El ex presidente argentino Néstor Kirchner murió en la localidad de Calafate, debido a una afección cardiaca. Encabezó el gobierno a través de las primeras elecciones populares de la Argentina en la etapa posterior a la crisis. En su discurso de asunción a la primera magistratura afirmó: “ahora es el Estado el que debe actuar como el gran reparador de las desigualdades sociales y viabilizar los derechos constitucionales, con la integración latinoamericana como un proyecto regional”.

Néstor Carlos Kirchner Ostoic nació el 25 de febrero de 1950 en la capital de la provincia de Santa Cruz, la ciudad de Río Gallegos. Comenzó su participación en política a temprana edad, pues se afilió a las juventudes peronistas que se oponían a las reformas restauradoras de la “revolución libertadora” y la “revolución argentina”, dos golpes de Estado que barrieron con las reformas sociales y económicas del gobierno de Juan Domingo Perón y los posteriores gobiernos democráticos.

Mientras Juan Carlos Onganía, Marcelo Levingston y Alejandro Lanusse comandaron al Estado con mano dura, Néstor Kirchner culminó sus estudios. Se licenció como abogado en La Plata, ciudad donde conoció a su futura esposa y actual Presidenta de los argentinos, Cristina Fernández. Contrajeron matrimonio  en 1975. Ambos eran militantes peronistas de izquierda,  pero luego de licenciarse, en 1976, se marginaron de la actividad política. A pesar de esto, el joven abogado conoció la prisión en 1977.

Como funcionario del gobierno de su provincia, alcanzó la dirección de la Caja de Previsión Social de Río Gallegos, en 1983. Ya en años democráticos y luego de un debate público que protagonizaron Kirchner y el gobernador de Santa Cruz, -que lo obligó a renunciar a su cargo-, se lanzó a la arena política. Fue alcalde de Río Gallegos entre 1987 y 1991, para luego postularse por la gobernación de la provincia, elección  que ganó con el 66% de los votos.

Se mantuvo como gobernador de Santa Cruz durante once años, hasta que los duros años de la crisis económica argentina, con una gran crisis institucional,  radical desconfianza hacia el sistema político y la democracia representativa, lo coloca en el ámbito nacional como posible candidato a la presidencia. Con posterioridad  al gobierno encabezado por Eduardo Duhalde, que reordenó la institucionalidad argentina, se celebra

ron las elecciones de 2003 en las que Néstor Kirchner resultó triunfador en segunda vuelta con un discurso opositor al de Carlos Menem, presidente argentino de la década del noventa.

En su discurso oficial, afirmó :“ahora es el Estado el que debe actuar como el gran reparador de las desigualdades sociales y viabilizar los derechos constitucionales, con la integración latinoamericana como un proyecto regional”, conceptos que ilustran para sintetizar las bases de su gobierno.

Bajo su mandato, Argentina escapó a la crisis económica y fiscal, reorganizó la deuda externa, detuvo la inflación, incrementó los volúmenes exportadores y bajó la desocupación. A los ojos de la historia, formará  parte del conjunto de presidentes cuyas orientaciones económicas y sociales  han mirado a la ciudadanía con ojos más humanos.

Finalmente, asumió la responsabilidad de Secretario General de la    UNASUR, una institución con orígenes y directivas que nacen directamente del seno de las inquietudes de los latinoamericanos. Su actividad internacional no cesó a pesar de que su salud estaba en riesgo, debido a problemas gástricos e intervenciones cardíacas. Murió hoy 27 de octubre, a los 60 años, acompañado por su esposa, la presidenta Cristina Kirchner, en el hospital de El Calafate. Sus restos serán enterrados en su provincia y además, se instalará una capilla ardiente en el Congreso de la Nación Argentina.