Durante seminario en San Pablo

Ministros destacan clima de inversiones y alientan llegada de capitales brasileños

La economía uruguaya cuenta actualmente con un marco ideal para la inversión extranjera y está en mejores condiciones que nunca para complementarse con la brasileña en numerosos sectores productivos, afirmaron hoy los ministros de Relaciones Exteriores, Economía, e Industrias, Luis Almagro, Fernando Lorenzo y Roberto Kreimerman, durante sendos seminarios realizados en la ciudad brasileña de San Pablo.

Almagro y Lorenzo participaron en la inauguración de un seminario organizado por la Federación de Industriales del Estado de San Pablo (FIESP.

Ambos destacaron los registros históricos de actividad, inversión directa, producción y seguridad jurídica que presenta la economía uruguaya.

El seminario, titulado “Uruguay – Brasil: Integración regional y oportunidades económicas”, se desarrolló en la mañana paulista de este lunes 14 y contó con la participación de 150 personas.

Almagro insistió en la similitud de puntos de vista entre los gobiernos uruguayo y brasileño en cuanto a privilegiar la inversión con sentido productivo y puso el acento sobre la complementariedad entre ambas economías.

“Las condiciones geográficas de Uruguay, combinadas con la fortaleza brasileña, hacen propicias las condiciones de éxito para ambos en el futuro”, dijo.

Lorenzo subrayó a su vez los buenos indicadores generales de actividad, competitividad, clima de negocios y estabilidad (democrática, jurídica y fiscal) del Uruguay, así como la históricamente baja tasa actual de desempleo. Destacó también la política de promoción de inversiones que lleva a cabo su cartera.

El titular de Industrias, Roberto Kreimerman, intervino a su vez en el coloquio “Qué se puede hacer: la integración de las cadenas productivas”.

Kreimerman identificó a los sectores automotor, naval, agroindustrial y del turismo como los que ofrecen mayores oportunidades para una integración de las cadenas productivas de ambos países.

Dijo por otra parte que Uruguay promueve un modelo de crecimiento económico sostenible, con alta especialización productiva, y que apunte a una mayor integración social. Destacó en ese sentido los énfasis puestos por la actual administración en la reducción de la pobreza y la inversión en educación.

Brasil es el principal socio comercial de Uruguay. En 2010, el intercambio entre ambos alcanzó los 1.531 millones de dólares.

En cuanto al estado de San Pablo, el principal de la economía brasileña, tiene con Uruguay un saldo comercial favorable de 300 millones de dólares.