Fuerte impulso
Desarrollo Rural: tres proyectos para apoyar y
fortalecer a 34.000 productores familiares
Tras afirmar que las políticas
vinculadas al desarrollo rural han sido durante muchos años
“la gran asignatura pendiente” en el Ministerio de
Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), Tabaré Aguerre
destacó la implementación de tres proyectos que procuran
apoyar y fortalecer sobre todo a los productores
familiares. Se trata de aproximadamente unos 34.000, que
tienen menos de 500 hectáreas, y de los cuales 24.500 son
ganaderos familiares.
Aguerre dijo que actualmente tenemos
un mundo que demanda alimentos, energía y fibras, con
relaciones de mercado que han dinamizado con mucha
fuerza la actividad económica en los últimos 10 años en
el país.
A esto, dijo, se agregan sistemas
productivos de alta tecnología, con alto nivel de uso de
las técnicas de la información y la comunicación, la
masificación en la agricultura de la siembra directa y de
los cultivos transgénicos; novedosos y modernos sistemas de
comercialización y de coberturas de riesgos.
No obstante, señaló que todos esos
procesos han llevado implícito, tanto el de la agricultura
como el de la forestación, un modelo de concentración en el
uso de los recursos.
“Y un modelo de concentración en el uso
de los recursos en un Uruguay de las características de
población rural que tiene nuestro país, lleva a la
exclusión y no a la inclusión de algunos sectores que
consideramos estratégicos en cuanto a la sociedad rural
uruguaya”, dijo.
Por este motivo, explicó, ya en el
gobierno anterior quedó conformada en el MGAP la Dirección
General de Desarrollo Rural con el objetivo de implementar
políticas de desarrollo a través de tres proyectos que se
conocen como el Proyecto de Producción Responsable, con
financiamiento del Banco Mundial; el Proyecto Ganadero, con
financiamiento del BID; y el Proyecto Uruguay Rural, con
financiamiento FIDA.
“Nuestra intención es tener una política
de desarrollo integral con un abordaje integral y no por
actividades específicas”, dijo el ministro quien explicó
que actualmente “estamos fortaleciendo el presupuesto de
esa Dirección, la estamos constituyendo, estamos creando
los cargos de desarrollo en el interior y hemos obtenido la
autorización de un aumento de nuestra capacidad de
endeudamiento externo para llegar a ejecutar esos
programas, sobre todo en productores familiares que en el
Uruguay en su mayoría son ganadero-familiares”.
Para Aguerre “es bueno que se conozca
que en el Uruguay hay 54 o 55.000 productores, de los
cuales 34.000 son productores familiares”. Explicó que se
trata de productores familiares que tienen menos de 500
hectáreas, índice CONEAT 100, que viven en el predio o a 50
kilómetros del predio, y que ocupan dos o menos de dos
empleados permanentes. “Esa es la definición de agricultor
familiar en el Uruguay”, dijo.
“Esos agricultores familiares, que como
digo son las dos terceras partes, de esos 33.000 hay unos
24.500 que son ganaderos-familiares. Y normalmente son
ganaderos familiares, en su mayoría ganaderos criadores, y
en su mayoría están ubicados en regiones con suelos que
-por algo son ganaderos criadores, por algo no son
invernadores y por algo no son agricultores: por las
condiciones edafológicas o de capacidad de almacenamiento
de agua de sus suelos”, sostuvo.
Para Aguerre esos productores son los
que requieren apoyo, y agregó que además de planes de
asistencia técnica, de ayudas en materia de manejo de campo
natural, de ayudas en manejo de los rodeos de cría o de las
majadas ovinas, “nos parece que requieren una malla de
contención que de alguna manera los ayude a sortear los
efectos climáticos adversos, como por ejemplo una sequía
que los puede hacer desaparecer del mapa económico”.
“No podemos hacer lo que el productor
tiene que hacer por sí mismo. Un gobierno tiene que generar
un marco de reglas claras, una ruta para cada rubro donde
debe transitar, pero en algunos casos tiene que tener
intervenciones que corrijan las asimetrías que por sí solo
ni la capacidad de la empresa, la capacitación del
productor, la ubicación geográfica donde está, o el
mercado, impidan resolver por sí sola”, dijo.
Explicó que las políticas de desarrollo
agropecuario y rural que se van a llevar adelante desde el
Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, para esa
población objetivo de productores familiares, conjuntamente
con la Dirección de Desarrollo también trabaja la Dirección
de la Granja donde recordó hay un montón de productores
granjeros que también son pequeños productores familiares.
“Cuánto de esto se podrá ejecutar, qué
éxito tendremos, en qué grado impediremos que se siga
perdiendo población rural, son preguntas difíciles de
contestar”, dijo, agregando que la emigración rural no es
un problema de nuestro país sino que es un problema
universal. “En todas partes del mundo ocurre, lo que
tenemos que hacer nosotros es generar las condiciones para
que sea más digno vivir en condiciones rurales”, afirmó. |