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15 de octubre, 2010

Procedimiento de rutina

UPM cesará actividades por 20 días al iniciar etapa de revisión general y mantenimiento
La planta UPM alcanzó el tope de producción autorizado e iniciará la revisión general de sus instalaciones. Coincidentemente, este proceso se realizará junto a la etapa de mantenimiento anual de la planta, por lo que cesará su actividad durante 20 días. El Director de Medioambiente, Jorge Rucks, explicó que se trata de un proceso de rutina en el cual la empresa cumple con los compromisos asumidos al momento de su instalación.

El Director Nacional de Medioambiente, Jorge Rucks, explicó que UPM (ex Botnia) tiene una autorización de producción -establecida desde el momento de su instalación- que marca un tope anual de 1.000.000 de toneladas de celulosa. Igualmente, se estableció un margen determinado por los niveles de productividad, pudiendo llegar hasta 1.111.200 toneladas/año. Una vez llegado a ese tope, la planta debe realizar una revisión general de sus instrumentos, equipos e instalaciones.

Rucks aclaró que desde la DINAMA se controlan los volúmenes de producción y al haberse constatado que éstos se acercaban al máximo se le comunicó la situación a la empresa, solicitando un informe sobre las acciones a tomar. La planta resolvió entonces hacer coincidir el receso para las revisiones con el período de mantenimiento anual, el cual se trata de un proceso de rutina. Rucks aclaró que UPM es quien decide cómo organiza sus actividades, recesos y mantenimiento de acuerdo a sus conveniencias. Cuando se identificó que el volumen de producción estaba llegando al máximo, la propia empresa tomó la decisión de tener un período de receso que durará de 15 a 20 días, previendo reiniciar su actividad cerca del 5 de noviembre.

El mantenimiento consiste en la revisión de todos los aspectos mecánicos y de ajustes que requieren los distintos instrumentos. De esta manera se evita que luego la planta entre en situaciones puntuales o fallas que a la postre pueden significar problemas de producción o medioambientales.

El mantenimiento de la planta implicará la presencia de personal de unas 50 empresas nacionales y misiones técnicas internacionales que brindarán asesoramiento.

En referencia al control ambiental por el que pasa esta empresa, Rucks aclaró que el comité científico de CARU comenzó sus actividades de reconocimiento de la planta con el fin de definir su plan de trabajo y que no es competencia de este comité atender temas sobre el funcionamiento operativo de la planta. Este aspecto corresponde únicamente a las responsabilidades de la empresa para con el país y los acuerdos alcanzados para la puesta en operación.

La empresa UPM alertó a la DINAMA que cuando la planta recomience su funcionamiento podrán emanar olores fuertes, que se diseminarán en el ambiente, que no son tóxicos ni afectan a la salud, pero que pueden molestar a la población. Los mismos cesarán cuando la planta ingrese en su ciclo de operación normal.