REUNIÓN DE MINISTROS DE SALUD DEL MERCOSUR Y ESTADOS
ASOCIADOS
Este viernes 11, en el Salón Cisneros de la Sede de
ALADI, se llevó a cabo la apertura de la "XIX Reunión de Ministros de
Salud del MERCOSUR y Estados Asociados", con la presencia de los
titulares de dichas carteras de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile,
Paraguay, Uruguay y Venezuela.
La apertura de la reunión estuvo a cargo de la
Ministra de Salud Pública de nuestro país, María Julia Muñoz, quien
destacó los diversos aspectos del nuevo diseño que el gobierno viene
encarando en materia de salud.
En el marco de la agenda prevista, se destacó la
presentación y la lectura del Acta de la Reunión de Coordinadores
Nacionales y del Acta de Proyectos de Acuerdo de Ministros, así como los
temas Sistema Nacional de Salud e Influenza Aviar.
Cabe señalar que en esta XIX Reunión de Ministros de
Salud del MERCOSUR y Estados Asociados, estuvieron presentes los
ministros de Argentina, Ginés González García; de Bolivia, Álvaro Muñoz
Reyes Navarro; de Brasil, José Saraiva Felipe; de Chile, Pedro García
Aspillaga; de Paraguay, Teresa León Mendaro; de Uruguay, María Julia
Muñoz; y de Venezuela, Francisco Armada.
PALABRAS DE LA MINISTRA DE SALUD PÚBLICA, MARÍA JULIA
MUÑOZ, DURANTE LA INAUGURACIÓN DE LA XIX REUNIÓN DE MINISTROS DE SALUD
DEL MERCOSUR Y ESTADOS ASOCIADOS, EN MONTEVIDEO
MINISTRA MUÑOZ: Aprovechando la visita de tan
distinguidos colegas de toda Latinoamérica, vamos a poner muy brevemente
en consideración de ustedes para la reflexión futura -no para hoy y muy
brevemente repito, porque no quiero abusar de vuestra paciencia- la
situación y el trabajo que venimos desarrollando con nuestro equipo de
colaboradores hacia un Sistema y Seguro Nacional de Salud del Uruguay.
En realidad nosotros estamos trabajando para cambiar
el modelo de atención de gestión y de financiamiento, integrando en
Uruguay bajo un Sistema Nacional al subsector público y el subsector
privado.
Como subsector público el Uruguay tiene una cantidad
de instituciones, no solamente los servicios de salud que dirige el
doctor Tabaré Gonzalez, del propio Ministerio de Salud Pública, sino
además son prestadores del Banco de Seguros del Estado, el Banco de
Previsión Social y otras instituciones que en realidad queremos
incorporar en el sistema. Y también tenemos la particularidad de tener
instituciones de prepago de asistencia médica colectiva con muy larga
tradición en el país, algunas con más de 150 años de existencia que
nacieron de los emigrantes que llegaron a nuestro país y que tienen un
gran arraigo ciudadano.
Por lo tanto, queremos integrar los sectores, los
subsectores, para construir un sistema y mediante él construir un
seguro.
Como estrategias para cambiar el modelo de atención
nos planteamos tener en cuenta, fundamentalmente, la satisfacción del
usuario, el aumento de la resolutividad en el primer nivel de atención,
hacer una reorganización de la base territorial, un seguimiento por
programas priorizados y una participación de la comunidad organizada.
Vamos a pasar muy rápidamente en lo que estamos
trabajando, que es en el diseño de las tareas de salud, las zonas y las
regiones que ya están prácticamente trabajadas, distribuidas y en
acción, así como rápidamente una visualización de los programas que
priorizamos destacando fundamentalmente que queremos incorporar en las
prestaciones del Sistema Integrado de Salud las prestaciones de salud
bucal, salud mental y salud ocular, que han sido olvidadas o fuera de
las prestaciones del sistema, tanto por el sector público, como por el
sector privado en el Uruguay.
Queremos también agradecer la solidaridad del
gobierno de Venezuela en expresar la posibilidad de contar con la
"Operación Milagro" y la efectivización que hemos hecho ahora de la
"Operación Milagro" por parte del gobierno de Cuba.
Entendiendo la salud como parte de las políticas
sociales y teniendo que concebir una importante integralidad de las
mismas, es que nuestro gobierno ha encarado la creación de un Gabinete
Social para la coordinación intersectorial, donde participan además los
gobiernos locales, porque conjuntamente con los hermanos de la República
Argentina entendemos que la coordinación con los Municipios es una
herramienta sustantiva para mejorar la salud y promover la salud de los
habitantes del país; y también trabajamos intensamente en la integración
de mesas departamentales intersectoriales con los organismos
mencionados, otros organismos públicos y privados y las organizaciones
sociales.
Apelamos a que exista gobernanza en cuanto al control
ciudadano de la gestión porque creemos que todas las políticas publicas
deben tener un control social que es la mejor garantía de la democracia
y de la equidad en un sistema que hoy –un sistema de salud- carece de la
misma.
Creemos que tenemos que ser muy constantes para
incluir la participación social y el proceso educativo habilitando
espacios de propuesta y organización, así como asambleas de usuarios por
zonas, por departamento. Y tenemos una importante tradición de los
Consejos Vecinales en el departamento de Montevideo que hace quince años
tiene un proceso de descentralización muy consolidado y que creemos que
va a ser una herramienta fundamental para la incorporación de los
usuarios en el control del Sistema Integrado Nacional de Salud.
Para transitar hacia ese Sistema hemos creado un
Consejo Consultivo de Salud para los Cambios, que tiene la siguiente
integración: Ministerio de Salud Pública y las organizaciones de
instituciones de asistencia médica colectiva privada, las organizaciones
de trabajadores públicos y privados; el Congreso de Intendentes; el área
salud de la Universidad de la República; y, especialmente, las
organizaciones de médicos y especialmente queremos destacar por la
importancia que le damos a la inclusión de la salud bucal y ocular y
mental, la inclusión de las gremiales de odontólogos y de sicólogos para
que colaboren en el diseño de las pautas que deben constituirse en
pilares fundamentales de nuestro futuro Sistema Nacional de Salud.
Esta es la estructura actual de Recursos Humanos que
tiene el Ministerio de Salud Pública en donde en realidad tenemos una
importe desestructura, superposición de cargos y por como vemos tenemos
un número importante de funcionarios más y más aún de pagos, con una
distorsión muy importante en la escala. También tenemos un multiempleo
médico en el sector público, con una dispersión salarial que va de los
4.297 médicos en 923 que ganan menos de 7.500 pesos, a 889 que ganan más
de 50 mil pesos.
La siguiente; esos son los salarios más bajos con los
cuales es uno de los motivos. Nosotros hemos hecho durante los ocho
meses de gobierno un aumento en algunas franjas casi del 80% del
salario, pero es uno de los problemas existentes de conflictividad
actual con el gremio médico.
El problema del multiempleo médico es un problema que
seguramente no sólo el Uruguay tiene. Tenemos también una inequidad en
el gasto y en el gasto operativo de salarios y de medicamentos entre el
sector público y el sector privado, para ejemplo citamos el gasto
operativo por ejemplo del Banco Central y que para 1916 usuarios tiene
un gasto operativo total de $1463 mientras que los servicios de salud
del Estado para 1.154.750 usuarios tiene un gasto operativo total de
$335 y eso es en menor cuantía para el servicio de las Fuerzas Armadas y
para el servicio policial.
Eso nos muestra también la inequidad existente cuando
comparamos departamentos del país.
¿Cuáles son los desafíos que nosotros entendemos que
tenemos en el momento actual?, los desafíos para integrar un sistema son
fundamentalmente cómo vamos a capacitar y revalorizar nuestros recursos
humanos; cómo desarrollamos un nuevo sistema de incentivo, construir
espacios de participación de los trabajadores que nos permitan avanzar
hacia la consolidación de un estatuto del trabajador de la salud.
Las reformas, las reformas en el mundo han atravesado
y atraviesan una crisis paradigmática, muchas veces nos detenemos o la
reflexión es en un modelo que se dedica a curar el sistema pero que se
olvida de cuáles son las necesidades de la gente. Nosotros tenemos,
asistimos hoy, esta reunión es un ejemplo de eso, enfermedades que ya
deberían haberse erradicado de nuestra región y que aún persisten y
también asistimos al peligro de enfermedades reemergentes que todos los
días nos hacen reflexionar sobre la causalidad.
También es otra interrogante que nos planteamos que
luego de más de cien programas de reformas sectoriales en donde se ha
logrado apoyo de organismos financieros internacionales; estos mismos
organismos están asumiendo sus fallas y hoy tenemos a nuestros países,
el nuestro, no solo sumamente endeudado sino –además- con deudas del
sector privado que van a pagar todos los uruguayos, o esa los que
también tienen ese poco gasto operativo de en el sector público.
¿Cuáles son los dogmas a los que nos enfrentamos? Que
aunque los sistemas son diferentes en los distintos países las reformas
han sido iguales. Hemos tratado de financiar la demanda, nos preocupamos
mas por crear mercados que por identificar y asumir los problemas de
Salud Pública.
Cuando se habla de la focalización, hemos visto que
no se han consolidado los derechos de los ciudadanos ni se ha podido
avanzar en la equidad de las prestaciones. Muchas veces al
descentralizar no con criterio de dotar de mayor operatividad a los
sectores, lo que se logró fue perder economía de escala, falta de
coordinación, no se consolidó una división del trabajo y si se consolidó
una superposición de tareas.
Pensamos que la descentralización debe tener la
posibilidad de una ejecución horizontal y de una transversalización de
los programas que nos aseguren una mayor eficiencia.
¿Cuál es la situación que tenemos ahora? ¿En qué
etapa estamos?
Estamos en la etapa de consolidar los instrumentos
políticos y jurídicos para presentar en marzo del año 2006, una Ley que
contemple el Sistema Nacional Integrado de Salud y el Sistema Nacional
de Salud.
Los criterios generales para el mismo están
sustentados en el aporte al sistema, por parte de los usuarios, en
función de su ingreso familiar, que con un mínimo no imponible y que les
de derecho a una cobertura integral de todos los servicios de salud.
Las empresas -tanto públicas como privadas- aportarán
al fondo un financiamiento en proporción a la nómina de trabajadores y
el Estado va a complementar esos ingresos con un aporte presupuestal.
Los prestadores del Seguro Nacional de Salud, serán
aquellas instituciones que acepten instrumentar las pautas, normas de
controles que el Sistema Nacional resuelva. Creemos que debemos
fortalecer sustantivamente la capacidad rectora del Ministerio de Salud
Pública.
El Seguro podrá aportar un financiamiento que apoye a
actividades para fortalecer prioridades establecidas a nivel de todo el
Sistema Nacional de Salud. La coordinación y recursos, de recursos,
entre lo público y lo privado se establecerá en convenios de acuerdo a
protocolos y aranceles definidos a nivel nacional una vez que se haya
legislado la integración del Sistema y que se haya legislado la
formalización del Seguro.
Las Instituciones que estén presentes, o que se
adhieran al Seguro deberán recibir los ingresos que les posibilite una
adecuado equilibrio cobrando cuotas diferenciadas por primas de riesgo,
según sexo, edad y otras variables.
En cuanto, lo siguiente. En cuanto a las acciones que
estamos realizando es fundamentalmente tratar de fortalecer el primer
nivel de atención en el marco de la estrategia de atención primaria,
fortaleciendo policlínicos y centros de salud conformando sistemas
locales de salud con base territorial para lograr una cobertura
universal, un plan de promoción, prevención y educación para la salud a
nivel nacional, aumentando la capacidad de resolución del primer nivel
de atención y también la capacidad de satisfacción de los usuarios.
Creando ámbitos de coordinación intersectorial e integrando en la
atención de la salud, del trabajo a los equipos interdisciplinarios con
un enfoque integral.
En suma, fortaleciendo la atención en base a
programas prioritarios horizontalizados, fortaleciendo el segundo y
tercer nivel de atención, y racionalizando los servicios de urgencia y
emergencia.
El establecimiento de sistemas de referencia y
contrarreferencia claros es un elemento sustantivo para la mejora en la
calidad de la atención y para la equidad de las prestaciones.
Promover un Sistema Nacional de Urgencia y Emergencia
para el Uruguay, un país pequeño, para Montevideo, su departamento
capital, es una necesidad imperiosa en la que nos encontramos abocados.
Nuestras políticas en relación a los medicamentos y
la tecnología tienden a la accesibilidad, a la racionalización de la
utilización abatiendo costos, apuntar a la investigación y a la
producción, no sólo nacional sino también del MERCOSUR.
En cuanto a las acciones me quisiera detener, o
destacar, fundamentalmente en la que referimos el estímulo a la
producción nacional y regional de medicamentos, dejando pendiente el
convenio que van a firmar Brasil y Argentina, en el cual posteriormente
quiere participar Uruguay con su producción, a los efectos de
incorporarse al mismo.
Vamos a tener, a los efectos de ir construyendo el
seguro, un Fondo Público Obligatorio con los aportes, como señalábamos,
del Estado, de los hogares y de las empresas. Los usuarios elegirán
libremente las instituciones en las que quieren estar, recibir las
prestaciones.
Las instituciones, tanto públicas como privadas, que
estén integradas al Sistema Nacional de Salud deben brindar atención
integral, y el pago se realizara por cápita, riesgo y nivel de atención.
Seguidamente, colocamos las etapas para el año 2006 y
deseamos en la siguiente establecer las líneas fundamentales del
proyecto de Ley que el Ministerio está elaborando para enviar, como
decíamos, al Parlamento en marzo del año 2006, que tendrá los siguientes
capítulos: las líneas estratégicas del Sistema Integrado en el cambio
del modelo de atención y de gestión; el capítulo del derecho de los
usuarios; el capítulo del financiamiento y fondo público obligatorio;
los mecanismos del reembolso del Fondo a los prestadores del Sistema;
los mecanismos de regulación entre los prestadores; el Plan Integral de
Prestaciones; la creación de una Superintendencia de la Salud, que
definirá y conducirá el Seguro Nacional de Salud. Dicho organismo será
público, con mayoría estatal, participación social de las Instituciones
de Asistencia Médica Colectiva; o sea, de los prestadores, de los
usuarios y de los trabajadores. Y tenemos a definir más concretamente
aspectos sobre la parte legal.
Las disposiciones transitorias, en tanto, en
consideración en el Parlamento nuestro proyecto de ley, las
disposiciones transitorias van en la dirección al Seguro planteando
ampliar la base de DISSE para aumentar el acceso de los usuarios al
sistema de Instituciones de Asistencia Médica Colectiva; y en la próxima
Rendición de Cuentas, apelar a las transferencias de los recursos
presupuestados para otros organismos públicos que estén incluidos en el
Fondo Público constituido por la Ley que se presentará al Parlamento.
Estas consideraciones generales, pensábamos que eran
de importancia compartirlas con América del Sur, en la medida que
creemos que los países tenemos que conocernos para poder ayudarnos y
tener políticas comunes.
Por lo tanto, yo les agradezco la atención. De futuro
quedan nuestros correos abiertos para los comentarios, para las
experiencias, y también el compromiso de tenerlos al tanto de cómo han
sido nuestros avances, nuestras penurias, nuestras dificultades. Y
esperamos también conseguir de ustedes buenos consejos que nos permitan
encarar estos cambios con mayor capacidad de encontrar acuerdo.
Muchísimas gracias.
SISTEMA Y SEGURO NACIONAL DE SALUD EN EL URUGUAY
- VER PRESENTACIÓN
|