Turismo y Deporte
Lescano manifestó que existe voluntad
política para pasar a constituir dos ministerios
Turismo y Deporte, en nuestro
país aparecen unidos por diferentes vínculos. Aún así, la
importancia de ambas actividades justifican su máxima
institucionalidad. El Ministro Lescano manifestó la
voluntad política de separar ambas Carteras. Explicó que
esa dimensión institucional se resolverá tras el envío al
Parlamento en 2011, de un proyecto para la aprobación de
una Ley Nacional de Turismo y de una Ley Nacional de
Deporte
El Ministro de Turismo y Deporte, Héctor
Lescano se refirió en conferencia de prensa a la
conveniencia de separar los Ministerios de Turismo y de
Deporte, tema analizado en la interna ministerial.
Los eventos deportivos más importantes
del mundo en los años 2014 y 2016 en Brasil (Mundial de
Fútbol y Juegos Olímpicos) son coincidentemente los dos
eventos turísticos más destacados y para los que Uruguay se
debe preparar, pero el desarrollo de cada actividad por si
misma, justifica la máxima institucionalidad posible.
El Jerarca aclaró que el diseño
institucional no es el tema fundamental; sí lo son las
políticas, los impulsos, la voluntad política que se tenga
desde el Gobierno y todos los sectores para comprender la
centralidad de ambas actividades y la importancia del
desarrollo de programas y políticas turísticas y
deportivas.
Explicó que comprometió el envío al
Parlamento de un proyecto para elaborar una Ley Nacional de
Turismo y una Ley Nacional de Deportes, pero sin urgencia.
Hoy se cuenta con los instrumentos necesarios para llevar
adelante las políticas, en algunos casos aplicando cosas
que por alguna razón no se emplean en todas su dimensión,
argumentó.
Lescano dijo que aspiran a que esas
Leyes se aprueben por la unanimidad del Parlamento
Nacional. Además de necesario y conveniente se cree que es
posible, teniendo en cuenta que existe un camino recorrido,
de construcción de amplios compromisos tanto en turismo
como en deporte.
Anunció que a mitad del año legislativo
de 2011 se procederá a enviar al Parlamento los citados
proyectos de ley, previo paso por un camino de consultas y
consenso.
Las Leyes nacionales no pueden dejar de
considerar la dimensión institucional, por lo que será la
hora de las decisiones políticas a partir de ese momento,
añadió.
Existen muchos aportes para esas Leyes,
por lo que se está recorriendo el país junto a la Cámara
Uruguaya de Turismo, quien expone sus ideas. Lescano
sostuvo que existe una concordancia prácticamente en el
100% de ellas.
El ámbito más adecuado será concentrar
todos los avances en la Comisión de Legislación del Consejo
Nacional de Turismo, un organismo que no es burocrático ni
está consolidado, cuyo proyecto para la institucionalidad
está en el Parlamento para que surja con el vigor de una
norma de carácter legal.
Es allí el ámbito donde técnicos
públicos y privados, y la gente con la experiencia
concreta de todas las actividades podrán trabajar en la
elaboración del anteproyecto de ley.
Esto se planteó en el Consejo de
Ministros, y el Presidente Mujica está informado del
proceso, indicó.
El fortalecimiento institucional supone,
en primera instancia, superar la debilidad existente en
materia de recursos humanos debidamente formados (en
cantidad y calidad). Es decir que no se cuenta con el
personal preparado. Uruguay debe hacer un gran esfuerzo en
ese sentido, ya que es una debilidad del país.
En este Presupuesto se incluyen algunos
contratos pero son insuficientes.
En el marco del Proyecto BID se procura
superar en parte esta debilidad contando con un grupo de 12
personas de alta calificación técnica. Este equipo viene
trabajando con profesionalismo y nivel técnico, coordinado
por Álvaro López quien integra el equipo ministerial.
Asimismo, sostuvo que existen
instrumentos para capacitar a jóvenes y si es posible del
interior. Citó como ejemplo los y las guías de turismo,
apostando al abordaje de la equidad de género, enmarcado en
los compromisos políticos solemnes que procuran cumplir a
nivel ministerial en el marco de las políticas generales
públicas.
Citó como ejemplos del accionar
público-privado: la capacitación de guías para los cruceros
en Punta del Este, los convenios con distintas entidades de
la enseñanza pública y privada para establecer la
calificación, el nivel técnico-universitario que pasa el
nivel de Licenciatura, existen Maestrías y el Bachillerato
de UTU en todo el país, la formación idiomática y la
capacitación a Policía Turística y Caminera, entre otras
alternativas.
Asimismo, informó que se vive una
verdadera eclosión en algunas áreas como la gastronomía,
cada vez más vinculada al turismo y reconocida como
expresión cultural y como seña de identidad. En ese sentido
existe una línea de formación profesional de mucha gente.
Aún resta mucho por hacer, por ello se
pondrá énfasis en las tareas de capacitación y se insistirá
en que al visualizar las promisorias cifras manejadas en el
sector turístico, se requerirán mayores esfuerzos en
materia de contratación, renovación de cuadros en términos
etarios y fundamentalmente en la formación. El sector
público no solo debe acompañar sino liderar esta revolución
de la oferta.