Española de Cooperación
Internacional (AECID).
Resaltó la importancia de reconstruir
este lugar, con el fin de convertirse en un referente local
de proyección internacional en el fomento de la producción,
investigación y exhibición del arte contemporáneo. “Qué
mejor destino que imaginar que en el futuro, todas las
cárceles viejas y todas las cárceles futuras a construir
tengan como destino final convertirse en centros
culturales, no en lo que ahora son”, sostuvo.
Por otra parte, el Ministro de Educación
y Cultura, Ricardo Ehrlich, afirmó que esta iniciativa se
suma a la apuesta de un país que se construye sobre la
cultura en todo el territorio nacional y en su diversidad.
Agregó que al visitar este lugar es inevitable recordar los
102 años que funcionó como cárcel y que la resignificación
del espacio, convirtiéndose en una suerte de palimpsesto
urbano, donde se escribe sobre lo viejo pero que al
“raspar” se pueden encontrar las huellas del pasado. “Es un
espacio que invita a la reflexión y se espera que también
invite a la inspiración y a la creación artística”
Finalmente, el Vicepresidente de la
República, Danilo Astori, expresó que en nuestro país va
quedando progresivamente atrás el erróneo enfoque que
significa creer que el desarrollo cultural es algo
subordinado al bienestar material y a la prosperidad medida
en términos de producción material.
Agregó que no hay proyecto nacional con
criterio de futuro sin un desarrollo cultural vigoroso que
juegue un papel de asociación muy estrecha con la educación
y con la creación de conocimiento, con el progreso
científico y tecnológico. En ese sentido, el desarrollo
cultural es el encargado en inyectar valores al progreso de
la educación y el conocimiento, y es el espacio de la
sociedad donde sus integrantes confluyen, crecen y se
cultivan juntos, aprenden a respetar valores superiores,
como la solidaridad, el respeto y la tolerancia.
“Ese es el enfoque que crece en el
Uruguay de estos días y además, crecen criterios
fundamentales para impulsar el desarrollo cultural, como
por ejemplo la democratización y descentralización de la
cultura”, resaltó y celebró la iniciativa de aprovechar un
espacio creado para la privación de la libertad, como un
espacio para profundizar una de las expresiones más
auténticas de la libertad: la creación artística. |