Apuesta a convivencia pacífica
Gobierno y oposición alcanzaron acuerdo sobre Seguridad
Pública
Tras seis meses de negociación, una
Comisión Interpartidaria sobre seguridad pública firmó un
acuerdo que contempla diversas políticas. Algunas requieren
intervención del Poder Legislativo (Código Penal, Código
del Proceso Penal, Ley Orgánica Policial, Archivo Genético
de ADN). Otras refieren a medidas presupuestales, rediseño
y despliegue territorial de la Policía, capacitación y
eliminación gradual del Servicio 222.
El diputado
del Frente Amplio, Jorge Orrico, informó que una comisión
interpartidaria trabaja en el tema de seguridad pública
desde febrero, y finalmente llegó a un documento de
consenso.
La propuesta
tiene dos ejes clave: primero, aquellas políticas que
requieren una Ley: modernizar y actualizar el Código Penal,
reformar el Código del Proceso Penal y la Ley Orgánica
Policial, crear el Archivo Genético de ADN y trabajar en
medidas alternativas y un sistema de salidas transitorias
que permitan incorporar al individuo a la vida en sociedad,
pero con una custodia que impida la reincidencia.
Segundo, las
medidas que no requieren intervención del Poder
Legislativo. Medidas presupuestales y rediseño de la
Policía Nacional. Concebir una Policía Comunitaria como una
modalidad del servicio que debe implantarse en todas las
comisarías del país, no importa la actividad que desempeñe.
Se apuesta al
despliegue territorial de la Policía, lo que implica una
reforma de gestión y profundizar la profesionalización.
Para ello, la Comisión acordó un sistema para ir eliminando
gradualmente el Servicio 222. Esto obedece a que quien
trabaja 16 horas diarias le resulta imposible dedicar
tiempo a la capacitación.
La
negociación
Orrico
informó que cada uno de los integrantes de la Comisión
partió de lugares diferentes y de concepciones ideológicas
distintas. En la discusión se fueron logrando consensos y
cristalizando en un documento.
Esta Comisión
tuvo la gran ventaja que siempre se contó con la presencia
del Ministro del Interior, del Subsecretario o del Director
General de Secretaría. De esta forma los temas se
negociaban rápidamente.
Siempre el
tema del adolescente en conflicto con la Ley genera
confrontación. Finalmente se llegó a una buena solución, en
la medida de los criterios que independientemente cada
Partido tiene y que fueron explicitados en los Programas
presentados a la ciudadanía en la última Elección, hay
acuerdo en que la niñez y la adolescencia son un interés
superior de la nación. Esto se traduce en el incremento de
escuelas de tiempo completo y la creación de institutos
secundarios con similares características.
Se requieren
condiciones para que el delito no se produzca, dijo, porque
si bien está mal decir que los pobres son los que delinquen
(lo consideró un disparate), hay condiciones de extrema
pobreza que son un factor de riesgo.
La minoridad
(sobre todo adolescentes) que no estudian ni trabajan, que
en Uruguay son muchos, es otro factor de riesgo.
La salida es
trabajar sobre ellos, creando condiciones para que esos
niños de hoy, mañana estén integrados, porque sino no se
puede hablar de rehabilitación, sino de habilitación,
aclaró. La idea es que todos respeten las reglas de juego
para la vida en sociedad.
El
concepto en sí mismo
La seguridad
pública es un derecho humano, una necesidad social
indispensable para la convivencia humana, un derecho de la
gente, un cometido esencial y una responsabilidad
indelegable del Estado. Es una condición sin ecuanum para
el desarrollo sostenible.
La seguridad
pública es bastante más que un Ministerio o una repartición
estatal, es una cuestión de la comunidad entera. Está
involucrado todo el aparato del Estado, no sólo un
Ministerio (pese a la relevancia lógica que tiene el
Ministerio del Interior).
El Estado
como tal debe inmiscuirse, procurando crear las condiciones
para que en definitiva la gente viva sin temor.
Rediseño
territorial policial
El Legislador
anunció que se crearán más Seccionales, Comisarías y
Destacamentos Policiales, distribuyendo los recursos
humanos. Esto requiere el ingreso de más personal, más
teniendo en cuenta que se procura eliminar el Servicio 222.
En la Ley de
Emergencia Carcelaria se le autorizó al Ministerio a
contratar hasta 1500 funcionarios, recordó Orrico.
En cuanto al
concepto de “Policía Comunitaria”, explicó que es una
doctrina que tiene que imperar en todo el organismo, que se
traduce en el viejo concepto de policía civil aggiornado,
identificado con la comunidad a la que pertenece y en
contacto permanente con ella.
Eso no es un
atributo exclusivo de un cuerpo determinado que se llame
“Policía Comunitaria”, sino una forma de proceder de toda
la Policía. Exige capacitación específica en un área que
normalmente la Policía no tiene. (Por ejemplo, cómo atender
a las personas en una Seccional).
La imagen de
cualquier institución pública o privada desde su “hall de
entrada” debe estar bien presentada, porque es fundamental.
De la misma forma, el individuo que ingresa a una comisaría
requiere ser recibido por alguien capacitado, que sepa
manejar las situaciones emocionales.
Inteligencia Policial y Seguridad Privada
En lo que
respecta a los Servicios de Inteligencia Policial, Orrico
explicó que el rol lo define cada Administración, la
Comisión no opera sobre las estructuras diciendo lo que
tiene que hacer.
Entre las
recomendaciones, destacó la necesidad de tecnificar todo,
porque actualmente se cuenta con técnicas muy sutiles que
pueden ser utilizadas por los aparatos de inteligencia,
sobre todo cuando se habla de delitos organizados.
En seguridad
privada, el legislador dijo que se debe revisar la
normativa existente (Leyes, Decretos), adecuándose a los
conceptos que tiendan a la profesionalización de esta
gente.
A través del
Ministerio del Interior es necesario darle al Estado un
papel orientador y fortalecer el Registro Nacional de
Empresas de Seguridad Privada (o como se denomine), que
tendrá a su cargo la inspección permanente de este tipo de
empresas. El objetivo es que cuenten con el personal
capacitado, y no con una persona a la que se le entrega un
arma y se lo manda a vigilar.
Medidas
que requieren Ley
En esta
Legislatura la Comisión de Constitución y Códigos de la
Cámara de Diputados está tratando el tema del Archivo
Genético Criminal de ADN incluido en el análisis de la
Comisión Interpartidaria. Es una Ley que implica que se
pueden realizar análisis de ADN pero a través de mecanismos
que aporten información sobre la identidad (que no haya una
asociación directa entre los genes no codificantes). Este
tipo de archivos mal manejado, puede ser utilizado por
organizaciones que trafiquen órganos, por ejemplo.
La Ley de
Emergencia Carcelaria creó una comisión especial sobre
reforma del Código Penal y del Código del Proceso Penal que
les entregarán en estos días, por lo que aguardan que en
esta Legislatura se apruebe. Asimismo, se está trabajando
en la Ley Orgánica Policial.
En cuanto a
las Leyes sobre Salidas Transitorias, existe un proyecto
sobre medidas alternativas que está en la Comisión de
Constitución y Códigos que se terminará este año.
Establecimientos Carcelarios: disminución de hacinamiento
Los
establecimientos carcelarios merecen un capítulo aparte en
este acuerdo. En el mismo se plantea que se debe
reestructurar todo el sistema, creando un Instituto
Nacional de Rehabilitación que opere como un servicio
descentralizado.
El acuerdo de
la Comisión implica que las cárceles salgan de la órbita de
la Policía Nacional. Esto no significa que salgan de la
órbita del Ministerio del Interior. Se trata de crear un
escalafón especializado en la custodia y en la habilitación
o rehabilitación de los detenidos.
Es necesario
crear un Instituto especializado con esa misión exclusiva,
porque no es correcto desde el punto de vista doctrinario
que la misma persona que detiene al individuo, sea la misma
que lo cuida y rehabilita.
La Comisión
abogó por un fortalecimiento del Instituto Nacional de
Criminología, que debe tener celeridad y funcionar con
eficacia, teniendo en cuenta que se trata de personas
detenidas, cuya situación se debe resolver rápidamente.
Orrico
explicó que es necesaria una descentralización de los
centros de privación de libertad, sea con la construcción
de nuevos establecimientos o con la adaptación de inmuebles
ya existentes, pero procurando que estas mega cárceles sean
disminuidas en su capacidad. El objetivo es contar con
cárceles más chicas en las cuales es mejor trabajar.
El Diputado
se refirió a la necesidad de contar con una cárcel de alta
seguridad sobre todo para las personas vinculadas al delito
organizado (trata de blancas, de órganos) y el
fortalecimiento del sistema de seguridad penitenciaria,
buscando medidas que mejoren el relacionamiento del
personal penitenciario con los recursos. Para ello se
apuesta a determinar qué condiciones de seguridad requiere
cada recluso.
Seguridad,
disciplina y programas de integración social deben estar
equilibrados, dijo. Todo esto requiere que haya una
disminución del hacinamiento de manera que se pueda
clasificar y a partir de allí trabajar.
Orrico confía
en que el tema del hacinamiento se resuelva en este
período. De ser así, se logrará clasificar la conducta de
los reclusos para que el gran narcotraficante que forma
parte del crimen organizado, no se junte con un “raterito”
que robó 300 pesos, porque sino este último va a la cárcel
a “hacer un postgrado”, reflexionó.
Por otra
parte, informó que recientemente se aprobó una modificación
a la Ley de Salidas Transitorias que le permitirá al
recluso salir a trabajar cuando aporte al Juzgado los
recaudos correspondientes que acreditan que efectivamente
desempeñó esa tarea.
El Legislador
se mostró optimista en que gran parte de las medidas que se
acordaron se podrán plasmar en cuestiones efectivas en este
período. En tanto, el efecto es diferido, no se verán
resultados inmediatos, concluyó. |