“Heisei-En” : La paz lograda
Integración de las sociedades uruguaya y japonesa rinde
frutos en todo el país
A noventa años del establecimiento de
relaciones entre Japón y Uruguay, los representantes de la
nación nipona en nuestro país recorrieron centros que
recibieron su apoyo en la cooperación internacional. Luego,
cerraron el trayecto con un paseo por el emblemático Jardín
Japonés. Acompañó a la comitiva en su recorrida la
intendenta de Montevideo, Ana Olivera. La cooperación
japonesa donó en 2010/2011 unos 160 mil dólares.
La recorrida comenzó en el Centro de
Atención a la Infancia “Mi Casita”, lugar donde se
construyó un salón destinado a la estimulación temprana,
para unos 160 niños, todos ellos residentes del barrio
Casavalle. El centro es un emprendimiento de la Unión de
Mujeres Uruguayas y contó con la colaboración del
Ministerio de Transporte y Obras Públicas, la
Intendencia de Montevideo y la Agencia de Cooperación
Internacional del Japón. Este año, el centro de
orientación y educación de Mi Casita cumplirá 20 años.
El segundo punto de encuentro fue la
sede de la asociación civil Acción Promocional, una
iniciativa que nuclea a vecinos del Cerrito desde hace 35
años. Allí se instaló el centro educativo “Midori”, en el
cual los jóvenes y adolescentes del barrio aprenden sobre
jardinería, horticultura orgánica y mantenimiento de
espacios verdes. El año pasado el centro atendió a 80
jóvenes y 40 adultos; los últimos provinieron del programa
del Ministerio de Desarrollo “Uruguay Social”, en su
mayoría. En ocasión de la visita de ayer, los miembros del
colectivo obsequiaron un timbó al embajador Kenichi Sakuma.
La recorrida fue acompañada por la
prensa y asimismo por distintos beneficiarios de la
cooperación japonesa, entre los que se contaron integrantes
de la cooperativa agraria CALESFRA de Fray Marcos,
Florida.
Los setenta productores agrupados se
dedican a diversas áreas de la ganadería y la agricultura.
Recibieron dos maquinarias para la siembra de granos,
indispensable para la producción de los pequeños
propietarios.
La recorrida finalizó en el Jardín
Japonés, situado en el parque del Museo Blanes, en la zona
de El Prado. En el acceso al jardín se lee: : “Heisei –
En”, que significa “la paz lograda”. La puerta de entrada
al jardín será removida por otra, construida por un
voluntario japonés, especialista en la curaduría de
puertas tradicionales en su país de origen.
A la recorrida se sumó la intendenta
capitalina, Ana Olivera, quien recordó que en el mes de
setiembre este espacio verde cumplirá diez años de su
existencia en este lugar tan caracterizado de la ciudad.
Desde que se implementó el Programa de
Asistencia Financiera No Reembolsable de Apoyo a Proyectos
de Seguridad Humana, en el año 2003, se financiaron unos 53
proyectos, que contabilizan unos 3.546.930 dólares hasta el
momento. En los últimos doce meses, la cooperación no
reembolsable fue de 159.662 dólares.
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