Botulismo en Paysandú
MSP: equipo técnico de Epidemiología trabaja
intensamente para identificar causas
En relación con la aparición de tres
casos sospechosos de botulismo en Paysandú, el MSP inició
en el pasado fin de semana un trabajo de investigación con
el fin de identificar posibles causas. El director de
Salud, Gilberto Ríos, junto al equipo técnico de la
división Epidemiología se comunicó en videoconferencia con
la directora departamental de Salud, Magdalena Espillar y
equipo local, con el objetivo de actualizar la información
.
En la sala de
videoconferencias del Ministerio de Salud Pública
se realizó una comunicación del equipo de División
Epidemiología con la directora departamental de Salud de
Paysandú, departamento donde se han detectado los tres
casos de botulismo.
Para esta instancia
de intercambio, el MSP convocó a integrantes del
Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, a la
Intendencia Municipal de Montevideo, a la Organización
Panamericana de la Salud, y a la Unidad de
Descentralización del MSP con el fin de analizar la
situación.
El director General
de la Salud, Gilberto Ríos, informó que su cartera viene
trabajando intensamente en la búsqueda de las causas que
pudieron provocar la aparición de esta enfermedad. En ese
sentido, indicó que los pacientes detectados están
confirmados, desde el aspecto clínico y epidemiológico
restando el análisis de laboratorio, que debió enviarse a
Argentina, y cuyo resultado estará disponible en 48 horas.
Ríos explicó que la
característica de estos casos es que son diferentes entre
sí. En el primero de ellos, la paciente se encuentra
internada desde el 10 de diciembre en el Hospital Maciel y
su estado es estable. La segunda paciente está internada en
Hospital Español, también en situación estable. Por su
parte, la tercer paciente afectada permanece en Paysandú y
fue el único caso en que se detectó a tiempo la patología.
Por tanto, le fue administrado el suero antibotulinico,
presentándose una leve mejoría en el aspecto neurológico.
Las únicas
coincidencias que tienen estos tres casos radican en que se
trata de tres mujeres que viven en Paysandú,. Además, la
paciente del hospital Español y la paciente que ha
permanecido en Paysandú son hija y madre, respectivamente.
El jerarca de Salud comentó que aún resulta difícil
identificar la fuente de contaminación de estas personas.
Recordó que en
nuestro país existe un antecedente de esta enfermedad en el
año 1999, en que después de la detención del primer caso y
los entonces cuatro involucrados, el punto en común fue
una conserva casera.
En la situación
actual, lo único que se puede determinar es que pudieron
haber sido dos fuentes, ya que es muy difícil unir un mismo
alimento de una persona que se enfermó en noviembre, con
dos personas que se enfermaron entre fines de diciembre y
principios de enero.
Ríos subrayó que para
identificar las causas de la aparición de bolutismo viene
trabajando intensamente un equipo en Paysandú,
interrogando a los familiares de los pacientes,
investigando aquellos alimentos que consumieron en los
domicilios de las propias personas y en los negocios en que
fueron comprados.
El botulismo es una
intoxicación rara, pero grave, causada por una toxina
producida por la bacteria Clostridium botullinum. La
enfermedad puede surgir al ingerir alimentos que contienen
la toxina, siendo los alimentos enlatados los más
frecuentemente involucrados. No obstante, también es
posible vincularlo al consumo de otro tipo de alimentos,
como pueden ser conservas caseras en mal estado.
La prevención pasa
por el correcto lavado de manos y recipientes utilizados
para la elaboración de conservas. Además, según indicó el
jerarca, “la preparación casera de alimentos en conserva
debe cumplir criterios de tiempo, presión y temperatura
apropiados para la destrucción de la toxina.
Asimismo, Ríos
recordó que se llama a no dar miel a los niños, antes del
año de edad, y a no ingerir alimentos enlatados que
presenten deformaciones en su envase. Señaló la
recomendación de desechar el producto cuando la lata esté
pinchada o hinchada.
Una medida de
precaución puede ser el hervido durante 10 minutos de
aquellos alimentos enlatados antes de consumirlos.
Los síntomas
presentan “manifestaciones clínicas del sistema nervioso
principalmente, ptosis palpebral (incapacidad de elevar a
su posición normal el párpado superior), visión borrosa,
diplopía y parálisis fláccida descendente y simétrica que
puede evolucionar a insuficiencia respiratoria y paro
respiratorio”.
En caso de niños
lactantes, según se informó, la enfermedad presenta
“estreñimiento, inapetencia, indiferencia, ptosis
palpebral, dificultad a la deglución y aparición de
debilidad progresiva que puede evolucionar a insuficiencia
y paro respiratorio”. |