Mujica: debemos apurar el tranco
El Presidente destacó la importancia del intercambio
internacional
Tras destacar como un elemento
fundamental el relacionamiento personal en el marco del
relacionamiento internacional, el Presidente José Mujica
ratificó desde su audición de M24, la necesidad de la
diversificación de la producción y de los mercados, pero
subrayó la importancia que tiene la región para nuestro
país. “Ello significa cultivar las mejores relaciones
posibles pero no solo en mera teoría, no solo en papeles
escritos”.
En su audición de M24, el Presidente de
la República sostuvo que en un mundo “con multitud de
centros económicos, con mecanismos que condiciona las
relaciones de todo tipo y sustantivamente las relaciones
comerciales donde el concepto de libertad de mercado es,
fundamentalmente, una declaración, un pomposo enunciado
porque reina la libertad de mercado para venderte pero una
cosa muy distinta es cuando tu vas a vender. Encontrarás
por todas partes las resistencias a veces desde adentro de
los Estados, por encima de los papeles y los compromisos
suscriptos, en otras veces los distintos niveles de la
burocracia”.
Dijo que existe todo un conjunto de
recursos que permiten teóricamente sostener la libertad de
mercado por un lado, pero desde el punto de vista real no
ejercerlo. Y en este sentido, recordó que “esa
contradicción que hace pocos días saltó que un país nos
pide, para que ingrese nuestra carne, poco menos que el
análisis cerebral de cada vaca que ha sido faenada para
producir esa carne y el mismo país no tiene ningún
inconveniente para que le entre ganado en pie, vivo, desde
el Uruguay. Contradicciones de este tipo abundan en el
mundo de hoy y están frecuentemente más allá de los
tratados y mucho más allá de los acuerdos firmados”.
Tras señalar que nuestro país tiene una
larga experiencia en materia de tratados y acuerdos, Mujica
recordó que “tenemos un TLC acordado con México, ¡y vaya
las dificultades que más de una vez hemos tenido para
colocar alguno de nuestros productos! ¿Por qué? Porque por
todas partes hay intereses que se sienten agredidos por
nuestra competencia y se mueven, e influyen y logran
decisiones tácitas más allá de los acuerdos”.
“Pero tenemos que recordar algo muy
elemental, con lo cual hay mucho que insistir: atrás de los
papeles firmados, muy atrás, siempre hay seres humanos;
hombre y mujeres, con todo lo que ello significa, y a veces
hacemos abstracción de esa realidad y nos conformamos con
la letra muerta”.
Para el Presidente “si atrás de nuestras
gestiones no existen seres humanos que accedan a
acompañarnos con alguna capacidad de influir o de decidir,
es muy probable que los papeles queden precisamente sin
aplicación. Ninguna relación, ninguna forma de relación
puede sustituir hasta hoy a las personas”.
“Mucho después vendrán los papeles pero
es previo ese tipo de relacionamiento que obliga,
naturalmente, a gastar energías pero que no encontramos
forma de sustituirlo”, agregó.
En el mismo sentido, recordó su reciente
viaje a Brasilia y donde “fuimos a cumplir con un homenaje
a un celebre antropólogo, creemos que el primero que dio
esta materia en el Uruguay hace muchos años. Hace muchos
que Darcy recaló refugiándose de la dictadura militar
brasilera”.
Pero naturalmente, dijo, “ fuimos a ese
homenaje respondiendo a una invitación de Lula, porque el
gobierno brasilero que se retira, el que se retira es Lula
de la Presidencia de Brasil naturalmente es un hombre muy
importante que va a seguir influyendo inevitablemente en la
política brasilera pero el Uruguay tiene que continuar y
tiene que tejer ahora la relación con el nuevo aparato, que
si bien es sucesor del que existía va a tener
conformaciones también distintas y ese es un ensamblaje de
relación humana entre los hombres para poder a posterior
acordar discutir, negociar”.
Al respecto, dijo que Uruguay tiene un
conjunto de problemas pendientes con la región, aparte de
que Brasil es hoy por hoy nuestro principal cliente
exterior y lo seguirá siendo probablemente cada días más.
“La idea de que Brasil, por su magnitud
y por el tipo de producciones que tiene, es un país
competitivo con nosotros es cierto, pero es relativa. Hay
un Brasil con enorme poder adquisitivo superior al que
puede tener un país como Francia. Hay un Brasil rico, que
consume algunos de los productos uruguayos por calidad, por
tradición. Los mejores clientes para los corderos uruguayos
están tal vez en las parrilladas de San Pablo. ¡Y vaya que
nuestra gran empresa láctea, CONAPROLE, sabe por notoria
experiencia que habiendo 10 marcas en los supermercados
brasileros la gente cuando encuentra productos CONAPROLE
los arrebata!”
Para Mujica esta relación resulta
estratégica en varios sentidos, aunque hayan cosas
pendientes importantes. Recordó que luego de años, “cuando
mejoramos la relación con Argentina, el gobierno argentino
habilitó que el Uruguay pudiera utilizar los fondos
acordados, eso que se llama el FOCEM; Fondos económicos
para construir una línea de interconexión eléctrica con
Río Grande del Sur y tener una variable más en caso de
necesidad cuando nos aprietan las grandes sequías y donde
frecuentemente nos puede salir más barato comprar energía
en el exterior que producirla en base a petróleo”.
“Pero, naturalmente, eso está en curso y
está en marcha y estuvo congelado mucho tiempo, ahora se
está haciendo. Pero tenemos que acordar los precios de ese
intercambio, porque nos convendría conseguir precios
razonables con respecto a esa energía y no caer con precios
del último momento que suelen ser muy caros. Pero esto hay
que acordarlo con el gobierno de Brasil. Ganaríamos mucho
en seguridad pero tenemos que ganar también en la
conveniencia de relaciones económicas.
Dijo que este es un asunto pendiente que
tendremos que negociar. Está pendiente el afinar el acuerdo
automotriz que está deparando para el Uruguay la
posibilidad de muchos puestos de trabajo. Está pendiente la
participación de PETROBRAS en algunos tipos de acuerdos con
ANCAP para los cuales existen francas posibilidades.
Hemos avanzado muchísimo. Hace 19 años
que hay una propuesta de hacer un nuevo puente sobre el
Yaguarón, allí casi en conexión con la Ruta 26. Las
decisiones de Brasil han madurado muchísimo pero ahora hay
que concretarlas. Hay que apurar el tranco. Lo mismo digo
con respecto a la eventual interconexión ferroviaria en
Rivera y Santa ana (do Livramento).
En fin, existen problemas de relaciones,
existen problemas que no son solo de intercambio comercial:
hay que construir infraestructura complementaria. De acá se
deriva que el nuevo gobierno de Brasil, que por razones
constitucionales, increíblemente arranca el 1º de enero,
nos obliga a que parte de nuestro equipo de gobierno trabe
las mejores relaciones posibles con los nuevos ministros y
sus equipos respectivos porque todos estos tendrán que ver
en negociaciones futuras.
Creemos que la inserción internacional
es decisiva para el destino del país, para el trabajo, para
el intercambio. De nada vale producir si no se vende bien,
si los números no cierran.
El que esto pueda ser así en parte
depende de la habilidad de tejer las relaciones de carácter
internacional. Pero si las relaciones internacionales son
importantes con el mundo entero son decisivas con los
colosales países que nos rodean en el marco de esta región,
porque hasta ahora los países no se mudan y como no se
mudan tiene que tener conciencia de las limitaciones que
les impone su geografía, pero tienen que tener clara
conciencia también de las oportunidades que les da su
geografía. Ello significa cultivar las mejores relaciones
posibles pero no solo en mera teoría, no solo en papeles
escritos, sino tener mucha franqueza y tener relaciones
personales los más anudados posibles que nos ayuden en los
momentos de traba a encontrar salidas porque existe en el
fondo voluntad de encontrar salidas. Sin esto nada se
conseguirá.
En realidad estas son cosas que deberían
saberse pero no necesariamente la opinión pública las
conoce. Y este es uno de los motivos por los cuales
nosotros damos tanta importancia a las relaciones con la
región y creemos francamente que en este frente hemos
recogido en poco tiempo beneficios que si no cambian la
historia del Uruguay, no pretendemos eso, sí nos han
permitido avanzar sustantivos pasos y creemos que tenemos
que continuar duramente construyendo esa política y
construyendo esas relaciones.
Atrás de los acuerdos que se cumplen,
atrás de las mejoras de relaciones, existen miles y miles
de compatriotas que se ganan la vida por la influencia del
turismo, que se ganan la vida porque son albañiles y
responden a los retos que la inversión inmobiliaria de
afuera está imponiendo en toda la costa uruguaya y en otros
lugares. Y no son de palos, son compatriotas que se gana la
vida.
También existen miles de compatriotas
que se ganan la vida en el intercambio comercial, en las
redes del transporte, en la logística, en todo ello.
El mundo del trabajo en estas cosas
necesita estas cosas previas y a veces no se ve la
importancia que tienen estas cuestiones que hacen posibles
lo verdaderamente importante que es tanta gente se pueda
ganar decentemente la vida en sus trabajos y en sus
relaciones.
Y acá cuando hacemos análisis estamos
obligados a disociar por partes la realidad. Sin embargo,
la realidad es un conjunto de cosas que interactúan unas
con otras. No nos cansaremos jamás de continuar en todo lo
posible afirmando las relaciones no solo en el mundo, sino
sustantivamente regionales en todo lo podamos.
Con una salvedad, como pequeño país
nuestro destino debe ser la diversificación de productos y
de mercados. El Uruguay no puede renunciar a su condición
ni a su geografía, tiene que tener la sabiduría de ser
sabio en el sentido de cuidarse del abrazo del oso, y por
lo tanto tejer una amplia interdependencia que nos ayude en
los momentos de dificultad. |