Violencia doméstica contra la mujer

Presentan datos sobre situación en Uruguay para combatir problemática

En el Día Internacional de la lucha contra la violencia hacia la Mujer, el Ministerio del Interior realizó la presentación de la Guía de Procedimiento Policial. Asimismo, se hicieron públicos los datos sobre victimas registradas entre noviembre 2009 y octubre de 2010, reveladores de que cada cinco homicidios, uno corresponde a una mujer. Bonomi, dijo que se trata un problema cultural y que se deben hacer esfuerzos para "cambiar la cabeza" de toda la sociedad.

El Día Internacional de Lucha contra la Violencia hacia la Mujer se celebra en todo el mundo desde el año 1981 en conmemoración del asesinato de las hermanas Mirabal, activistas políticas dominicanas que fue perpetrado en 1960.

En el marco del Día Internacional de Lucha contra la Violencia hacia la Mujer, el Ministerio del Interior se adhirió a la Campaña "Actívate Uruguay" que se realiza en el marco del llamado "Únete para poner fin a la violencia ejercida hacia las mujeres y niñas" lanzado en el año 2008 por el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki- moon.

Dicha campaña se encamina hacia el año 2015 con el propósito de establecer la meta de reducción de la violencia hacia las mujeres como compromiso mundial complementario a los objetivos del Desarrollo del Milenio.

Con el firme propósito de contribuir con este objetivo, el Ministerio del Interior convocó al seminario "Violencia doméstica como un tema de seguridad pública" ,El seminario fue precedido por una conferencia donde se presentó públicamente el decreto 317/ 10 que reglamenta la actuación policial en violencia doméstica y de género de la ley 18.315 de procedimiento policial y a al mismo tiempo, se revelaron datos sobre violencia doméstica del Observatorio de Criminalidad y Violencia.

El ministro del Interior, Eduardo Bonomi, dijo que la situación de violencia doméstica es un problema cultural y que más allá de que la policía intervenga se deben hacer muchos esfuerzos para "cambiar la cabeza" de toda la sociedad. Igualmente, señaló que todas las dependencias y organismos que trabajan en la lucha contra este flagelo continuarán en los esfuerzos para combatirlo. Comentó que el gran problema de detectar o prevenir la agresión es que la misma ocurre puertas a dentro, lugar donde la Policía no puede intervenir. Para atacar esta complicación, el Ministro anunció que se están licitando pulseras electrónicas para controlar a personas que están cumpliendo las penas alternativas y a aquellas que tienen prohibición de proximidad a una pareja.

Por su parte, la directora de la División Políticas de Género del Ministerio del Interior, Marisa Lindner, expresó que cada vez con mayor presencia, el Estado uruguayo a través de sus instituciones promueven instancias donde se rinde cuentas y se asume nuevos compromisos en el combate a la violencia de género. En ese sentido, dijo que su cartera asume el compromiso de instalar este tema en la agenda de seguridad a través de varios ejes de trabajo. Ellos son el fortalecimiento y profesionalización de la actuación policial en violencia doméstica y de género para que toda la Policía nacional brinde respuestas responsables, solventes y adecuadas y con calidad. Por otro lado, la jerarquización de las unidades especializadas en violencia doméstica, como espacios institucionales con competencia y especialización en la temática.

Asimismo, indicó que en el artículo 2/ 33 de la Ley de Presupuesto Nacional una norma programática que establece la jerarquización de las unidades especializadas en violencia doméstica con la dotación y la infraestructura necesaria. De la misma manera, se capacitará en todos los niveles de formación policial a los estudiantes para atender a victimas. También se buscará mejorar el registro de las denuncias y el análisis estadístico de la situación. A pesar de los esfuerzos realizados, la violencia doméstica queda invisible a través de la tipificación de otros delitos, subrayó. Por lo tanto, anunció que se trabaja para incorporar dentro del sistema de información una forma de vincular esos delitos como violencia doméstica. Además, informó que se está diseñando una encuesta de victimización en violencia doméstica y delitos sexuales, abuso y maltrato infantil, siendo la primera encuesta de estas características.

El sociólogo Javier Donángelo, del Observatorio Nacional de Violencia y Criminalidad, presentó datos de la situación uruguaya de violencia doméstica en el periodo noviembre 2009 y octubre de 2010. En primer término, dijo que generalmente las víctimas tienen dependencia económica y miedo a la estigmatización. Además, en su gran mayoría, siguen viviendo con el agresor.

Otro dato relevante, es que uno de cada cinco homicidios tiene como víctima a una mujer y 41 fallecieron como consecuencia de este grave delito.

Contrariamente a esta situación, el sociólogo informó que el número de denuncias creció desde el año 2008 a la fecha en un 123%. En este sentido, agregó que las denuncias por violencia doméstica son el segundo caso denunciado después del hurto.

Precisamente, en lo que va del año, superan a las denuncias por delito y el 85% de las mujeres asesinadas, es por causa de violencia doméstica mientras que el resto es por rapiña o copamiento. Del vínculo del agresor con la mujer se reveló que el 50% mueren a manos de sus parejas actuales o de sus ex parejas, mientras que el riesgo de que ésta sea asesinada por un desconocido es de un 7%. En lo que tiene que ver con edades, predominan las mujeres jóvenes que no supera los 50 años. En cifras concretas, en Uruguay el promedio es de un homicidio cada 10 días, que es tres veces y media superior a la de los países de Europa Occidental.

Las armas usadas en general no son de fuego lo que refleja que la vulnerabilidad física de la mujer es un factor determinante y no sea necesaria un arma de fuego y un cuchillo de cocina pueda ser un arma mortal.

Otro aspecto importante que se vio en esta investigación fue que el 71% de los hombres que matan a una mujer por violencia doméstica, se quitan la vida. En este sentido, explicó que de esta situación se puede decir que los hombres no soportan el abandono y tanto el machismo como el sentido de pertenencia o un posible abandono materno pueden ser determinantes de que se transformen en asesinos.