Se reduce incidencia del alcohol en
siniestros de tránsito
El presidente de UNASEV, Gerardo
Barrios, tildó de “alentadora” la situación en cuanto a la
incidencia del alcohol en siniestros de tránsito.
Tras la baja de 0.8 a 0.3 g/l de alcohol
en sangre, solo el 2% de las espirometrías de conductores
que participan en accidentes da positivo. UNASEV y
Presidencia redactaron un anteproyecto de Ley para llevar a
cero el nivel en todos los conductores.
Uruguay atraviesa una situación más
alentadora en cuanto a la incidencia del alcohol en los
siniestros de tránsito. Tras la baja de 0.8 a 0.3 g/l de
alcohol en sangre, solo el 2% de las espirometrías que se
realizan en el país a conductores que participan de
accidentes, dan un resultado positivo, situación que “nos
ubica en primer nivel en el mundo”, aseguró el presidente
de la Unidad Nacional de Seguridad Vial (UNASEV), Gerardo
Barrios.
De todas maneras, UNASEV y Presidencia
de la República redactaron un anteproyecto de Ley que
integra el paquete de Leyes que se debatirán en un foro de
discusión parlamentaria el próximo 25 de mayo, con el
objetivo de llevar a cero el nivel de alcohol en sangre
para todos los conductores, no solo para los profesionales,
como rige actualmente. En este sentido, Barrios argumentó
que el mensaje es uno solo: “si tomás alcohol no
conduzcas”.
Por otra parte, teniendo en cuenta
recientes siniestros protagonizados por vehículos que
trasladaban pasajeros en sus cajas traseras, tanto sea
militares como civiles, Barrios recordó que cuando se
compra un vehículo (auto, camioneta o camión) la libreta de
propiedad establece la cantidad de personas que pueden
viajar en él. En la caja de un camión se permite
transportar carga, no seres humanos. Es una disposición
vigente hace muchos años.
El Código de Circulación Vial Nacional
establece que solo en situaciones excepcionales pueden
viajar personas en las cajas de los camiones. Eso se
conversará con el Ministro de Defensa. “Situaciones
excepcionales” es la guerra, una situación de emergencia
donde se deban movilizar tropas para hacer una ayuda
humanitaria, o un plan de contingencia. “En esas
situaciones es lógico que se haga ese tipo de traslados,
con mecanismos de seguridad para quienes viajan en las
cajas. Pero si no se atraviesa una situación excepcional la
gente no puede ni debe viajar en la caja de los camiones”,
ratificó.
Habrá que articular formas alternativas
de transporte de personal militar (en ómnibus por ejemplo).
Si el ministerio de Defensa carece de recursos o tiene
dificultades para incorporar ómnibus habrá que recurrir al
sector privado o a otras instituciones que puedan brindar
el apoyo necesario para movilizar las tropas. |