Trabajo pionero
CEPAL analiza y sugiere medidas para armonizar cambio
climático y comercio
Uruguay posee en su agenda de política
exterior el análisis del cambio climático y el comercio.
En este contexto, se invitó al director de CEPAL,
Osvaldo Rosales, a compartir una presentación que
analiza estos vínculos. El jerarca indicó que hay que
ser conscientes del impacto que tienen sobre el comercio
los desastres naturales, aunque sostuvo que al aumentar
el comercio también se afecta al cambio climático.
La Unidad
de Análisis Estratégico del Ministerio de Relaciones
Exteriores fue creada en agosto de 2007. Su cometido es
investigar y sintetizar diversos procesos y analizarlos
a largo plazo, en línea con los objetivos programáticos
del ministerio y del país. Una de los primeros temas
seleccionados es el de cambio climático, recursos
naturales y comercio, debido a su potencial impacto en
materia de política exterior, que incluye el económico y
comercial.
En
este marco, el director de la División Comercio
Internacional de Integración de CEPAL, Osvaldo Rosales,
en una conferencia denominada “Comercio y Cambio
Climático, Relevancia y Desafíos para la región”,
analizó los vínculos y aportes del comercio al cambio
climático e iniciativas nacionales en curso, riesgos y
sugerencias sobre el tema de convocatoria.
Rosales
indicó que es preciso estar conscientes del impacto que
tiene sobre el comercio los desastres naturales
asociados al cambio climático, ya que se encuentran en
juego diversos frentes: infraestructura, cadenas de
suministro, transporte y distribución. Sin embargo,
desde otra óptica el comercio afecta al cambio climático
ya que al aumentar éste también aumenta la emisión de
gases de efecto invernadero, ejemplificó Rosales.
Por
otro lado, se deduce de diversos estudios que el
comercio internacional es responsable de casi un cuarto
de las emisiones de estos gases del cual un tercio es
responsabilidad directa de América Latina y el Caribe.
Dentro de la región, las economías de Brasil y México
explican el grueso de esa emisión.
A nivel
multilateral se entiende que el cambio climático es un
problema global y de hecho existen convenciones a las
que los países adhieren, como el Protocolo de Kyoto, al
cual Estados Unidos –principal emisor de gases del
planeta- no adhiere.
Los
países industrializados, a diferencia de los que están
en desarrollo, tienen diversas actitudes a la hora de
enfrentar la temática, aunque los primeros son más
sensibles a la contaminación ambiental y a la vez, los
más preocupados por proteger y retener la competitividad
de sus industrias domésticas evitando las “fugas de
carbono” (industrias que emigran a zonas menos exigentes
en normativas ambientales). En cambio, los países en
desarrollo necesitan transferencias de recursos y
tecnología para enfrentar el desafío planteado.
A modo
de conclusión, Rosales indicó que el objetivo es
“enverdecer la OMC (Organización Mundial del Comercio)”
eliminando tarifas a bienes y servicios ambientales;
armonizando estándares de regulaciones técnicas para
estimular eficiencia energética y equilibrando la
innovación (propiedad intelectual) con el acceso eficaz
y rápido a la transferencia de nuevas tecnologías.
Entre
las sugerencias, dijo que sería muy beneficioso reducir
o eliminar los subsidios a los combustibles fósiles,
considerada la principal causa de los cambios
climáticos. “Si no se logra, el resto de las políticas
no tienen mucho sentido (…) es un subsidio regresivo,
favorece a los que más tienen, y contra el medio
ambiente”, añadió. Además, advirtió que a la hora de
aplicar subsidios se debe tener la precaución de no caer
en el proteccionismo.
Según
el informe presentado, la región cuenta con
oportunidades que deberían ser explotadas. Por ejemplo,
continuar utilizando menos fertilizantes y métodos menos
mecanizados en su producción agrícola.
Por
último, mencionó como desafíos la importancia de mejorar
el trabajo interinstitucional promoviendo la formación
de un comité interministerial que trabaje con políticas
coordinadas; la conformación de alianzas entre los
sectores públicos y privados y la armonización regional
de estándares técnicos en eficiencia energética y
trazabilidad de carbono.
En
tanto, el director general de la secretaría de
cancillería, Nelson Chaben, explicó que la CEPAL lleva
adelante un trabajo pionero en la investigación del
cambio climático y el comercio y promueve su inserción
en las agendas de los países de la región. Al respecto,
añadió que Uruguay es un país que ya ubicó esta temática
en su política exterior. |