17/12/03
BALANCE DEL EQUIPO ECONÓMICO
El
equipo económico del gobierno realizó un balance de su gestión resaltando
la reducción de la inflación que oscilará en un dígito el año próximo,
la recuperación de la plena capacidad de pagos frente al mundo, la
reducción del gasto del sector público en un 33%, como el mantenimiento de
los niveles de gasto social y la reestructura del sistema bancario oficial.
FORO CON EL EQUIPO
ECONÓMICO DE GOBIERNO DENOMINADO “BALANCE Y PROYECCIONES PARA EL 2004”,
EN EL COMPLEJO PUNTA CALA. 17/12/2003
En
una presentación organizada por la Asociación Cristiana de Dirigentes de
Empresas (ACDE), el Ministro de Economía y Finanzas, Isaac Alfil, el
Presidente del Banco Central, Julio de Brun y el Director de la Oficina de
Planeamiento y Presupuesto, Ariel Davieux, participaron del foro “Balance
y Proyecciones para el 2004”.
MODERADORA: Con
la presencia del señor Presidente de la República y del Secretario de la
Presidencia, el doctor Raúl Lago, damos comienzo al Foro. Muchas gracias
MODERADOR: Damos paso a la primera de las
tres exposiciones previstas en esté Foro organizado por ACDE con el equipo
económico de Gobierno. Invitamos a hacer uso de la palabra al economista
Julio de Brun, Presidente del Banco Central del Uruguay. El título de su
conferencia “El manejo de la política monetaria y cambiara”.
DE BRUN: Gracias
Emiliano. En realidad buena parte de las cosas que iba a decir ya las dijo
Rosario al principio, así que me ha ahorrado algo de tiempo previsto. Creo
que en realidad es bastante.
No es posible
tratar de explicar lo que fue el manejo de la política monetaria durante el
año 2003 sin tomar en cuenta, o olvidando, lo que era las condiciones
iniciales a fines del año 2002. Ciertamente, tras la crisis ocurrida en
Uruguay durante el año 2002, el sentimiento que teníamos quienes de alguna
manera integramos el equipo económico y de gobierno en general, era que el
largo plazo ya estaba aquí, ¿verdad? Y que todas las decisiones que
tomábamos desde ese momento en adelante eran decisiones que ya no eran
cuestiones de transición hacía otro estado de la economía, en un proceso
ordenado y demás, sino que en las circunstancias en que se encontraba
Uruguay, a mediados del año
2002, todas las discusiones, todos los temas que eventualmente habían
estado en agenda durante mucho tiempo, era el momento ya de implementarla
porque ciertamente no había plazos, tiempo de ajuste, como para poder
procesar las cosas.
En
la tumba de Karl Marx, en Londres, reza en su epitafio una frase del propio
Marx, que dice: “hasta ahora los filósofos han discutido distintas
maneras de cómo interpretar el mundo, pero lo importante es cambiarlo”.
Si bien es curioso que sobre fin de Siglo XX los que han filosofado más y
han hecho menos, se han convertido menos en agente de cambios han sido los
marxistas, de todas maneras, ciertamente está frase revela el espíritu con
que hemos estado trabajando durante estos 18 meses en el gobierno, tratando
de cambiar lo que estaba a nuestro alcance de cambiar, a fin que la
situación de Uruguay fuera hoy lo más distinta posible, lo mejor posible,
en comparación con lo que era a mediados del 2002. Ciertamente, esto se
trata de instituciones no de personas. Esto se trata del Bancos Centrales,
se trata del Ministerios de Economía, se trata del gobiernos, se trata de
autoridades, en definitiva ejercida con el propósito de lograr los
objetivos buscados. Pero corriendo el riesgo de caer en el error que se le
atribuye a Edward Ribors en su obra “Decadencia y caída del imperio
romano”, donde se le señala que a veces se debe distinguir cuando habla
del Imperio romano y cuando habla de sí mismo. De todas maneras, trataremos
de ir explicando que es lo que tratamos de hacer durante todo esté año a
fin de llegar a los resultado en que nos encontramos ahora.
En lo que toca a
mi parte, básicamente los problemas con que nos encontramos a comienzos del
año y que de alguna manera determinaban los objetivos de política
monetaria, eran la necesidad de hacer una variedad de cosas. Esa variedad de
cosas incluía reconstituir la confianza en el sistema bancario,
introduciendo normas prudenciales que permitieran volver a recomponer
gradualmente el nivel de depósitos. Reconstituir activos dañados en Bancos
que habían entrado en liquidación, a través de la creación de un nuevo
banco y fondos de liquidación sobre los activos no vigentes, o los activos
malos, de los bancos liquidados. Teníamos pendiente además, o teníamos
por delante, en el Banco Central encarar la tarea de liquidación de los
cuatro mayores bancos del país, en un proceso en el cuál desde
prácticamente mediados de los 70, el Banco Central no había estado
entrenado ni disponía de los recursos humanos ni materiales para poder
llevar adelante, implementando medidas, afortunadamente medidas legales
innovadoras, introducidas en la ley de diciembre del año pasado, que de
alguna manera permitían agilizar y hacer más eficientes esos procesos.
Pero de todas maneras experimentando también y aprendiendo en mecanismos
que no eran habituales en la práctica uruguaya. Teníamos un tema de
dominancia fiscal importante en la política monetaria dado que los
esfuerzos en materia fiscal que se habían empezado a realizar en el segundo
semestre del año pasado todavía no se estaban materializando en un
incremento sustancial de los saldos de las cuentas del gobierno. Además,
teníamos el tema que era el tema a mediados, a fines del año pasado, con
respecto a las perspectivas del 2003, y recuerden las preguntas que se nos
hacían el año pasado en éste lugar: eran básicamente referidas a qué
iba a pasar con los vencimientos de deuda durante el año 2003.
Durante éste
año, en conjunto con el Ministerio de Economía, la Oficina de Planeamiento
y Presupuesto, encaramos un proceso de reestructura de la deuda que resultó
exitoso, y permitió reducir significativamente la necesidad de
financiamiento de corto plazo del gobierno, y mejorar también
sustancialmente la capacidad de maniobra del Banco Central en cuanto al
manejo de los instrumentos disponibles para la política monetaria.
Además de todo
esto, también tratamos de ser generosos y contribuir con diversos esfuerzos
parlamentarios en el sentido de investigar, a veces con sentido
constructivo, a veces no tanto, respecto, basado con discusiones que
abordaron la conveniencia o no de determinadas decisiones adoptadas por el
BCU en su momento; o que también involucraron tratar de averiguar qué
pasó con alguna hoja de un expediente. Para todo eso tratamos de poner
atención, entendiendo que en definitiva en circunstancias como las que ha
vivido Uruguay, con tantas ansiedades y tantas preocupaciones, es sumamente
difícil distinguir entre lo importante y lo urgente, y tratamos de alguna
manera de poner atención a todo eso dentro de la medida que nos fue
posible. Yendo a las cosas importantes, ¿verdad?; que son dentro de las
cuales me voy a concentrar.
Partamos entonces
de una las principales preocupaciones que tuvo el Banco Central durante el
año 2003, que era reconstituir la liquidez internacional. O sea, el Banco
Central tiene como objetivo fundamental, entre varios, pero entre los
fundamentales, el de preservar la capacidad de pago del país y preservar el
valor de la moneda. Dentro de las prioridades que tenía el año 2003 dada
la circunstancias que vivíamos a fines del año pasado, la primera
prioridad estaba en constituir la liquidez del país con reservas
internacionales que estaban todavía bastante menguadas sobre fines del año
pasado, incluso se deterioraron algo en primer trimestre del año hasta que
pudimos encarar el canje de deuda. Pero precisamente en buena medida gracias
al éxito del canje, las reservas internacionales se pudieron prácticamente
cuadruplicar a lo largo del año 2003 desde niveles menores a quinientos
millones de dólares a mediados de marzo, hasta niveles cercanos a los dos
mil millones de dólares para fines de éste año. No solamente es
importante el aumento de reservas internacionales per se, sino además la
calidad de la composición de las reservas internacionales. La posición de
moneda del Banco Central, que era negativa en trescientos millones de
dólares en setiembre del año 2002, está prácticamente nivelada hacia
fines del año 2003. La relación entre las reservas internacionales y las
exigibilidades de corto plazo fundamentalmente del sistema bancario en el
Banco Central, que llegaron a ser negativas en casi quinientos o seiscientos
millones de dólares en febrero del año 2003, hoy también están
prácticamente niveladas y con tendencia a tener un saldo positivo una vez
que vayamos teniendo los incrementos de reservas previstos en el programa
2004.
De modo que, hoy
por hoy, el Banco Central ha recuperado su plena capacidad de respaldar al
sistema, de atender la capacidad de pago del país frente al resto del
mundo, lo cual a su vez se ha reflejado en definitiva en una mayor
estabilidad de todas las variables financieras que hemos manejado durante
esté año.
Nuestro otro gran
objetivo, que es en materia de inflación, tuvo resultados mucho mejores que
los esperados originalmente. Habíamos arrancado el año, recuerden ustedes,
hablando de una inflación similar a la del año 2002, de niveles del orden
del 27%. Pero una serie de factores benignos permitieron que la inflación
observada fuera persistentemente inferior a la que de alguna manera estaba
en nuestras metas. En el año 2002 el Banco Central modificó el sistema
cambiario, en definitiva el ancla nominal del sistema vigente hasta ese
momento hacía algo que prácticamente no se hacía desde el año 1984, que
era tener un esquema de flotación relativamente limpio, utilizando la
cantidad de dinero como ancla nominal del sistema, lo cual tenía un par de
razones básicas detrás de eso. La primera, es que dado el nivel de
reservas que teníamos a mitad del año pasado no podíamos razonablemente
basar una estrategia de reducción de la inflación en base a compromisos en
materia cambiaria, porque no teníamos niveles de reservas suficientes para
sostenerlo. Pero, además, por el hecho que dada nuestra preocupación en
reconstituir las reservas del Banco Central, la principal preocupación del
Banco Central en el 2003 no tanto en términos de precios de determinadas
variables, sino en términos de stock, si teníamos que incrementar nuestras
reservas internacionales y teníamos que a su vez mejorar nuestra posición
en moneda extranjera, teníamos que necesariamente incrementar esas reservas
internacionales contra pasivos denominados en moneda nacional. Eso implicaba
de alguna manera establecer metas sobre expansión de pasivos monetarios, y
de ahí también nuestra preocupación por establecer metas sobre esos
pasivos monetarios que fueran consistentes con la estabilidad de precios y
evitar un fenómeno que se había dado muchas veces en crisis cambiarias en
el Uruguay en el pasado que era a niveles altos y por períodos prolongados
de tiempo.
La estabilidad
lograda por el éxito de una política monetaria sumamente restrictiva sobre
fines del año 2002, junto con el crecimiento de la economía durante el
año 2003, que es uno de los temas sobre los que va a hablar el Ministro de
Economía, junto además, también, con una tendencia a la remonetización
de la economía generada por el propio ambiente de flotación, que
consideramos una herramienta indispensable si queremos entrar en un proceso
de desdolarización de la economía, fueron generando un gradual aumento de
la demanda de dinero por encima de lo esperado por el Banco Central, lo que
dado determinadas metas sobre cantidad nominal de dinero, en definitiva, se
reflejó en niveles de inflación sustancialmente menores a los esperados.
Es así que en los
12 meses a noviembre estamos ya muy cerca de inflación de un dígito, vamos
a terminar este año en niveles de inflación del entorno al 10% y, como
muestra allí la gráfica, estamos trazando metas de inflación para el año
2004 entre 7% y 9% anual,
diciembre a diciembre.
Justamente, el
proceso de remonetización de la economía se observa en esa gráfica que
está allí: esta línea gris es la evolución de la emisión durante el
año 2000. Este incremento de la emisión en términos reales que observan
aquí es el que se produce a la salida del feriado bancario, el Banco
Central, paga las cuentas en pesos en cuentas corrientes y caja de ahorros,
junto con algunos problemas fiscales que se producen, precisamente por los
problemas en la cadena de pagos a la salida del feriado bancario, luego se
observa la caída siguiente, que es la contracción monetaria realizada a
partir de ese momento y que es la que permite estabilizar la inflación; o
sea: la inflación fue alta en el tercer trimestre del año 2002, pero bajó
rápidamente en el cuarto trimestre merced a este esfuerzo en materia
monetaria, y luego la línea rosada refleja la evolución de la emisión
durante el mismo período del mismo mes de cada año, pero al año
siguiente, donde ya se observa hacia
fines de este año, ya en diciembre, niveles de emisión en términos reales
superiores a los del mismo mes del año pasado en un proceso que, dada esta
tendencia, seguramente va a continuar durante el año 2004.
El aumento de la
demanda de dinero por encima de lo previsto hizo que el Banco Central
tuviera que, de alguna manera, generar mecanismos que inyectaran mayor
liquidez sin modificar nuestros objetivos originales en materia de base
monetaria, y eso lo hicimos disminuyendo la distorsión que, en definitiva,
existía sobre el sistema bancario, que era el alto nivel de encajes en
moneda nacional, también con ello apuntando al establecer un menor encaje
en moneda nacional que sobre depósitos en moneda extranjera, a los
objetivos de desdolarización que estamos buscando en la economía uruguaya.
Esa reducción de los encajes generó a partir de los meses de julio y
agosto un incremento importante en los niveles de liquidez excedente de los
bancos, pero que ya a partir del mes de octubre comenzó a revertirse
gradualmente, coincidiendo con un aumento de los préstamos en moneda
nacional en el sistema bancario en su conjunto en este período. Este
proceso de liberación de liquidez a su vez contribuyó a una reducción
sustancial de todas las tasas, ¿verdad?, las tasas pasivas del sistema
bancario, el col interbancario, la tasa de las Letras de Tesorería o las
Letras de regulación monetaria del Banco Central, y junto con ello también
una gradual reducción en las tasas de interés activas en moneda nacional,
todo ello contribuyendo, sobre todo en la segunda mitad del año, a la
recuperación en el consumo que están mostrando también las cuentas
nacionales del tercer trimestre, y que también empiezan a ratificarse para
el cuatro trimestre.
A partir de este
momento y habiendo, como quien dice, limpiado la cancha de lo que eran los
mayores problemas a fines del 2002, podemos trazarnos cuáles son nuestros
principales objetivos con miras al año 2004. En primer lugar, vamos a
mantener nuestro esquema de flotación cambiaria, con metas monetarias que
van a estar anunciadas en breve en el boletín monetario que publica
trimestralmente el Banco Central, en un mecanismo en el cual este esquema de
flotación vamos a seguir trabajando en el sentido de aumentar la
transparencia y la calidad de la información que disponen los agentes en
cuanto a los objetivos del Banco Central, a lo largo del año hemos ido
tratando de enfatizar cada vez más que lo que pretende el Banco Central en
el mercado de cambios no es establecer precios, sino que las intervenciones
son con propósito exclusivo desde el punto de vista cuantitativo en materia
de reservas internacionales. Por eso es que en su momento empezamos a
anunciar cuáles eran los montos de licitaciones de Letras de Tesorería de
regulación monetaria al inicio de cada jornada operativa, a fin de que el
sistema tuviera mejor información sobre cuál iba a ser el nivel de
liquidez disponible para esta jornada. Luego incorporamos anuncios sobre el
nivel de compras de dólares por parte del Banco Central para que también
el mercado tuviera conocimiento de la naturaleza de la intervención del
Banco Central en ese día. Esos mecanismos se van a mantener, lo único que
con mucho menos intensidad que en el año 2003, porque habiendo llegado
hacia fines del año 2003 a redondear nuestros objetivos en materia de
cierre de posición de moneda extranjera y de cobertura de los depósitos en
el Banco Central, de las reservas internacionales, las
necesidades de compra de dólares por parte del Banco Central van a ser
sustancialmente inferiores en el año 2004 respecto del año 2003. Estamos
pensando en principio en un nivel de compras brutas por parte del Banco
Central en el mercado del orden de los 100 millones de dólares,
aproximadamente equivalentes a las pérdidas en moneda extranjera que tiene
el Banco Central por pago de intereses, ya sea al Fondo Monetario o por
depósitos en el Banco Central, lo cual representa aproximadamente una
quinta parte de las compras que hizo el Banco Central en el mercado durante
el años 2003.
Como habíamos
dicho, estas metas monetarias van a ser consistentes con un objetivo de
inflación de un dígito, entre 7% y 9% anual, diciembre a diciembre,
manteniendo la tendencia de reducción que observamos durante el año 2003.
Esto lo vamos a acompañar, además, con una encuesta sobre expectativas de
inflación, que vamos a estar circulando entre colegas, y que vamos a
estar divulgando mes a mes, a fin de que todos los formadores de precios
puedan tener, de alguna manera, y tener el propio Banco Central también,
tener una visión clara de cuáles son las expectativas del mercado en
materia de inflación, y en ese sentido tomar los correctivos necesarios en
nuestra política monetaria a fin de lograr de que gradualmente, y de forma
consistente con la mayor credibilidad de nuestra
política monetaria, esas expectativas se vayan alineando a lo que
son los objetivos de inflación por parte del Banco Central. Esto, de alguna
manera, es también, por un lado el reflejo del compromiso que tiene la
autoridad monetaria con la estabilidad de precios, que pretendemos que sea
un objetivo tipo institucional que vaya más allá de lo que pueda ser el
mandato de las actuales autoridades, y además también es una forma de
centralizar la atención del público en lo que realmente nos interesa, que
es la inflación, y no otras variables que normalmente solían generar la
atención por parte del público en cuanto a sus precios, en particular el
tipo de cambio. El mecanismo de flotación que hemos tratado de implementar
tiene como uno de sus objetivos destruir el rol del tipo de cambio como
unidad de cuenta del sistema, y todas nuestras acciones, de alguna manera,
están dedicadas a que la atención del público empiece a concentrarse cada
vez más en lo que es la
evolución del poder adquisitivo y, en definitiva, de lo que es la
evolución de la inflación.
La mejora de la
liquidez internacional, al estar limitadas nuestras compras a lo que pueda
ser simplemente el mantenimiento de nuestra posición en moneda extranjera,
va a provenir de los desembolsos de los organismos internacionales,
fundamentalmente en el caso del Banco Central de parte del Fondo Monetario,
y vamos a seguir introduciendo medidas dedicadas al fortalecimiento
bancario.
La crisis del año
2002 nos ha dejado muchas lecciones, que en el Banco Central estamos
tratando de incorporar y reflejar en el desempeño de nuestras funciones, en
nuestro marco regulatorio, en el tipo de organización de nuestra
supervisión. En ese sentido, vamos a seguir una continua mejora de la
normativa prudencial sumada a lo que ya hemos introducido en materia de
distintos topes de riesgo. Uno de los temas que seguramente analicemos en
profundidad durante el año 2004, que es la cuestión de los topes de riesgo
en materia de mismatch de moneda, en donde ya tenemos alguna normativa que
introduce dentro de la calificación subjetiva el posible impacto de la
devaluación sobre los balances de las empresas deudoras del sistema y el
establecimiento de previsiones, en consecuencia respecto a ello. Pero es un
tema sobre el cual vamos a seguir trabajando de tal manera de reducir la
fragilidad que tradicionalmente afectaba a Uruguay en materia de excesiva
dolarización del sistema, cuando los créditos en moneda extranjera estaban
concentrados en sectores cuyos ingresos estaban fundamentalmente basados en
el mercado interno.
Vamos a mantener
nuestra agenda de dolarización, partiendo de un esquema de flotación
cambiaria, siguiendo con normativa prudencial que refleje los distintos
riesgos del sistema entre estar en una moneda u otra, introduciendo
gradualmente un sistema de seguro de depósitos que también reconozca los
diferentes tipos entre moneda nacional y moneda extranjera en una forma
paulatina que refleje, por un lado la necesidad de contar con el seguro de
depósitos como un elemento más en la red de seguridad del sistema
financiero, pero también en forma consistente con la situación actual del
sistema financiero, su rentabilidad, el nivel de tasas de interés y el
nivel general de tributación que hoy tiene el sector.
Entre otras
acciones previstas para el año 2004 tenemos acciones
relativas al fortalecimiento del mercado de capitales, la regulación
de los agentes intervinientes. Teníamos un proyecto de ley enviado a fines
del año 2002, que fue desglosado en el tratamiento parlamentario, vamos a
insistir sobre el tema a través de algunas coincidencias que hemos
encontrado con agentes participantes del mercado, como la Bolsa de Valores.
Tenemos temas en carpeta desde hace mucho tiempo, que entendemos
imprescindibles para el desarrollo del mercado de capitales uruguayo, como
es el tema de la caja de valores, sobre lo cual también vamos a estar
trabajando y tomando algunas decisiones durante el año 2004. Esto es todo
por ahora, quedo a las órdenes para la etapa de las preguntas. Muchas
gracias.
COTELO: Señoras y señores, para
desarrollar la segunda de las conferencias de este foro ACDE 2003 con el
equipo económico, invitamos al contador Ariel Davrieux, Director de la
Oficina de Planeamiento y Presupuesto, que expondrá sobre “Reformas y
gasto social”.
DAVRIEUX: Buenos
días, vuelvo a estar con ustedes a tratar de estos temas, y comenzando por
decir que, diferente al año pasado, tenemos que comenzar diciendo que en
este mes de diciembre tuvimos un retroceso. Efectivamente, a fin del 2001 se
aprobó una ley que intentaba dar comienzo de solución al tema de los altos
costos del combustible en el país, el año pasado les decía que esto
podía estar sujeto a un referéndum y podíamos tener insucesos, y
efectivamente esto ocurrió. O sea, que es bueno partir reconociendo lo que
nos ha pasado en este año. La sociedad uruguaya resolvió que ese no era el
camino y en este tema, por lo menos, no hemos tenido éxito. Pero esto no
significa que la senda de
reformas se haya detenido o no haya tenido avances importantes.
Tengo
que introducirme en el campo del economista De Brun, porque los cambios más
importantes, sin duda, que por el mismo hecho de que no se manejan como
cambios así de reformas estructurales, tal vez
no han merecido la misma atención,
está vinculado con el sistema financiero.
A
fin del año pasado se aprobó una ley modificatoria de la Carta Orgánica
del Banco Hipotecario, cuya trascendencia tal vez no fue percibida pero
implicó transformar otro organismo que llamamos banco en no banco. En
Uruguay tenemos cinco bancos, de los cuales, el Banco Comercial es uno solo. Tenemos el
Banco de Previsión Social, un Banco de Seguros que los funcionarios se
consideran bancarios y son empleados de una compañía de seguros; el Banco
Central, que es un órgano regulador del sistema bancario y no es un banco
comercial, y ahora tenemos un
Banco Hipotecario, que ha dejado de ser banco o está en camino de dejar de
ser banco.
El
Banco Hipotecario vivió los últimos veinte años en una situación
extraña. Por un lado funcionaba como un banco, recibía depósitos,
efectuaba préstamos, pero todo el mundo, los Poderes Ejecutivo,
Legislativo, directorio y funcionarios lo operaban como su no fuera un
banco. Eso lo llevó a una
situación complicada con la crisis, y a lo largo del año 2002 se votaron
dos leyes -una de ellas por unanimidad y la otra por una amplísima
mayoría- y en este año
tendremos que continuar apoyando al banco por un costo total de 1.100
millones de dólares.
Ese
es el costo que nos ha traído tener un banco que funciona como banco con
una parte no banco a través de directivas, resoluciones del directorio,
sugerencias y orientación del
Poder Ejecutivo. La transformación del Banco Hipotecario significa pasar de
un organismo con un activo del tipo 2 mil millones a un activo que, cuando
esté funcionando como prevé la ley, será de 80 millones como máximo, 70
u 80 millones como máximo, de un organismo de 2 mil empleados a algo por el
estilo de unos quinientos empleados y que se concentre efectivamente en los
préstamos hipotecarios con garantías y con títulos suficientemente
saneados para que puedan operar en Bolsa.
El
organismo, por su parte, ha venido reduciendo sus gastos, su personal ya
está en el orden de las 750 personas, reduciendo sus gastos operativos,
comenzando a cerrar muchas de las actividades involucradas, y en
consecuencia ha iniciado, en los últimos dos meses, a cumplir
anticipadamente un nuevo acuerdo con el Banco República para cumplir con
los pasivos que asumió el Banco de la República por cuenta de los
depósitos que anteriormente tenía el Banco Hipotecario.
Este
cambio está operando y se concretará en un convenio a firmarse
posiblemente esta semana entre el Banco República y el Banco Hipotecario, y
dará garantía a ese activo muy importante que tenía a su favor el
República contra el Hipotecario, próximo a los 800 millones de dólares,
que pasará a un nivel de los 600 y tantos, cuando se concrete un préstamo
del gobierno al Hipotecario a través del República por 270 millones de
dólares en este mismo mes.
O
sea que, hoy, las capitalizaciones dispuestas por las leyes de junio 2002 y
diciembre 2002 conforma el
conjunto de 1.100 millones de dólares de costos en el cual incurrimos y
los cuales estamos tratando de evitar, para el futuro, con los
cambios dispuestos para el Banco Hipotecario.
Algo
similar, pero afortunadamente de mucho menor escala debido al tamaño del
banco, ocurre con el Banco República, donde la idea de que es un banco de
promoción social, de que es un banco que presta pero no tiene porqué
cobrar si le va mal en el negocio. Bueno,
eso no es un banco. Y no puede funcionar un banco así porque crea
obligaciones demasiado importantes que no es posible afrontar con el capital
del banco y el propio directorio ha iniciado un conjunto de
transformaciones, aprobación de un nuevo plan estratégico, aprobación de
tercerizaciones, separación de carteras que actualmente no están
cumpliendo y son carteras morosas; se trata de sanear nuevamente ese banco,
que en principio contará con una garantía del gobierno sobre esa parte,
pero que implica cifras del orden menores que de las del Hipotecario por un
monto más grande, pero también del orden
de los 600 millones de dólares. Si las cosas salen bien el costo será
cero; si las cosas salen mal, pueden costar todo eso adicionalmente. O sea,
que las transformaciones en el sistema financiero,
que no estaban dentro de nuestra agenda inicial, pasaron a ser de
hecho las más importantes que se están
haciendo y van a continuar concretándose en el año 2004.
En
la parte real de la economía, para hablar de lo que generalmente se llama
financiero como si no fuera de la parte real, también las noticias más
importantes de éxito sobre ejecuciones tiene que ver con toda la parte de
infraestructura y transporte. En el área portuaria recordemos que se había
privatizado la terminal de contenedores de Montevideo. Este año se
inauguró un puerto privado, un puerto construido privadamente por lo que
entiendo también es un crédito del BID, siempre apoyando estas actividades
en el Uruguay.
En
Nueva Palmira existen tres
terminales de derecho privado, se está planteando una licitación o puja de
precios entre distintos interesados en construir otra terminal, se está
llamando a licitación para la construcción del puerto de La Paloma a
partir de una iniciativa privada, o sea que en principio, de no haber otras
mejores, será ese privado el que operará. En consecuencia, la actividad
portuaria origen del Uruguay, en definitiva, porque de esa actividad
venimos, ha tomado un impulso, un gran impulso, sobre todo en el año 2003
en el país.
En
el área aeroportuaria, bueno, ¿qué podemos decir? La compañía aérea
del gobierno pasó a ser una compañía privada con la participación del
gobierno. En el período del gobierno pasado, el aeropuerto de la laguna del
Sauce fue concedido a particulares; hace dos meses se concretó el traspaso
de la principal terminal aeroportuaria, con lo que se ha completado lo que
podíamos hacer.
El
año pasado anunciamos que íbamos a hacer algo con el ferrocarril -y
naturalmente cuando digo anunciamos no lo digo yo sino el Ejecutivo- el
ferrocarril, a través de la acción muy eficiente de su presidente
interino, en enero del 2003 inició la parte más complicada del tema, que
era su separación en dos empresas: por un lado una empresa de transporte y
por otro un departamento de mantenimiento de infraestructura que asumió el
Ministerio de Transporte. Eso llevó a una reducción del personal del orden
del 70% en la propia empresa de transporte y en este momento se ha llamado a
licitación para la
reconstrucción de la infraestructura del transporte por ferrocarril en las
principales líneas que tiene capacidad de transporte pesado, que es a
Rivera, a Río Branco y a Minas. Por otro lado, estamos intentando la
posibilidad, con sociedades muy fuertes, de que se concrete alguna o más de
una empresa para que use las vías con material propio, privado, en
transporte conjuntamente con empresas públicas.
En
otra área de reforma, que es el tema habitual que yo manejé durante mucho
tiempo, que es el de la seguridad
social, luego de la reforma del 95-96, se había conseguido aprobar, en el
año 2002, la ley de la Caja Notarial. En el año 2003 esperábamos aprobar
por lo menos esa. Por el momento se aprobó la de la Caja de Profesionales
Universitarios y tuvo una media aprobación, en el senado, la de la Caja
Policial. Aspiramos a que en el año 2004 poder obtener que el Parlamento
dé su aprobación a las modificaciones de la Caja Policial y Militar.
En
particular, yo siento -y me gustaría manifestarlo- especial interés en la
Caja Policial, que introduce modificaciones todas ellas buenas, extiende el
período de actividad, mejora sustancialmente las pasividades de los
policías de menores ingresos, incorporándoles partidas que actualmente no
dan derecho a jubilación, tales como pagos en especies, los
servicios 222, y todo eso que en la actualidad hace que el policía, que se
retire por un régimen particularmente beneficioso, termine cobrando la
tercera parte de lo que cobra en actividad cuando se retire. Por el nuevo
régimen entra en un régimen similar, porcentajes iguales, que los de la
ley 16713, la Ley General del BPS, extiende su actividad y crea un
componente de ahorro que justamente incentiva y hace ver el rendimiento
de lo que uno va haciendo y de los aportes.
Tenemos un
problema -y es bueno anunciarlo, y tal vez es bueno hacerlo público- con la
situación de la Caja Bancaria. Debido a la evolución que ha tenido la
actividad financiera, la situación de las cifras básicas de la Caja
Bancaria se han venido deteriorando muy fuerte; y no me contengo de citar
algunas cifras: hace 5 años, la Caja Bancaria tenía 17.500
afiliados, hace un año 15.200, actualmente 13.300 o 13.200; la tendencia
declinante del número de afiliados activos es tan importante, que hace
prácticamente imposible efectuar previsiones de largo plazo.
En julio de este
año hicimos previsiones sobre 15 escenarios distintos, trabajando con una
estabilización de los números funcionarios en 14.000; pocos días después
estábamos debajo de 14.000 y con perspectivas de seguir bajando. Hoy este
número está en 13.500, en
octubre; en noviembre sabemos que está próximo a
13.000 y nuestras previsiones con 13.000 nuevamente ponen dudas sobre
todo cuando pensamos en 30
años. Hemos decidido, el gobierno decidió, quiero decir no yo, tener
reuniones y análisis conjuntamente con la Caja Bancaria y con la
Asociación de Empleados Bancarios para revisar conjuntamente el tema, en
una perspectiva que muestra que con cifras y evoluciones de este tipo es muy
difícil poder prever sistemas que sean auto-sustentables en la práctica.
Al mismo tiempo que los activos pasaron de 17.000 a 13.000, los pasivos
pasaron de 13.000 a 16.000, y la relación pasivo equivalente que estaba
hace sólo 5 años en 1-70, ahora está en 1-04.
Quiere decir, que
es una situación realmente, como evolución en muy corto plazo,
realmente es muy difícil de predecir, por supuesto que no se espera una
continuación de este decrecimiento, pero es lo que hace muy difícil
cumplir con nuestro compromiso con nosotros mismos y con organismos
internacionales de presentar un proyecto viable antes de este fin de año.
Ese compromiso no lo podemos cumplir y tenemos que abordar qué
posibilidades se abren para el futuro con una evolución tan desfavorable de
la población activa con respecto a la pasiva.
En otras áreas de
actividad, vamos a continuar haciendo modificaciones. En el día de hoy se
publicitó que UTE hará su llamado para la central de gas, tema que
esperábamos hace bastante tiempo, y en otros sectores que son deficitarios
tales como el Correo, o donde necesitan mejoras como OSE, encararemos
cambios en el año 2004.
Paso ahora,
entonces, enganchado un poco con las pasividades al tema del gasto social.
En Uruguay el gasto social -ya lo hemos dicho muchas veces, y más o menos
está reconocido y absorbido por todos nosotros- representa un gasto muy
importante en el Estado; aproximadamente el 70% del gasto del Estado es
gasto social y eso representa del orden del 22, 23 % del Producto. Es el
país de América del Sur, o en general sin contar Estados Unidos, que
dedica mayor porcentaje de su Producto y de su presupuesto al gasto social.
En una situación en la cual el Producto del país cayó 11%, en el año
2002, luego de baja en los tres años anteriores, y con la necesidad de un
fuerte ajuste del gasto público, naturalmente que esto afectó el total del
gasto social. Y, entonces, acompañando la reducción general del ingreso,
el gasto social -que es uno de los elementos muy fuertes de Uruguay que
conduce y que lo mantiene todavía como el país de distinción del ingreso
más igualitario de América- se vio afectado, afectando también la
distribución del ingreso. La consecuencia es que la caída del Producto y
la necesaria baja del gasto social, condujo a un aumento de desigualdad y a
un empeoramiento de la situación de los más pobres.
En ese sentido,
frente a esta situación, ¿qué se hizo? Alguno de los elementos son
automáticos, si aumenta la desocupación hay un seguro de desocupación que
permite cubrir esa gente, y si bien la noticia de que hay más gente
cobrando el seguro de desocupación no es buena, es bueno saber que están
cobrando. No que solamente están desocupados y no cobran.
El número de
desocupados que cobró las retribuciones en el año 2002 se duplicó frente
a años anteriores, aunque han tenido una evolución favorable en el sentido
de pagar menos, en línea con la disminución de la desocupación, que
empezó a operarse a mediados de este año.
Pero saltaron
otras medidas vinculadas justamente a una situación crítica. Uno de los
elementos más importantes, fue el destinado a atender las situaciones más
graves vinculadas con la alimentación.
Tanto el Programa
de Alimentación Escolar, como los
programas de INDA, lejos de disminuir, como es la tendencia general del
gasto público, el gasto público primario, sin intereses, bajó del 30% del
Producto al 25% del Producto. Con un Producto que baja el 10%, esa es una
baja espectacular del gasto público en términos reales y en relación a
deudas habrá una disminución de más del 30%. Pero el gasto de
alimentación en particular, en términos reales, tanto el gasto del
Instituto de Alimentación como la alimentación escolar, aumentó en el
orden del 30%. Y lo mismo el número de personas atendidas por estos
servicios. El número de personas, alcanzó en el año 2002 a 510 mil
personas y los gastos subieron de cifras bastante menores a estas, o sea que
hubo una duplicación del gasto, por ejemplo en el rubro alimentación a una
cifra de 800 millones de pesos, partiendo de cifras más próximas a 400 el
año anterior.
Por otro lado, a
través de la acción del Ministerio de Vivienda y del Ministerio de
Trabajo, básicamente, se inició un plan de actividades comunitarias,
tendientes a asociar la percepción del ingreso con pagos, utilizando
recursos propios del Ministerio de Trabajo y fondos del Ministerio de
Economía.
En el marco de los
acuerdos con el Banco Interamericano y con el Banco Mundial, que ayudaron a
financiar y a permitir, más o menos transitar este período tan grave que
vivimos en el año 2002, las condiciones de los propios bancos, que también
se preocupan no sólo de aspectos financieros, también de los actores de
los sectores sociales, incluyó un conjunto de áreas protegidas de
actividades, áreas sociales protegidas, en las cuales, el gobierno se
comprometió a hacerlo y cumplió con el gasto vinculado con esas
actividades. Ellas están relacionadas efectivamente con la alimentación,
el plan de alimentación escolar, el INDA, los principales planes de reforma
de la educación, la atención tiempo completo en las zonas sociales
críticas en Primaria, el desarrollo en la actividad de Secundaria, en
servicios de empleo del
Ministerio de Trabajo, el pago del desempleo en el Banco de Previsión
Social, los pagos de las
pensiones no contributivas del Banco de Previsión Social, los principales
servicios de Salud Pública que atienden a toda la población, en particular
a las más carenciadas, toda la zona de inmunizaciones, la lucha contra el
dengue, la lucha contra epidemias. Bueno, inmunizaciones, lo principal son
las vacunaciones, las inmunizaciones. En todas esas actividades hubo un
compromiso del mantenimiento del gasto. En el año 2002, se propuso un
mantenimiento del gasto en eso, que traducido a dólares de la época,
representaba 400 millones de dólares del año pasado. El
programa fue cumplido efectivamente y se cumplió un 106%
de los programas ofrecidos, o sea, se gastó en promedio un 6%, donde
sólo en algunas áreas de la educación no se llegó al gasto previsto,
pero el exceso en alimentación y en áreas de Salud Pública hizo que se
cumpliera por encima de eso.
Y en el año 2003,
en el primer trimestre, que era la condición de desembolso con el BID, que
cumplimos estrictamente, también se superó la cifra prevista para el
primer trimestre.
Quiere decir que,
hubo un intento que dentro de la reducción global del 30% en lo que es el
70% la parte básica destinada a los sectores más carenciados no sólo se
mantuvo sino que pudo aumentarse.
Y con una visión
a problemas nuevos, nuevos en el sentido de que no están atendidos por el
sistema formal, se creó y comienza su aplicación en este fin de año, el
Programa de Infancia y Familia en la Secretaría de la Presidencia de la
República. Esto está destinado, justamente, a los problemas de la niñez,
la maternidad adolescente, los problemas de los adolescentes, y que tendrá
un impulso esperamos decisivo en el año próximo.
Para el año
próximo, pensamos continuar con estas actividades. Estamos diseñando,
nuevamente en colaboración con el Banco Interamericano, un programa de
empleo que permita incrementar las actividades comunitarias, que
evidentemente no son la mejor solución económica, no están destinada al
crecimiento económico, son actividades que no deberían desarrollarse
normalmente si la economía respondiere y no tuviéramos desocupación. Pero
en tanto conseguimos el crecimiento y la recuperación de la actividad,
estas actividades dan un empleo digno y un ingreso a gente que hoy no lo
tiene. Entonces, se programa de empleo supone un aumento de las actividades
comunitarias, una financiación de todas las actividades vinculadas con
exoneraciones de aportes -industria, agropecuaria, transporte,
construcción- que permitan mantener la competitividad en las actividades
externas y la reducción de costos en las que trabajan en las actividades
internas.
Por otra parte,
estamos también terminando -estamos, siempre el Poder Ejecutivo, no yo- en
particular el Ministerio de Trabajo y el Ministerio de Economía, culminando
la preparación de un nuevo proyecto de seguro de desocupación que amplíe
su extensión y trae
innovaciones que le permita ser más útil y dedicado a alcanzar a más
desocupados y que evite algunos incentivos negativos, que sobre todo
encontramos en el sistema creado en el año 58, por esa época éramos
estudiantes; pero yo también fui profesor a partir del año 60, que no se
preocupe el contador Iglesias, yo comencé a dar clases en el año 60,
también. Entonces, en esa época, el seguro de desocupación fue votado
-allá por octubre del año 58- junto con la Ley Orgánica de la
Universidad, y, bueno, requiere desde nuestro punto de vista algunos
mejoramientos y sobre todo una mejora en los incentivos que lo hagan más
atractivo para quienes hagan más atractivo la recuperación pronta del
empleo. Básicamente, esto es lo que estamos haciendo, en condiciones bien
difíciles ya que la contención del gasto público, la obtención de un
superávit primario entre el 3%
ahora y proyectándose hacia el 4% en años futuros, implica que el gasto
público decididamente ha tenido una contracción fantástica en términos
reales, lo que significó un mayor peso en definitiva del Estado sobre la
sociedad.
Muchas gracias.
ALFIE: Buenos
días a todos, es para mí un privilegio estar hoy aquí con gran
satisfacción, realmente, por los resultados que se vienen obteniendo luego
de todo lo que se pasó y se sufrió el año pasado, lo que podemos
catalogar para el Uruguay algo así como el Diluvio Universal. Hoy podemos
estar aquí, aun con las heridas de guerra, pero con la frente alta para
mostrar las realidades y las buenas perspectivas que el país tiene.
Naturalmente que existen ciertas correlaciones básicas, hoy, todo el equipo
económico es de Peñarol. Perdone Presidente, perdone Presidente. El
Presidente Julio dice que es de River, pero es rayado y yo recuerdo cuando
mandaban a Morena, a Barbosa y a todos esos jugadores; y, bueno, hay
estadísticas que marcan determinada cosa. Todos recordamos el último
quinquenio, qué pasó con la economía; esperemos que las cosas sigan
igual. Luego de esta introducción estadística rigurosa, vamos a pasar
ahora a cosas un poco más aleatorias. Yo también debería decir que en el
año 60, no éramos ni nacidos ni Julio ni yo. Discúlpeme, discúlpeme.
Bien, hablando en
serio, hace apenas 15 meses, no más que eso, con Ariel, con Carlos
Sténeri, con Humberto de la Vega, que sigue trabajando y por eso no está
hoy aquí; con el Embajador Fernández Faingold en Washington, con Julio y
Atchugarry aquí, en Montevideo, estábamos en un viaje de días que se
transformó en dos semanas; peleando y sufriendo, y tratando de diseñar una
salida por recursos que nos posibilitaran una esperanza. Lo único que
tratábamos de buscar era recursos para tener una chance. Yo recuerdo que
nos acostábamos a las tres de la mañana, nos acostábamos a las seis, por
supuesto, llamábamos a Montevideo a esas horas y estaban aquí, al pié del
cañón, tanto el Ministro de Economía como el Presidente del Banco
Central. Ninguno hubiera imaginado que en tan poco tiempo se puede cambiar
tanto y, aunque debemos reconocer que somos rápidos para el olvido, yo
particularmente no me voy a olvidar nunca y creo que todos los que estuvimos
allí no nos vamos a olvidar nunca. Por supuesto, tampoco el Presidente de
la República, ni los Legisladores que nos acompañaban en ese momento, que
estaban sufriendo quizás más que los que estábamos directamente
segregando adedralina. Pero teníamos una ventaja, que teníamos la
convicción de lo que estábamos haciendo, teníamos la convicción de por
qué lo estábamos haciendo y la convicción de que el plan de salida que s
estaba diseñando era el correcto. La misma convicción que ahora tenemos
para seguir adelante; la misma convicción con la cuál se encararon todas
las reformas que enumeró el contador Davrieux y que, a pesar de que se diga
que se va lento, cosa que es verdad, se ha hecho muchísima cosa. Hemos
liberalizado prácticamente todo el sector de transporte, liberalizado en
sentido amplio. Está concedido toda la infraestructura básica de
transporte al sector privado, lo cuál es absolutamente importante e
imprescindible para el Uruguay, para aprovechar su mayor ventaja
competitiva. La reforma de los bancos públicos no es un tema menor, el
contador Davrieux dijo cuál es el costo del Banco Hipotecario. También
comenzamos a llamar las cosas por su nombre y, por lo tanto, creo que eso es
un inmenso avance que se ha hecho en la sociedad. Yo creo que el esfuerzo
valió la pena, valió la pena por nuestros hijos y valió la pena por el
país. Y todo empezó con una ley aprobada por la coalición de gobierno en
agosto de del año 2002; una ley que salió en un fin de semana que fue la
Ley de Reforma del Sistema Financiero, una ley madre, una ley que fue
llamada “Ley de Bancos”, que fue apoyada, como dije, unánimemente por
el Partido Colorado y el Partido Nacional, con los votos también, en
algunos casos, del Partido Independiente. Entonces ahora, hago una pequeña
introducción de algo que yo lo he venido repitiendo, pero lo creo
fundamental. ¿Cuáles fueron las características de la salida de la
crisis, el marco, el sentido amplio en el cuál se empezó a trabajar? La
primera característica, el respeto integral por los derechos de propiedad
de la gente, demás está decir que es una de las bases para sentar la
confianza, para sentar la inversión y el consumo en el mediano y largo
plazo. El respeto por las leyes del juego, las legales, nada se alteró. El
respeto por las monedas en las cuales los particulares habían realizado sus
contratos. No se desdolarizó por un acto administrativo, sino que se
comenzó un proceso largo de desdolarización vía decisiones individuales y
de mercado, largo pero seguro. Los actos administrativos son muy efectivos
en el papel y poco efectivos en la realidad, sobre todo cuando van en contra
de la naturaleza. Tampoco se cambió las reglas del juego tributarias, era
bastante fácil, bastante sencillo con un dólar que se había duplicado en
poco tiempo, y con precios y sobre todo salarios que no se habían movido,
decir, bueno, tenemos una base disponible fácil que son los impuestos a las
exportaciones; caer en esa tentación era muy fácil. No se optó por ese
camino. Se respetó la independencia del Banco Central.
Y esto que parece
una cosa de libro, teórica, dio como resultado algo que recién el
Presidente del Banco Central mostró. En realidad no tuvimos inflación,
tuvimos un cambio de precios relativos que se reflejó por un salto en el
Índice de Precios al Consumo y luego la variación de los precios vuelve a
lo que era previamente. ¿Por qué esta regla es importantísima? Bueno, la
ley del año 96, que marcó la imposibilidad o prácticamente la
imposibilidad del Banco Central de financiar al gobierno, de darle crédito
al gobierno, contra la emisión pura, lisa y llana. También hubiera sido
fácil ceder a la tentación de alterar la ley, pedirle el crédito al Banco
Central, o sea, que el Banco central emita para financiar al gobierno, y
entonces entrar en una espiral de inflación.
Todos sabemos la
incertidumbre que esto genera y los problemas que esto genera luego para la
recuperación económica. Entonces, yo rescato también este factor
institucional fundamental para la estabilidad macroeconómica del país.
¿Cuáles fueron los instrumentos?, lo otro fue el marco. ¿Cuáles fueron
los instrumentos? Un manejo fiscal ortodoxo, ortodoxo, como recién decía
el contador Davrieux y ahora vamos a mostrar, un manejo fiscal prudente de
reducción de los gastos. Nosotros sabemos o, mejor dicho, los economistas
en general saben que para medir efectivamente el tipo de cambio real y para
medir efectivamente la competitividad de la economía, hay que medir el
gasto público en dólares, porque el comercio y en general el comercio
externo se mide en esa moneda, entonces, cuanto menos gasto público en
dólares, menor es la afectación de recursos de la sociedad que tiene que
hacer el Estado sobre el valor de lo que se produce y se exporta.
Evidentemente también un manejo monetario ortodoxo, con licitaciones de
Letras de Tesorería, o de letras de regulación monetaria, para evitar que
los precios se desbanden, o que la expansión monetaria que hubo que dar por
la salida de la crisis bancaria para pagar los depósitos en pesos, fuera de
alguna manera contrarrestada y esterilizada, evitando así la suba de los
niveles de precios.
Todos sabemos que
las finanzas de las empresas públicas en Uruguay son parte importante del
déficit o del resultado. A nadie le gusta aumentar las tarifas públicas,
pero si no aumentábamos las tarifas públicas, las empresas públicas
entraban en déficit y no podían seguir cumpliendo sus planes de
inversión, por lo tanto, se reconoció ese hecho en forma realista y se
aumentaron las tarifas públicas para absorber los costos. Todos sabemos
aparte que si no hay inversión en los servicios públicos eso,
indefectiblemente, y ya lo indiqué, al mediano plazo, o en el corto plazo,
degenera pérdida de competitividad del país.
Se dio solución a
la crisis bancaria, como ya ese explicó y una solución a la deuda
pública, mejor dicha a la concentración del vencimiento de la deuda
pública entre fin del 2002 y en especial 2003. Lo que nosotros llamamos el
riesgo de refinanciación de los corto plazo de vencimiento del Estado. Esto
permitió una salida propia la construcción de una salida ordenada, veamos
un poco el manejo fiscal, no me resisto a la comparación de cómo se manejo
la crisis esta vez con 20 años atrás. Allí en ese grafico mostramos el
gasto total del gobierno en términos reales, normalizados con base fiel en
el año 99 y el otro año 79, y como el gastos en términos reales
evolucionó en uno y otro año en especial el año82 ya fue el año de la
crisis enorme, muy parecida a la del año 2002. El comportamiento que había
sido expansivo ahora fue absolutamente contractivo.
Como bien decía
Ariel, el gasto primario, o sea, el gasto consolidado total del sector
público incluyendo Intendencias, organismos paraestatales, y organismos de
seguridad social, bajó del 31 a poco
más del 25 del PBI, que combinado con la caída del PBI, hace una
reducción –a mi gusto desconocida- del 33% aproximadamente, un tercio del
gastos en términos reales en apenas dos años. Preservando, lo que bien
explicó recién Ariel, los gastos sociales, los gastos focalizados en los
sectores vulnerables, preservando la red de protección social tradicional
del país. Justamente la devaluación con un gasto fiscal contractivo es lo
que surge los efectos que estamos viendo, todos sabemos en teoría
económica no hay duda, una devaluación expandiendo el gasto el gasto
fiscal no tiene ningún efecto, porque el cambio de los precios
relativos,que da como resultado la devaluación, si hay una mayor demanda interna había un mayor gastos
públicos, deja de generar los excedentes necesarios para la exportación,
si el llamado cambio de la estructura de gastos no se da o por lo menos no
tiene la fuerza que debería tener, y eso pasó -acá tengo la comparación-
cuando se observan las exportaciones en las crisis anterior, y ahora todos
sabemos que la exportaciones este año están creciendo, todos sabemos que
ya son más que las del año 2001, y que cuando observábamos la crisis del
principio de los 80 hasta el año 85, las exportaciones estaban bajando,
aún con una devaluación que fue en términos reales mucho mayor a la que
tenemos hoy, y están los datos que avalan el aserto. La contrapartida
de este comportamiento de gasto fiscal es este resultado primario,
aproximadamente en números preliminares a octubre estamos ya en un 2.6% de
superar el primario consolidado, 3% es la meta, estamos en camino al pleno
cumplimiento de nuestros compromisos como es tradicional en el país.
Veamos algunos
resultados que creo que es lo más importante. El Producto se empezó a
recuperar ya en el primer trimestre de este año, y estamos previendo
aproximadamente un crecimiento del orden del 12% en el cuarto trimestre de
este año sobre el cuarto trimestre del año pasado. Ahora, este resultado
dada la crisis que tuvimos, ¿es bueno o es malo? Si lo comparamos contra la
crisis de principio de los 80 de Uruguay evidentemente es espectacular
porque demoramos hasta la segunda mitad del 85 para comenzar acrecer. Pero
vamos a compararlo con otros fenómenos, otras crisis mundiales, a ver cómo
anduvimos en términos en estándares
internacionales. Vamos a empezar por lo que tanto leemos en los diarios y
tanto a veces alabamos, algunos, que es nuestro vecino del Plata. Comparemos
el Producto, cómo creció el Producto desde el último
trimestre, con base al último trimestre que cayó, con Argentina al
año 2002. Este es acumulado al sexto trimestre, o sea 18 meses después del
piso, Argentina tiene un crecimiento del 9% acumulado en el Producto Bruto
Interno. Ahora, Uruguay ya tiene 9.8% seguro y va a tener 12% -y no soy
optimista en exceso creo- cuando terminemos en cuarto trimestre.
Ustedes dirán,
bueno, Argentina tuvo algunos problemas, las soluciones que se dio no
eran tan buenas. Muy bien, veamos con Brasil, cuando tuvo la profunda crisis
del 92´, más o menos el crecimiento de Brasil es parecido en
la salida al de Argentina, naturalmente inferior al nuestro.
Comparémonos con quienes en general se muestran muy dinámicos y tiene
economías en donde el sector privado es bastante más pujante. Corea 98´,
en el cuarto trimestre Corea acumulaba el 11%, nosotros esperamos 12%; en el
tercer trimestre después del pozo de la crisis, Corea 7
y nosotros casi 10; y este es el más cerca, con Tailandia como
verán también ha tenido un comportamiento como Argentina y Brasil, y
también podemos comparar con Singapur, Taiwán, y todos los resultados son
bien parecidos. ¿Qué quiere decir? Bueno, desde mi punto de vista, algo
tuvo que haber habido en el diseño de las salidas, en la forma que se
implementaron las reformas, para que esto suceda. Nada de estos fenómenos,
ninguno de estos fenómenos, están librados al azar, tampoco el crecimiento
viene exclusivamente por un efecto de rebote y si lo consideramos rebote lo
otro, nosotros rebotamos bastante más rápido quiere decir que también
hubo un factor diferencial,
quiere decir tenemos que pensar que hay países, algunas culturas que están
implícitas de hace más de 2000 años que no muestra casi crecimiento.
¿Cuál es la
situación actual? Los números recientemente divulgados del tercer
trimestre muestran crecimiento en todos los sectores; el tercer trimestre
sobre el piso, que es el cuarto trimestre del año pasado, esta mostrando el
crecimiento en la construcción, en el comercio, en el agro, y en la
industria, y también en el resto de los sectores. Todos crecen, ya no es un
fenómeno como en principio de año que
era liderado como es obvio por algunos sectores, a los cuales no le
llega a los demás; ya empezó a llegar por todos los sectores.
El producto
Industrial sin refinería desnacionalizado tiene un comportamiento también
muy importante. El empleo total urbano crece, como se dijo cuando salieron
los números del trimestre
pasado de octubre, había 50 mil personas trabajando que un año atrás.
Estas son satisfacciones para el Ministro de Trabajo, para todos nosotros,
pero no seamos mezquinos es una satisfacción para le país, para todos,
porque esto es lo que tantas veces se dice cuándo va a llegar la
recuperación a la gente, y todos nos alegramos que esto llegue y cuánto
más rápido mejor. Otro indicador las importaciones intermedias sin
petróleo, en trimestres móviles; básicamente los insumos, para la
industria, también tienen un comportamiento de crecimiento explosivo y que
esperamos que siga manteniendo. Las exportaciones totales muestran el mismo
comportamiento que fueran las primeras que empezaron a responder por la
combinación de un abaratamiento en el precio relativo de la mano de obra
nacional, conjuntamente con una austeridad Fiscal.
Este Grafico es
bien interesante, la línea azul muestra la recaudación real del IVA en
Aduana diario, el promedio de
21 días móviles, la línea amarilla muestra el año 2002 y la línea roja
muestra el año 2003. Como verán ya estamos por encima del año 2001 en
recaudación real, obviamente que es tan solo un indicador del nivel de
actividad interna. Si ustedes ven ahí, en ese grafico más allá, de la
natural estacionalidad que tienen, la recuperación del año 2003 condujo a
cierta asimetría en el comportamiento, hay ese salto, un salto de nivel;
bueno, esos fueros los días posteriores al canje, al canje de la deuda,
algo debió tener que ver el canje con el nivel de actividad.
La recaudación de
la DGI, comercio exterior, también está creciendo desde un pozo , el pozo
y estabilidad se llevó desde junio-julio de este año, a partir de julio,
agosto se empezó a crecer más fuertemente y la variación de los
depósitos de lo acumulado del sector privado en moneda extranjera, no
financiero, muestra ese comportamiento –la base es el día del feriado
bancario- y tiene un comportamiento positivo de arriba de 500 millones de
dólares, aun cuando hayamos partido de menos 500 en el mes de agosto,
quiere decir que la recuperación supera los 1000 millones de dólares en
poco más de 1 año. Todo esto quiere que todos los indicadores son
indiscutibles del camino que esta mostrando el país, y la base para lo cual
somos razonablemente optimistas en la formulación del programa del año que
viene, en el cual esperamos un crecimiento importante en términos uruguayos
de nuestra economía. Para elaborar el programa, naturalmente, primero hay
que mirar el entorno.
¿Cuál es el
entorno que tenemos? Asia, EE.UU., América Latina, Europa, todos están
creciendo. Quiere decir que la demanda externa va a ser un motor, o por lo
menos no va a ser un freno, a nuestra expansión. Las tasas de interés en
términos reales siguen bajas, y por del momento van a seguir bajas. Los
precios de exportación son precios que han mejorado, no son de películas,
pero han mejorado. De hecho, del crecimiento de este año del total de
exportaciones que podemos situar en el entorno de los 300 millones de
dólares, casi 70 millones tienen un efecto precio, el resto un efecto
volumen. Aproximadamente ¼ efecto precio, un tercio efecto volumen.
Las bases también
de la formulación del programa son los resultados que hemos venido
observando y los que nosotros tomamos como política. La política es: vamos
a seguir respetando las reglas de juego, mantenemos una flexibilidad
cambiaria, mantenemos la austeridad fiscal, generamos espacio para la
inserción uruguaya del Mundo.
¿Cuáles son las
bases del programa? Crecimiento 5%, para hacer la proyección fiscal;
inflación, como dijo Julio, entre 7 y 9%. Estamos previendo crecimiento del
salario real entre 1 y 2% , y estamos previendo un incremento de tarifas
públicas que atienda el incremento de costo de las empresas públicas y
también el costo en sentido amplio, quiere decir que las empresas sigan los
programas de reformulación y reducción de sus costos también las tarifas
van acompañar los programas de reducción de sus costos.
En promedio
estamos esperando que el número de nuevos empleos para el año que viene,
sea aproximadamente de 50 mil. Estamos previendo un crecimiento de las
exportaciones entre 15 y 20%, un crecimiento de la producción Industrial,
sin refinería, entre 12 y 14 %, siempre en términos reales.
Desde el punto de
vista fiscal, estamos previendo, o tenemos un programa, un compromiso, de
que el resultado primario, esto es el resultado ante del pago de intereses,
sea superavitario en al menos 3.2% del PBI, y dada la carga de intereses un
resultado global negativo de 2,9% del Producto. Dentro del programa hay
algún otro aspecto que entendemos importante. Naturalmente que con 5% de
crecimiento, logramos el 3% de superavit primario, podemos empezar a
recomponer en nivel de inversión pública muy deteriorado, que no hubo más
remedio que hacer durante la crisis. Por otro lado, estamos previendo una
cierta recuperación del nivel de inversión pública. Sin embargo, cuando
vemos los egresos de los gastos globales consolidado al sector público el
programa prevé solo un aumento del 1.4% de los egresos consolidados en el
sector público en términos reales. Ahora, este 1.4% incluye algunas cosas
que necesariamente se dan en algunos casos, porque hay un año electoral que
es el costo de las elecciones, y en otros caso porque tenemos que pagar
determinadas deudas, que estábamos muy atrasados, y que entendemos
razonable dejar en orden también este aspecto.
Aquí tenemos una
estimación de los gastos que son de una vez, y nada más que una vez, para
el año que viene; algunos como el gasto eleccionario, es recurrente cada
cinco años. Los ticket de alimentación fue una partida que, como todos
recuerdan, se dio en febrero de este año, tanto para pasivos como para
activos, con una inflación proyectada del 27 por ciento, se pensaba el
descontar de los futuros aumentos de sueldos. Por su suerte la inflación
será del entorno del 10 por ciento, no había margen para hacer un gran
descuento, o mejor dicho no había margen para hacer ningún descuento. El
sector público va a asumir el costo, seguramente en el tercer trimestre del
año que viene, y eso cuesta 592 millones de pesos. El costo de las
elecciones, contando el pago a los partidos políticos por los votos, que es
aproximadamente 425 millones de pesos, y además tenemos un abatimiento de
atrasos y deudas previsto de 1.240 millones de pesos, aproximadamente, que
como ustedes habrán visto en la prensa diariamente surgen problemas con
esto.
Naturalmente, que
si no tenemos recursos no podemos pagarlo, no es un acto arbitrario no
pagarlo en la fecha que quieren los acreedores, es un acto de necesidad, y
por lo tanto pensamos ponernos al día. Todo eso da 0,6 por ciento del
Producto. Todo esto va al resultado primario, quiere decir que la base del
resultado primario para el año 2005, es 3,8 % del Producto, de una
previsión pasiva, aun sin crecimiento.
A su vez tenemos
otro factor en el déficit global que es el hecho, bastante específico y
bastante técnico, que el Banco Central de acuerdo al manejo que se ha dado,
tiene que pagar dos años de intereses de los Certificados de Depósitos que
tiene constituido del sistema bancario, que eran a dos años. Esto cuesta
aproximadamente 0,4 % del Producto, entonces, si sumamos los dos factores,
como son dos años, el 0,4 se transforma normalmente en 0,2, y entonces
tenemos que el déficit global del 2,9 % bajaría a 2,1% en una proyección
pasiva a partir del año 2005. Naturalmente que todavía es déficit y que
todavía hay que mejorarlo, pero claramente estamos bastante mejor de lo que
estábamos no hace mucho tiempo.
Ahora quiero
referirme a algo que a nuestro entender es sumamente trascendente y que hace
justamente al crecimiento y al empleo y al salario que es, en definitiva,
toda nuestra preocupación. Hace poco más de un mes, en el almuerzo de la
competencia, decíamos que el Uruguay tiene que pisar firme y poner un pie
fuera del país y, de ser posible, sin olvidar la región, también fuera de
ella, para evitar los vaivenes e incertidumbres, que los vaivenes e
incertidumbres de la región no nos vuelvan a afectar tan duramente como nos
afectaron durante los años pasados. Decíamos que teníamos que aprender la
lección y decíamos también que teníamos que convertirnos en la
plataforma de lanzamiento de América del Sur para sacar nuestra producción
y la producción ajena, para transformarla, para agregarle valor a nuestra
producción y a la producción ajena. Decíamos, que cuando alguien piense
en invertir en la región, al menos evalúe a Uruguay y que para ello, desde
nuestro punto de vista, no hay un sector más importante que el otro: el
Agro, la Industria, el Comercio, los Servicios e Infraestructura, la
Logística, los Servicios Financieros, todos son buenos, todos son
importantes, todos se relacionan y tienen sinergias entre sí. Naturalmente
decíamos que parte de las condiciones para esto. Estábamos pensando en el
planteo negociador que estábamos desarrollando tanto a nivel de MERCOSUR
Como a nivel del ALCA y
estábamos pensando en todas las acciones que bien enumeró el contador
Davrieux, de infraestructura básica de transporte y de servicio que le
están dando. Sabemos que somos parte y nos debemos a este lugar del mundo,
sabemos también que nuestros dos grandes vecinos, hermanos y socios, tienen
grandes industrias y tienen gran potencial. Pero también sabemos que
Uruguay fue grande cuando se enfrentó al mundo y no le tuvo miedo, no le
tuvo miedo de exportar y tampoco tuvo miedo de importar porque en la
especialización estaba el crecimiento. Esta independencia y ese mirar al
mundo fue lo que construyó la gloria de Uruguay. Para ello qué
pensábamos, pedíamos la comprensión de nuestros socios del MERCOSUR para
tener una posición negociadora más flexible, que contemple los legítimos
intereses del Uruguay y de su gente. Que contemple a este pequeño
territorio entre dos gigantes, que legítimamente tienen también sus
prioridades, pero que esas prioridades no nos impongan un corsé a nosotros.
¿Y qué pasó
estos días? Creo que hemos logrado las reglas claras y estables para que no
haya incertidumbres de todas las cosas que se venían encima por los
acuerdos del MERCOSUR. Uruguay logra preservar la competitividad de su
economía. Los aranceles de bienes de capital, Informática y
Telecomunicaciones que estaban entre 6 y 9 % y que subieran a 14 y 16% entre
el 2004 y 2006, se bajan a 2% hasta el 2010. Se mantiene hasta el mismo año
el régimen de preferencia en materia de importación de insumos para el
agro, se mantiene el régimen de promoción de inversiones, se mantiene el
régimen de admisión temporaria, hay un aumento en el total de excepciones
para otros insumos básicos que Uruguay entienda pertinentes y que
son claves para la Industria de 100 a 225 que también van a entrar con un
arancel preferencial. Quiere decir: tenemos una posición de estabilidad por
7 años, la Industria puede pensar tranquila sus inversiones por 7 años
que, en términos generales, es un plazo más que razonable para mejorar su
competitividad, para poner el pie dentro y fuera de la región, para crecer
genuinamente.
A su vez, y
reconociendo que el comercio también es un factor importantísimo en la
generación de valor agregado del país, se ha conseguido una cantidad de
mejoras en materia de acceso a mercados. Se consiguió el reconocimiento en
materia de origen para la acumulación de procesos productivos; esto es, a
partir de ahora, mercaderías provenientes de países miembros pueden ser
sujetas a transformación, a mecanismos de fraccionamiento, a mecanismos de
agregación de valor en términos generales, que el origen se suma de toda
la región y no hay que tener prácticamente una producción totalmente
integrada. Esto mejora muchísimo la integración productiva y mejora
muchísimo la especialización y, en definitiva, la competitividad. Se
eliminan las reservas de mercado de Argentina y Brasil para las compras
gubernamentales, las empresas uruguayas van a poder participar en
licitaciones de Argentina y Brasil. De la misma manera, en el primer punto,
se incorpora al régimen de libre circulación de bienes producidos, los que
también se transforman en los depósitos aduaneros, lo mismo que el primer
punto, en sentido un poco más amplio. Brasil libera la compra de servicio
de su estado para los servicios uruguayos, el mantenimiento de equipos de
Software, de equipos de computación, cualquier
servicio va a poder ser brindado por uruguayos libremente cuando
compre el Estado brasileño. Y, por ultimo, se obtiene mayor flexibilidad
para negociaciones externas y vamos a trabajar fuertemente dentro de los
países de América, en especial para lograr ciertas complementaciones
productivas con países en los cuales claramente somos y producimos bienes
que se integran en cadenas productivas.
En resumen,
creemos que este era nuestro deber y el gobierno cumplió en otorgar las
bases y en otorgar la plataforma para que el sector privado haga su trabajo,
para que el sector privado elija lo mejor, al mejor precio, sin barreras
artificiales que dañen su potencial de producción.
Por último, y
estoy un poco pasado, yo hace 20 años que sirvo en el sector público,
empecé como docente en la Universidad de la República; hace 18 que trabajo
en el Gobierno Central, jamás vi un cimbronazo como el que tuvimos en el
año 2002, pero tampoco jamás vi una recuperación tan rápida y vigorosa
como la que tuvimos. La experiencia Mundial, por lo menos la reciente,
tampoco asistió a cosas muy parecidas. Quiere decir que esta probado que
podemos hacer las cosas y que debemos tener fe en nuestras fuerzas y que
además, cuando instrumentamos las cosas, debemos de mirar al mundo en
términos modernos y cambiar con él y adaptarnos a las realidades, y no
vivir pensando en algo que ya fue y que no volverá jamás.
Nuestra tarea es
seguir dando las bases, seguir haciendo los acuerdos como este que
mostramos, nuestra tarea es no dilapidar los recursos de la sociedad desde
el sector público y por eso diseñamos ese programa financiero austero.
Nuestro deber es cuidar la caja de todos los uruguayos y brindar las
condiciones para el desarrollo como hacen los buenos padres de familia, como
dice el Código Civil. Las prioridades están en el mantenimiento de la red
de protección social que las familias también reservan a sus miembros más
débiles, reduciendo los gastos en todo lo que sea posible, pero
privilegiando los gastos como se privilegiaron y en los mismos sectores,
durante el año pasado. Tenemos un hecho ahora que es el tema de la cobranza
de las carteras del BROU; el BROU es un Banco público que tiene garantía
estatal, nosotros le vamos a exigir al directorio del BROU que la garantía
sobre esa cobranza no se ejerza, le vamos a exigir que cobre esos créditos,
porque si no cobra los créditos toda la sociedad tendrá que pagar por
ello. El capital que se puso en el BROU, el capital que se pone el BHU, nos
cuesta 8 o 10% anual de intereses y si no rinde eso, estamos dilapidando los
recursos de la gente, de todos
lo que pasan por ahí afuera y no tienen ninguna posibilidad de defenderse.
Nuestro enemigo es
el desempleo, que trae la marginación, y ya vimos la respuesta diferente
que se dio a esta crisis frente a la crisis anterior; ya vimos la diferencia
de respuesta que la sociedad le dio, y que el sector privado, el verdadero
generador genuino de riqueza, le dio. Está claro que no podemos tener un
Estado triturador de recursos de la sociedad, que gobierne para sus
funcionarios, o para las corporaciones que lo presionan, sino que -como nos
hemos impuesto- que gobierne para la gente y para las empresas que son las
generadoras genuinas de la riqueza, que generan el crecimiento y que generan
el empleo. Antes de ceder a las tentaciones del gasto, todos nosotros
preferimos bajar los impuestos y dejar que la gente gaste su dinero como
más le guste y dónde mayor utilidad le de a sí mismo.
Nuevamente tenemos
que tener un Estado ágil y musculoso, preocupado por el trabajo de su
gente, que deje que quienes
apueste al riesgo gane y no les
expropiemos su ganancia, porque en ellos esta el crecimiento. Hay que mirar
para adelante, y por eso se han tomado las medidas sobre la inversión que
se tomaron el mes pasado, por eso se están mandando las leyes que se están
mandando al Parlamento para facilitar el crédito, para evitar doble
tributaciones
En definitiva,
como decía John F. Kennedy, que es lo que tenemos que asumir, aquella frase
que decía “no te preguntes
qué puede hacer el Estado por ti, sino que puedes hacer tú por tu país”;
y eso es lo que tenemos que asumir desde el sector público y privado.
En resumen creo
que vamos a tener un buen año, en nosotros esta que sea mejor o mucho
mejor, nosotros vamos a seguir trabajando y creo que ustedes también.
Muchas gracias.
PREGUNTAS DEL
PÚBLICO AL EQUIPO ECONÓMICO
COTELO: De
ustedes los asistentes y las respuestas de los invitados de está mañana.
Son muchas las preguntas así que les voy a pedir a los integrantes del
equipo económico respuestas breves.
Por orden,
primero con las preguntas para el Presidente del Banco Central.
Usted mencionó que el referente de la
política monetaria y cambiara será la inflación y que no existirán
intervenciones sobre el tipo de cambio. ¿Cuáles son los valores de
expansión monetaria y déficit fiscal que resultan compatibles con la
inflación de 7 a 9% anual? ¿Cuál es su estimación de devaluación para
el 2004?
DE BRUM: Bueno,
como había dicho en la presentación, la intervención del Banco Central en
el mercado de cambio, nuestras intervenciones son con objetivos de metas de
reservas, no sobre el precio del tipo de cambio, precio del dólar. La idea
es que, en definitiva, en la medida que el Banco Central no financie al
gobierno, como dijo el Ministro en su exposición, mantenemos en ese sentido
los requerimientos legales en materia de que hay topes al dinero que el
Banco Central puede prestarle al gobierno y en esa línea nos hemos
mantenido estrictamente. Lo que importa, desde el punto de vista de las
metas monetarias, no tanto la situación del déficit fiscal, sino en
definitiva cuáles es la expansión monetaria consistente con la capacidad
del Banco Central de intervenir, o de manejar sus distintos instrumentos
monetarios, de tal manera que esas metas monetarias se cumplan
estrictamente. Lo que importa aquí desde el punto de vista del déficit
fiscal, es que esté en una magnitud suficiente como para que el programa
financiero del gobierno cierre en sí mismo y esa metas es el que anunció
el Ministro, de 2,9 por ciento del Producto para el año que viene, es
consistente con los desembolsos previstos en el año 2004 parte de
organismos multilaterales con destino al gobierno, con la capacidad de
endeudamiento en el mercado que pueda tener el gobierno en el próximo año,
que entendemos que vamos a tener poca necesidad de acudir a él, justamente
incrementamos nuestra capacidad de generar recursos en el año 2003,
previendo que eventualmente en el 2004 fuera más difícil acceder a los
mercados, y todo este financiamiento debería ser a su vez consistente y
suficiente para cubrir los vencimientos de deuda durante el año 2004. O
sea, que desde el punto de
vista de las metas de inflación y de programa monetario del Banco Central,
la situación del sector público está corriendo por cuenta separada y no
la afecta mayormente.
COTELO: Se preguntaba también por
estimación de devaluación para el 2004. Hay otras preguntas que también
va por allí, dice, ¿qué proyecciones de devaluación tiene para el 2004?
Usted anunció menores necesidades de compra de divisas dado que el año que
viene hay elecciones y puede haber mayor incertidumbre ¿Planea intervenir
en el mercado de cambio con las reservas del Banco Central?
DE BRUN:
Estimaciones, nosotros hacemos estimaciones del tipo de cambio ara uso
interno a efecto del cálculo de los costos de las compromisos en dólares
del sector público. Pero no tenemos metas y por lo tanto anuncios públicos
en materia de devaluación. Digamos el tipo de cambio será durante el año
el que tenga que ser de acuerdo a las condiciones del mercado.
Indudablemente se comportará de acuerdo a lo que sea necesario en función
de la competitividad de Uruguay, de cómo sea la evolución de los precios
internacionales y demás.
COTELO: ¿En
cuanto a la posibilidad de intervenir?
DE BRUN: No. La
intervención está limitada a las necesidades de reservas. Y,
eventualmente, la posibilidad de que si fuera necesario en algún momento
modificar el programa monetario porque la monetización de la economía es
mayor que la esperada, ahí decidiremos si eso lo hacemos vía aumento de
reservas o menor endeudamiento en moneda nacional, reduciendo el stock de
Letras de Tesorería. Eso lo veremos, o mediante la regulación monetaria,
eso lo veremos en su momento.
COTELO: Parte de las metas de inflación
para el año 2004 que usted menciono, es decir del 9%, inferiores a las del
2003, Considerando el aumento previsto de la actividad, la reactivación de
la demanda. Considerando también que se ha hablado de leve recuperación de
salarios reales en el sector público, y también la posibilidad de
incertidumbre por el impacto de las elecciones, ¿cómo es que pueden
lograrse menores niveles de inflación en el 2004?
DE BRUN: Todo el
comportamiento de los salarios reales, está de alguna manera consistente
con las previsiones en materia demanda agregada. Por lo tanto con la
presión sobre los precios dentro de las estimaciones previstas. Justamente
el programa monetario se acomoda a lo que pueda ser la expansión en el
nivel de actividad, de empleo, y de salario prevista, detal manera que la
inserción se mantenga dentro de los rangos establecidos.
Evidentemente,
en caso de que las presiones salariales sean mayores, o en el caso de que el
crecimiento en el nivel de actividad sea mayor, incluso al previsto, en ese
caso haremos los ajustes correspondientes en el programa monetario para
mantener la inflación en esos rangos.
COTELO: Esta
pregunta tiene que ver con bancos en liquidación y Banco de Crédito.
¿Porqué la inactividad de éstos, por qué la pasividad de estos, frente a
los planteos concretos de empresas en marcha, con créditos originalmente
otorgados a mediano plazo, a las que solamente se les responde con
telegramas colacionados de cancelaciones en 72 horas?
DE BRUN: No hay
realmente inactividad, se han hecho en todos estos fondos de liquidación en
su momento se han hecho convocatorias y llamados para la renegociación de
los créditos. Seguramente, lo que puede haber ocurrido en el caso de quien
plantea la pregunta, es que la propuesta de pago no se adecuaba a las
garantías existentes sobre el crédito, y entonces las instrucciones que
tienen en general los fondos de liquidación, es recuperar la totalidad del
capital adeudado, teniendo en cuenta el valor de las garantías. Simplemente
eso. Pero cuando las propuestas de pago se adecuan con el valor de las
garantías y el mantenimiento del valor de los créditos, esas
refinanciaciones se otorgan y de hecho se han otorgado en un número
importante.
COTELO: Esto no
es una pregunta, es más bien una demanda, un reclamo: “Por favor,
reconozcan a los tenedores de Eurobonos del banco Montevideo, como
ahorristas con derecho a cobrar sus haberes. La vida de muchos uruguayos y
de muchas empresas depende de esa decisión”.
DE BRUN: El
reconocimiento como ahorristas es tal, ellos son acreedores con derecho en
la liquidación del banco de Montevideo. El problema que existe con los
tenedores de bonos, tanto en Montevideo, como en Comercial, es que, por la
naturaleza del instrumento no se puede aplicar el beneficio previsto para
los depósitos en cuanto al esfuerzo de con utilizando la recuperación que
el Estado tiene en estos fondos del liquidación, poder llegar a niveles de
100 mil dólares. O sea por las características de esos instrumentos, no
podemos llegar a una nominatividad que diera las garantías suficientes como
para un tratamiento análogo al caso de los tenedores de bonos.
En ese sentido,
como forma de contemplar alguna recuperación un poco mayor en esos
depósitos, es que en su momento el ministro Atchugarry, estando en el Poder
Ejecutivo, envió un proyecto de ley al Parlamento solicitando la
autorización para que de lo que obtiene el Estado, de la parte que le
corresponde al Estado, de los fondos de liquidación, también se pudiera
dar un complemento adicional a los depositantes mayores de 100 mil dólares
y a los tenedores de bonos. Ahora en este último caso, los tenedores de
bonos del Montevideo y Comercial, no irían con mínimos asegurados, sino
que sería una mejora en la prorrata que les corresponde en el proceso de
liquidación.
COTELO: ¿Cómo
piensan lograr una reducción significativa del grado de dolarización en un
año como el próximo, caracterizado por incertidumbre electoral?
DE BRUN: El
proceso de dolarización, gradualmente se ha iniciado. Creemos que en buena
medida incentivado por el propio ambiente de flotación, que en la medida de
que no establece una dirección previsible del tipo de cambio en el mediano
plazo, complica mucho más el cálculo de rentabilidades para instrumentos en dólares versus instrumentos en pesos, y en
un contexto de relativa estabilidad, tanto de precios como de tipo de
cambio, se empieza a generarle mayores incentivos o mayores ventajas a la
generación de instrumentos de ahorro en moneda nacional. Eso lo estamos
tratando de complementar, justamente introduciendo, facilitando, promoviendo
la aplicación de instrumentos de ahorro en moneda nacional, como han sido
los papeles en unidades indexadas, donde inicialmente lo habíamos intentado
con letras de regulación monetaria del propio Banco Central. La emisión
pública registrada internacionalmente, lo que fue una experiencia sumamente
novedosa por parte de Uruguay en los mercados internacionales de hacer una
emisión internacional en pesos uruguayos en octubre, sirvió también como
catalizador para el desarrollo de este tipo de instrumentos; y en las
siguiente licitaciones que hemos seguido haciendo en el Banco Central ya
ahora a plazos mayores que los que teníamos inicialmente ahora llegando a
plazos de hasta 5 años, empezamos a encontrar mayor cantidad de interesados
en estos instrumentos y a tasas significativamente menores que las que
había seis meses atrás. Y en general, lo que estamos tratando es de ir
generando un marco regulatorio que genere sesgos a favor de la moneda
nacional especialmente en materia bancaria, reconociendo justamente los
diferentes riesgos de estar en moneda nacional o en cualquier moneda
extranjera, las normas de encaje de moneda extranjera son más restrictivas
que en moneda nacional, ya señalé también que en materia de créditos ya
tenemos disposiciones que obligan a quienes evalúan la cartera de la
institución bancaria de detectar el impacto que eventualmente una
devaluación tendría sobre el balance del deudor, y efectuar las
previsiones correspondientes. Una vez que se implemente a lo largo del
tiempo el Seguro de Depósitos, va a generar incentivos a ahorrar en moneda
nacional, ya sea por el pago de menores primas y también por mayores
niveles de cobertura de depósitos en moneda nacional, justamente también
reflejando la diferencia de riesgos, en definitiva la moneda nacional es la
moneda que uno emite y que en definitiva puede acudir como prestamista de
última instancia del sistema; la moneda extranjera está acotada a las
reservas internacionales que
uno dispone y a la capacidad de endeudarse que ya vimos durante el año
2002, que en tiempo de crisis ambas cosas se pueden dar muy rápidamente.
Eso es
básicamente en líneas generales la batería de instrumentos con las que
más allá de lo que ocurra en el transcurso de un año electoral, a mediano
plazo va a ir generando elementos favorables hacia la dolarización.
COTELO: Quizá la pregunta apuntaba a
saber si también existen previstos, además de ese marco general,
instrumentos específicos para un
año como el que viene.
DE BRUN:
Básicamente el instrumento específico es tener las murallas bien sólidas
dando señales al mercado de que el sector
público básicamente no tiene problemas de financiamiento para el
año 2004, que el Banco Central a su vez tiene un nivel de retorno
suficiente como para respaldar cualquier contingencia que exista en el
sistema bancario, que a su vez el sistema bancario está con muy altos
niveles de liquidez, con solvencia también muy alta y con resultados que ya
en octubre empiezan a ser positivos lo cual le da una estabilidad general al
sistema financiero; lo cual aún, pese a ellos es probable que exista algún
ruido durante el año 2004, pero en todo caso es perfectamente controlable
por el gobierno.
COTELO: Dejamos descansar al economista De
Brun, quizá aparezca alguna pregunta más, después, pero por ahora eso es
todo. Vamos al Contador Davrieux, director de la Oficina de Planeamiento y
Presupuesto. Aquí le piden más reformas: “Usted se refirió al
desarrollo de varios puertos en el país, quisiera conocer en qué está el
proceso de licitación del puerto de Punta del Este, ya que hace
años que se anuncia su privatización pero nunca se
concreta”.
DAVRIEUX: Me voy a
tener que excusar sobre el punto, porque no siendo el encargado de ese
departamento y no estando el Ingeniero Lucio Cáceres acá no puedo
contestarle ese detalle concreto.
COTELO: Otra pregunta: “Si la situación
de la Caja Bancaria es tal cual usted ha descrito, ¿por qué motivo los
montos por IRP que perciben sus afiliados, deben ser vertidos al BPS? ¿No
sería una solución que quedaran formando parte de sus ingresos? En los
hechos terminan subvencionando al BPS.
¿Es ese un sistema equitativo?”
DAVRIEUX:
Bueno, primer punto los aportes, los impuestos a las retribuciones
personales no tienen como destino el BPS sino tienen como destino Rentas
Generales, o sea, que esa es una afirmación que no corresponde. En cuanto a
los aportes que se realizan a la Caja Bancaria, son
excepcionalmente altos. En este momento, de acuerdo con la tasas normales,
más la que se aplicó adicionalmente por la ley de diciembre del 2002, las
tasas de aportes sobre sueldos, rondan el 50%. De tal manera, que una
persona, cuyo costo para la empresa es 130, percibe algo así como 60%
líquido. O sea hay un suplemento de impuestos, la mayor parte de ellos con
destino a la Caja, excepcionalmente alto. El componente del impuesto a
Retribuciones Personales, fue destinado justamente a cubrir los déficit del
gobierno que contribuimos todos, y no para dar más beneficios a un sector,
que se encuentra seriamente en dificultades.
En todo caso, lo
que sí se ha pensado, es aunque no es una buena situación, es mantener ese
sobre-impuesto con destino a la Caja, que se presentaría un proyecto en
este mes de diciembre, dado que con los efectos de la devaluación, la Caja
tuvo un efecto favorable. Como sus colocaciones son en dólares en el
gobierno, han aumentado en relación a sus egresos y tiene un fondo que le
ha permitido en todos estos meses, en los últimos doce meses por lo menos,
si bien tiene déficit corporativo a través de su ganancia financiera logra
un resultado global favorable. O sea, que no es una situación desesperada
de iliquidez inmediata, sino evolutiva a más largo plazo. Estimamos que el
año que viene no tendría que dificultades inmediatas.
COTELO: Y desde
el punto de vista del proyecto de ley que se estaba planteando.
DAVRIEUX: Con el
proyecto de ley lo que se ha planteado que un aporte adicional del 4.5%
sobre el aporte patronal que es vertido básicamente por el Estado. La
situación actual de la Caja Bancaria es que próximo al 70% de los
afiliados son funcionarios públicos, el Banco República, Banco de Seguros,
Banco Hipotecario, Banco Central, Nuevo Banco Comercial, fondo de
liquidación, etc. y en definitiva esto es como un aporte adicional del
Estado que se hace a la Caja, porque el 70% de su aporte adicional lo pone
el Estado.
COTELO:
¿Y lo que se prevé es mantenerlo?
DAVRIEUX:
Mantenerlo. Requiere una ley y la aprobación de la ley.
COTELO:
¿Y mantenerlo por cuánto tiempo?
DAVRIEUX: En
principio, la idea era mantenerlo por un término que permitiera al próximo
gobierno tomar decisiones, o sea, no por un años, sino que se estimaba que
era posible en unos 18 meses, para que el gobierno que asumiera en marzo,
pudiera hasta junio tomar decisiones. O hasta que se adopten las medidas
quizás por algún proyecto de ley.
COTELO:
Usted habló de importantes reducciones de personal en el Banco
Hipotecario y en AFE. ¿Significa eso que los contribuyentes dejamos de
pagar esos salarios, o significa que estos empleados fueron reubicados en
otras dependencias del Estado?
DAVRIEUX: Bueno,
como todos conocen, y el que hizo la pregunta lo conoce, la estabilidad de
los funcionarios llega mucho más allá de lo que marca la Constitución. En
todo caso, es un principio entendido que se busca una salida a los
funcionarios que no los deje en situación de desocupación. Eso lo muestran
todos los datos de desocupación que todos los desocupados son privados. Los
ocupados son públicos y privados, pero los desocupados son privados. En el
caso de estos organismos, una parte de ellos lo que hacen es pasar a
jubilación, eso ocurrió mucho cuando se estableció el límite de 60 años
para ejercicio de actividad en los bancos oficiales, eso redujo la
ocupación en todos los bancos, y permite que parte del
personal que disminuye en el Banco Hipotecario, pasen a ocupar los
lugares que ocupaban antes quienes se jubilaron. Por el momento y mientras
están vivos, y disculpe la expresión, porque ese tipo de preguntas sigue
siendo a cargo de alguien, en el caso de jubilados justamente de la Caja de
Jubilaciones Bancarias. Con estos funcionarios que están redistribuidos,
cubren espacios que quedan en los otros bancos. En realidad el Banco de la
República desde mediados del año pasado hasta los próximos meses, por el
régimen de retiro, en un sistema de retiro anticipado, reducen más
personal en el banco que todo el que se reduce en el Banco Hipotecario. Esto
produce unas 700 plazas en el Banco de la República. Y en el Banco
Hipotecario va a haber una reducción de ese mismo tipo.
En el caso de AFE,
hubo tres situaciones, pero fue tres destinos a los funcionarios. Una parte
quedo en la empresa, aproximadamente un 40%. Otra parte, otro 40% pasó a
cumplir funciones en infraestructura, mantenimiento de infraestructura. Y
otro 20% salió de la empresa, la mitad aproximadamente por incentivo de
retiro y la otra mitad se mantiene en disponibilidad y se redistribuye
cumpliendo los espacios que se tiene en todas las oficinas, entre ellas
Planeamiento al no poder decirle a ningún funcionario público, se
redistribuye desde Servicio Civil. O sea, se cubren vacantes que van dejando
los otros funcionarios.
COTELO: Dentro de la teoría de cuanto
peor mejor, un candidato presidencial sigue hablando de hacer una importante
quita a la deuda uruguaya. Todavía estamos lejos de las elecciones, pero en
la medida que nos acerquemos a la fecha y no se cambie esté discurso, esto
es muy probable que desencadene otra crisis financiera. Ya vimos que esperar
y después defender a dado resultados nefastos. Aquí alude a los casos de
Antel y Ancap y los referéndum que se enfrentaron. ¿Qué estrategia tiene
el gobierno para evitar cargar con una crisis creada por un preanuncio, que
es claro nunca debe hacerse si se actúa con honestidad y o profesionalidad?
DAVRIEUX: Es
un poco difícil esto porque no es una afirmación ni de gobierno. Además
entiendo que el candidato del Encuentro Progresista se refirió a la
necesidad de una quita antes del canje. Las referencias que se hicieron
después habla de la necesidad de refinanciar la deuda con los bancos
sociales no la deuda que ya refinanciada. Pero existe si la
alternativa que eso puede llegar a ocurrir
y esta abierto a que un gobierno futuro cambie la línea. A través de eso
puede, si esta anunciado, puede crear dificultades. Las versiones que yo
ví, posiblemente hayan otras hacían mención a que los vencimientos con
los organismos internacionales -FMI, BID, Banco Mundial- eran importantes
entre los años 2005 y 2007, lo que es cierto. Pero todos -los tres
organismos- han hecho mención de su disposición en la medida que se
mantengan determinada líneas políticas para renovar esos vencimientos, ya
sea no por refinanciación lo que no ocurre, sino por
concesión de nuevos prestamos que sean acorde con los vencimientos. Eso fue
afirmado por representantes del Banco Mundial y del BID en reuniones que
tuvimos en enero, y nosotros seguimos trabajando sobre esos impuestos, y
también el Fondo Monetario con un progresivo desenganche de Uruguay, porque
han habido préstamos de montos enormes para Uruguay del FMI que supone que
en la medida que Uruguay se recupere comienza a disminuir su vinculación
con el Fondo, pero en forma paulatina. Eso no puede ocurrir en tres años
porque las cifras involucradas son muy importantes.
COTELO: La síntesis entonces es que este
tipo de planteos no genera crisis financiera.
DAVRIEUX: Bueno,
no es el mejor anuncio, uno no queda tranquilo con ese tipo de anuncio, pero
esperemos que no lo genere porque no crea una presión inmediata, puede
crear temor y fuga de capitales.
COTELO: El logro de la meta de superavit
fiscal primario se basó principalmente en la caída real de salarios y
jubilaciones, debido a su peso relativo en el total del gasto. Para el 2004
se habla de leve recuperación real de los salarios públicos. Entonces,
¿es suficiente el aumento de la actividad económica para alcanzar las
metas fiscales que son históricamente elevadas para el Uruguay? ¿En qué
tipo de medida se está pensando?
ALFIE:
Primera precisión, es cierto que los salarios y pasividades cayeron en
términos reales, el salario de los públicos, sin embargo, los salarios
públicos cayeron menos que los salarios privados. Segundo tema, en nuestros
números, por eso está hecho el programa totalmente consistente, ese
pequeño aumento del salario real, en el sector público, aunque
evidentemente existe un pequeño aumento del salario real del sector
público muy parecido al sector privado, es posible darlo y también
entendemos, o se entiende, que en la medida que la economía se recupere,
que los ingresos de todos se recuperen, esto tiene que distribuirse.
Entonces todos los que han hecho el esfuerzo, enorme, de contener su nivel
de gasto, porque contuvieron su nivel de salario, también tienen la necesidad de muchos casos, y el derecho en términos
generales a tener sus frutos de las mejoras. Y, por lo tanto, entendemos que
es razonable, que es moderado,
pero que además que los números lo están demostrando que es perfectamente
consistente.
Y,
bueno me acota el contador
Davrieux, que también hay una baja en los niveles bajos del IRP, cosa que
es cierta, en los activos se reduce el adicional a partir del primero de
enero para los salarios entre tres, para las personas que ganan entre tres y
seis salarios mínimos nacionales y para los pasivos se reduce el adicional,
perdón, se reduce el impuesto original, no el adicional, a cero por ciento
hasta los que ganan hasta siete salarios mínimos nacionales. En algunos
casos es el uno por ciento hasta tres salarios y en otro es del dos por
ciento de tres a siete salarios mínimos.
COTELO: Pese a todo
esto, ¿no son necesarias otras medidas para alcanzar las metas fiscales?
ALFIE:
Pese a todo eso no son necesarias ninguna otras medidas para alcanzar las
metas fiscales. Es más, y le hemos puesto regularizaciones necesarias de
atrasos, quiere decir que no son necesarias ninguna otra medida.
COTELO: ¿Qué
estrategia tendrá el Gobierno para atraer inversiones extranjeras en un
año especial como será el 2004?
ALFIE:
Bueno, yo creo que se han tomado una gran cantidad de medidas en materia de
inversión, medidas que postergan determinados beneficios fiscales. Todas
las medidas que se han, mejor dicho, toda la estabilidad de reglas que se ha
logrado por siete años en estos acuerdos de ayer, creo que son más que
suficiente para que en un horizonte bien largo para
todas las inversiones.
Además
creo que la mejor medida que tomo el país fue cuando respetó a las reglas
de juego y respetó su tradición de más de 30 años, de no impedir que
cualquier persona tenga libre circulación de monedas en Uruguay, no impedir
que las utilidades, los dividendos, los royalities, salgan y entren del
país sin ningún tipo de restricciones.
Y
bueno, esa es la mejor medida y la mejor conducta. Si pretendemos que venga
alguna inversión y porque es extranjera le vamos a dar mas beneficio, en
este caso sería darle un subsidio directamente en contra de otras
inversiones, yo creo que eso no es razonable; por qué no le damos subsidios
a los internos; si no se lo damos es por dos motivos: primero porque creemos
que son malos, y segundo porque tampoco hay plata.
COTELO: Seguimos con
las preguntas: ¿Qué puede hacer el Poder Ejecutivo para lograr que el
crecimiento que se espera llegue a todos los sectores de la economía y no
suceda como pasó con el sector ganadero que al mejorar provocó un fuerte
incremento en los precios para la población, los precios de la carne?
ALFIE:
Yo creo que el precio de la carne, que por cierto en dólares bajó, bajó
prácticamente un ocho por ciento, ocho y medio por ciento del pico hasta
ahora en dólares, obviamente. Creo que es parte de los efectos beneficiosos
del aumento de los ingresos y de los empleos viene precisamente porque el
sector ganadero está exportando y ese ingreso de divisas al país se
distribuye entre toda la sociedad.
Los
ganaderos son habitantes del Uruguay, también gastan dentro del Uruguay y
compran otras cosas y compran servicios. Entonces, si el sector ganadero
mejoró su ingreso por una conjunción de mejora de precios internacionales,
pero específicamente por una apertura de mercados, yo creo que eso es
bueno.
Me
parece que sería muy malo decirle a un sector usted no puede vender, usted
no puede ganar todo lo que el mercado le paga. Yo preguntaría quien hizo la
pregunta si el bien que él vende también fuera limitado en su precio, qué
diría; y si tiene las posibilidades de exportarlo, a mejor precio, qué
diría.
COTELO: Una pregunta
muy concreta, ¿va a haber un nuevo ajuste de tarifas públicas en enero?
ALFIE:
Sí, naturalmente, dijimos que va haber aumento de salarios, y va
haber de tarifas, alineados con lo estrictamente necesario para cubrir los
costos de las empresas.
COTELO: ¿Cuándo se va a aprobar el
decreto que introduce modificaciones al sistema de los intereses
bonificables de las tarjetas de
crédito?
ALFIE: A mire no
sé cuándo se va a aprobar ese decreto.
COTELO: No se si todos escucharon pero el
Presidente dice que es una decisión que le corresponde tomar a él y que no
va a anunciar en este momento.
Esta otra
pregunta tiene que ver con el MERCOSUR, el cual habló el Ministro Alfie a
propósito de los resultados en la cumbre de Montevideo.
¿Para las
empresas estatales en el MERCOSUR, las empresas constructoras uruguayas
podrán competir en esos países, o se les va a exigir tener radicado los
equipos en esos países? O sea, lo que se llama tener la capacidad de
contratación libre, que está
vinculada directamente a los quipos propios disponibles.
ALFIE:
Los acuerdos permiten justamente poder competir en los países sin tener que
radicarse con empresas en los países.
COTELO: ¿A qué se refiere cuando dijo
que si las empresas pública siguen en proceso de reestructura esto se
reflejará en las tarifas? ¿Quiere decir que pueden llegar a bajar las
tarifas? ¿Y en ese caso cuáles serían?
ALFIE: Si los
ahorros de los costos son más que suficientes como para compensar la suba
de los precios, las tarifas puede llagar a bajar. Yo no creo que se puede
con la inflación del 7, 9 % en un año hace el ahorro sobre todos los
costos, porque hay que tener presente que las tarifas también reflejan
costos sobre los cuales no hay ninguna discrecionalidad que son las
materias primas en mucho casos, o el valor de las inversiones; pero
eventualmente podría llegar a suceder.
COTELO: Esta pregunta va para el
economista De Brun, y toma como base lo dicho por el contador Davrieux,
cuando señaló que la banca pública tiene una operativa particular, y si
bien no estaba en la agenda la crisis financiera obligó a reformar la Banca
pública, entonces en concreto, referente al Banco República, uno, ¿qué
va a pasar con las careras pesadas? Dos, ¿qué
rol le va a corresponder al BROU como Banco de promoción y
desarrollo ya que actualmente no está brindando nuevos créditos?
DE BRUN: La
cartera pesada, o las carteras no vigentes del Banco República, está
previsto que sea transferidas a un fideicomiso, el cual va a estar
focalizado a en la recuperación de esa cartera en un plazo de tiempo
determinado. Este fideicomiso supone un compromiso por parte del Banco
República al cual hizo referencia el Ministro de Economía que justamente
pasa por tomar acciones concretas en base a personal especializado,
experiente, y dedicado a esa tarea de recuperación del activo de tal manera
de acompasado a los flujos de fondo que a su vez evidentemente puedan tener
los deudores en esa categoría poder realizar la recuperación de cartera en
los valores previstos a fin de evitar pérdidas patrimoniales para el Banco
República o la exigencia de garantías hacia el Gobierno con el
correspondiente costo, digamos, para la sociedad en su conjunto.
Esta
operación implica de alguna manera una limpieza de balance del Banco
República, junto con los incentivos apropiados en materia de
especialización, liberación de recursos dentro del Banco República para
poder concentrar en lo que es propiamente sus negocio, y justamente no sé
si llamarlo banca de desarrollo pero ciertamente un Banco del tamaño que
tiene el Banco República en nuestra plaza financiera tiene un rol de banco
general de negocios de actividades en el país del cual no puede ser
prescindente, y limpiarlo del peso de esas carteras o de la administración
de esas carteras pesadas le permite a la gerencia del Banco Republica
concentrarse en las áreas de negocios las cuales obviamente son más
importantes para el país y para la rentabilidad del banco mismo.
COTELO: Esta va para el Ministro de
Economía. ¿Por qué Estados Unidos cuando enfrenta recesión baja las
tasas de intereses, últimamente a menos del 1 por ciento? Uruguay en igual,
o más grave, realidad aumenta los intereses, que hace imposible hacer uso
de los préstamos porque los intereses son muchas veces más que un rédito
razonable para comercio, un
servicio honesto.
ALFIE: Yo no sé a
qué tasa de interés se esta refiriendo. Cuando Estados Unidos baja la tasa
de interés, baja la tasa de interés de los redescuentos, que es una tasa
de interés de referencia. La tasa de interés interbancaria hoy, o la tasa
de interés que toma el Banco Central, es 1%, en términos reales es
bastante negativa, con una inflación de 10. Por otra parte, esas tasas de
interés son el reflejo de la escasez de dinero, particularmente luego de la
crisis financiera no nos podemos creer que tenemos una abundancia de
capitales para decir que pueden bajar. Y si queremos regular a la baja la
tasa de interés, seguramente se irán más capitales todavía. Por algo el
año pasado el gobierno llegó a pagar 170% de interés nominal. ¿Lo pagaba
porque quería? Seguramente, no. Porque tenía imperiosa necesidad. Cuando
hay escasez de capital suele suceder que el precio del capital sube, como
cuando hay escasez de cualquier bien. Entonces es un fenómeno natural, es
un hecho de la realidad y nada mas que eso.
COTELO: Ministro Alfie, usted habló de lo
que son las previsiones de evolución del producto este año y el año que
viene. Esta consulta va un poco mas allá, dice, ¿usted considera que el
fuerte crecimiento de la actividad económica de este año, puede mantenerse
en los años venideros, o estaremos, o podemos eventualmente estar ante un
rebote técnico? Complementa con lo siguiente: con los niveles actuales de
inversión, ¿a qué ritmo puede crecer el país en una perspectiva de
mediano plazo?
ALFIE: Este año
HAY crecimiento, es importante en términos promedio, todos sabemos que va a
ser uno, un poco más de 1%. El año que viene tenemos un crecimiento
importante. Nosotros entendemos que el potencial de Uruguay es enorme, y que
todas las medidas que se han tomado, y toda esta reestructura y este
saneamiento financiero que ha hecho el país de la banca publica, toda esta
liberalización de toda la infraestructura, el llamado a los trenes, los
puertos, la concesión del Aeropuerto de Carrasco, no se hace por una
cuestión ideológica, se hace por una cuestión de pragmatismo y de
realidades. Alguien tiene que venir a poner el dinero y alguien va a
invertir y con eso se generan las bases del crecimiento. Si usted me
preguntan a mí cuál es el potencial de Uruguay, y, bueno, hemos demostrado
que tenemos un potencial enorme y que el famoso, o esa presunción de que
fue solo un rebote técnico las graficas que mostramos diría otra cosa.
Crecimos bastante más que los demás luego de las crisis, o sea que si
tenemos un rebote técnico, el técnico debe ser Bianchi, porque es muy
bueno.
COTELO: La pregunta apuntaba también al
mediano plazo. En una perspectiva de mediano plazo ¿qué niveles de
crecimiento puede tener la economía uruguaya con los actuales niveles de
inversión?
ALFIE: Todo
depende. Todo depende del volumen de inversión que se genere en el futuro.
Creo que el volumen de inversión que estamos generando es muy importante,
en las circunstancias que estamos viviendo; inesperado para nosotros, la
inversión empezó a crecer a términos acelerados,
y todas las medidas que estamos tomando, la estabilidad de las reglas
del juego, las medidas de promoción de la inversión, son para que venga
más inversión. Si la
inversión se consolida en niveles razonables, yo no tengo ninguna duda que
Uruguay tiene un camino de crecimiento entre 4 y 5% anual a largo plazo. Y
en términos per cápita es una cosa muy importante, no olvidemos que la
población crece apenas medio por ciento. Pero eso depende de las reglas de
juego y depende de la estabilidad de las reglas y de las políticas que se
apliquen. No es un hecho automático.
Nuevamente,
depende de nosotros, no depende de los de afuera. Siempre depende de
nosotros, por suerte.
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