Donación japonesa
Instalarán planta solar fotovoltaica en predio de Comisión
Técnica Mixta de Salto Grande
Tiene un costo de 7:000.000 de dólares
y la primera de sus características es que estará conectada
a la red eléctrica en nuestro país. Contará con una
capacidad instalada del entorno de los 480 kWp y se estima
que en septiembre de 2011 esté operativa. Según el ministro
Kreimerman, el proyecto contribuye con la estrategia de
diversificación de fuentes energéticas, además del
desarrollo tecnológico y la mano de obra nacionales.
El Ministro de Industria, Energía y
Minería (MIEM), Roberto Kreimerman y el representante de
Crown Agents, Tim Armstrong, firmaron, en el
salón de actos de esa cartera, un acuerdo de donación,
en el marco de lo acordado el pasado 21 de diciembre por
los gobiernos de Uruguay y Japón, a través de la Agencia
Internacional de Cooperación de Japón (JICA).
La firma de este acuerdo facilitará la
concreción del proyecto consistente en la instalación de
una planta solar fotovoltaica de generación de energía
eléctrica, la primera de sus características en nuestro
país, que contará con una capacidad instalada del entorno
de los 480 kWp.
El proyecto plantea la instalación de la
primera planta solar fotovoltaica conectada a la red
eléctrica en Uruguay, con el objetivo de generar
conocimiento y experiencia local en el manejo de una
tecnología en pleno desarrollo y con gran potencial futuro.
Desde el MIEM se informó que la planta
se conectará al sistema eléctrico uruguayo como una nueva
fuente de energía a ser incorporada por el país y que
contribuirá con la estrategia de diversificación de fuentes
que Uruguay impulsa como uno de los ejes fundamentales de
su política energética.
La planta estará ubicada en uno de los
predios de la Delegación Uruguaya de la Comisión Técnica
Mixta de Salto Grande, en virtud de los altos niveles de
irradiación solar de esa zona del país, el acceso al
sistema interconectado, las políticas nacionales de
descentralización y la visibilidad pública del
emprendimiento, que formará parte del circuito de visitas
técnicas de Salto Grande.
El ministro Kreimerman indicó que la
donación para la instalación de la granja experimental es
del orden de los 7 millones de dólares. “Esto es de gran
importancia para nosotros -reconoció-, porque Uruguay
cuenta con una dotación de factores (en referencia al
viento, sol y agua) que permiten que nuestra matriz
energética se diversifique y lo haga a través de energías
renovables, limpias y no contaminantes”.
Energía autóctona e ilimitada
Crown Agents es el nombre de la
empresa internacional -con clientes en 110 países y con 36
oficinas en todo el mundo, según su sitio web-, que designó
el gobierno nipón para instrumentar el acuerdo suscripto.
El mismo “permitirá que todo el proceso de compra,
implementación y gastos previstos con esta donación sea
ágil y transparente para que, en un año, tengamos instalada
esta granja solar fotovoltaica”, puntualizó el secretario
de Estado.
El ministro Kreimerman reconoció que los
480 kWp que generará el emprendimiento energético, “no
constituyen una gran cantidad pero es algo interesante y
suficiente como para conocer el funcionamiento de los
paneles fotovoltaicos y cuales son los costos para poder
implementarlo”.
Esto, además de contribuir a la
independencia energética de los combustibles fósiles, puede
significar el inicio de una política más agresiva en
procura de utilizar una fuente de energía autóctona e
ilimitada que posiciona al nuestro entre los principales
países del mundo en cuanto a disponibilidad de energía
solar directa e indirecta.
En el MIEM se considera que “ya hay
camino avanzado en el estudio del recurso solar a partir de
un proyecto de estudio del potencial solar en el Uruguay,
que fuera presentado recientemente por la Facultad de
Ingeniería (UDELAR), en convenio con el Proyecto de
Eficiencia Energética de la Dirección Nacional de Energía
y Tecnología Nuclear”.
“En segundo lugar –agrega-, la
localización de la planta en el área de influencia de la
ciudad de Salto, va en línea con la política nacional de
descentralización e impulsa las decisiones en el mismo
sentido de la academia de generar centros de investigación
en el interior del país”.
El integrante del Poder Ejecutivo confió
que “estamos pensando que en la matriz prevista para el año
2030 tenga un importante porcentaje de energía solar pero
pretendemos, más que nada, diversificar y tener menos
dependencia del petróleo del que hoy en promedio -y
considerando los años de sequía- llegamos a consumir el
70%. Además, incrementar en un 10 o 15% la producción de
gas, similar porcentaje de energía eólica y un 5% o un poco
más, de energía solar”.
Consultado respecto a si el proyecto
puede significar un estímulo para el desarrollo del
conocimiento científico y tecnologías nacionales, el
ministro Kreimerman dijo que se tiene previsto “aplicar un
porcentaje de valor agregado nacional que asegure el
desarrollo tecnológico y la mano de obra propia.
Evaluaremos qué partes del sistema se pueden hacer en el
Uruguay y cuáles tendremos que traer de afuera”. |