Uruguay en la cadena de esfuerzos
Comunidad científica celebra Día
Internacional de Protección de la Capa de Ozono
La Estación de Ozonométrica
de la Base Científica Artigas obtiene datos sobre el
espesor de la capa de ozono estratosférica y la intensidad
de la radiación UV-B. La misma es gestionada y operada por
personal especializado del Servicio Meteorológico de la
Fuerza Aérea Uruguaya y envía, con regularidad, las
mediciones obtenidas y los estudios realizados a
importantes entidades de investigación meteorológica
internacionales.
Es un hecho por demás difundido, que la
capa de ozono que nos protege de los efectos nocivos de la
radiación ultravioleta, ha presentado en las últimas
décadas, un preocupante debilitamiento. Ello, por efecto
de la liberación indiscriminada, a la atmósfera, de
sustancias químicas fabricadas por el hombre con fines
industriales. Se trata de los denominados
“clorofluorocarbonos o CFC”, localizadas principalmente
sobre el territorio antártico y conocido como “Agujero de
Ozono” o “Agujero de Ozono Antártico”. Esta zona, es motivo
de constantes monitoreos e investigaciones por parte de la
comunidad científica internacional, con el objetivo de
identificar sus causas, monitorear su evolución y proponer
acciones tendientes a intentar revertir esta situación.
A partir del año 1998, el Instituto
Antártico Uruguayo con apoyo de la Dirección Nacional de
Medio Ambiente (DINAMA), decidió integrarse al esfuerzo
internacional de investigación de la capa de ozono sobre la
Antártica. Estas acciones, mediante la ejecución de un
proyecto científico para monitorear las medidas de ozono
desde su Base Científica en la Antártica (BCAA). Para ello
inauguró, el 5 de mayo de ese año, una Estación de
Ozonométrica, gestionada y operada por personal
especializado del Servicio Meteorológico de la Fuerza Aérea
Uruguaya (FAU).
El 31 de julio de 1998, la estación fue
aceptada por el Sistema Mundial de Observaciones de Ozono
de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), tomando la
denominación de “King George Island Station” número
351.
La misma está constituida básicamente
por un Espectrofotómetro Brewer, como instrumento de
medición y un computador asociado con software específico
para su operación.
El objetivo principal del referido
Proyecto, es la obtención de datos sobre el espesor de la
capa de ozono estratosférica y la intensidad de la
radiación UV-B en la vertical de la Base Artigas.
Razones presupuestales determinaron que
la ejecución del Proyecto debió ser interrumpida a
principios de 2002, no obstante lo cual, y luego de
distintas gestiones realizadas, se logró obtener la
suficiente colaboración para reiniciar sus actividades a
partir de diciembre de 2007. Esto fue posible gracias al
aporte económico ofrecido por el Gobierno de Canarias y el
apoyo técnico que, mediante un convenio de cooperación
brinda la Agencia Española de Meteorología, a través de su
Centro de Investigaciones Atmosféricas de Izaña, en
Tenerife.
Desde entonces se han enviado en forma
regular las mediciones obtenidas y estudios realizados a
importantes entidades, como el Centro Mundial de Datos de
Ozono y Radiación Ultravioleta (WOUDC, por sus siglas en
inglés) en Canadá, la División de Investigaciones
Atmosféricas de la OMM, en Suiza, la Red de
Espectrofotómetros Brewer de España, Portugal y
Marruecos (Iberonesia), entre otros. Estos hechos hacen que
nuestro país sea reconocido como un importante eslabón de
la cadena de esfuerzos que está llevando a cabo la
comunidad científica internacional.
Si bien recientes investigaciones
muestran algunos resultados alentadores sobre la situación
actual y evolución del fenómeno de debilitamiento de la
capa de ozono, se sabe que el proceso de recuperación será
lento y que, suponiendo el total compromiso de la comunidad
internacional a lo pactado en el Protocolo de Montreal, se
podría recién alcanzar a mediados de siglo.
Esto hace, que el seguimiento de este
fenómeno se deba realizar en forma permanente, mediante la
obtención de mediciones de estaciones satelitales y de
superficie, lo más confiables y completas posibles, que
ayuden a la toma de decisiones con la antelación debida,
para evitar retrocesos imprevistos en el proceso de
recuperación de la capa de ozono.