UNA SOLA CONDUCCIÓN ECONÓMICA, PROCURANDO EL
BIENESTAR DE TODOS
Existe una sola política económica, cuyo único
objetivo es mejorar las condiciones de vida de los uruguayos,
especialmente de aquellos que más han sufrido, afirmó el Ministro
Astori, agregando que para ello se debe impulsar la inversión
productiva, generando crecimiento del PBI y del empleo.
Este año el Instituto Interamericano de
Cooperación para la Agricultura, la Consultora Agropecuaria SERAGRO
y el diario El País, invitaron a los Ministros de Economía, Danilo
Astori, Al Ministro de Ganadería, José Mujica y al Ministro de
Industria, Jorge Lepra, al tercer ciclo de conferencias "Políticas
de Estado: El Agro en los tiempos que vienen" porque el sector
agropecuario tiene interés de escuchar al Poder Ejecutivo sobre la
conducción macroeconómica y de las políticas de Estado para este
sector.
En el día de la fecha, el Ministro de Economía,
Danilo Astori, junto al Subsecretario de dicha cartera, Mario
Bergara, y el Director de Macroeconomía, Fernando Lorenzo,
expusieron sobre el escenario con el cual se empezó a trabajar, la
situación del camino transitado y perspectivas; la Rendición de
Cuentas y la consolidación fiscal; las reformas propuestas para la
consolidación del Uruguay Productivo con el fin de mejorar las
condiciones de vida de los uruguayos.
Astori manifestó que el Proyecto de Rendición de
Cuentas supone una consolidación fiscal, lo cual fue analizado desde
la perspectiva del impacto del crecimiento de la producción
nacional.
En marzo del año pasado se comenzó a trabajar en
tres aspectos fundamentales. Una de ellas fue consolidar la
recuperación productiva, que fue del 12% en el 2004 -signado por el
rebote tras una situación de la mínima del cual el país había vivido
en el 2002- donde el sector agropecuario jugó un papel fundamental.
La segunda meta fue paliar el elevadísimo
endeudamiento público que sigue exhibiendo el Uruguay; "la deuda más
importante de toda nuestra historia y –en términos relativos- la más
importante del mundo", dijo Astori.
Y el tercer desafío planteado fue disminuir el
agudo deterioro social, que llevó a que Uruguay conociera los
niveles de pobreza y desigualdad excepcionales en nuestra historia
contemporánea.
Las necesidades del país requieren medidas de
mediano y largo plazo para poder responder a las demandas
inmediatas. La estrategia más importante, es la referida al impulso
a la inversión productiva porque Uruguay es un país con muy bajos
niveles de inversión en comparación al nivel internacional. "La
inversión productiva es el único camino genuino para la generación
de más y mejor empleo y por supuesto para alimentar y consolidar la
expansión del proceso de producción del país", sintetizó Astori.
Para potenciar la inversión se requieren tres
caminos: reglas claras y previsibles, garantizar un escenario de
estabilidad económica y realizar reformas estructurales que
garanticen la consolidación de la resolución de problemas de fondo.
El Ministro Astori anunció que la economía
continúa creciendo a buen ritmo. En el último trimestre el país
creció 7.2%, respecto a igual período del año pasado, siendo las
proyecciones superadas. En este crecimiento los sectores productivos
de bienes han participado activamente. La industria y el agro desde
el 2002 han tenido una recuperación absolutamente fundamental. El
agro ha tenido una inyección de capital permitiendo el mejor
comportamiento en materia de repago de su endeudamiento.
La inversión en capital fijo representada por la
tasa de inversión bruta interna fija, refleja la recuperación
liderada por el sector privado dadas las restricciones que tiene el
sector público, que se prevé revertir en la Rendición de Cuentas.
Tanto la inversión nacional y la extranjera
–particularmente – han tenido una evolución excepcional en lo que es
la historia del país. Desde el 2003 la inversión tiene una pendiente
positiva, sustentado por el crecimiento real del 25% para el 2005 y
en los tres primeros meses de este año la inversión creció 34%,
respecto a igual período del año anterior –sin tener en cuenta el
efecto de las plantas de celulosa.
En cuanto a las exportaciones de bienes y
servicios, Astori dijo que se ubican en un máximo histórico,
superándose mes a mes. El país el año pasado exportó 5.000 millones
de dólares, compuestos por 3.800 millones en bienes materiales y el
resto en servicios, de los cuales la tercera parte es exportación de
la industria logística. En julio de este año las exportaciones
crecieron 30%, respecto a igual mes del año pasado, siendo el mayor
crecimiento de la región de América Latina con un 22% en la tasa de
crecimiento del volumen exportado de bienes.
Para el titular de la economía uruguaya, se está
logrando una diversificación en la cartera del mercado de las
exportaciones. Estamos menos dependientes de la región y la
presencia de Estados Unidos en nuestra cartera ha aumentado el
doble; esta diversificación pretende equilibrar la distribución del
destino de nuestro comercio exportador, explicó.
En tanto, dijo que el crecimiento de las
importaciones está liderado por las compras de bienes de capital,
hecho fundamental para un país que se propone seguir estimulando los
niveles de inversión y que esto sea la base del crecimiento
productivo.
La balanza comercial tiene un superávit que
muestra el impulso de expansión que se refleja en la gráfica del
saldo de la balanza comercial como porcentaje del PBI, importante
para una pequeña economía abierta como la uruguaya.
En los últimos años el Uruguay ha logrado
equilibrar su cuenta corriente. "Equilibrio en el que juega un papel
importantísimo el comercio, pero también el hecho que Uruguay está
moderando su resultado de ingresos con el exterior en términos de
servicios de factores", dijo, agregando que esto ha permitido lograr
que esa cuenta corriente mantenga un nivel próximo al equilibrio
para garantizar la recuperación económica del Uruguay.
La balanza de pagos tiene una cuenta corriente y
una cuenta capital, que registra los movimientos de capital entre
los residentes del país y los no residentes. "Muchas veces en el
país dijimos está ingresando mucho capital especulativo, por ejemplo
depósitos bancarios, otros tipos de activos financieros; ¡cuánto nos
gustaría que ingresara al país capital productivo, porque es el
capital que genera puestos de trabajo de calidad y le permite crecer
y aumentar sus ingresos!", dijo Astori.
Esta ingresando inversión extranjera directa,
inversión productiva, que está teniendo una pendiente positiva con
crecimiento sostenido. En el año 2005 la inversión extranjera se
duplicó, superando los 600 millones de dólares y hasta marzo del
2006 la inversión extranjera directa es de 1.000 millones de
dólares, sin contar las plantas de celulosa. El Uruguay tendrá un
aumento de la inversión nunca visto en la época contemporánea.
Si se analizan los destinos de la inversión hay
una diversificación imporantísima, donde la agroindustria está
jugando un papel fundamental, siguiendo el transporte, las
comunicaciones, servicio portuario, el turismo, biotecnología,
tecnología de la información y el complejo industrial –forestal.
El Ministro Astori dijo que el tipo de cambio
real, como indicador del grado de competitividad comparada, se
mantiene 20% por encima de los niveles pre-devaluación- al comparar
una canasta de bienes y servicios con otros países-.
En cuanto a los costos laborales, no solo
salarios, medidos en dólares se ubican todavía en niveles muy bajos
en relación con nuestros socios comerciales. Las ganancias de
productividad han amortiguado los mayores costos por aumentos
salariales. Sustentado por las muy buenas evoluciones de la
productividad en los distintos sectores de la economía. En total una
mejora en la productividad del 6% en 2005.
El crecimiento económico repercutió positivamente
en el empleo durante 2005. En este año se generaron 30.950 puestos
en el sector privado, siendo el resultado neto de 16.000 por la
disminución de la cantidad de empleados públicos, el informalismo y
por la presencia del miembro del hogar no remunerado.
En mayo del 2006 la tasa de desempleo se situó en
un 10.7%, la tasa menor de los últimos 10 años, cerca de la meta
trazada por el Gobierno que era de un digito. En tanto la tasa de
empleo de mayo es del 54.5%, mayor a la de los últimos 20 años, por
el comportamiento del esfuerzo de la inversión.
Las perspectivas de crecimiento, según encuesta
del sector privado, para este año son del 5%. Para el Ministerio de
Economía estas cifras son ratificadas y Astori espera que se va a
mejorar. El PBI crecerá 5% en 2006 y 4.2% en el 2007. Esto confirma
que el país está logrando mantener niveles de crecimiento muy
superiores a la media histórica.
El Ministro Astori adelantó que se proyecta que
para estos años se mantenga el ritmo de expansión real de la
formación bruta interna de capital fijo, acentuando por la presencia
de las plantas de celulosa.
La Rendición de Cuentas proyecta impulsar la
inversión pública, no para sustituir al sector privado, sino para
"cumplir el papel que el sector público tiene que asumir
indelegablemente", señaló Astori. En los años de la crisis se dejó
de invertir en el sector público y ahora es el momento de darle el
impulso que se necesita.
Con las inversiones públicas proyectadas, por 120
millones de dólares, se pretende modernizar el ferrocarril, la
realización del dragado del puerto, mejorar el transporte de carga
fortalecido por la industria forestal, adquisición de fibra óptica
para que ANTEL tenga un mejor desempeño en las telecomunicaciones y
la mejora del transporte carretero.
"No se trata de tener un superávit para
mantenerlo estéril, se trata de mantener un superávit para destinar
parte de esos recursos para superar las necesidades evidentes del
país", enfatizó Astori.
En la Rendición de Cuentas se abre un especio
fiscal para atender prioridades del país y los recursos se obtienen
porque: se ha crecido por encima de las previsiones, la importante
reducción de los niveles de evasión e informalismo por la eficiencia
de organismos -Aduanas superó la recaudación de 1.000 millones de
dólares-, ahorro en el pago de intereses por pago anticipado por la
cancelación anticipada a organismos internacionales, venta del Nuevo
Banco Comercial, menor ejecución en el PANES durante 2005 que
reforzarán el Plan de Emergencia en el 2007.
Los equilibrios macroeconómicos y reformas
estructurales nos permiten mantener un crecimiento estable, que con
un aumento de la inversión - producto de la confianza de los agentes
económicos- nos permiten mejorar la cantidad y calidad del empleo;
"lo cual es fundamental para reducir la pobreza", destacó el
Ministro Astori.
El sector público no financiero muestra una
evolución moderada del gasto hasta 2009, en relación al producto.
Siempre la evolución del gasto será inferior al producto,
atendiéndose el gasto social para las necesidades del pueblo. La
meta es reducir el ratio, cada vez más de la deuda pública y
producto.
El Ministro Astori explicó que "estamos
sustituyendo deuda cara por deuda barata, como lo que acabamos de
hacer al anticipar la deuda que teníamos con el Fondo y que vencía
en 2007" además "estamos sustituyendo deuda de corto plazo por de
largo plazo, hemos pagado este anticipo con el Fondo Monetario que
hemos colocado a 2022".
Astori analizó las reformas necesarias para el
Uruguay Productivo. En primer lugar, la Reforma Tributaria que está
en el Parlamento y que tiene varios objetivos como: incentivar el
crecimiento, la eficiencia, fomentar equidad y estimular la
inversión productiva. Para ello se reduce el impuesto a la Renta
Empresarial en 5 puntos, incluyendo incentivos a la innovación
tecnológica y generación de empleo. Fomentando un sistema racional,
focalizado y transparente.
La Rendición de Cuentas faculta al Poder
Ejecutivo a utilizar créditos presupuestales para proyectos de apoyo
al sector productivo por lo que se ahorre como producto de esta
revisión del esquema actual de devolución de impuestos a las
exportaciones. Asimismo, dijo que " el posible ahorro que se pueda
obtener por una mala administración o concepción de esta
herramienta, va a permanecer como estímulo al sector productivo".
El programa de trazabilidad del ganado vacuno
tiene que ver con el País Productivo de origen agroindustrial; tiene
como objetivo ampliar las oportunidades comerciales de los productos
ganaderos bajo una plataforma que garantice seguridad
agroalimentaria. En tal sentido, se creó el Sistema de
Identificación y registro animal y "en la Rendición de Cuentas se
han incluido 97 millones de pesos -con cargo a la Tesorería- para la
adquisición de los instrumentos electrónicos que permitirán el
funcionamiento de este sistema", señaló.
En cuanto al Programa Global de Financiamiento
Multisectorial que tenemos con el BID, explicó que será encarado
para disponer nuevos mecanismos financieros con la participación de
privados. Se trata de impulsar proyectos de agentes privados. Al día
de hoy se ha terminado el reglamento operativo.
La reforma de la Aduana comenzará a regir en el
próximo año. El objetivo es la defensa de la producción nacional
mediante la mejora de los sistemas de contralor, "logrando el
equilibrio entre una Aduana que cumpla su labor de control, pero
también una Aduana que encare su trabajo con la perspectiva de
facilitación de la inserción internacional", resumió Astori.
Además, se proyecta una reforma en la Carta
Orgánica del Banco Central y la creación de la Corporación de
Protección al Ahorro Bancario. El objetivo es centralizar la
regulación y supervisión bancario para darle estabilidad al sistema
y orientarlo al financiamiento del sector productivo.
El proyecto de Promoción y Defensa de la
Competencia, que tiene media sanción en Diputados, pretende
fortalecer el área de Defensa del Consumidor.
Respecto al Proyecto de Ley de Bancarrota, que
está a estudio en el Parlamento, dijo que con esa iniciativa se
pretende modernizar una norma que rige desde la época de la Corona.
Siendo este un proyecto revolucionario para el país. La misma
proyecta la reestructura de empresas evitando su endeudamiento.
Está en estudio del Ministerio de Economía una
propuesta de la Corporación Nacional para el Desarrollo, para
facilitar a las PYMES acceso al crédito.
Está para la firma del Presidente de la República
el Decreto para la creación de la Unidad de Apoyo al Desarrollo y la
Inversión en el Sector Privado, siendo en puntapié para la
consolidación de la ventanilla única de inversiones.
Por otra parte, los ministerios de Industria y
Economía ya aprobaron el Decreto para la promoción de Parques
Industriales, especialmente en el interior del país.
EXPOSICIÓN DEL MINISTRO DE ECONOMIA Y FINANZAS,
DANILO ASTORI
MINISTRO ASTORI: Muy buenos días a todos. Para
nosotros es un gran gusto compartir con ustedes esta jornada de
trabajo, como se ha dicho. Obviamente quiero comenzar por agradecer
mucho a los organizadores del evento: al Instituto Interamericano de
Cooperación para la Agricultura, al diario El País, a la consultora
Seragro y a todos los quienes auspician el evento por la oportunidad
que nos brindan, precisamente, para compartir con todos ustedes,
como parte de este ciclo que hoy se inicia, aspectos que a todos los
uruguayos nos importa considerar.
Naturalmente, lo compartiremos desde una
perspectiva que es la nuestra: la perspectiva económica -en este
primer paso del ciclo- para tomar nota de la situación de nuestra
economía, las perspectivas y obviamente -asignando prioridad a las
vinculaciones entre esas situaciones- la expansión y el desarrollo
productivo del país, que muchas veces, por estos días, sintetizamos
en esa expresión "Uruguay productivo".
Yo les voy a proponer dividir esa exposición en
cuatro partes, que son las que allí están observando. La primera,
obviamente: los puntos de partida. Siempre es importante, cuando uno
se propone analizar una situación y las proyecciones de futuro,
analizar de qué lugar se partió, de qué características se partió y
con qué escenario se comenzó a trabajar, porque ello contribuye a
explicar las orientaciones elegidas, el camino seleccionado, las
herramientas a las que se está apelando. Luego, precisamente vamos a
dedicarnos en el segundo lugar a analizar el camino transitado hasta
ahora, como veremos enseguida, en el sentido de considerar
especialmente la situación y las perspectivas.
En tercer lugar, porque es una experiencia
reciente, que incluso no ha culminado aún en el Parlamento de la
República, donde ha sido comenzado a analizar, vamos a estudiar en
particular el proyecto de Rendición de Cuentas y la consolidación
fiscal que supone, pero siempre también desde la perspectiva que a
todos nos importa analizar hoy en esta jornada, que es su impacto
sobre el rendimiento de la producción.
Y finalmente algo que para nosotros es clave, que
son las reformas estructurales. Hoy, considerándolas específicamente
desde el punto de vista que nos convoca: el crecimiento productivo
del país. Entonces, vamos a seleccionar el conjunto de reformas
estructurales, profundas, arraigadas, durables, que está proponiendo
el gobierno, aquellas que se destacan precisamente por su impacto
sobre el objetivo de expandir la producción nacional.
Y sin más trámites vamos al primer punto, que son
precisamente las características del escenario inicial desde que
comenzamos a trabajar en marzo del año pasado.
Allí hay que destacar tres aspectos: en primer
lugar comenzamos a trabajar en un país que ya había comenzado antes
un proceso indiscutible de recuperación productiva. Ustedes
recordarán que en 2004 el país llegó a crecer 12%. Este 12%
obviamente también se explica parcialmente por el impacto de lo que
en economía solemos llamar el rebote contra una situación de mínima,
o de fondo, una situación grave como la que el país había vivido en
2002 y gran parte de 2003, pero en todo caso comenzamos a trabajar
en un Uruguay que ya había iniciado un proceso de recuperación,
recuperación en la que el sector agropecuario venía jugando, como
veremos enseguida, un papel fundamental.
La segunda característica refiere al elevadísimo
endeudamiento público que exhibía, y sigue exhibiendo
lamentablemente todavía, el Uruguay, la deuda más importante de toda
nuestra historia, una de las deuda en términos relativos más
importante del mundo. Cuando digo en términos relativos me refiero a
la producción uruguaya, a su comparación con otras economías, a su
papel en los organismos multilaterales que son los principales
acreedores del país, y, desde ese punto de vista, entonces,
sintéticamente, estábamos también ante uno de los compromisos de
deuda pública más importantes del mundo, con todo lo que eso supone
en materia de restricción fiscal, en particular restricción del
gasto. Finalmente, un agudo deterioro social, que llevó a que el
país conociera niveles de pobreza y desigualdad, de fractura social,
prácticamente excepcionales en nuestra historia contemporánea.
Teniendo en cuenta estas tres características.
los criterios básicos de orientación que seleccionó el gobierno
apenas comenzó a trabajar desde el punto de vista económico, tenían
que obligatoriamente que mirar simultáneamente, a mediano y a largo
plazo y al mismo tiempo responder a las demandas inmediatas que
estábamos recibiendo por la situación que acabo de describir.
Desde el primer punto de vista no había, no hay
objetivo u orientación estratégica más importante que la que refiere
al impulso, a la inversión productiva. Por dos razones: en primer
lugar porque Uruguay seguía siendo, al comienzo de nuestro trabajo
–y todavía lo sigue siendo- un país con muy bajos niveles de
inversión en la comparación internacional y naturalmente desde el
punto de vista de nuestras prioridades internas.
La inversión productiva es el único camino
genuino para la generación de más y mejor empleo y por supuesto para
alimentar y consolidar la expansión del proceso de producción en el
país. Por lo tanto, no había opciones: era absolutamente fundamental
concentrarnos desde el primer día de trabajo en empezar a estimular
con diversos tipos de herramientas la expansión de la inversión
productiva.
Ello, al mismo tiempo tenía que ser compatible
con una conducta fiscal rigurosa. Aquí tampoco había -y sigue sin
haber- opciones. Nosotros, dado el nivel del endeudamiento publico
no tenemos otro camino que ser muy rigurosos desde el punto de vista
fiscal, para, entre otras cosas, asegurar sostenibilidad al camino
que venimos siguiendo en la administración de este elevadísimo
endeudamiento publico. Y finalmente, ahora sí atendiendo los
reclamos inmediatos que el país presentaba, es precisamente tomar
medidas de consideración de la emergencia social que estábamos
viviendo, que seguimos viviendo y que empezamos precisamente a
encarar a través del Plan de Emergencia que ustedes conocen. Ahora
bien: si un objetivo estratégico consistía y consiste en la
expansión de la inversión productiva, vuelvo a repetir –y no me
cansaré de hacerlo- camino genuino, único camino genuino, para
empezar a apuntalar las condiciones potenciales de crecimiento que
tiene este país y que indudablemente son muy importantes.
Se requerían por lo menos tres consideraciones,
tres caminos fundamentales a su vez que son los que refieren, en
primer lugar, a reglas de juego claras y previsibles en esta materia
y a un gobierno firmemente comprometido en su mantenimiento. No hay
cosa más importante para un inversor, sobre todo proveniente del
sector privado, que es quien estaba llamado a realizar el gran
esfuerzo de apuntalamiento de inversión, que la de tener reglas
claras y previsibles, pero además las de observar a través de hechos
y no sólo de palabras, la presencia de un gobierno firmemente
comprometido con su mantenimiento.
En segundo lugar, junto con esa previsibilidad y
esa seguridad de que las reglas se mantendrían, un escenario de
estabilidad. Esto es, un escenario en el que se puedan hacer planes
de negocios, llevarlos a la práctica, jugar con un resultado
esperable, obtener ese resultado e ir alimentando por esa vía el
esfuerzo acumulativo que supone todo proceso de inversión.
Y para el Uruguay de 2005, el Uruguay de estos
tiempos que corren, del elevado endeudamiento publico, el principal
factor, la principal inyección de estabilidad que teníamos que
lograr apenas llegados al gobierno, consistía en hacer acuerdos con
nuestros principales acreedores y esto es con los organismos
multilaterales de crédito para asegurar a través de planes
conocidos, transparentes, durables, por lo menos en gran parte del
periodo de gobierno, que no sólo habría reglas de juego claras e
imprevisibles sino que el país podía confiar en este escenario de
estabilidad que también se requiere para la inversión. Y nos fue muy
bien, porque habiendo asumido en marzo nuestras funciones, en abril
ya teníamos acuerdos con los tres organismos internacionales de
crédito cubriendo prácticamente todo el período de gobierno.
Finalmente, un conjunto de reformas estructurales
a las que luego nos vamos a dedicar con un poco más de detalle, por
una razón absolutamente fundamental: nada de lo que yo acabo de
explicar puede durar en el tiempo si el país no ataca problemas de
fondo que durante mucho tiempo padeció. Nada de lo que yo acabo de
proponer en materia de estímulo a la inversión, atención de la
emergencia social, conducta fiscal rigurosa, tiene perspectivas de
arraigar en el funcionamiento de la economía uruguaya.
Y mucho menos un crecimiento que sea francamente
superior a los promedios históricos si no atacamos los cimientos,
esos cimientos que se atacan por haber durado tanto tiempo con
transformaciones igualmente profundas, igualmente durables en su
capacidad de arraigo, ahora con perspectivas de futuro. Es a eso que
llamamos reformas estructurales y las llamamos estructurales porque
precisamente no sólo refieren a las estructuras del país, las que
duran más allá de las coyunturas que se van sucediendo, sino porque
precisamente le otorgan, le asignan, le prestan consolidación a
todos los cambios que se van haciendo a través de los instrumentos y
las herramientas de la política económica.
Este es el primer punto que yo quería compartir
con ustedes: cómo comenzamos a trabajar en un escenario que tenía
las características que acabamos de ver. Cuáles son las primeras
orientaciones elegidas para ir conduciendo a la economía uruguaya.
Vuelvo a repetir, con una respectiva de mediano y de largo plazo, en
que las reformas juegan un papel fundamental y el objetivo
estratégico esencial es el incremento de la inversión. Y por otro
lado teniendo en cuenta precisamente los requisitos que esos
objetivos tienen, al tiempo de atender los reclamos inmediatos que
el país presentaba cuando asumimos el gobierno.
Vamos ahora a analizar el camino transitado en
este año y medio, prácticamente, que llevamos de trabajo. Pero no
desde un punto de vista estático. Vamos a tratar de no sólo tomar
nota de dónde estamos prados, sino además vamos a ver perspectivas,
sobre todo porque esas perspectivas -que luego vamos a profundizar
con lo último que hemos hecho, que es la propuesta del Proyecto de
Ley de Rendición de Cuentas- son de fundamental importancia para lo
que vendrá después: tener en cuenta cómo impacta esto en el país
productivo y, naturalmente, cómo está delineado el contexto para que
luego en la sucesivas conferencias, con una perspectiva
agroindustrial primero y con perspectiva directamente relacionada
con el sistema agropecuario, puedan ver ustedes después como parte
de la cuestión..
Veamos entonces las principales características
del camino transitado. Los invito a ver con una perspectiva
dinámica. El primero, y obviamente elemental insumo de esa
reflexión, es tomar nota de que el país está creciendo a muy buen
ritmo. Y eso es fundamental. Eso es la base de todo: el crecimiento,
obviamente sabiendo que estaba base necesita que los cimientos estén
fuertes. La línea de color amarillo nos está mostrando la tendencia,
digamos así; las barras de color lila nos está mostrando los
crecimientos desestacionalizados, medidos con referencia trimestral,
esto es con las tasas de crecimiento trimestrales
desestacionalizadas. Les quiero decir especialmente que en el último
trimestre sobre el que ahí se registra información el país creció
7.2 respecto a igual periodo del año pasado. Ustedes recordaran que
el Uruguay creció en todo el año pasado 6.6 %. En el primer
trimestre de este año creció 7.2 y en los doce meses finalizados en
marzo de este año creció más que el año pasado, creció 6.8. Esto
tiene mucho que ver con las previsiones para 2006, que ya han sido
mejoradas por tres oportunidades, precisamente, que tomando nota de
la fuerza que tiene realmente el crecimiento que el país está
teniendo en este momento.
Los sectores productores de bienes han
participado activamente en este crecimiento. Podríamos repasar a
todos los sectores productores de bienes, pero nos ha parecido
especialmente importante seleccionar el agropecuario y el
industrial, que como ustedes están observando, a partir de 2002 han
tenido una recuperación absolutamente fundamental que es la que yo
mencionaba al principio, pero en el caso del agro hay todavía una
característica que yo quiero resaltar especialmente.
El agro es el que está representado por la curva
verde de la fase superior de esta gráfica y yo les pido a ustedes
que observen que en plena crisis, en plena profundización de la
crisis, antes de 2002 y sobre todo a partir de los últimos trimestre
de 2000 y sin duda 2001, el agro tuvo un crecimiento excepcional en
este sentido, un crecimiento que se presentó acompañado con una
fuerte inyección de capital en la actividad agropecuaria y que entre
otras cosas permitió que el sector agropecuario fuera el de mejor
comportamiento en materia de repago de su endeudamiento. Y esto hay
que destacarlo y oportunamente, seguramente, será analizado cuando
se profundice en el tema.
La inversión, base de todo crecimiento, continúa
recuperándose desde los bajos niveles alcanzado durante la crisis.
Aquí tenemos la formación bruta de capital fijo, que es el corazón
de la inversión, esto es la que le da carácter acumulativo a la
inversión. La otra parte de la inversión -la que no está considerada
aquí- es la variación de existencias, que obviamente desde un punto
de vista económico y contable es considerado inversión, pero el
corazón reproductivo de la inversión es el capital fijo, es la
inversión en capital fijo. Y aquí tenemos la formación bruta de
capital fijo como porcentaje del Producto Bruto Interno: es lo que
en Economía llamamos la Tasa de Inversión Bruta Interna Fija y se ve
claramente que tenemos una recuperación liderada, como es obvio, por
el sector privado, dadas las restricciones fiscales que tiene el
sector publico, el que sin embargo -se ve apenas una línea, una
curva lila de la fase inferior del gráfico- ya ha comenzado
suavemente a tener una recuperación. Por ejemplo quiero decirles que
en los primeros meses de este año la inversión pública se duplicó en
el país respecto a igual periodo del año pasado y luego vamos a ver
el esfuerzo que ahora, como parte de esta Rendición de Cuentas, el
gobierno está haciendo en materia de inversión publica.
Pero el sector privado ha tenido muy buen
comportamiento. Tanto la inversión nacional y particularmente la
inversión proveniente del exterior han tenido una evolución
excepcional en lo que es la historia del país, un país que siempre
se ha caracterizado por tener los bajos niveles que mencionábamos
antes. En todo caso, ya desde 2003 la inversión en su conjunto está
mostrando una evolución francamente positiva, que nos permite
percibir, comprobar, registros muy importantes para 2005 y también
percibir que en los primeros meses de 2006 continúa invirtiéndose a
muy buen ritmo en el país.
En 2005, por ejemplo, la inversión en su conjunto
registró un crecimiento real, esto es en términos reales, despojado
de todo impacto inflacionario o contable desde el punto de vista de
su valoración en las monedas en que se calcula esta evolución, de
prácticamente 24%, una tasa de crecimiento de la inversión
excepcional en la historia del Uruguay. Y quiero decirles que en los
tres primeros meses de este año, la inversión creció 34% respecto a
igual período del año anterior. Quiere decir que no solo se mantiene
el crecimiento a un ritmo excepcional, sino que el ritmo mismo de
crecimiento está en expansión durante los primeros meses de este año
y no estoy incluyendo en esta reflexión las plantas de celulosa, el
efecto de las plantas de celulosa que a partir de este año sí van a
tener un impacto importantísimo en la evolución de estas variables
según veremos.
El comercio exterior y particularmente las
exportaciones se ubican en un margen histórico. Las exportaciones
baten récord mes a mes en el país. Ustedes lo ven allí. La línea
blanca es precisamente la serie original, son los datos que
recogemos de las instituciones que miden las exportaciones concretas
que va realizando el país, mes a mes y la línea de color rojo marca
la tendencia.
Tenemos una exportación anual de exportaciones
extraordinariamente importante. El país el año pasado exportó
aproximadamente 5 mil millones de dólares. Nos hemos acostumbrado
mucho a confundir comercio exportador con comercio exportador de
mercancías, de bienes materiales, pero el país ya es un gran
exportador de servicios. Hace años y está registrando volúmenes
importantísimos que no solo le aseguran superávit comercial.
El Uruguay no es un país deficitario desde el
punto de vista comercial , es un país superavitario y lo va a seguir
siendo gracias a los bienes pero también a los servicios. Es lo que
nos lleva a destacar fundamentalmente estas cifras: 5 mil millones
de dólares de exportaciones en 2005 es una cifra muy importante,
aproximadamente unos 3.800 o 3.900 en bienes materiales y más de
1.100 millones en servicios, de los cuales la tercera parte es
exportación de la industria logística que viene con una expansión
notable en el país, pero hay destinos que, observen también, las
cifras de este año. En julio las exportaciones crecieron 30%
respecto a igual mes del año pasado y en el primer período, el
conjunto de estos primeros siete meses del país, el período
enero-julio crecieron 17% en términos reales respecto al año pasado.
Quiere decir que la pujanza del crecimiento
productivo y de la inversión se refleja-como no podía ser de otra
manera- en una pequeña economía abierta como la uruguaya, en un
fuerte impulso a la exportación. Que, como dice esta gráfica,
exhiben el mayor dinamismo de la región, en toda la región de la
América latina que es la que está representada en todas estas
barras. Uruguay está al tope en materia de tasa de crecimiento del
volumen exportado de bienes. Acá no están considerados los
servicios, promedio 2004-2005, con un 22 % de crecimiento.
Hemos logrado o estamos logrando -porque este es un proceso que
hay que seguir mejorando- una diversificación importante de los
mercados de destino de nuestras exportaciones. Hoy en día estamos
algo menos dependiente de la región. La presencia de Estados Unidos
como cliente comercial del país ha aumentado notoriamente y tenemos
una mejor distribución de los grandes destinos de nuestro comercio.
Allí respecto a la medición en mayo de este año los destinos son
Europa, Estados Unidos, resto de América, Argentina y resto del
mundo (debí decir, Argentina y Brasil, omití mencionar a Brasil)
pero requieren atención más inmediato dentro de la región.
Lo que quiero trasmitir es el concepto de que hoy
tenemos un mayor equilibrio de diversificación en los destinos de
nuestro comercio exportador. Por otra parte , observando ahora la
otra hoja de la tijera del comercio exterior, que son las
importaciones, es muy relevante saber que el principal crecimiento
de las importaciones está explicado por la importación de bienes de
capital, lo que es absolutamente fundamental para un país que se
propone seguir estimulando los niveles de inversión y que esto sea
la base del crecimiento productivo. La balanza comercial, como
decíamos recién, que mide, precisamente los flujos de exportación e
importación de bienes y de servicios, está mostrando, como lo indica
gráficamente esta presentación que estamos observado ahora, un
importantísimo superávit. Superávit que al tiempo de presentarse con
un volumen relevante, nos muestra, por comparación, el impulso de
expansión, que unido a las recientes tendencias está verificándose
en materia de comercio exterior. Obviamente toda el área que está
por encima del eje horizontal blanco es un área que nos muestra, que
indica la representación del volumen del superávit y una cuenta
corriente que se mantiene equilibrada.
Esto, en materia de conducción y de resultados
económicos, es un indicador fundamental, sobre todo, repito, para
una pequeña economía abierta como la uruguaya. Recién hablábamos de
cuenta comercial que, como su nombre lo está indicando, mide los
flujos de comercio del país, flujos exportadores e importadores.
La cuenta corriente agrega a ese flujo las
diferencias que se obtienen por los flujos de ingresos que van hacia
el exterior, y que recibe el país proveniente del exterior, ingresos
por concepto de factores, por ejemplo, intereses de la deuda
pública, beneficios de empresas. Todo ello se agrega a los flujos
comerciales y redunda en un resultado que llamamos cuenta corriente.
Es muy grave cuando el resultado de esta cuenta corriente es
deficitario para un país como el Uruguay. Quiere decir que podemos
tener problemas comerciales, pero además podemos tener problemas de
desequilibrio porque estamos enviando al exterior un mayor volumen
de ingresos de factores que los que recibimos.
Obviamente, toda la superficie verde que está por
debajo, es un déficit de la cuenta corriente que se hizo
especialmente grave hasta el estado de máxima profundización de la
crisis de 2002. Allí teníamos salidas importantes hacia el exterior
por esos conceptos que acabo de explicar mucho más voluminosas que
lo que el país recibía, jugando los intereses de la deuda un papel
especialmente importante. En los últimos años Uruguay ha logrado
equilibrar su cuenta corriente, equilibrio en el que juega un papel
importantísimo el comercio, pero también juega un papel
importantísimo el hecho del que el Uruguay está moderando su
resultado de ingresos con el exterior en términos de servicios de
factores y por lo tanto está logrando que esa cuenta corriente
mantenga un nivel próximo al equilibrio, jugando, en comparación con
la cuenta capital que es la otra que tenemos que tener en cuenta y
que enseguida vamos a ver un papel importante en la recuperación
económica del Uruguay.
Precisamente vamos ahora a eso, porque la balanza
de pagos además de tener una cuenta corriente, tiene una cuenta
capital que registra los movimientos de capital entre los residentes
del país y los no residentes. Y aquí hay diferentes tipos de
capitales en las relaciones de una economía con el exterior. Muchas
veces en el país dijimos: bueno está ingresando por ejemplo, mucho
capital especulativo, por ejemplo, depósitos bancarios u otro tipo
de activos financiero. Cómo nos gustaría que ingresara al país
capital productivo porque es el capital que al venirse a invertir
genera puestos de trabajo de calidad y le permite al país crecer y
aumentar sus ingresos. Aquí tenemos entonces un fiel reflejo de la
historia de los últimos años.
En primer lugar, las barras lilas que están a la
izquierda del primer gráfico, nos muestran los déficit en cuenta
corriente que teníamos antes, y esas dos barras profundas que caen,
la verde y la celeste, precisamente en forma inmediata nos están
indicando que en el año 2002, año grave para el país, perdimos
muchas reservas precisamente por salida de capitales y al mismo
tiempo la cuenta capital, que es la celeste, presentó un déficit
profundo.
Toda la parte de la derecha de la primera gráfica
nos está mostrando, en primer lugar que el déficit en cuenta
corriente, como acabamos de ver prácticamente desapareció, pero que
los flujos de capital se han transformado en positivo, están todos
por encima del equilibrio. El verde, acumulación de reservas, el
país hoy tiene un volumen de reservas internacionales netas
absolutamente coherente con este esfuerzo de consolidación que
estamos haciendo, supera los 3 mil millones de dólares, me refiero a
la reserva internacionales netas en poder del Banco Central y luego
la barra celeste nos indica que la cuenta capital está teniendo un
resultado muy favorable y lo que es más importante , no solo por
recibir capital del exterior como está recibiendo el país, sino por
el carácter de ese capital y ahora vamos a la segunda gráfica, la
que está un poquito más abajo, lo que está entrando es inversión
productiva, inversión extranjera directa, por eso la sigla IED,
inversión productiva y les pido que observen en particular, la
evolución que está teniendo en los últimos años. En el año 2005 la
inversión extranjera directa se duplicó, es la penúltima barra en
relación a la antepenúltima, superando los 600 millones de dólares,
repito sin contar las plantas de celulosa , que van a convertir este
proceso expansivo a partir de este año en un proceso que el país
nunca vivió antes en materia del crecimiento de la inversión. Pero
les pido que observen la última barra, responde a los doce meses
terminados en marzo de este año y el crecimiento supera los mil
millones de dólares de inversión extranjera directa sin contar las
plantas. Tenemos un muy buen comportamiento de la inversión del
exterior productiva que revela que el país es depositario de
confianza de los inversores, que el país tiene atractivos
para la inversión, si analizamos los destinos de esta inversión
vemos que hay una diversificación interesantísima, aquí está la
agroindustria alimenticia jugando un papel fundamental, pero están
los transportes, las comunicaciones, los servicios portuarios, el
turismo, las actividades conexas, las actividades o los ámbitos de
mayor grado de innovación en el país, biotecnología, tecnología de
la información, todos esos son destinos de esta inversión extranjera
directa y obviamente el complejo industrial forestal, que además de
tener un fuerte impacto indirecto sobre estas inversiones que acabo
de mencionar, sobre todo las inversiones en infraestructura -repito-
transporte, comunicaciones, servicios portuarios están muy
estimuladas por el complejo industrial forestal. El propio complejo
en sí mismo le va a agregar a estas cifras, volúmenes absolutamente
desconocidos en la historia del país. Entonces esto lo tenemos que
destacar porque revela potencialidad, a nosotros nos ha ido muy bien
hasta ahora, en la colocación de deuda soberana uruguaya, también
podemos hablar un poquito de eso más adelante, pero nos está yendo
muy bien, no solo en la colocación de deuda, por la confianza que,
un país que respeta sus contratos, sus instituciones, que es serio,
que es responsable, despierta en el mundo, sino también por el
ingreso de inversión directa proveniente del exterior. Vamos ahora a
la relación cambiaria del país, un aspecto sobre el que se ha
enfocado y dirigido mucho análisis y mucho debate, quizás este
debate prosiga, sobre todo cuando pensamos en el país productivo, en
primer lugar les quiero decir que la variable relevante para
discutir este tema no es el tipo de cambio nominal, ese que
observamos todos los días en la prensa a través de sus variaciones,
sino éste, el tipo de cambio real, en segundo lugar les quiero decir
que el tipo de cambio real no es el tipo de cambio nominal
deflactado por la inflación, como a veces podemos tender a creer, el
tipo de cambio real es otra cosa, es una medición, un indicador del
grado de competitividad comparada que tiene el país y teniendo
varias modalidades de medición nosotros acá estamos utilizando la
medición que a nuestro juicio es la mejor, esto es la comparación de
una canasta de bienes y servicios entre Uruguay y sus países de
relación relevante en materia comercial, de bienes y de servicios
precisamente analizando lo que ocurre con los precios de esa canasta
en Uruguay y en esos otros países. ¿Qué países hemos seleccionado?,
los más importantes para el Uruguay: Argentina, Brasil, México,
Estados Unidos, Alemania, España, Italia, Reino Unido y China, de
alguna manera países seleccionados de esa diversificación de
destinos de exportación que nosotros habíamos visto hace un ratito
en una lámina anterior y esa evolución que está mostrada ahí nos
está permitiendo comprobar a mi juicio, dos características
fundamentales, en primer lugar que el tipo de cambio real como dice
el título de la lámina se mantiene 20% por encima de los niveles pre-devaluación.
Ustedes recordarán que el país hizo una importante devaluación antes
de la profundización de la crisis, que se observa ahí en el punto
más bajo de la gráfica roja y luego el tipo de cambio real creció y
el tipo de cambio real creció manteniendo hoy todavía una
localización, una ubicación 20% por encima de los niveles que el
país tenía antes de la devaluación y la otra cosa que les invito a
comprobar es que esta es una gráfica que prácticamente recorre los
últimos treinta años de la vida nacional, el punto inicial en el eje
horizontal es 1977 y naturalmente tenemos una línea ubicada en la
evolución índice 100, les pido que observen, entonces, que la
evolución del tipo de cambio real está obviamente cercana a lo que
podríamos considerar un indicador de equilibrio en el país y que no
podemos considerar por esta razón que la evolución de este tipo de
cambio real esté perjudicando las condiciones de competitividad
comparada de la producción nacional. Quería hacer especial énfasis
en este análisis precisamente porque es una variable importante
cuando se discuten las perspectivas del país productivo. Los costos
laborales, medidos en dólares -no los salarios- los costos laborales
de los cuales los salarios son un componente, se ubican todavía en
niveles muy bajos en comparación con nuestros socios comerciales,
nuestros socios comerciales son los mismos que acabo de mencionar
para la medición del tipo de cambio real. La línea amarilla es la
que corresponde al Uruguay, la línea roja es la que corresponde a
nuestros principales socios comerciales, teniendo una evolución
prácticamente muy pareja hasta el año 2000, a partir del 2001 los
costos laborales del país comienzan a descender claramente por
debajo de los que predominan en nuestros socios comerciales, pero
además a ello tenemos que agregar el hecho de que las ganancias de
productividad que son muy importantes en el Uruguay, que ahora vamos
a ver algunos detalles al respecto, han amortiguado los mayores
costos por los aumentos salariales, entonces, acá vemos otros
componente del costo laboral, por un lado el costo laboral está
explicado por los salarios que están aumentando en el país, nominal
y realmente, pero otro componente fundamental de la repercusión en
materia de costos laborales es la evolución de la productividad de
los trabajadores. La verdad es que tenemos muy buenas evoluciones de
productividad en los distintos sectores de la economía, acá tenemos
industria, construcción, comercios, hoteles y restaurantes,
transportes y comunicaciones y una suerte de promedio de total de la
economía. ¿Cómo está medida la productividad? Con un indicador. La
relación entre el índice de volumen físico de la producción y el
índice de horas trabajadas por sectores. Esto es, el resultado que
se obtiene en materia productiva por cada hora trabajada observado
en su evolución relativa. Esto es un indicador de la productividad
de los trabajadores por sector en el total de la economía.Y los
resultados son muy buenos. En algunos casos desparejos, porque por
ejemplo en transporte y comunicaciones tenemos un 15 por ciento de
variación en el 2005. Son todas positivas.En la construcción un 2.3
por ciento; comercio, hoteles y restaurantes 7.2; industrias 6.3;
total de la economía, aproximadamente, 6 por ciento de mejora de la
productividad en el 2006.
El crecimiento repercutió positivamente en el
empleo durante 2005 y este es un dato fundamental.
Hoy hablábamos de pobreza, de marginación, de
exclusión; bueno, sepamos que el principal factor generador de
pobreza en el país son los problemas de empleo; los problemas
cuantitativos y cualitativos de empleo y que la manera más sólida de
combatir la pobreza es invertir y generar empleo. Esa es la mejor
política de combate a la pobreza.
Sin descuidar que también es necesario atender la
situación de los que más están sufriendo, como el país está
intentando hacer. Pero la mejor política, la más sólida, la más
duradera, para trabajar por la equidad en el país es invertir y
crear empleo; no hay otro camino más importante que ese.
Y es que tiene resultados, como los estamos
viendo aquí.
El país en 2005 creó 30.950 nuevos puestos de
trabajo en el sector privado; que no se tradujeron en un resultado
neto similar, porque hubo disminución de creación de empleos desde
otros puntos de vista, por ejemplo, hay 8.790 empleados públicos
menos al terminar 2005 y eso hay que restarlo de los puestos de
trabajo. Como también hay que restar la disminución que se verifica
en sectores muy próximos al informalismo; trabajador cuenta-propia,
sin local; miembro del hogar no remunerado, que son los otros signos
negativos que hay allí.
Entonces, ¿qué está pasando con este cuadro?
Primero, que hay un impacto positivo en el empleo, sin duda.
Segundo, que hay una recomposición del empleo; disminuye el empleo
público, pero al mismo tiempo disminuye también el empleo informal.
Aumenta el grado de formalización del trabajo, lo
que quiere decir que además de haber más empleo hay mejor empleo.
En 2005, se está viendo eso con un resultado neto
-luego de hacer las deducciones correspondientes- de 16.000 puestos
de trabajo. Seguramente, muchos de los que disminuyeron allí en el
sector más informal están luego engrosando la creación de puestos de
trabajo formales, que está en la primera línea de este cuadro.
Y esto aceleró la caída del desempleo en 2006.
Como ustedes ven ahí, tenemos el período enero-marzo de ese año;
abril de este año y mayo de este año, que es el último que tenemos
en materia de información.
Y hemos llegado a una tasa de desempleo de 10.7
por ciento, ya muy cercana a la meta que nos trazamos para todo el
período, que era la de llegar a un dígito de desempleo. Seguramente,
vamos a lograr esta meta antes de que termine el período, si siguen
las cosas como están evolucionando hasta ahora.
Esta es la menor tasa de desempleo abierto en el
país de los últimos 10 años.
Pero, yo les pido también que presten atención a
la segunda línea, a la tasa de empleo no a la de desempleo. Porque
la tasa de empleo es un indicador fundamental; quizás más que la
tasa de desempleo, que naturalmente es más espectacular en la
comunicación tanto para bien como para mal.
Pero la tasa de empleo es fundamental, porque es
la que está respondiendo a los esfuerzos de inversión. Y yo le
quiero decir que este 54.5 de mayo de 2006 es la mayor taza de
empleo desde que el país recuperó la democracia en 1985 es la mayor
taza de empleo de los últimos 20 años. Y esto es producto del
comportamiento de la inversión. Por eso les digo que si seguimos por
este camino de concreción de inversiones, seguramente vamos alcanzar
la meta en materia de empleo antes de finalizar el periodo.
Las perspectivas de crecimiento ya lo adelanté
para este año, las hemos mejorado ya por tres veces consecutivas,
acá se esta exhibiendo en esta presentación el producto de una
encuesta selectiva de expectativas económicas es la mediana
estadística de esas expectativas privadas de crecimiento, esto es
una encuesta realizada en el sector privado. Y como ustedes ven las
expectativas del sector privado ya están claramente por encima del
5% crecimiento para este año.
Ahora vamos a nuestras cifras las del Ministerio
de Economía, que estamos colocando por primera vez en el año esta es
-lo comentábamos con Fernando Lorenzo el otro día- la primera vez
que públicamente el Ministerio de Economía dice que vamos a crecer
5% en este año. Yo ahora personalmente digo que creo que lo vamos a
superar y ojalá la realidad avale mis palabras. Pero estamos
trabajando para esas metas para el 2006 y 2007, crecimiento del
producto de 5% este año y 4.2 el año próximo.
Detengámonos un segundo acá, esto significa
confirmar que el país, no a corto plazo sino ya a esta altura
mediana plazo está logrando mantener niveles de sentimiento muy
superiores a la media histórica que es lo que tenemos que tratar de
lograr en el país, y no en cinco años de gobierno, es mucho más de
cinco años. Uruguay tiene de proponerse por lo menos triplicar su
crecimiento histórico en largos periodos, Uruguay tiene que superar
definitivamente una historia de crecimientos efímeros y crisis
largas, que es lo que nos ha caracterizado durante décadas.
Uruguay tiene que lograr durante décadas mantener
niveles de crecimiento promediales muy superiores. Y por eso destaco
que crecer 12% en 2004, 7% prácticamente en 2005, más de 5 en 2006,
4,2 en 2007 en lo que está llevando al país y ojalá seamos capaces
todos de mantenerlo porque esto es una cuestión de Estado, no es una
cuestión de un gobierno, de mantener a la larga estas tasas, estos
ritmos de crecimiento que superan notablemente a los que
caracterizan a la historia larga del Uruguay.
Luego vienen las metas en materia de consumo
privado, de exportaciones y de importaciones y de formación bruta de
capital fijo, ahora sí con las plantas de celulosa. Les reitero que
estas son variaciones reales esperadas, que quiere decir que en 2006
tenemos un 27,7 % de expectativas de crecimiento real de la
inversión que precisamente la formación bruta interna de capital
fijo crecerá realmente más allá de lo que ya creció el 2006 en esa
cifra.
Ahora ya comenzado a incorporar el impacto de las
plantas de celulosa, digo comenzando porque el impacto de las
plantas se va diseminar en el tiempo, no lo vamos a incluir todo
ahora, por supuesto que no, vamos a ir contabilizando a medida que
se materializa la inversión, que es una inversión de largo periodo
de maduración esto es primero se prepara el escenario de la
inversión después empiezan las obras civiles, después se va
incorporando la maquinaria, es un proceso que se extiende a lo largo
del tiempo.
Lo que estamos incluyendo en 2006 y 2007, que
entre otras cosas, supone un mayor crecimiento de importaciones que
de exportaciones es precisamente el impacto que vamos a tener ahora,
la mayor cantidad de importaciones está prevista precisamente por la
incorporación de maquinarias precisamente en las plantas de
celulosa.
Entonces, estamos pronosticando, proyectando,
mejor dicho, no es un pronóstico, es una proyección, para estos
años, un mantenimiento importante del ritmo de expansión real de la
formación bruta interna de capital.
Bien, esta es la situación y las perspectivas.
Vamos ahora a la última novedad, si podríamos llamarlo así, que es
el espacio fiscal, creo que corresponde usar ese nombre, que
acabamos de abrir con la Rendición de Cuentas, sobre todo para
impulsar algo que nos preocupa muchísimo y es el impulso a la
inversión pública; no para sustituir al sector privado, esto debe
quedar clarísimo, sino para cumplir el papel que el sector público
tiene que asumir indelegablemente.
La inversión que no realiza el sector privado,
pero que necesita el sector privado. La inversión, por ejemplo, de
infraestructura, sin la cual no es posible llamar a los inversores.
Sin dragar el puerto de Montevideo, cosa que no va a hacer ningún
privado, que necesariamente tiene que hacer el sector público, no
podemos convocar a que vengan a invertir en los servicios portuarios
que el país tiene que seguir desarrollando. Porque no vamos a poder
recibir las embarcaciones del porte que nos pueden conducir al
desarrollo de la prestación de esos servicios y a la expansión de la
logística.
Entonces, se deprimió tanto la inversión pública
en los años de la crisis, lo primero que se dejó de hacer fue
invertir desde el sector público, precisamente porque no había
recursos entre otras cosas, ahora es el momento de empezar a darle
el impulso que necesita. Por eso yo no podía dejar de compartir con
ustedes, aunque sea brevemente, esta Rendición de Cuentas que alude
al pasado, pero que en realidad vamos a observar desde el punto de
vista del futuro. Porque en esa Rendición de Cuentas estamos
abriendo un espacio fiscal adicional para atender prioridades del
país.
Pero comencemos por considerar de dónde estamos
obteniendo los recursos para calificar bien el impacto de este
gasto.
En primer lugar porque hemos crecido por encima
de las previsiones, el país tenía metas de crecimiento que fueron
superadas por los resultados que acabamos de obtener. En segundo
lugar, porque hemos asistido en este período en este año y medio a
una fortísima reducción de niveles de evasión e informalismo, que se
traduce en una evolución extraordinariamente buena de la recaudación
tributaria. Por mayor eficiencia de los organismos, por crecimiento
del nivel de actividad, lo cual redunda, entre otras cosas, en una
reducción importante de los niveles de evasión e informalismo.
No tenemos tiempo de hacerlo ahora, pero yo les
pido a ustedes que tengan en cuenta la evolución creciente e
imparable que tiene la recaudación de la Dirección General
Impositiva. Las cifras del Banco de Previsión Social, que han
llegado a récords; el Banco de Previsión Social hoy tiene más de
1.100.000 cotizantes en una población económicamente activa de
1.250.000 personas, aproximadamente. Nunca había tenido Uruguay una
relación de ese tipo. Y hasta la Aduana, que está requiriendo una
reforma muy profunda, que el país postergó durante décadas, y que
estamos encarando este año, ha superado los 1.000 millones de
dólares de recaudación anual.
Entonces, quiere decir que no sólo crecimos por
encima de las previsiones, sino que la recaudación también está por
encima de las previsiones, por razones de crecimiento, pero por
razones de mayor eficiencia de estos organismos también.
En tercer lugar porque hemos sobre cumplido las
metas de superávit primario, entre otras cosas, porque hemos tenido
una menor ejecución del Plan de Emergencia de 2005, teníamos
previsto gastar 70 millones de dólares el año pasado y gastamos 30,
lo cual hace que los 40 que no gastamos en el 2005 engrosen los
recursos para el Plan de Emergencia en el 2007, y también
constituyen una fuente de recursos, el ahorro en el pago de
intereses por la cancelación anticipada a organismos internacionales
que ha alcanzado hasta ahora la cifra de 43 millones de dólares,
esto es administrando la deuda como la debe administrar un país
endeudado, con criterio profesional ya hemos ahorrado 43 millones,
son recursos nuevos y son recursos que se agregan a la dotación que
el país ya tiene y que van a financiar las necesidades del país, y
finalmente una inversión excepcional como fue –digamos la que hemos
podido realizar- con la venta del nuevo Banco Comercial también nos
están posibilitando utilizar 50 millones de dólares, producto
parcial de esa venta en el financiamiento de necesidades nacionales
impostergables.
Entonces la gran protagonista de los destinos de
estos recursos es la inversión pública, vamos a estar concretando
planes de inversión que superan los 120 millones de dólares en 2007,
yo hoy hablaba del dragado del puerto, ahora puedo agregar, como
ejemplos de los destinos de esta inversión, la modernización del
ferrocarril sobre la base de la asociación público privada, dando
prioridad al transporte de carga que está estimulado formidablemente
por el complejo industrial forestal. La fibra óptica para que ANTEL
tenga un mejor desempeño en el terreno de las telecomunicaciones,
son todos ejemplos de –precisamente-mejoramiento de infraestructura,
lo que hay que agregar es la tarea que va a realizar
fundamentalmente la Corporación Vial en materia de transporte
carretero, Corporación Vial que está sostenida conjuntamente como
ustedes saben por el Ministerio de Transporte y Obras Públicas y la
Corporación Nacional para el Desarrollo. Pero la gran protagonista
de este esfuerzo fiscal adicional es la inversión, se está gastando
más que invertir fundamentalmente para mejorar ese escenario de
invitación a la inversión privada nacional y del exterior para que
desarrolle importantísima contribución al crecimiento y al
desarrollo del país. Estos recursos adicionales para atender
necesidades urgentes, parten de un esquema de razonamiento
fundamental, el crecimiento económico, la reducción de la evasión,
el manejo prudente del gasto y de la deuda, conducen a una mayor
solidez de las cuentas públicas. Y es esta mayor solidez de las
cuentas públicas la que genera ese espacio fiscal que hoy estamos
dedicando a la inversión.
No nos podemos confundir, por un lado hay que
seguir manejando con mucha rigurosidad las cuentas públicas, y una
política prudente en materia del gasto pero el Gobierno no puede
dejar de atender las necesidades de un país que sufrió mucho, pero
no se trata solamente de tener un gran superávit para mantenerlo
inutilizado y estéril, se trata de mantener un buen superávit
primario entre otras cosas para destinar, parte de esos recursos a
ir superando las necesidades más evidentes del país, no se puede
renunciar ni a una cosa ni a la otra. El arte consiste en manejar
con equilibrio las dos, manejemos con seriedad las cuentas, pero
vayamos atendiendo las necesidades impostergables del país y por eso
trabajamos también con este razonamiento cuyo corazón está en la
parte del medio de ese esquema, los equilibrios macroeconómicos y
las reformas estructurales nos permiten mantener un crecimiento
estable de la economía, sobre todo las reformas estructurales, las
que junto a un aumento de la inversión producto de la confianza de
los agentes económicos nos permite mejorar la cantidad y calidad del
empleo lo cual es fundamental para reducir la pobreza.
Pero la pobreza también la reducimos con un
aumento del gasto social, que es el que figura en la etapa... en la
parte izquierda superior de la presentación.
Estamos, entonces, atacando la pobreza, no sólo
por el lado del empleo, la inversión, el crecimiento, sino también
por el lado de un gasto social que nos permite realizar el manejo
consolidado de las cuentas publicas.
Por eso insisto, en que mantendremos una política
prudente en materia de gastos, estas evoluciones nos están mostrando
la roja interior, los egresos primarios corrientes, esto es sin
contar inversión, sin contar intereses de la deuda publica. Luego
viene el ingreso primario total, esto es agregando la inversión y
luego viene el egreso total, esto es agregando los intereses de la
deuda publica, que es la evolución amarilla de la parte superior, en
todos los casos como porcentaje del Producto Bruto Interno, la sigla
esta complicada quiere decir Sector Publico No Financiero, nos está
mostrando una evolución muy moderada del gasto hasta el 2009 en
relación al producto, en todo caso quiero decirles que siempre la
evolución del gasto será inferior la evolución del Producto, estará
cubierta por la evolución financiera, porque esta es la manera de
tener un gasto genuinamente apuntalado por la parte real, la parte
material fundamental, el corazón de la evolución económica que no
está en otro lado que no sea la producción.
Y vamos a destinar recursos a recuperar los
niveles de inversión publica, como lo muestra el área roja que
indica incluyendo el efecto de esta Rendición de Cuenta las
inversiones del sector publico como porcentaje en el Producto Bruto
Interno, pero esa es una tendencia al crecimiento de la inversión
publica, luego de haber llegado a niveles muy bajos de renta. Este
manejo responsable de las cuentas publicas nos va a permitir dos
cosas: primero ir achicando cada vez más las barras verdes que
aparecen por debajo de la línea blanca, hasta hacerlas desaparecen.
Yo me atrevo a decir que esto es una gráfica conservadora, porque
esas barras verdes indican el déficit global del país, déficit
capital global, van a desaparecer antes del 2009 ahora están
indicando las metas con las que estamos trabajando, pero seguramente
van a desaparecer antes de 2009 si logramos mantener la tendencias
económicas que estamos analizando. Y las rojas de la parte superior
indican el superávit primario antes del pago celeste, con el que
estamos trabajando y que es un superávit clave, fundamental para ser
posible todo lo que yo acabo de decir en estos momentos; entre otras
cosas tratar de obtener el mejor resultado fiscal global que sea
posible. Vuelvo a repetir creo que este resultado fiscal va a ser
mucho mejor que el que estamos indicando acá.
De esta manera podremos continuar reduciendo la
relación entre deuda publica y producto, es lo que está indicando
esta gráfica, la parte amarilla final, son nuestras metas, nuestras
metas que terminan el 60% en 2009, al fin del periodo de gobierno,
no olviden ustedes que en 2003, el país había superado el 100% de
relación entre deuda y producto, esto es debíamos más de todo lo que
producíamos en un año, hoy ya estamos muy por debajo de esa cifra y
proyectamos seguir disminuyendo esta relación en el correr de los
próximos años, en función de estas relaciones estamos administrando
la deuda, lo que nos permite ahorrar mucho dinero, como ya hemos
visto.
Estamos sustituyendo deuda cara, por deuda
barata, como lo acabamos de hacer al anticipar la deuda que teníamos
con el Fondo y que vencía el próximo año 2007; una deuda muy cara
que estaba pagando entre 8.22 y 7.02 de interés, la hemos pagado con
recursos que hemos colocado a 8.05 en el mercado internacional, y
con recursos que teníamos colocados acá al 5% de interés, haciendo
muy buen negocio para el país.
Estamos sustituyendo deuda de corto plazo, estos
vencimientos eran del año que viene, muy cercanos, por deuda de
largo plazo; hemos pagado en gran medida este anticipo con el Fondo
Monetario con una deuda que hemos colocado a 2022, esto es, con
vencimiento dentro de 16 años, y estamos sustituyendo deuda
condicionada por deuda sober4ana.
En ese marco es que irá disminuyendo la evolución
entre Deuda y Producto.
Vamos ahora a la cuarta y última parte de esta
exposición, referida a un repaso breve por supuesto de las reformas
vistas desde un punto de vista estructural, sobre todo con relación
al país productivo.
Déjenme decirles que no vamos a ver todas las
reformas que estamos proponiendo, porque son unas cuántas más de las
que van a ver ustedes acá, sino que vamos a ver especialmente
aquellas que, a nuestro juicio, merecen una consideración al
servicio del Uruguay productivo.
En primer lugar, la reforma tributaria que tiene
ella misma varios objetivos a alcanzar y no solo los de estimular la
inversión; tiene el objetivo de eficiencia, tiene el objetivo de la
equidad social y sectorial en el país, pero tiene que cumplir un
papel de estímulo a la inversión productiva. Por eso, forma parte de
una reformulación de estímulos económicos, incluyendo un tratamiento
favorable a las inversiones; disminuyendo el Impuesto a la Renta
empresarial en cinco puntos; e incluyendo incentivos a la innovación
tecnológica y a la generación de empleo.
La propia reforma tributaria, además de otras
herramientas que usa el país en esta orientación, incluye estos
estímulos.
Su grado de avance, como todo el mundo sabe, es
el de estar en discusión parlamentaria, precisamente, en la Cámara
de Representantes.
Vamos a racionalizar las exoneraciones fiscales
en el país, con el objetivo de reformular los estímulos económicos
en busca de un sistema más racional, focalizado y transparente.
Racional, cada palabra tiene su explicación,
porque entendemos que Uruguay tiene muchas situaciones disímiles,
desde este punto de vista, que cuesta mucho explicar con fundamentos
sólidos; y que se han venido arrastrando a lo largo del tiempo y que
en algunos casos ni siquiera conocemos, ya no solo en lo que refiere
a su existencia, sino también en lo que refiere a su impacto;
racional quiere decir eso.
Focalizado, quiere decir que el país tiene que
darse a sí mismo el derecho de orientar estos estímulos; con
transparencia, por supuesto, que es la tercera característica.
Los uruguayos tenemos que saber adónde van los
estímulos que desde el Estado se ponen en práctica, porque somos
todos nosotros los que pagamos impuestos para que esos estímulos se
puedan conceder. Lo menos que podemos pedir es saber cuánto estamos
destinando a cada cosa y cuál es el destino de esos recursos. Por
eso racionalidad, por eso focalización y por eso transparencia.
Entonces, tenemos a estudio el costo del sistema
de devolución de impuestos y estímulos a la exportación; entiéndase
bien, no para renunciar a esa herramienta, sino para que funcione
mejor de lo que ha venido funcionando hasta ahora.
Entonces, seguramente, como producto de este
estudio podremos tener, sin dudas, un mejor sistema de devolución de
impuestos indirectos. Pero, además, vamos a tener seguramente la
posibilidad de focalizar la administración de esta herramienta,
orientarla y sobre todo tener transparencia: cuánto estamos volcando
a esta herramienta, hacia quién van los recursos y por qué.
En la Rendición de Cuentas se faculta al Poder
Ejecutivo a utilizar créditos presupuestales para proyectos de apoyo
al sector productivo, por lo que se ahorre como producto de esta
revisión del esquema actual de devoluciones.
Lo que quiere decir algo muy sencillo: el posible
ahorro que se pueda obtener por una mala administración o concepción
de esta herramienta no va a ir para otro lado, va a permanecer como
estímulo al sector productivo, solo que con estas características
que acabo de proponer.
El Programa de Trazabilidad del ganado vacuno que
tiene mucho que ver con el país productivo de origen agroindustrial,
tiene, como ustedes saben, el objetivo de ampliar y asegurar las
oportunidades comerciales de los productos ganaderos, mediante la
creación de una plataforma de información que brinde seguridad
alimentaria.
El grado de avance sobre este tema es que se creó
el sistema de identificación y registro animal y en la Rendición de
Cuentas, en esta Rendición de Cuentas, hemos incluido 97 millones de
pesos con cargo a la Tesorería, para la adquisición de los
instrumentos electrónicos que van a permitir el funcionamiento de
este sistema; inversión fundamental para el Uruguay, absolutamente
fundamental para no solo expandir este importante sector de la
producción, sino para alcanzar los niveles de calidad a los que el
Uruguay tiene que aspirar permanentemente en todo su esquema
productivo.
Nosotros tenemos que especializarnos
productivamente en el país, para potenciar los objetivos y las
finalidades del desarrollo productivo; pero tenemos que hacerlo
siempre procurando altos niveles de calidad.
El programa global de financiamiento
multisectorial que tenemos con el Banco Interamericano de
Desarrollo, será encarado con el objetivo de disponer nuevos
instrumentos financieros con la participación de privados. El
rediseño del programa multisectorial abrirá espacios a la
participación en el financiamiento de proyectos a los agentes
privados y el grado de avance que podemos exhibir hoy es que hemos
terminado el reglamento operativo precisamente para trabajar al
servicio del objetivo que acabamos de mencionar.
Les adelanté ya que estamos trabajando
intensamente de modo de alcanzar la meta este año, la reforma de la
Aduana que entraría en vigencia el próximo año; el objetivo es la
defensa de la producción nacional mediante la mejora de los sistemas
de contralor, logrando lo que hoy no tenemos: esto es, un equilibrio
entre una Aduana que cumpla con eficacia su labor de control, pero
también una Aduana que encare su trabajo con la perspectiva de
facilitación de la inserción internacional del país que se requiere
en los tiempos que corren. Control y facilitación; no traba, no
obstáculo.
Nuevos procesos y sistemas de información para
asegurar el cumplimiento de las normativas y los acuerdos externos
son fundamentales, de modo de reducir el tiempo de las operaciones y
mejorar la previsión de los riesgos.
Precisamente, una Aduana que intente equilibrar
sus objetivos de contralor y de facilitación tiene que tener
herramientas de medición de riesgos, para actuar con la eficacia que
debe actuar una Aduana en una pequeña economía abierta al exterior,
que sabe que en esa apertura al exterior se juega gran parte de sus
potencialidades de crecimiento y desarrollo.
Estamos en proceso de definición de la Reforma;
este es el año de formulación de la Reforma. ¡Y ojalá podamos en
2007 tener el año del comienzo de la aplicación de la Reforma en la
práctica!
La Carta Orgánica del Banco Central del Uruguay,
creando la Corporación de Protección al Ahorro Bancario, tiene mucho
que ver con el país productivo porque va a permitir mejorar el
funcionamiento de un área fundamental de la política económica.
Por eso, destacamos el objetivo de centralizar la
regulación y la supervisión bancaria, nada menos que relacionada con
las posibilidades de funcionamiento de las Instituciones de
Intermediación Financiera, que son las encargadas de llevar el
crédito a la producción. Esto es algo así como el aparato
circulatorio de la economía.
Supervisar correctamente a esas instituciones
tiene impacto sobre la producción; por supuesto, que sí.
El desarrollo del mercado de capitales, ¡gran
carencia nacional!; Uruguay no es un país con mercados de capitales
a medianos y a largo plazo, tiene pretensiones de inversión pero no
tiene mercado de capitales y éste tiene que ser un objetivo
fundamental que vaya en línea, por otra parte, con la
desdolarización de la economía uruguaya, factor de riesgo muy
importante.
Tenemos que crear la Superintendencia de
Protección del Ahorro Bancario para dar más estabilidad al sistema y
orientarlo al financiamiento del sector productivo.
La Superintendencia de Protección del Ahorro
Bancario también es una institución con gran impacto potencial sobre
la producción.
Uruguay tiene que iniciar otra historia desde
este punto de vista; por suerte, ya hemos tenido experiencias
aleccionadoras: todo el trauma de COFAC está culminando de la mejor
manera posible, no solo sin volcar recursos de toda la sociedad a
esta fractura, sino inaugurando una nueva etapa -ahora con la
presencia del BANDES- de intermediación financiera sana en el país.
Esto está en tratamiento parlamentario, se encuentra en la Comisión
de Hacienda del Senado.
Pero es fundamental ver la relación que existe
entre una fuerte conducción del sistema financiero del país y la
eficacia de este último en relación al estímulo al desarrollo
productivo.
Hemos enviado también al Parlamento un Proyecto
de Promoción y Defensa de la Competencia, parte fundamental de la
creación de ese clima de inversiones, de ese escenario atractivo
para el inversor nacional y del exterior, cuyo objetivo -como su
nombre lo indica- es promover la competencia para fomentar la
eficiencia, conductas emprendedoras y defensa de los intereses de
los consumidores. Dicho sea de paso, el Ministerio está
fortaleciendo su Unidad de Defensa del Consumidor, porque entendemos
que es un complemento indispensable de otras reformas que tenemos en
marcha; por ejemplo, la Reforma Tributaria -a nuestro juicio- está
diseñada para que desciendan los precios de muchos bienes y
servicios importantes en este país. Por eso estamos disminuyendo
fuertemente la carga tributaria, sobre todo de los bienes y
servicios que consumen los sectores de menor nivel de ingreso.
Me refiero a la eliminación del COFIS, a la
disminución del Impuesto al Valor Agregado; pero eso tiene que
traducirse en disminución de precios para la gente.
Como está ocurriendo hoy con la carne, sector en
el que estamos practicando una suerte de adelanto de la Reforma
Tributaria, porque hemos disminuido su carga tributaria. Y esperamos
que esto se refleje -se está reflejando- en una disminución del
precio al consumo de la gente. Pero para eso tenemos que tener una
institución fuerte de Defensa de los Derechos del Consumidor y
estamos fortaleciendo esta Unidad del Ministerio, cuyo lanzamiento
ya hicimos públicamente hace algunos días en la Presidencia de la
República. Este Proyecto de Ley está también en trámite
parlamentario.
Y acabamos, hace pocas horas prácticamente, de
enviar otro Proyecto al Parlamento, en este caso para modernizar las
obsoletas reglas que en materia de Bancarrota y de Concurso que
están en vigencia en el país desde tiempo inmemoriales.
Yo digo inmemoriales porque como nos ha explicado
más de una vez algún experto en esta materia, Uruguay todavía
-aunque parezca mentira- tiene en vigencia normas para las empresas
con dificultades que están inspiradas en instituciones de la época
de la Corona.
Este será, sin duda, como también lo calificó un
experto en la materia, un proyecto revolucionario para el país,
porque va a cambiar totalmente la perspectiva para encarar el caso
de empresas en dificultades; que dada la historia nacional, en más
de un 90% terminan quebrando, pertenezcan al sector que pertenezcan.
Este proyecto promueve la reestructura de
empresas de modo de reducir o evitar las pérdidas, facilitando su
supervivencia cuando estén en dificultades importantes, sobre todo
si son empresas viables; y permitiendo una liquidación equitativa de
las que no lo sean, protegiendo la inversión, el empleo y
consolidando relaciones comerciales sanas. Por ejemplo, vamos a
innovar profundamente en materia de pedidos de concordatos, ya no
solo el deudor podrá pedir un concordato, sino también el acreedor
si este proyecto se aprueba, asegurando -como dice acá- relaciones
equitativas en materia de acceso a la información, lo cual es
fundamental, entre todos los protagonistas; los titulares de las
empresas en dificultades, pero también sus acreedores, con el
objetivo facilitador de ubicar soluciones alternativas que no sean
necesariamente las que conducen siempre a la quiebra y a veces a la
pérdida de activos muy importantes.
Por eso digo que es un proyecto revolucionario.
Por eso, ¡ojalá!, lo tengamos en vigencia pronto; acaba de ingresar
al Parlamento y está a estudio del mismo.
El Fondo de Garantía de Créditos, que ha
propuesto la Corporación Nacional para el Desarrollo y que está a
estudio del Ministerio, tiene por objetivo fundamental facilitar el
acceso de micro, pequeñas y medianas empresas -vamos a tener que
cambiar la sigla, en la sigla no entran las micro y nos hemos
acostumbrado mucho a las PYMES, pero en realidad las micros son muy
importantes, las que tienen menos de cuatro asalariados o
trabajadores- de modo que puedan acceder a lo que más difícil le
resulta acceder que es el crédito en un país que tiene que mejorar
mucho desde este punto de vista, porque en materia de créditos
nosotros tenemos grandes carencias aún.
La Ventanilla Única de Inversión es fundamental
para el sector privado, supone la simplificación de trámites
oficiales y el apoyo a la creación de instituciones articuladoras de
actividades productivas; y queremos que esté en el Ministerio de
Economía, de modo que sea el Ministerio el que pueda sintetizar esa
asistencia al sector privado. Por supuesto, informando a todos
aquellos que tengan que estar informados, pero asegurando al
inversor que aquí está el conjunto de herramientas y de instrumentos
que están al servicio del estímulo al proyecto que usted va a
comenzar.
Y por eso, hemos instalado o resuelto instalar,
mejor dicho, la Unidad de Apoyo al Desarrollo y la Inversión en el
sector privado en el Ministerio de Economía, que está a la firma del
Presidente de la República y que, seguramente, ya en la semana que
viene va a estar en vigencia.
La reglamentación de la Ley de Parques
Industriales, que había sido aprobada anteriormente en el país y que
se ha realizado por la vía de un Decreto ya aprobado y en vigencia
que concebimos en el Ministerio de Economía y Finanzas, junto al
Ministerio de Industria y Minería, precisamente tiene por objetivo
promover los Parques Industriales, especialmente en el interior del
país porque entendemos que son un vehículo, un espacio fundamental
de integración productiva y que pueden jugar, vuelvo a repetir
particularmente en el interior que está siendo un destino por suerte
preferente de la inversión productiva, incluyendo y empezando por la
inversión que llega del exterior, para concretar planes de expansión
productiva que nuestra población necesita tanto.
Muy bien, estas son las reflexiones que yo quería
compartir con ustedes desde el punto de vista, precisamente de el
escenario de partida que hemos tenido; el camino transitado, las
perspectivas, las últimas novedades en materia de apoyo a la
inversión y estas reformas de fondo que -a nuestro juicio- son
fundamentales.
Esto forma parte de un único esquema de
conducción económica. Aquí no tenemos, en este Gobierno, una
política económica para manejar bien las cuentas públicas; no
tenemos otra política económica para asegurar estabilidad
financiera; no tenemos otra política para negociar con el Fondo
Monetario internacional; no tenemos otra política para trabajar por
el desarrollo de la producción.
Aquí hay una sola política económica, cuyo
objetivo excluyente es el de mejorar las condiciones de vida del
pueblo uruguayo, dando especial preferencia a aquellos que más han
sufrido. Y utilizando todas las herramientas a las que una
conducción económica puede apelar en el mundo de hoy para concretar
ese objetivo, que es el objetivo fundamental.
Toda la conducción económica está orientada hacia
esa finalidad fundamental y promueve el buen manejo de las cuentas
públicas; la estabilidad financiera; el acuerdo con los acreedores;
la expansión productiva; porque está convencida que es ese el camino
genuino y duradero para que los uruguayos vivan cada vez mejor en el
futuro. Muchas gracias.
VER PRESENTACIÓN
RONDA DE PREGUNTAS AL MINISTRO DE ECONOMÍA Y FINANZAS, DANILO
ASTORI, AL SUBSECRETARIO DE LA CARTERA, MARIO BERGARA,Y AL JEFE DE
ASESORÍA MACROECONÓMICA, FERNANDO LORENZO
PREGUNTA: Comenzamos con una pregunta del Centro
de Bodegueros del Uruguay. ¿El impulso a la inversión no sería mayor
si no se encontrara con costos de servicios públicos de los más
altos de la región, debido a las necesidades de financiamiento del
aparato estatal?
MINISTRO ASTORI: Bueno, si el interés fundamental
contenido en esta pregunta significa la finalidad, el objetivo de
trabajar para deducir el costo de los servicios públicos, yo doy una
respuesta afirmativa y coincidente. Entendemos que tenemos que
trabajar con ese objetivo, objetivo por el cual no solo juegan
factores interno, sino también en una economía como la uruguaya
factores exógenos algunos de los cuales están fuera de control y les
menciono uno que entraña un riesgo absolutamente evidente, desde ese
punto de vista, que es el precio de los combustibles, el precio del
petróleo, que -¡Dios quiera!- no se ponga muy exacerbado en los
próximos meses. Pero en todo caso yo comparto la idea que está
contenida en esa inquietud y naturalmente este Gobierno está muy
conciente de la necesidad de trabajar para reducir esos costos.
PREGUNTA: La tasa de cambio del período ’77-2004
está afectada por dos períodos de fuerte atraso cambiario, y eso
está impactando en el promedio. Estoy simplificando la pregunta. ¿No
debería ampliarse el concepto de tasa de cambio de equilibrio para
que no sea afectados por esos períodos negativos?
MINISTRO ASTORI: Bueno, hay períodos negativos,
períodos positivos. En esa evolución de treinta años que estuvimos
analizando como base de nuestra propuesta, y así como se puede
calificar de atraso cambiario algunas de las fases negativas que
acabamos de ver, también hubo fases que podríamos calificar
exactamente al revés, como fases de adelanto cambiario. A nosotros
nos parece que el hecho de tomar un período largo, el hecho de
trabajar con una medición del tipo da cambio real que signifique la
comparación de precios, de canastas de bienes y servicios entre
Uruguay y sus socios relevantes, es un método que garantiza una
conclusión equilibrada al respecto. De todas maneras, créanme que
esta es una de las variables a la que les prestamos mayor atención.
PREGUNTA: Una pregunta que viene del Contador
Adrián Pérez, que dice que mucho de las gráficas de la primera parte
se refieren a la situación inicial, diagnóstico de puntos de partida
con períodos de auge y depresión. ¿Está previsto a futuro la
adopción de medidas anticíclicas para cuando sobrevengan períodos
económicos de depresión?
MINISTRO ASTORI: Bien. Yo supongo que la pregunta
refiere concretamente al comportamiento fiscal contracíclico,
variando una historia uruguaya que se caracteriza por una conducta
procíclica desde esTe punto de ver. Quiero decirles que comparto
también la inquietud. Pero quiero pedirles que tengan en cuenta las
enormes dificultades que tiene el Uruguay para alcanzar un objetivo
de este tipo.
Y que son de dos tipos. Una es más inmediata, se
puede ver con una perspectiva más inmediata. La otra es más
duradera.
La más inmediata es que Uruguay había postergado
la atención de una gran cantidad de necesidades muy importantes; yo
lo dije hoy: el Gobierno uruguayo tiene la obligación de manejar con
prudencia el gasto pero no puede seguir desconociendo necesidades
impostergables del país.
Entonces, la gran cuestión es mantener equilibrio
entre una cuestión y la otra, e ir eligiendo prioridades a atender.
Esta es la más inmediata.
Ahora, la más duradera es la fuerte rigidez que
caracteriza el gasto público uruguayo, que está en una enorme medida
dedicado a salarios, pasividades, e intereses de la deuda.
Entonces, con un escenario de gasto de ese tipo
no es fácil, no es rápido, llegar a comportamientos contracíclicos.
Pero creo que tenemos que plantearnos esta necesidad y de a poco
tratando de ir alcanzando esta posibilidad, que a su vez depende del
éxito que podamos tener en nuestro estímulo a los factores reales de
la economía: la inversión, el crecimiento del Producto.
PREGUNTA: Esta es una pregunta abierta al equipo
económico, de Roberto Villamil, de la Cámara de Industrias. ¿Cómo
podrá destinarse parte de la mejor recaudación tributaria, por mayor
eficiencia y por el crecimiento, a reducir en la carga impositiva
sobre la producción, el consumo y el empleo?
MINISTRO ASTORI: Como es una pregunta abierta, vamos a hacer
trabajar al equipo económico; entonces, vamos a pedirle a Mario y a
Fernando que digan algunas palabras de respuesta abierta a esta
pregunta abierta.
BERGARA: Muy bien. Sabemos que esta es una
preocupación sistemática de Roberto en su rol a nivel de la Cámara
de Industrias. Evidentemente, esto tiene un trasfondo en que está
basado en la discusión sobre la propuesta de Reforma Tributaria que
el Gobierno ha enviado al Parlamento y alrededor del cual en el
trámite parlamentario se continúa el proceso de debate y de
elaboración. Nosotros hemos dicho varias veces que creemos haber
hecho un muy buen Proyecto de Reforma Tributaria y que seguramente
del Parlamento va a salir una excelente Ley de Reforma Tributaria.
Justamente, ahí está planteada la reducción
impositiva, en términos de tasas; que en varias presentaciones que
hemos hecho sobre el tema hemos mostrados gráficos que reflejan los
principales impuestos en los últimos 20 años; o sea, a partir de la
salida del periodo dictatorial, y muestran que la Reforma Tributaria
está planteando una reducción del Impuesto a la Renta Empresarial
como no existió desde el año ’85 a la fecha.
Está planteando una reducción de las tasas al
consumo, de la imposición al consumo, por la vía de la eliminación
de COFIS; en el caso de los bienes, ¿verdad? Y por la vía de la
reducción de las tasas de IVA, apuntando a un horizonte que vuelva
el IVA básico a la misma tasa que había en el año ’85, que es el
20%; y reducir aún más el IVA mínimo a tasa del 10%, dos puntos
abajo de lo que era el 12% del año ’85. Y que en materia de
Impuestos a las Rentas Personales, obviamente hay una modificación
en la forma estructural del cobro en el pasaje del Impuesto a las
Retribuciones Personales y el Impuesto a la Renta de las Personas
Físicas, pero que también se contenía dentro de parámetros que no
eran elevados en una perspectiva histórica, ¿verdad? Dadas las tasas
que también durante estos 20 años se fueron sucediendo con respecto
al Impuesto a la Renta, Impuesto a las Retribuciones Personales.
O sea, que en los principales impuestos
planteados en la estructura tributaria uruguaya, la propuesta de
reforma que hace el gobierno implica en general tasas menores,
porque estamos convencidos de que el impulso a la homogeneidad en el
tratamiento tributario en los distintos sectores de la economía; el
impulso a la lucha contra la evasión y el informalismo, que creo por
primera vez tiene una clara voluntad política detrás; el impulso a
las mejoras de eficiencia a nivel de la DGI, a nivel de la Dirección
de Aduanas, a nivel del Banco de Previsión Social, de la Inspección
de Trabajo, del Banco de Seguros, etcétera; y a nivel también de una
racionalización de la base imponible que ayude a entender un poco
esa situación que planteaba hoy el Ministro en cuanto a que hay
situaciones que son muy difíciles de explicar, más allá de anécdotas
históricas de por qué hay tanta perforación y tanto agujero en el
sistema tributario, toda esta constelación de aspectos permite que
más uruguayos sí -que hoy por hoy por razones que tienen que ver con
la evasión, con el informalismo, con las perforaciones del sistema,
no están contribuyendo a las necesidades que el Estado tiene para
poder cumplir sus obligaciones y sus funciones- se integren a
contribuir a las arcas del Estado para estos fines. Y eso es lo que
permite que las tasas tributarias empiecen a tener un sendero
declinante, ¿verdad?
Y, por lo tanto, hacer un poco realidad, lo que
es un poco el lema de la DGI hoy: que si todos y más uruguayos, si
todos los uruguayos pagamos los impuestos que debemos pagar, todos
vamos a estar terminando de pagar menos impuestos de los que pagan
hoy, pagan.
O sea, que nosotros estamos convencidos de que el
esquema conceptual que está detrás de la Reforma Tributaria, que
incluye todos estos aspectos va en el sendero de racionalizar la
base tributaria; homogeneizar el tratamiento tributario de los
distintos sectores económicos; contribuir a una mayor equidad, tanto
en el terreno horizontal de sectores económicos como vertical en el
sentido de acercar la carga tributaria a la capacidad contributiva
de las familias; y en ese sentido, sí, ver que la dinámica de una
buena recaudación y de un mejor control y un buen combate a la
evasión y al informalismo van a permitir que todos vamos a terminar
pagando menos impuestos.
LORENZO: Yo voy a agregar dos elementos para
responder directamente a la pregunta de Roberto. Está previsto y ya
ha sido acordado con las empresas públicas que los efectos, todos
los efectos de la reducción de costos que estén implícitos en la
reforma tributaria, una vez que ésta esté aprobada, serán destinados
únicamente a proyectos que implique reducción de tarifas y
beneficios directos para los usuarios.
Esos fondos no tienen otra utilización ni en
proyectos de inversión ni en ningún otro proyecto de interés para
las empresas, sino directamente en reducción de las tarifas, en los
momentos en los que se puedan hacer apropiados, pero no podrán tener
otro uso que no sea reducir las tarifas.
En este sentido, la Reforma Tributaria va a ser
percibida por los usuarios en materia de servicios públicos en la
medida que la Reforma implique reducciones de costos van a ser
transferidos a las tarifas de los usuarios. Esto ya es un acuerdo
pero falta saber cuál va a ser finalmente la Reforma Tributaria y
básicamente establecer los montos de ahorro de costos que esto
implica. Fundamentalmente son los aportes patronales, los aportes
patronales que pagan las empresas públicas son en algunas de las
empresas superiores al 20% y la adecuación 26% en el caso de algunas
de las empresas y esta reducción al 7,5% implica un ahorro de
costos, el único uso previsto son reducciones de tarifas y/o
proyectos que tengan directamente impacto sobre la calidad o los
precios a los que los usuarios acceden de los servicios.
El segundo elemento que quisiera mencionar no
tiene directa relación con la pregunta de Roberto pero sí con alguna
pregunta anterior y es qué reflejan las tarifas públicas, si
reflejan costos efectivos si reflejan otras cosas. Este año
claramente la tarifa de UTE no refleja los costos operativos de
generación de energía eléctrica en el país. Este año por decisión
política se ha decidido utilizar al día de hoy más de 130 millones
de dólares, de excesos de recaudación de la Impositiva para evitar
que los usuarios, los ciudadanos, las empresas pagaran los costos
efectivos de generación de energía eléctrica correspondientes a
estos años que hubieran implicado aumentos y ajustes de las tarifas.
Hoy con 130 millones de dólares de costos
superiores a lo previsto en materia de energía eléctrica, ajustes
superiores al 30% en el último aumento que se dieron del 5%, esto es
la integralidad de la visión que se tiene sobre para qué se usan las
ganancias de eficiencia en la recaudación. Se usaron este año, no es
que se está prometiendo usar para el futuro, se usaron este año
efectivamente para impedir que las tarifas públicas fueran las que
tuvieran que absorber enteramente costos que creemos además
transitorios y esperamos que lo sean.
PREGUNTA: Una pregunta tiene que ver con el tema
agrocombustibles, viene de Pablo Valdez. Ministro Astori, ¿conoce
usted el Proyecto de Ley de Agrocombustibles?¿No desestimula la
inversión en este sector declarar el monopolio de ANCAP en la compra
de agrocombustibles?
MINISTRO ASTORI: En primer lugar, no sólo lo
conozco, sino que la última redacción es un trabajo que compartimos
con el Ministerio de Industria, Energía y Minería y con el
Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca. Lo hemos elaborado
conjuntamente y hemos estado contribuyendo a la redacción final.
La respuesta es negativa, no sólo no creo que sea
un desestímulo a la producción sino que es un proyecto que contiene
importantísimos estímulos tributarios para la producción de
Agrocombustibles nacionales. En cuanto al impacto del monopolio de
ANCAP no nos salimos de lo que establecen las normas en vigencia en
cuanto a la importación y refinación pero no lo extendemos en cuanto
a la producción de la materia prima que se utilizará para generar el
producto final, sea este alcohol carburante o el biodiesel, alcohol
carburante para mezclar con las naftas, biodiesel para mezclar con
el gasoil. Así que no sólo no creo eso sino que creo que va a ser
una herramienta muy importante para impulsar la búsqueda y la
consecución de fuentes alternativas de suministro de energía.
PREGUNTA: Hay varios asistentes, la mayoría de
ellos productores rurales que han hecho una pregunta exactamente
igual y la voy a sintetizar por lo tanto. ¿Cuál es el tope previsto
para poder permanecer aportando en el IMEDA a partir de la Reforma
Tributaria que implica la creación del IRAE?
MINSTRO ASTORI: No está previsto. Todavía tenemos
que en primer lugar conseguir la sanción del Proyecto de Ley de
Reforma y naturalmente ponernos a trabajar en la reglamentación
posterior. Este es un típico tema de reglamentación, no obstante lo
cual, a pesar de lo dicho desde ya estamos abiertos a recibir
propuestas, elementos de juicio, antecedentes, que refieran a este
punto que sobre todo interesa -como fue dicho antes- a los
productores agropecuarios. Pero es un típico, una típica definición
de reglamentación de la ley. Obviamente, una típica definición que
estamos dispuestos asumir con la flexibilidad que esto merece,
buscando un conjunto de elementos de juicio y no solo uno, porque
por lo general utilizar un solo elemento de juicio conduce a
situaciones inequitativas, seguramente; un conjunto de elementos de
juicio que nos permita realmente dejar esa opción al productor que
más la necesita y dejar reservada la alternativa del pago del
Impuesto a la Renta Empresarial al productor que tiene una capacidad
económica como para encarar definitivamente esta alternativa como
alternativa única. Así que, para no extenderme más no hay definición
todavía al respecto, tenemos que hacer un buen estudio de elementos
de juicio para fijar este limite y estamos abiertos a, como lo hemos
estado siempre, recibir propuestas desde este punto de vista.
PREGUNTA: Fernando Matos, Presidente de la
Asociación Rural, dice: No hubo comentarios respecto a la inserción
internacional y la estrategia de comercio exterior, aspecto
fundamental para la economía y fundamentalmente para el agro.
¿Podría comentar cuál es el camino elegido?
Conrado Hughes, de Radio El Espectador, también:
En su presentación no hubo referencia a este tema. ¿No es importante
para el país productivo y la economía?
MINISTRO ASTORI: Lo dejamos reservado para las
preguntas; sabíamos que iba a ser así. De modo que haya novedad en
las preguntas. En primer lugar, estoy totalmente de acuerdo en que
es un tema absolutamente relevante para el país productivo.
En segundo lugar, quiero decirles que Uruguay
esta viviendo una etapa histórica peculiar en la que teniendo
notorias dificultades de acceso a los mercados regionales, como lo
indican las cifras; y cuando digo acceso a los mercados regionales,
pienso incluso en aspectos absolutamente elementales de una relación
comercial, esos que suelen estar en la tapa del libro; busca y
necesita mejorar su inserción económica no solo comercial fuera de
la región.
Cuando digo no solo comercial estoy pensando
fundamentalmente en las inversiones, para alimentar ese flujo de
crecimiento muy importante que ha tenido la inversión del exterior
hasta ahora y que esperamos que se mantenga. Es que en el mundo de
hoy son inseparables comercio e inversiones, a diferencia del pasado
no pueden ser analizados separadamente, aisladamente; entre otras
cosas porque se alimentan mutuamente, interactúan fundamentalmente,
a veces las posibilidades de inversión en un determinado ámbito
económico abren posibilidades comerciales que antes no existían; a
veces la visualización de esas posibilidades comerciales convoca a
invertir en un país que está generándolas.
Por lo tanto, es por eso que hablo de inserción
económica y estamos intentando encarar esta inserción económica
fuera de la región sin abandonar la misma, por supuesto, con un
criterio diversificado, amplio.
Uruguay está tratando de desarrollar sus
instrumentos internos como para encarar esta tarea externa de la
mejor manera posible.
Cuando digo no abandonar la región me estoy
refiriendo al hecho de que nosotros tenemos una pertenencia natural
a esta región del MERCOSUR, que hoy vive con problemas, sin ninguna
duda; pero la solución no está en abandonarla, la solución está en
ganar presencia para contribuir a superar los problemas que hoy
existen; presencia que se ganará en la medida en que Uruguay aumente
su presencia, su inserción, su fortaleza, fuera de la misma.
Y es por eso que estamos siguiendo esta
estrategia, fortaleciendo -como decía antes- instrumentos internos
al servicio de la misma. Los instrumentos internos prácticamente se
resumen en una conducción más eficaz de esa condición
interministerial que de alguna manera vincula a todo el gabinete
productivo -por decirlo de alguna manera- junto a la Cancillería en
la conducción activa, -proactiva debería decir- de los trabajos
hacia este objetivo. Uruguay no puede -a diferencia del pasado-
sentarse a esperar que otros desde afuera nos miren.
Uruguay tiene que salir a buscar su negocio,
exhibiendo sus activos; sus activos que son muy importantes. Y
créanme, he podido viajar en estos dieciocho meses por todo el mundo
y Uruguay es mirado con respeto y mucho interés en cualquier parte
del mundo a la que uno va, y eso es un activo intangible fundamental
que hay que alimentar, preservar, cuidar; entre otras cosas con una
gran unidad nacional, desde este punto de vista; verdadera cuestión
de Estado, si las hay.
Y en esta verdadera cuestión de Estado, lograr
más y mejores negocios para empezar con nuestro principal cliente
que son los Estados Unidos de América, pero también con Europa, con
los países de Asia, de África. Mejorar nuestra relación con ese país
importantísimo que el la India y que está invirtiendo mucho y muy
bien en Uruguay.
Digo ‘mucho y muy bien’ porque no solo tenemos
volúmenes crecientes sino una calidad de inversión muy importante
como lo es la inversión en tecnología de la información. Lograr un
creciente canal de acuerdo comercial y de inversiones con China, la
gran economía del siglo XXI; son todos objetivos que nos estamos
proponiendo. El año que viene vamos a ir a China, en el marco de una
visita de Estado, precisamente a intentar dar un salto cualitativo
en nuestras relaciones con ese país; y hoy lo estamos haciendo con
los Estados Unidos procurando agregar al acuerdo de inversiones que
ya tenemos y que es muy importante el acceso comercial mejor que nos
está faltando.
Cuando digo ‘nos está faltando’ por supuesto no
desconozco que –repito- es nuestro principal cliente, hoy, en las
actuales condiciones; digo que ‘nos está faltando’ porque eso es
absolutamente mejorable, ampliamente mejorable, debe ser mejorado. Y
por eso, vamos a ingresar ahora en una fase decisiva de negociación,
que hasta ahora no ha comenzado, vamos a recibir a importantes
autoridades de la negociación comercial de los Estados Unidos, la
próxima semana, en este país; y yo confío que eso sea un elemento de
impulso importante para lograr agregar al acuerdo de inversiones más
y mejores accesos comerciales.
Entonces, yo creo que Uruguay va la lograr muy
buenos resultados desde este punto de vista soy muy optimista, no
solo en lo que estoy analizando respecto a Estados Unidos sino a los
otros destinos también; hay unas demostraciones, unas
manifestaciones de interés en distintos sectores de inversión en el
país, básicamente en la infraestructura también. Ni que hablar en el
complejo industrial forestal como ya lo veíamos antes que nos hace
pensar que Uruguay va a mejorar muchísimo su inserción fuera de la
región, y que esto le va a dar fuerza para ser más y mejor
considerado en la región.
Yo siento que Uruguay no ha sido correctamente
considerado en la región del MERCOSUR, que hay profundas asimetrías
no corregidas, la primera de las cuales –en el caso de nuestro país-
es nuestra propia escala interna. No hay asimetría más importante
que la de tener una pequeña escala interna, y esa asimetría se
corrige incrementando la realización del potencial nacional fuera
del país; fuera del país en la región y fuera del país fuera de la
región.
En esa estrategia estamos, que es una estrategia
amplia y diversificadora, con el augurio de obtener muy buenos
resultados.
PREGUNTA: Hay un par de preguntas vinculadas al
tema financiero, crédito y endeudamiento. El ingeniero Enrique
Valdez pregunta, ¿qué importancia le atribuye al Banco República en
el apalancamiento del país productivo? Si fuera importante, ¿no
considera que sería tiempo de terminar definitivamente con el viejo
problema del endeudamiento interno, en el sentido de sincerar la
situación y permitir que el Banco se libere de un pesado obstáculo
que lo inmoviliza y le impide el cabal cumplimiento de su función?
MINISTRO ASTORI: Estamos en eso, precisamente,
compartiendo totalmente el objetivo planteado en la pregunta,
estamos en eso. No hay dudas de que un elemento importante en el
fortalecimiento de nuestra principal institución crediticia
nacional, es una buena resolución del endeudamiento que existe en el
país, y cuando digo endeudamiento me refiero a todo el
endeudamiento, sabiendo que el Banco de la República es el principal
acreedor de todos los deudores del país, asumidos o sintetizados en
una sola suma. Una buena solución a este tema sin duda que es
fundamental para que el Banco se fortalezca.
El tema es qué es una buena solución para este
tema, nosotros hemos descartado la soluciones a las que apeló el
país en el pasado que no sólo no nos parecen una buena solución sino
que nos parecen una manera muy eficaz de debilitar a nuestra
principal institución financiera nacional. Por eso hemos creído la
necesidad de analizar cada caso en particular sin normas de carácter
general que traten de igual manera situaciones muy distintas, hemos
tratado de ayudar básicamente a las personas, a las instituciones, a
las empresas, a las explotaciones agropecuarias con expresión de
voluntad de pago y hemos tratado de dar nuestras principales ayudas,
ventajas a los más débiles, a las personas con no sólo voluntad de
pago sino con más escasa dimensión económica. Eso es lo que
contienen las pautas de mayo del año pasado en las que hemos venido
aplicando hasta ahora con buenos provechos, como lo indica la
información.
La aplicación de esa pauta siempre es mejorable,
es lo que estamos tratando de hacer permanentemente en un trabajo
codo a codo con el Banco de la República porque siempre se puede
aplicar mejor una pauta que se ha aprobado para orientar un
determinado trabajo, sobre todo cuando este trabajo nunca se realizó
antes en Uruguay con el criterio con que lo estamos encarando ahora
y mantenemos una actitud abierta en función de esos criterios.
Ahora, yo quiero decirles que el Banco de la
República está haciendo un esfuerzo notable para a su vez, salir al
encuentro de las necesidades de crédito en el país, y esto no es
fácil, no es fácil en un país que sufrió tanto desde el punto de
vista financiero y que lastimó tanto la confianza, ingrediente
fundamental especialmente ya no de una economía en su conjunto, sino
de un sistema financiero que intermedia entre ahorristas e
inversores, porque esa es la función del sistema financiero. La
confianza es la principal herramienta, si no hay confianza no hay
sistema financiero. Este país vio herida profundamente su grado de
confianza en nuestro sistema financiero, se pierde rapidísimo esta
confianza, se recupera muy lentamente, y en ese proceso de
recuperación de confianza vamos muy lentamente.
Hemos, por ejemplo, vuelto a tener instituciones
financieras que han recuperado un enorme volumen de depósitos, esa
recuperación de depósitos se ha traducido en mejoras patrimoniales,
indudablemente. Ha disminuido el grado de morosidad notablemente
también, pero por ejemplo los uruguayos no se animan todavía a
depositar a plazo, casi todos los recursos que recibe el sistema
bancario y particularmente el Banco de la República, en un país que
ya tiene un débil mercado de capitales, como veíamos antes, son
depósitos a corto plazo, depósitos a la vista.
Entonces, en esas condiciones es muy difícil
prestar a mediano y a largo plazo; yo diría que imposible, porque
precisamente este descalce entre los tiempos de la captación de
recursos y entre la asignación de recursos a la producción puede ser
un síntoma de quiebra del sistema, puede ser un vehículo de quiebra
del sistema que el país ya vivió en el pasado junto al descalce de
mondas.
Entonces, esto va muy lento, pero el Banco de la
República no se ha sentado a esperar que se resuelva este tema de la
confianza, que depositemos a mayor plazo, que él capte recursos como
para poder prestar en el financiamiento de la inversión ha salido al
cruce de este problema y está licitando -herramienta inédita en la
historia del país- proyectos de inversión que el otro día
presentamos públicamente junto al Presidente del Banco de la
República y que ya está significando volcar recursos por veinticinco
millones de dólares y anunciar otros cien millones de dólares que
vendrán en un corto lapso.
Esos proyectos que han sido licitados, que van a
ser hoy apoyados financieramente por el Banco de la República,
recorren todo el espectro de las actividades productivas nacionales,
empezando por la agroindustria que, estoy seguro, es un ámbito de
preocupación en este auditorio. O sea, el Banco está haciendo
esfuerzos para salir al encuentro de las necesidades de crédito del
país; modestamente, como lo permite ese lento proceso de
recuperación de confianza. Por eso, decíamos el otro día, que la
economía que está marchando bien nos va a ayudar a acelerar ese
proceso de recuperación de confianza y ese es un factor objetivo
fundamental, pero que también hay factores subjetivos: nosotros
tenemos que cuidar al Banco, tenemos la obligación de cuidar al
Banco.
Cuidarlo en el terreno de las expectativas, de
nuestras opiniones sobre él, cuidarlo en el sentido de destacar las
cosas positivas que hace como ésta que yo acabo de analizar, porque
la economía uruguaya no puede vivir sin el Banco de la República. Es
una herramienta demasiado importante, decisiva, imprescindible en el
desarrollo productivo y social del país, entonces, cuidémoslo.
Cuidémoslo, sepamos que está trabajando en el buen sentido, en el
sentido de fortalecerse a sí mismo porque el Banco es consciente del
papel que tiene que cumplir en la asistencia financiera a la
producción, herramienta fundamental para estimular la inversión y el
crecimiento.
PREGUNTA: ¿Cómo se compagina el apoyo y aporte al
crecimiento con el destino del ahorro nuestro, colocado en el
exterior a bajas tasas de interés, muy menores a la que otorga las
entidades en la refinanciación de deudas? ¿Por qué no se coloca en
forma de crédito accesible al país?
MINISTRO ASTORI: Bueno, aunque no está dicho en
la pregunta, parto de la base que esto refiere a la constitución de
reservas y fondos del Banco de la República en el exterior. Quiero
señalarles que esto es producto precisamente de la inexistencia de
condiciones de colocación de esos fondos en el país, precisamente a
través de la modalidad de crédito. El Banco de la República no
constituye reservas en el exterior por gusto, las constituye porque
no ha encontrado desde un punto de vista bancario serio otro destino
que cuide mejor el ahorro nacional –como está dicho en la pregunta-
que no sea la alternativa por la que ha optado. El Banco sabe que
tiene una captación de recursos en mondas y plazos que tienen
determinadas características, en función de eso, conoce sus
posibilidades de colocar esos recursos en el crédito o la asistencia
financiera a la producción nacional. Yo no puedo financiar, como
banquero, proyectos de inversión a cinco, ocho, diez años de plazo
con depósitos a la vista; no se puede hacer, no se debe hacer porque
eso significa tirar por la borda el ahorro nacional mencionado en la
pregunta, y ese crimen no lo podemos cometer.
Lo primero que tenemos que hacer es cuidar el
ahorro nacional, son los recursos de toda la sociedad. Y cuidar el
ahorro nacional hoy nos exige tener dinero que no podemos volcar al
crédito por razones que acabo de anotar, bueno, tenemos dos
opciones: o tenerlo ocioso en el país, a cero interés, lo cual es
una manera de triturar el ahorro nacional, también, o buscar alguna
alternativa de colocación. Ese es el razonamiento que está en la
base de esta situación a la que alude la pregunta sin nombrar al
Banco, pero obviamente esta aludiendo al Banco de la Republica.
PERIODISTA: Ministro, un par de preguntas
vinculadas al tema de la tierra. Siendo tan importante para el
desarrollo nacional el impulso a la inversión, y si consideramos que
el agro ha sido un gran factor de atracción –es una pregunta de
Fernando Mattos, presidente de ARU- cómo se justifica iniciativas
desestimulantes como la ley que impide la tenencia de tierras y/o
explotación agropecuaria por parte de sociedades anónimas con
acciones al portador, licitan el país pero ahora representando una
fuerte discriminación para el sector.
MINISTRO ASTORI: Bueno, yo creo que el sector
también tiene algunos factores de diferenciación respecto a otros de
la economía. Estoy de acuerdo en que la ley que exige nominatividad
en el agro no está referida a otros sectores de la economía, donde
no se exige esta nominatividad, pero también sepamos ver que la
propiedad y la tenencia de la tierra tiene un factor diferenciador
respeto a la propiedad y tenencia respecto a otro tipo de recursos o
activos en el resto de la economía. Y es esa relación especial, con
un bien como la tierra, que da paso a resultados concretos para el
productor que la posee o la arrienda y la exporta, también es un
activo fundamental desde el punto de vista del patrimonio nacional.
Esto es lo que, seguramente, alienta en los fundamentos de un
proyecto que propone conocer quienes son los titulares de ese activo
tan especial y tan particular que es la tierra, diferente a los
demás.
PREGUNTA: La pregunta viene de la Cámara
de Exportadores de Citrus, Gonzalo Arocena, y también tiene que ver
con la tierra, en definitiva. Pregunta: el 7 y medio por ciento de
aporte patronal rural al BPS planteado en la Reforma Tributaria
¿cuál sería la posición del Ministerio en relación a que el mismo se
implemente mediante el incremento de ficto por hectárea?
MINISTRO ASTORI: No he comprendido la pregunta.
¿Me la puede repetir, por favor?
PERIODISTA: Sí, sí en definitiva se va a aplicar
el aporte patronal del BPS apuntando al ficto por hectárea en el uso
de la tierra o se va a establecer otro criterio.
MINISTRO ASTORI: Debo dar la misma respuesta que
di cuando se preguntó acerca de la opción entre Impuesto a la Renta,
impuesto a la enajenación de bienes agropecuarios, porque ese es un
aspecto típico de la reglamentación. Lo tendremos a estudio, y
también sobre este punto digo que estamos abiertos a considerar
propuestas. También acá se aplica aquello de que un solo elemento de
juicio para definir el funcionamiento del esquema no es aconsejable.
Quizá tengamos que recurrir a un conjunto de ellos, de modo de tener
una reglamentación lo más equitativa posible, y que obviamente tenga
en cuenta la capacidad de pago de los productores.
PREGUNTA: Ministro, la economista Susana
Guarnerio del Ministerio de Ganadería pregunta si cree que habrá
espacio con la actual Rendición de Cuentas para que se apliquen
otras políticas sectoriales, además de las que usted mencionaba en
cuanto a las formas estructurales. Otras políticas sectoriales que
estimulen el desarrollo productivo.
MINISTRO ASTORI: Bueno, yo creo que ya la
Rendición de Cuentas está apuntando a importantes estímulos
sectoriales. La propia inversión en infraestructura -Puerto,
telecomunicaciones, ferrocarriles, transportes- está alentando
expansiones de actividades sectoriales importantes. Pero a su vez,
esas mismas inversiones que el país está alentando, precisamente
abren posibilidades de ser utilizadas al servicio focalizado de
actividades muy referidas sectorialmente en el país.
Si a ello agregamos que en la propia Rendición de
Cuentas se está proponiendo que el Poder Ejecutivo pueda utilizar
recursos presupuéstales que se obtengan como consecuencia de la
revisión de la herramienta de la devolución de impuestos indirectos,
con destino al estímulo focalizado de actividades productivas,
entonces vemos que también desde este punto de vista el espacio
fiscal que se ha abierto con la Rendición de Cuentas puede tener una
expresión sectorial importante.
Pero más halla de la Rendición de Cuentas,
nosotros estamos trabajando en el marco del compromiso nacional con
un proyecto de Uruguay Productivo que tiene una fuerte expresión
sectorial.
Así que, yo contestaría afirmativamente; diría,
que a partir de estas decisiones contenidas en la Rendición de
Cuentas, en el proyecto Uruguay Productivo presentado en Compromiso
Nacional, se está fortaleciendo las posibilidades que tiene el país
de practicar políticas sectoriales.
PREGUNTA: Una pregunta que nos vuelve a llevar al
Banco República es de José María Nin, Presidente de COPAGRAN. El
Banco República no está otorgando crédito a muy buenos negocios
vinculados a la exportación, a empresas que con gran esfuerzo han
reestructurado pasivos con ese Banco; y esto por una categorización
que obliga a elevados encajes. ¿Hay algo previsto para modificar
esto? El no contar con crédito del Banco para negocios de
exportación obliga a tomar créditos más caros que les desquita
competitividad y el Banco se pierde un buen negocio.
MINISTRO ASTORI: Sí; comparto la inquietud, veo
el problema. Es un tema analizar, no puedo hacer anuncios al
respecto pero es un tema que preocupa al Ministerio y que
permanentemente estamos analizando. Ya lo hemos hecho, ya hemos
comenzado a hacerlo en espacios de trabajo conjunto con el Banco
Central y el Banco de la República Oriental del Uruguay. Pero quiero
decirles que comparto la inquietud.
Ahora también quiero agregar que hay un régimen
de prefinanciación de exportaciones, practicado por el BROU y el
BCU, que no sé si alcanza a quien ha formulado la pregunta y no
pretendo ingresar en las razones de por qué alcanza o por qué no
alcanza, que es extraordinariamente favorable y que termina en una
tasa de interés de 2% en moneda extranjera, ¿verdad?
Así que, desde el punto de vista planteado en la
pregunta, comparto la inquietud. Es un tema que está en análisis
para mejorar, por supuesto. Desde el segundo punto de vista quiero
decirles que el régimen de prefinanciación de exportaciones en este
momento tiene facilidades desde el punto de vista del costo de los
intereses, que nunca habían existido en el país hasta ahora.
PREGUNTA: Ministro, una pregunta que vuelve un
poco hacia el comienzo de la administración; Robert Amaro,
comerciante, pregunta: ¿Cómo se debe interpretar sus palabras "nos
fue muy bien en la negociación con organismos internacionales",
cuando se nos impone un superávit primario que Uruguay nunca había
alcanzado, lo que limita el proyecto de Uruguay Productivo? ¿No le
parece que hubo apresuramiento en la firma del acuerdo, cuando se
podría haber negociado de mejor manera?
MINISTRO ASTORI: No, no me parece. No me parece
porque Uruguay tuvo un excelente resultado dado su nivel de
endeudamiento, uno de los mas altos del mundo. Yo quiero señalarles
que Uruguay nunca tuvo que tener estas metas de superávit primario y
yo les pido a ustedes que no se olviden que Uruguay nunca tuvo la
deuda que tiene ahora.
Así que, no comparto la pregunta o la orientación
contenida en la pregunta y quiero decirles que el acuerdo logrado
con el Fondo es excelente para Uruguay. Excelente por muchas
razones. Primera razón, Uruguay no fue a preguntarle al Fondo que
teníamos que hacer, que teníamos que cumplir? Uruguay fue al Fondo y
les dijo este es nuestro programa de gobierno, el Fondo lo analizó y
nos dijo "está muy bien, es el programa de ustedes". El Fondo no les
va a hacer su Programa de Gobierno. Ahora practicar este Programa de
Gobierno con la deuda que ustedes tienen con nosotros tenemos que
tener este resultado fiscal que obviamente el Fondo planteó en
términos muchos más exigentes de lo que hemos logrado.
Entonces, desde este primer punto de vista,
nosotros decimos que nos fue muy bien. El programa que Uruguay tiene
con el Fondo es el programa del Gobierno uruguayo, no el programa
del Fondo Monetario Internacional. En segundo lugar, nos fue muy
bien por la relación entre desembolso y obligaciones a pagar, porque
obtuvimos una relación de sesenta por ciento y cuarenta por ciento,
que no es común en países tan endeudados como el Uruguay, vuelvo a
repetir.
Así que, estos son los dos principales motivos
por los que yo diría que Uruguay logró un excelente acuerdo con el
Fondo Monetario que –por suerte- estamos cumpliendo bien, al tiempo
que reducimos nuestra dependencia del Fondo porque hoy en día
nuestra exposición al crédito del Fondo -no satisfecha, no cumplida
hasta ahora- se ha ubicado después del último anticipo que hemos
dispuesto la semana pasada en mil millones de dólares. Nosotros
partimos de una deuda con el Fondo de aproximadamente dos mil
quinientos millones; hoy tenemos mil y naturalmente cuanto menos
deuda con el Fondo, menos dependencia con el Fondo tendremos; y
seguramente Uruguay, más temprano que tarde, superará este
condicionamiento.
PREGUNTA: ¿Hasta qué nivel de proactividad de
políticas se promoverán las micro, pequeñas y medianas empresas para
su crecimiento y desarrollo mirando al mercado externo? ¿Se puede
crear pronto un instituto como ProChile?
MINISTRO ASTORI: ¿Me puede repetir la pregunta?
PERIODISTA: ¿Hasta qué nivel de proactividad de
políticas se promoverán las micro, pequeñas y medianas empresas,
vinculadas al desarrollo de ventas al exterior?
MINSITRO ASTORI: Es muy difícil decir a priori
cual es el nivel de proactividad, pero a nosotros nos parece que
especialmente en este campo de la micro, pequeña y mediana empresa
hay que ser especialmente proactivos, estimulando la asociatividad,
por ejemplo, lo que refuerza la tarea de obtener buenos resultados
en este campo tan importante de la actividad económica nacional,
pero al mismo tiempo, poniendo al servicio de este ámbito
instrumentos que ataquen directamente sus carencias.
Yo hoy les mencionaba el acceso al crédito,
proyecto de la Corporación Nacional para el Desarrollo que estamos
considerando para actuar con mucha proactividad en esta materia.
Puedo decirles también que se ha venido trabajando mucho en materia
de constitución de fondos de garantía, en particular; otra carencia
importante de micro, pequeñas y medianas empresas.
Y que este Comité Interministerial de
conducción de la inserción económica internacional va a prestar
especial importancia a las necesidades de las empresas de menor
dimensión; así que me pareció que después de mencionaba al instituto
ProChile, ¿es verdad?
Yo creo que ese es un muy buen modelo, un muy
buen ejemplo para ir mejorando en nuestro país al respecto. Nosotros
tenemos Uruguay XXI. Quiero decirles que este Comité
Interministerial está empujando la renovación de Uruguay XXI para
que Uruguay XXI sea realmente una herramienta, un instrumento de
proyección, tomando en cuenta el importante esfuerzo del sector
privado en la materia del país en el exterior, en materia de
inversiones y de comercio. Y obviamente quiero comprometer la
opinión y la acción de una consideración especial hacia las micro,
pequeñas y medianas empresas.
PREGUNTA: ¿A qué proyectos estarán destinados los
recursos incrementales previstos de inversión pública en los
próximos años? ¿Existe un plan director dónde se inscriben los
mismos?
MINISTRO ASTORI: Bueno, existe una orientación
general que es la que yo intenté transmitir en la presentación y que
se vincula, por supuesto, en las prioridades ya definidas al
formular el Presupuesto Quincenal.
Nosotros tenemos cuatro prioridades, sobre las
que hoy no puse mucho énfasis en el sentido de prioridad
presupuestal porque la presentación estaba orientada
fundamentalmente desde otra perspectiva, pero son: la salud, la
educación, la infraestructura y la seguridad pública. En esos cuatro
destinos hay precisamente un componente de inversión importante –en
los cuatro destinos-. Pero al mismo tiempo, destaco que en
infraestructura estamos haciendo el mayor esfuerzo de todos, porque
sabemos que la infraestructura –vuelvo a repetir: transporte,
comunicaciones, servicios portuarios- es absolutamente fundamental
para sostener el escenario de atracción al inversor privado
–nacional o del exterior. Entonces, concretamente diría que van
dirigidos hacia esos proyectos que mencioné. Ejemplos concretos,
como el dragado del Puerto de Montevideo, la modernización del
ferrocarril, la fibra óptica de ANTEL, hasta incluso en el
Ministerio de Defensa Nacional, la inversión en los radares para
mejorar nuestras posibilidades de vigilancia en el territorio
nacional, que por motivos que ustedes comprenderán, son ejemplos de
destinos específicos de la inversión que estamos previendo. Sin
olvidar la mejora vial importantísima que estamos previendo, de
parte del Ministerio de Transporte y Obras Públicas y la Corporación
Vial. Estamos volcando, si no me acuerdo mal, unos 40 millones de
dólares al servicio de este objetivo.
PREGUNTA: Bien, Ministro, una pregunta con
alguna crítica al enfoque, pero me parece importante presentarla
como pregunta final. El contador Diego Costa, de Paysandú. ¿No
existe una confusión entre inversión y crecimiento con desarrollo y
empleo? El producto aumentó, las exportaciones, también; pero el
empleo es obvio que no. La inversión por sí sola sin políticas de
Estado activas no aseguran el desarrollo ni la eliminación de la
pobreza.
MINISTRO ASTORI: Comienzo por el final. Estoy
totalmente de acuerdo, sin políticas activas no habrá mejoramiento
económico y social del país. Es precisamente lo que estamos tratando
de hacer. No sé si comuniqué con claridad que habíamos logrado la
tasa de empleo más alta de los últimos 20 años. Se ve que no, pero
aprovecho la oportunidad que me brinda esta pregunta para decir que
tenemos la mayor tasa de empleo de los últimos 20 años, y la menor
tasa de desempleo de los últimos 10. Así que no comparto la
apreciación hecha en la primera parte de la pregunta. Este es el
camino que tenemos que seguir para afirmar como se debe –como lo
espera el pueblo uruguayo- las condiciones de crecimiento, de empleo
desde el punto de vista cuantitativo y cualitativo. Y permítanme, ya
que este es el final, que reitere algo que es muy importante, hay
una sola política económica, que tiene un objetivo fundamental:
mejorar la calidad de vida de los uruguayos. Y que al servicio de
ese objetivo pone todas las herramientas que es capaz de usar en
todos los terrenos –en el terreno financiero, en el terreno de los
compromisos con los organismos multilaterales, en el terreno de la
estabilidad, en el terreno del apoyo a las actividades productivas-.
Todo conforma un solo esquema de conducción que este Gobierno estima
es el que el país necesita, y el que va a permitir lograr la
finalidad que todos compartimos, que es precisamente ese: vivir cada
vez mejor. Y sobre todo, darles oportunidades equitativas de
realización en la vida a los más pobres, a los más humildes,
especialmente cuando recordamos que los más humildes, los más
pobres, están presentes en esa niñez del Uruguay que está alumbrando
a su camino en la vida y a la que tenemos la obligación de
asegurarle un sendero sólido de realización humana. Muchas gracias.
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Presentación |