Planta de energía en ALUR
Mujica abogó por defender a la caña de azúcar como un
patrimonio nacional
El Presidente señaló desde Artigas que
en el pasado faltó espíritu de unidad nacional para
defender la producción de caña de azúcar en el norte del
país: “nos dimos golpes inútiles, mientras las viejas
fábricas se mantenían ataditas con alambre, prendidas a una
esperanza”. Agregó que hay que poner talento para
incorporar más tecnología en la producción de la caña,
incorporar el riego y mejorar los sistemas de
fertilización.
El Presidente de la República, José
Mujica, inauguró una planta generadora de energía
eléctrica en el complejo agroenergético alimentario de
ALUR, ubicado en el Paraje Colonia España, en el
departamento de Artigas. En una primera instancia, dicha
planta producirá 10 megavatios, 4 de los cuales serán
distribuidos por la red eléctrica de UTE.
“Hemos pagado el precio como nación de
la falta de unidad”, dijo el presidente Mujica al inicio de
su alocución. Agregó que si bien la diversidad de clases,
de intereses y de pertenencias políticas es natural, una
nación para vivir necesita ciertos acuerdos en común, que
permitan el desarrollo de proyectos sustentables en el
tiempo.
En tal sentido, en referencia a las
polémicas que existían en el pasado en relación a la caña
de azúcar, precisó que fue una historia de muchos dolores y
derrotas. Dijo que muchos intelectuales esgrimían razones
de precios: sostenían que “se terminaba condenando a Doña
María a pagar más impuestos”.
En tanto, puntualizó el mandatario, otra
parte del país resistió: “había intelectuales de la
agronomía que estábamos convencidos que esta empresa era
difícil pero posible y que en el fondo en el norte no había
otra alternativa que pudiera sustituir a la caña”.
“Nos faltaba espíritu de cuadro grande y
nos dimos golpes inútiles, mientras las viejas fábricas se
mantenían ataditas con alambre, prendidas a una esperanza”,
sentenció.
Explicó que si una analizaba en
profundidad la realidad de los productores, se encontraba
con un puñadito que estaba por encima de los rendimientos
de Sao Paulo y se encontraba con otros que tenían
resultados desastrosos en materia de productividad. Todo
eso sucedía en un radio de 20 kilómetros, motivo por el
cual, explicó Mujica, era posible mejorar la productividad
global.
Por otra parte, el presidente reivindicó
el papel del componente agrícola en el emprendimiento de
ALUR. “Necesitamos que la producción de caña sea defendida
como un patrimonio nacional en el norte para poner los
talentos necesarios en las nuevas variedades tecnológicas,
en el sistema de riego y en el sistema de fertilización. El
esfuerzo industrial necesita de una pata ancha que lo
sustente, que es la parte agrícola, que tiene que responder
con creces al desafío que tiene por delante”.
Asimismo, puntualizó que hoy asistimos a
un nuevo escalón en la producción de caña de azúcar. No
obstante, especificó que la fase industrial aún no está
definitivamente madura. “Siempre quedan cosas por hacer:
ahora vendrá la historia de la vinasa”, comentó.
En referencia al capital social, indicó
que en la jornada jóvenes ingenieros le presentaron
orgullosos la nueva planta. “Si nos quedamos de brazos
cruzados estos gurises se van, porque aprendieron algo en
la facultad, pero ahora están aprendiendo laburando”.
Agregó que la educación sin oportunidades de trabajo es una
forma de despilfarro del esfuerzo social.
“Lo imposible parece que cuesta un poco
más, pero habrá que seguir batallando. Y lo que dije de la
unidad nacional no es para hacer historia, sino para mirar
hacia delante. Esto no puede ir para atrás, esto sale hacia
delante”, enfatizó el presidente Mujica. |