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13 de abril, 2011

Plan Nacional de Juventudes

Desempleo, vivienda, educación y participación, ejes de propuestas para el quinquenio
Reducir el desempleo juvenil, asegurar la continuidad en el sistema educativo de esa franja de la población, facilitar la emancipación de los menores de 29 años y construir escenarios de participación son algunas de las metas contenidas en el Plan Nacional de Juventudes 2011-2015, lanzado este miércoles 13. El dispositivo fue concebido como parte del proceso de actualización sectorial del Plan de Equidad.

El documento incluye un mensaje del presidente José Mujica, quien entiende “impostergable” profundizar aquellas acciones que tiendan a promover la transformación social, la equidad y la justicia social y que los jóvenes deben tener prioridad en ese terreno.

En la presentación del plan estuvieron presentes los ministros de Trabajo y Seguridad Social, Eduardo Brenta; Turismo y Deporte, Héctor Lescano; Educación y Cultura, Ricardo Ehrlich; Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, Graciela Muslera; Salud Pública, Daniel Olesker; y el interino de Desarrollo Social, Lauro Meléndez.

También lo hicieron el director nacional de Juventud, Matías Rodríguez, la representante de Naciones Unidas en Uruguay Susan McDade y la embajadora de España Aurora Díaz-Rato .

“En tempos en que algunas voces insisten en colocar a los jóvenes en los peores lugares de amenaza y peligrosidad, en que las respuestas solo irían por la represión y el juzgamiento, este plan prefiere otra propuesta dirigida a la educación, a garantizar derechos, a confiar en los jóvenes y entusiasmarlos”, dijo Matías Rodríguez.

Se trata de un documento “abierto y flexible” que apunta a amplificar acciones ya encaminadas para reducir las inequidades intergeneracionales, agregó.

Lauro Meléndez señaló que todo el gobierno está empeñado en generar políticas focalizadas en la población de 18 a 29 años.

Educación, trabajo, vivienda, emancipación y protagonismo son las áreas en que esas políticas deben esencialmente centrarse y el plan así lo recoge, indicó el ministro interino de Desarrollo Social.

Ricardo Ehrlich definió a este documento como un llamado a la participación de los jóvenes y un “formidable grito de respuesta” a sus preocupaciones.

Héctor Lescano hizo referencia a la escasa actividad física que realizan los jóvenes uruguayos. “El país tiene una población joven sedentaria. Sobre todo los jóvenes pobres hacen muy poca actividad física”, observó.

Recordó que para intentar corregir ese déficit el Ejecutivo ha ideado una ley de promoción del deporte que en gran parte está enfocada en los jóvenes y niños.

Graciela Muslera dijo que su cartera ha definido planes de vivienda específicos para los jóvenes destinados a favorecer su emancipación, con facilidades para el acceso a la vivienda nueva y usada y préstamos a tasas bonificadas.

El MVOTMA y el Instituto Nacional de la Juventud están trabajando en conjunto en programas de refacción y mejora de viviendas y en planes especiales de financiación y ya se ha puesto en marcha un programa de garantías de alquiler que flexibiliza los requisitos exigidos a los jóvenes, comunicó.

Eduardo Brenta destacó el alto nivel relativo de desempleo entre los jóvenes uruguayos, vinculándolo al escaso nivel de calificación de muchos de ellos.

Los jóvenes calificados, formados, tienen una situación de “privilegio” en el mercado laboral, dada la multiplicidad de ofertas que reciben, mientras aquellos que desertaron del sistema educativo presentan serias dificultades para acceder a un empleo, comparó.

“Se debe asociar fuertemente al empleo con la educación. Esa es la gran apuesta que el presidente Mujica priorizó”, dijo.

El Diálogo Nacional por el Empleo entre gobierno, trabajadores y gobierno -que se lanzará el 5 de mayo con el fin de acordar un programa de trabajo decente- dará prioridad a políticas de empleo juvenil, señaló.

Brenta expresó una preocupación especial por la situación de niños y jóvenes que trabajan en la clasificación de residuos.

Olesker detalló iniciativas en materia de salud incluidas en el plan, muchas de ellas ya en marcha, como atención integral de adolescentes y jóvenes con personal especializado, asesoramiento en salud sexual y reproductiva, médico de referencia obligatorio, historia clínica y carné de salud adolescente, beneficios de copago, espacios de escucha y orientación (consejerías), salud mental, programa de actividad física y capacitación de jóvenes en primeros auxilios.

En representación de las Naciones Unidas Susan McDade elogió un plan que, dijo, coloca a los jóvenes como ciudadanos con derechos que merecen la atención de todos y se fija el objetivo de revertir las inequidades existentes.

Esta franja de la población sigue de todas maneras exhibiendo indicadores preocupantes en temas como empleo, educación, vivienda, salud, resaltó, aun reconociendo los esfuerzos que se han llevado a cabo en estos dominios por la presente y la pasada administraciones de gobierno.

Aurora Díaz Rato aseguró a su vez que las políticas de juventud son un eje transversal de la cooperación española, y que al encontrar esa misma preocupación en el plan lo han decididamente apoyado.

   
 
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