Para Pepe, “El Sol del Perú”

Alan García: ”José Mujica, personero de la paz y el desarme entre nuestros pueblos”

García destacó del mandatario uruguayo, su personalidad, “permanente en su lucha orientada a grandes objetivos de la paz y la justicia”, al condecorarlo con el Gran Collar de la Orden “El Sol del Perú” en el Grado de Gran Cruz con Brillantes. Mujica agradeció distinción en el entendido de que es verdaderamente un reconocimiento al pueblo uruguayo. La ceremonia se realizó en Salón Dorado del Palacio de Gobierno en presencia de altas autoridades.

“Esta Orden del Sol que es el Sol de los Incas, esta Orden del Sol que es el viejo y permanente Perú, debe recibirla y ser personero, como te hemos pedido, de la paz y el desarme entre nuestros pueblos”, afirmó  el presidente Alan García Pérez, al distinguir al presidente de la República Oriental del Uruguay,  José Mujica,  con la máxima condecoración del Perú.

Durante la ceremonia  realizada  en el Salón Dorado de Palacio de Gobierno, el mandatario señaló el hecho  de que hubiesen tenido que transcurrir 25 años desde la última visita presidencial de Estado que realizara un primer mandatario del Uruguay al Perú.

“Pero, bien ha valido la pena esperar todo este tiempo, para recibir a Pepe Mujica como expresión auténtica y acrisolada de ese pueblo que ha sido siempre para nosotros ejemplo de democracia, ejemplo de educación, ejemplo de paz entre nuestros pueblos de Sudamérica”, recalcó.

Expuso que fue en Uruguay, donde se alzó mucho antes que en otros lugares la voz de una nueva forma de Estado democrática y social que, a través de presidentes como José Batlle y Ordóñez, impulsaron  tempranamente en el siglo XX las reformas laborales, la reforma del Estado, en su capacidad de entonces, y su necesidad de conducir la inversión y las nuevas formas de desarrollo.

“De ese Uruguay, al que llamamos con entusiasmo juvenil “la Suiza de América”, de ese Uruguay viene hoy día José Mujica para traernos un  mensaje de afirmación democrática.. Porque no solo condecoramos al elegido por los pueblos de Uruguay,  sino también a un luchador permanente cuyos 14 años de prisión son la mejor condecoración que puede llevar sobre su pecho,  como ejemplo para todas las generaciones latinoamericanas”, subrayó.

El jefe de Estado peruano destacó del mandatario uruguayo “su personalidad,  permanente en su lucha a los fines de la justicia”. Empero, destacó que,  atento siempre al realismo de conocer los cambios del mundo y saber enfrentarlos  orientándolos a los mismos y grandes objetivos de la paz y la justicia.

García  recordó lo que fue la  lucha, según dijo  “desde ese viejo Frente de Liberación Nacional hasta el Movimiento de Participación Popular,  como una constante de búsqueda, de concertación y una constante de libertades”.

Por eso, señaló: “en recuerdo a tus luchas, a tus compañeros, muchos de ellos muertos, es necesario aprovechar al máximo todos los resquicios y posibilidades que el mundo nos da para cumplir los objetivos en los que se soñó en la juventud.”

Acotó que  la paz y la justicia son dos palabras que significan la vieja lucha de Mujica. “Y nos alegra que el pueblo uruguayo haya premiado esa lucha haciéndote su representante. Y nos alegra que con la misma fuerza de  Artigas estés junto a nosotros para sembrar los árboles del mañana”, dijo.

El presidente Alan García evocó la figura de José Artigas, el descentralista, el republicano que supo, en su momento,  distanciarse de los planes monárquicos de otros, pero que de alguna manera también contribuyó al fortalecimiento de la expedición Libertadora que hasta nuestras costas llegó.

“Artigas,  de alguna manera está presente cuando ponemos sobre tu pecho la Orden del Sol del Perú que,  San Martín en este mismo espacio creó,  para imponerla a quienes representaran algo grande en la historia de América,  y algo meritorio en el camino de sus pueblos”, manifestó el mandatario peruano.

A continuación el presidente Mujica  agradeció la distinción que, dijo tomar como un reconocimiento a su pueblo.

“La medalla no es para Pepe, es para el pueblo uruguayo que además de saber jugar al fútbol sabe soñar también, a su manera, la gran causa que se llama América, nuestra América, nuestro continente, nuestros compatriotas, los que no saben leer, los que están olvidados”, dijo.

“Yo no merezco medallas, la medalla más grande es estar vivo, la vida es un milagro, y si el transcurrir fuera una pulpería quisiera que al llegar al fin,  pudiera pedir al pulpero otra vuelta para seguir viviendo. Está todo por hacer, se ha hecho poco, pero cuánto falta, hay que seguir soñando”, manifestó.

La ceremonia de condecoración se inició a las 20:15 horas en el Salón Dorado de Palacio de Gobierno, en presencia de altas autoridades peruanas y uruguayas.

Luego, los dos mandatarios recibieron el saludo de las autoridades y personalidades concurrentes.

Posteriormente, los dos jefes de Estado y sus invitados se dirigieron al Gran Comedor de la Casa de Gobierno donde el presidente Alan García ofreció una cena en honor al mandatario uruguayo.