Mensaje del
                     
                     Presidente Tabaré Vázquez a la 
                     ciudadanía al cumplirse 4 años de la gestión de Gobierno
                     18 de 
                     Julio y Paraguay
                     7 de marzo, 2009
                         Queridas uruguayas, queridos 
                         uruguayos. Se que se ha transformado en un lugar común, 
                         comenzar una vez más esta presentación ante ustedes con 
                         las mismas palabras y primero es lo primero; lo primero 
                         es agradecer la presencia de todos ustedes, de quienes 
                         están viendo del otro lado de la pantalla de 
                         televisión, escuchando por radio o por Internet este 
                         acto.  
                         Ciudadanos de todos los partidos 
                         políticos. ¿Quién lo puede negar? Ciudadanos de todos 
                         los partidos políticos, decenas, centenas de miles, 
                         siguiendo por todos estos medios, sin duda, este acto 
                         de Gobierno. Que no le quepa a nadie la menor duda, 
                         este es un acto político, del Gobierno Nacional, del 
                         Presidente, de todos los uruguayos, para todos los 
                         uruguayos. Y que nadie se confunda, no es un acto 
                         partidario. Es un acto de todos los uruguayos. De todos 
                         los uruguayos, de cualquier condición socioeconómica, 
                         cultural, de cualquier pensamiento religioso, de 
                         cualquier creencia filosófica. Es un acto que intenta 
                         rescatar aún más ese camino de profundizar, de ahondar, 
                         de ensanchar la democracia en el Uruguay.  
                         Y que a nadie se le ocurra preguntar 
                         cuánto cuesta, cuál es el costo de este acto. Este acto 
                         no tiene costo, no es un gasto, esto es una inversión y 
                         lo que se invierte en profundizar la democracia -desde 
                         mi muy modesto punto de vista- muy bien invertido está.
                          
                         El 17 de febrero de este año 
                         remitimos, como corresponde, al Parlamento Nacional, el 
                         informe de la Rendición de Cuentas, del balance 
                         presupuestal del año 2008. Y al otro día esa 
                         información fue colgada en página web de Presidencia. 
                         Seguramente ahí muchos ciudadanos han tenido 
                         oportunidad de enterarse de lo que este Gobierno -el 
                         Gobierno de todos los uruguayos- ha hecho en el correr 
                         del año 2008. Pero seguramente muchos de ustedes no lo 
                         habrán podido hacer o no tuvieron tiempo para hacerlo. 
                         Lo que sí tienen, todos los ciudadanos, es el derecho a 
                         saber lo que el Gobierno ha hecho. Por eso estamos acá. 
                         Para cumplir con nuestra obligación. Para cumplir con 
                         nuestro deber de informar y de hacerlo así, cara a 
                         cara, a la población de lo que hemos hecho. Pero 
                         también, para rescatar nuestro derecho como gobernantes 
                         a informar y decir lo que hemos hecho a lo largo de 
                         estos cuatro años de gestión de este Gobierno Nacional.
                          
                         Y cuando digo “lo que hemos hecho”, 
                         lo digo porque lo que se hizo no es sólo trabajo de una 
                         persona, o de dos personas, o de tres personas. Es 
                         trabajo de un equipo, de un equipo que comenzamos a 
                         formar al otro día de haber ganado las elecciones en 
                         octubre de 2004. Y fueron muchos ministros, 
                         subsecretarios, directores de secretaría de los 
                         distintos ministerios, asesores, presidentes de 
                         comisiones y miles y miles de ciudadanos que trabajaron 
                         fuerte para llevar adelante el Programa de Gobierno que 
                         había elegido la población, que habían elegido los 
                         uruguayos. Es imposible nombrar a todos y a cada uno de 
                         ellos. Pero quisiera sí, hoy, en las personas que voy a 
                         nombrar, explicitar mi reconocimiento a todos esos 
                         ciudadanos, tantos y tantos que han trabajado para 
                         lograr lo que se ha logrado en estos cuatro años. Y lo 
                         voy a hacer en las personas de quienes estuvieron 
                         ocupando cargos en los ministerios. Quienes ocuparon 
                         cargos y que hoy están realizando otras tareas, que 
                         prestaron una impresionante y valiosa colaboración para 
                         el desarrollo del programa de gobierno. Y me refiero al 
                         Senador Mariano Arana, me refiero al Senador Danilo 
                         Astori, me refiero a la hoy Presidenta del SODRE, 
                         Doctora Azucena Berruti, nombro al Ingeniero Jorge 
                         Brovetto, al Doctor José Díaz, al Senador Reinaldo 
                         Gargano, al Embajador Jorge Lepra, al Senador José 
                         Mujica; y quiero también reconocer a quienes me han 
                         acompañado desde el principio de esta gestión, me 
                         refiero a la Ministra Marina Arismendi, al Ministro 
                         Eduardo Bonomi, al Ministro Héctor Lescano, a la 
                         Ministra María Julia Muñoz, que está en la India 
                         recibiendo un premio internacional por el tema del 
                         tabaco y al Ministro Víctor Rossi. 
                         A quienes hoy nos están acompañando, 
                         ocupando cargos en estos Ministerios. Al Ministro 
                         Ernesto Agazzi, al Ministro José Bayardi, al Ministro 
                         Carlos Colacce, al Ministro Álvaro García, al Ministro 
                         Daniel Martínez, a la Ministra María Simon, a la 
                         Ministra Daisy Tourné, a quien me acompañara desde el 
                         principio como Secretario de la Presidencia y hoy 
                         Canciller, Doctor Gonzalo Fernández, a quien ocupara la 
                         Dirección de la Oficina de Servicio Civil y hoy la 
                         Secretaría de Presidencia, el Doctor Miguel Toma, al 
                         Licenciado Prosecretario, Jorge Vázquez, que me 
                         acompañó desde el principio de la gestión, al ex 
                         Director de la OPP, Carlos Viera, y al actual Director, 
                         Profesor Enrique Rubio. 
                         Y una mención muy especial a quien 
                         fuera mi compañero de todos los tiempos, cuando 
                         comenzamos, hace más de quince años las campañas 
                         electorales. A quien fue leal, a quien fue un compañero 
                         cabal, al que supo representar al país cuando lo tuvo 
                         que representar y al que cuando tuvimos que dejar el 
                         país para que él ocupara la Presidencia, lo hizo con 
                         hidalguía, lo hizo con entereza, lo hizo con capacidad, 
                         lo hizo con firmeza y con compromiso político: Rodolfo 
                         Nin Novoa. 
                         Y acá estamos, uruguayas y 
                         uruguayos. Acá estamos. Acá estamos en términos de 
                         presencia de ciudadanía, de equipo de Gobierno, de 
                         Consejo de Ministros, de Presidente de la República. 
                         Acá estamos en términos de dar la cara, de asumir 
                         responsabilidades. Sin reproches, pero sin excusas.  
                         Pero también acá estamos en términos 
                         de avance del cumplimiento de los compromisos de 
                         Gobierno y en términos de progreso como sociedad y como 
                         país, en el cumplimiento de los compromisos de Gobierno 
                         y en términos de progreso como sociedad y como país 
                         Tuvieron suerte, les tocó gobernar 
                         en un contexto internacional económicamente favorable, 
                         han dicho, dicen y piensan algunos. Yo digo que pensar 
                         es buena costumbre, además es bien saludable. Y es 
                         verdad, hasta mediados del año 2008 hubo un contexto 
                         internacional económicamente favorable, tuvimos suerte, 
                         pero a la suerte hay que ayudarla. No fuimos, este 
                         Gobierno no fue, los únicos y primeros tocados por esa 
                         suerte, pero ustedes lo saben, aprovechamos el período 
                         de bonanza para reducir las brutales vulnerabilidades 
                         que presentaba el país al comenzar nuestra gestión. No 
                         perdimos el tiempo, ni perdimos las oportunidades. Y lo 
                         vemos en los siguientes capítulos. En lo financiero, la 
                         administración prolija y profesional de la deuda 
                         pública permitió recuperar la liquidez y la confianza 
                         avanzando en el cumplimiento de un conjunto de 
                         objetivos básicos entre los que mencionaré 
                         Uno, reducción del peso de la deuda 
                         externa con relación al producto bruto interno, esa 
                         relación era extremadamente alta. Reducirla era una 
                         condición fundamental para la sustentabilidad de las 
                         cuentas públicas. La relación deuda pública neta, 
                         producto bruto interno, se redujo a menos de la mitad, 
                         pasando del 69% a fines de 2004, al 31% en el tercer 
                         trimestre de 2008, último dato disponible. 
                         En segundo lugar, hubo en 
                         reperfilamiento de la estructura de los vencimientos de 
                         esa deuda, superando el ahogo financiero que heredamos, 
                         las necesidades de financiamiento del Gobierno central, 
                         que debimos enfrentar en los primeros meses de gestión, 
                         equivalían al 23% del producto, lo que resultaba 
                         absolutamente impagable.  
                         Esta situación que heredamos 
                         contrasta con la que se observa en la actualidad y la 
                         que recibirá el próximo Gobierno Nacional. En este 
                         momento las necesidades de financiamiento para los años 
                         2009 y 2010 se ubican en tan solo el 6% del Producto 
                         Bruto Interno y el año 2009 y gran parte del año 2010 
                         ya están financiados.  
                         Tercer elemento en el terreno 
                         financiero, disminución del peso de la deuda con 
                         condicionamiento. Esa deuda que teníamos con los 
                         organismos financieros internacionales y que nos 
                         condicionaban fuertemente y aumentamos, incrementamos 
                         la deuda soberana, sin condicionamiento, deuda que 
                         maneja nuestro país, que manejará este y el próximo 
                         Gobierno, sin condicionamiento más que lo que fijó el 
                         propio país. Terminamos con los acuerdos con el Fondo 
                         Monetario Internacional y se redujeron sustancialmente 
                         las obligaciones con los otros organismos 
                         multilaterales de crédito, sustituyendo deuda 
                         condicionada que teníamos de corto plazo, por deuda 
                         soberana de largo plazo, reduciendo el costo del 
                         endeudamiento que era muy caro, por tratarse de una 
                         deuda que el Gobierno anterior adquirió de emergencia 
                         durante la crisis del año 2002.    
                           
                         En cuarto lugar, hubo 
                         desdolarización de la economía tal cual lo planteábamos 
                         en la campaña electoral anterior. Incrementando el 
                         endeudamiento en moneda nacional, ese endeudamiento en 
                         moneda nacional era sólo del 10% en el año 2004. Hoy la 
                         deuda externa uruguaya, en plata uruguaya, es el 30%. 
                         En quinto lugar, trabajamos para mantener elevados 
                         niveles de liquidez internacional. Los activos de 
                         reserva que hoy tiene el país más que se duplicaron en 
                         nuestro período de gobierno, pasando de 2.500 millones 
                         de dólares a fines de 2004 a 6.300 millones de dólares 
                         a fines de 2008. Esto sin duda, sin duda, constituye en 
                         un reaseguro esencial para poder enfrentar en mejores 
                         condiciones la actual crisis internacional. Si eso pasó 
                         en materia financiera cómo trabajamos en materia 
                         fiscal. En esta materia, se avanzó notablemente en la 
                         recomposición del gasto público priorizando los gastos 
                         y las inversiones estratégicas y generando incentivos 
                         tributarios a la inversión, todo ello en un marco de 
                         responsabilidad fiscal. Por primera vez, se aprobó una 
                         Ley de Presupuesto Nacional consistente con un programa 
                         financiero responsable y con prioridades bien 
                         definidas. Primero definimos lo que queríamos hacer y 
                         luego elaboramos el Presupuesto. Y lo que queríamos 
                         hacer era, en primer lugar, atender la emergencia 
                         nacional y nadie pudo tocar que lleváramos adelante un 
                         Plan de Emergencia Nacional. Pero definimos como 
                         prioridades no el manejo correcto de los elementos 
                         integrantes de la macro-economía que había que 
                         manejarlos bien, no había otra posibilidad, había que 
                         manejarlos adecuadamente, ese era un objetivo, pero no 
                         el central. El objetivo central lo fijamos diciendo: 
                         para este gobierno son prioridades la educación, la 
                         salud, las políticas sociales, las obras de 
                         infraestructura, la seguridad pública y el sistema 
                         judicial. Esto es lo fundamental. Las otras son 
                         herramientas. A su vez, se garantizó que durante este 
                         período de gobierno se recuperaría la pérdida salarial 
                         que habían sufrido anteriormente los funcionarios 
                         públicos. Y en cumplimiento de los compromisos 
                         programáticos de Gobierno que a partir de octubre de 
                         2004 pasó a ser un mandato de la soberanía al Gobierno, 
                         se realizaron reformas de la institucionalidad fiscal y 
                         presupuestal entre las que se destacan las siguientes: 
                         1º Reforma de los organismos recaudadores, en 
                         particular de la Dirección General de Impositiva, Banco 
                         de Previsión Social y la Dirección Nacional de Aduanas, 
                         para hacerlas más eficientes, más eficaces, más 
                         transparentes.  
                         2º Presupuesto diseñado para 
                         estimular la mejora en la gestión pública. Que  hay 
                         mucho por hacer todavía, uruguayas y uruguayos. Pero 
                         que mucho se ha hecho. Y optimizar entonces el uso de 
                         los recursos económicos y de los recursos humanos.  
                         3º Creación de una oficina de 
                         administración de la deuda pública cuyos resultados 
                         trabajados profesionalmente y muy eficientemente ya 
                         comentamos.  
                         4º Reforma Tributaria sobre 
                         criterios de justicia, eficiencia, y estímulo a la 
                         inversión productiva, lo que está permitiendo avanzar 
                         hacia objetivos de mayor equidad en la estructura 
                         impositiva, mayor eficiencia del esquema impositivo y 
                         contribución al Uruguay Productivo. 
                         Tenemos que mejorar todavía la 
                         distribución de la riqueza, pero no somos magos. Somos 
                         humanos, tenemos limitaciones y hacemos lo que podemos 
                         hacer.  
                         Hay mucho para hacer, mucho para 
                         hacer. Pero mucho es lo que se ha hecho.  
                         Se comenzó a distribuir de otra 
                         manera la riqueza que el país ha generado. Que pague 
                         más quien tiene más y que pague menos quien tiene 
                         menos. 
                         No era verso. No era verso, y el 1º 
                         de julio de 2007 comenzó a ser realidad. Y 
                         contrariamente, uruguayas y uruguayos, contrariamente a 
                         algunos pronósticos no necesariamente metereológicos, 
                         se hizo todo sin drama. Se equivocó la paloma cuando 
                         quiso dramatizar la reforma impositiva que este 
                         Gobierno llevó adelante.  
                         Ochenta por ciento de los 
                         trabajadores y más del 90% de los jubilados y 
                         pensionistas dejaron de pagar el Impuesto a las Rentas 
                         Personales y no pagan, o pagan mucho menos, con el 
                         Impuesto a las Rentas de las Personas Físicas.  
                         Como resultado de la prudencia y 
                         responsabilidad fiscal, el resultado de las cuentas 
                         públicas mejoró notoriamente.  
                         El déficit fiscal durante nuestra 
                         Administración ha disminuido sustancialmente. El 
                         déficit promedio entre el año 2005 y este año 2008 fue 
                         de 0.8%, promedio, de esos cuatro años. Mientras que el 
                         de 1985 al 89 fue del 5%. El de 1990 al 94, fue de 
                         1.2%. El de 1995 al 99 fue de 1.8%, y el del periodo 
                         2000-2004 se ubicó en 3.4%. Las cifras hablan por sí 
                         solas. 
                         Hoy, nuestro déficit fiscal es de 
                         1.6% del PBI, debido a dos elementos fundamentales que 
                         nos movieron las cuentas. Uno, es el sobrecosto 
                         energético, las sequías, la necesidad de generar más 
                         energía eléctrica. Punto de partida de las reservas de 
                         agua se habían agotado, hubo que comprar más petróleo, 
                         el petróleo llegó a valer casi 150 dólares el barril, y 
                         las sequías que tuvimos en 2005 y 2006 y estas últimas, 
                         que hemos tenido que invertir dinero -y bien invertido 
                         está- para tratar de salir adelante, configuraron un 
                         sobregasto adicional de aproximadamente 500 millones de 
                         dólares, lo que explica que hoy nos hallamos desviado 
                         de lo que nos habíamos propuesto como déficit fiscal.
                          
                         Estos son los números. Ahí están las 
                         realidades. Pero estos resultados financieros y 
                         fiscales, herramientas que hay que manejar muy bien, 
                         fueron los que sentaron las bases para las 
                         transformaciones profundas que se introdujeron y se 
                         están ejecutando en lo que más nos importa: en materia 
                         social y en materia productiva y de trabajo para los 
                         uruguayos. 
                         En lo social, los resultados 
                         alcanzados implicaron una mejora aún insuficiente, es 
                         cierto. Lo habíamos dicho en la campaña electoral: 
                         quien piense que votándonos, si llegamos al Gobierno, 
                         en un día, en una semana, en un mes, en un año, en un 
                         periodo de Gobierno, cambiamos todo y arreglamos todo, 
                         que no nos vote porque no lo vamos a poder hacer. Lo 
                         vamos a tener que implementar gradualmente. Lo dijimos 
                         en todo el país, no engañamos a nadie. Lo dijimos. 
                         Ustedes lo saben bien, todos los 
                         uruguayos lo saben bien. No recorrimos el país con 
                         promesas fáciles. No fuimos a cada lado a decir: “a 
                         ustedes les vamos a subir el sueldo, a ustedes les 
                         vamos a dar más y además vamos a bajar todos los 
                         impuestos, vamos a sacar el IVA, vamos a…”, no dijimos 
                         eso. Con responsabilidad dijimos: “va a costar mucho, 
                         pero lo vamos a hacer. Entre todos lo vamos a hacer y 
                         lo vamos a sacar adelante”. 
                         Y hay que hacer más, claro que hay 
                         que hacer más. Hay que hacer mucho más. En tres años, 
                         uruguayas y uruguayos, la indigencia, la pobreza 
                         extrema, se redujo a menos de la mitad. De casi un 4%, 
                         al 1,7%. Y la pobreza, disminuyó en casi un tercio, 
                         pasó del 32% al 21%. A mediados del año pasado, en 
                         Uruguay había 260 mil pobres menos y 59 mil indigentes 
                         menos que en el año 2005. 
                         Cuando comenzamos nuestro Gobierno, 
                         uno de cada tres uruguayos estaba en situación de 
                         pobreza. En la actualidad, uno de cada cinco padece 
                         esta situación y nos duele enormemente. No queremos que 
                         haya pobreza en el Uruguay y en esta dirección creo, 
                         tenemos que seguir trabajando porque ese es el objetivo 
                         fundamental de un Gobierno que quiera ser profundamente 
                         humano. 
                         La mortalidad infantil que se 
                         situaba en 13,2 por mil al inicio de nuestra gestión, 
                         en el 2008 se situó en el 10,6 por mil y pretendemos 
                         llegar a un solo dígito en mortalidad infantil. Pero, 
                         en Las Láminas, ¿se acuerdan de Las Láminas? ¿Allá, en 
                         el norte del país? La mortalidad infantil era de un 53 
                         por mil. Vergonzosa mortalidad infantil. Hoy está en un 
                         13 por mil. Y no por milagro. Por el trabajo que se 
                         hicieron desde el Ministerio de Salud Pública, desde el 
                         MIDES, desde otros Ministerios, apoyando una serie de 
                         programas para proteger a la madre, a la mujer 
                         embarazada y al niño recién nacido.  
                         Por otra parte, uruguayas y 
                         uruguayos, se verificó una marcada recuperación del 
                         empleo, creándose 170 mil nuevos puestos de trabajo, 
                         con tasas de empleo que se ubican en sus máximos 
                         históricos y tasas de desempleo en niveles mínimos: 6,6 
                         % a finales de 2008. 
                         Pero no solo se generaron nuevos 
                         empleos. Se generaron buenos empleos. Empleo de 
                         calidad. En efecto, hubo notables incrementos en 
                         términos de formalidad. Se formalizaron y hay 1.260.000 
                         puestos cotizantes al Banco de Previsión Social, en el 
                         último cuatrimestre del 2008. Récord absoluto de 
                         afiliaciones en el Banco de Previsión Social.  
                         El salario real creció un 19%. 
                         Mejoraron, sin duda, las relaciones laborales. Hay 
                         negociación colectiva, hay tripartita, el Estado no 
                         está ausente en estas negociaciones, está presente, 
                         como debe ser. Empresarios, trabajadores, Gobierno. En 
                         pasividades, se prestan 710.000 prestaciones que 
                         corresponden a 550.000 personas. Y un apunte sobre el 
                         empleo. A nivel de Estado hubo que regularizar, ordenar 
                         o naturalizar miles de situaciones heredadas, muchas de 
                         ellas de muy larga data. Años de becarios, años de 
                         pasantías, años de contratos. Esto es lo que regulamos. 
                         Hoy son funcionarios, están regularizados. No hay 
                         incremento, o si lo hay, es mínimo, y no el que se 
                         dice. 
                           
                         Sin perjuicio de ello, sí, hubo que 
                         crear nuevos cargos a nivel del Estado. 
                         Hubo que crear nuevos cargos. Pero 
                         ninguno de esos cargos se llenó a dedo. Los nuevos 
                         ingresos al Estado fueron por concurso, por sorteo, 
                         abiertos a toda la población. 
                         En el terreno del bienestar de la 
                         población hubo un fuerte incremento de la inversión 
                         social que permitió. No es un término técnicamente 
                         correcto el de “inversión social” el correcto sería 
                         gasto social, pero yo me rebelo a creer que una 
                         inversión en obras sociales sea un gasto, es una 
                         inversión. Y digo además, es una excelente inversión. 
                         Esta inversión social permitió fortalecer las redes de 
                         protección, aspecto que resulta de fundamental 
                         importancia en la actualidad para poder afrontar 
                         posibles impactos locales de la actual crisis 
                         financiera global. Estamos mejor preparados, sin duda, 
                         que la crisis anterior.  
                         En 2008, por ejemplo, el BPS liquidó 
                         542.000 beneficios activos. Subsidios por desempleo, 
                         subsidios por enfermedad, subsidios por maternidad, 
                         lentes gratis, prótesis gratis. Se pagaron 7.500.000 
                         pasividades y pensiones y se pagaron 12.400.000 
                         beneficios de cuota mutual; y de esto voy a hablar 
                         cuando hable de la Reforma de la Salud. Y, a propósito, 
                         debo decir que cabe resaltar el aumento de la inversión 
                         en salud, incluyendo el FONASA, el Ministerio de Salud 
                         Pública y ASSE, que más que se duplicó en términos 
                         reales, aumentando el entorno de un 130% la inversión 
                         de salud en nuestro período de Gobierno.  
                         En 2004, uruguayas y uruguayos, los 
                         recursos destinados a la salud se ubicaban –en 2004- en 
                         170 millones de dólares. En el 2008, alcanzaron los 600 
                         millones de dólares a precios constantes. Y de esos 600 
                         millones, 500 millones corresponden a ASSE y 100 al 
                         FONASA.  
                         Para el presente año –el año ese que 
                         algunos agoreros dicen que se va a caer en pedazos el 
                         Uruguay- se prevé una inversión igual a la del año 
                         pasado. El conjunto de inversiones vinculadas con la 
                         protección social también aumentaron sustancialmente el 
                         presupuesto destinado al INAU, al MIDES, al INDA y a 
                         Asignaciones Familiares. Más que se duplicó, aumentando 
                         120% en nuestro período de Gobierno. Al respecto, es 
                         pertinente resaltar que en función de lo dispuesto en 
                         la Ley 18.227 del Plan de Equidad, referida al nuevo 
                         sistema de Asignaciones Familiares, en febrero de 2008 
                         comenzaron a cobrar este beneficio 230.155 niños y 
                         adolescentes anteriormente amparados sólo en el Plan de 
                         Emergencia; lo cual representa, uruguayas y uruguayos, 
                         el 99,4%, casi el 100% de esos niños amparados en el 
                         Plan de Emergencia, son beneficiarios hoy de esta Ley.
                          
                         Ustedes recordarán como cuando se 
                         estaba desarrollando el Plan de Emergencia había quien 
                         decía –bueno, entre otras cosas, porque del Plan de 
                         Emergencia se dijo muchas cosas, pero voy a tomar una 
                         porque el tiempo corre y tengo que avanzar-, decían: 
                         “¿y qué va a pasar ahora cuando se salga del Plan de 
                         Emergencia?”, “ya van a ver a los pobres venir 
                         corriendo por todos lados para reclamar, para 
                         protestar, porque esta limosna que se les está dando 
                         los va a dejar mal”. Claro, esa es una mentalidad para 
                         pensar cómo se sale de un Plan de Emergencia. Nosotros 
                         teníamos otras propuestas: Rutas de Salida. Varias 
                         rutas de salida de las que hablaremos, entre ellas las 
                         asignaciones familiares, son las que nos permitieron 
                         salir sin ningún tipo de descalabro del Plan de 
                         Emergencia e instalarnos hoy en el Plan de Equidad. El 
                         total de importes pagados por esta prestación, 
                         asignaciones familiares, alcanzó en el mes de diciembre 
                         de 2008 a 10 millones de dólares a valores constantes y 
                         en 2007 había sido de 3 millones y medio. Quiere decir, 
                         que cada vez más, las redes de protección social se 
                         están desarrollando efectivamente en el país. 
                           
                         Sobre la educación. El presupuesto 
                         dedicado a la educación también registró un aumento 
                         significativo. En el 2004 se destinaban 420 millones de 
                         dólares para la educación. En valores constantes, en el 
                         2008 se están destinando 1.350.000 dólares para la 
                         educación. Prometimos y cumplimos. Al final de nuestro 
                         período de Gobierno destinados a la educación 
                         representarán el 4,5 % del PBI nacional.  
                         También en Seguridad Pública ha 
                         aumentado la inversión. Casi 50% más que en períodos 
                         anteriores, en equipamiento, en capacitación, en 
                         salario y protección social al funcionario policial y a 
                         sus familias. Claro que hay delitos, vaya noticia. 
                         Claro que los mismos provocan daños a menudo 
                         irreparables y además provocan inseguridad. Pero la 
                         serie histórica demuestra que no ha aumentado la 
                         cantidad de delitos sino que ha variado la tipología de 
                         los mismos. Hoy en los jóvenes hay más hurtos y 
                         rapiñas. Claro que tenemos que ser severos con quien 
                         delinque. Pero tenemos que ser más severos con las 
                         causas que llevan a esa producción de delincuencia. Esa 
                         una tarea pendiente, no es fácil, pero habrá que 
                         llevarla adelante. Lo que sí  ha aumentado y ha 
                         aumentado espectacularmente es la cantidad de crónicas 
                         policiales. No es una excusa, ni un reproche, es una 
                         realidad que podemos constatar día a día. Miren 
                         uruguayas y uruguayos, a manera de anécdota, dos. Una 
                         emisora radial del interior del país elaboró, hace 
                         pocos días, una ópera antigubernamental porque una 
                         señora que caminaba al costado de un camino se la llevó 
                         por delante una bordadora de cortar pasto,  que llevaba 
                         un motonetista en su moto, la rozó, la tiró, un 
                         accidente común y corriente, sin embargo fue base para 
                         que se hiciera una ópera anti gubernamental por ese 
                         accidente carretero.  
                         Y hace pocos días escuchábamos, en 
                         una audición radial en Montevideo, en el informativo, 
                         que como no había ningún hecho policial así grande, 
                         trascendente, la noticia era que un señor que se había 
                         peleado con su suegra, entró a la casa, patió una 
                         puerta y rompió unos vidrios.  
                         Bien, tenemos que trabajar para 
                         aumentar la seguridad pública, y lo vamos a hacer. 
                         Vamos a seguir haciéndolo.  
                         En fin, uruguayas y uruguayos, la 
                         inversión social que significaba el 35% del presupuesto 
                         anual en el 2004, este año significa el 49% del 
                         presupuesto. Y a ello podríamos sumar las inversiones 
                         en infraestructura porque las carreteras y puentes o 
                         los servicios de luz, agua y saneamiento, también 
                         inciden en la calidad de vida de los uruguayos. En el 
                         año 2004 las inversiones del Ministerio de Transporte y 
                         Obras Públicas en infraestructura se situaban poco 
                         menos que en 100 millones de dólares, año 2004. En el 
                         año pasado, las inversiones de este Ministerio de 
                         Transporte y Obras y la Corporación Vial, ascendieron 
                         esas inversiones a tres veces más, 280 millones de 
                         dólares. Y a ese monto, reitero, podríamos sumar los 
                         120 millones previstos para el saneamiento de la Ciudad 
                         de la Costa y Maldonado, a lo que nos habíamos 
                         comprometido y vamos a empezar a ejecutar, obras 
                         pendientes desde hace décadas. Los 65 millones de 
                         dólares destinados a mejorar la Planta de OSE de Aguas 
                         Corrientes, que abastece a Montevideo, la ampliación de 
                         la Planta de UTE en Punta del Tigre, o su primer parque 
                         eólico que comenzó a funcionar recientemente en la 
                         Sierra de los Caracoles.  
                         Si esto es en lo social, en materia 
                         productiva, los resultados alcanzados por el Gobierno 
                         han sido excepcionales, registrándose una marcada 
                         expansión económica con un crecimiento económico de 8% 
                         promedio anual en este período, creciendo 
                         sistemáticamente por encima del promedio de América 
                         Latina, que también tenía el mismo contexto 
                         internacional favorable. En este último año, 2008, 
                         estimado en base a datos de noviembre de ese año, 
                         América Latina va a crecer o creció un 4,6% su Producto 
                         Bruto Interno. Y el Uruguay, nosotros, este pequeñito 
                         país, con un contexto internacional favorable como el 
                         que tuvo toda América Latina, vamos a crecer o crecimos 
                         un 10,6% del  Producto Bruto Interno. Y para el año en 
                         curso, seguimos manteniendo la expectativa de 
                         crecimiento económico que se ubica en el entorno del 
                         3%. Haremos un seguimiento muy estricto, la crisis 
                         internacional está presente, vaya si hay países del 
                         mundo desarrollado que están en quiebra, se están 
                         cayendo en pedazos, están en una profunda recesión. Y 
                         se nos dice, “ah sí pero este año que viene vamos a 
                         caer porque vamos a crecer sólo un 3%”, pero si 3% era 
                         lo que crecíamos promedialmente antes en el Uruguay y 
                         era gran crecimiento. Claro, va a ser muy difícil que 
                         podamos crecer 2 dígitos en nuestro Producto Bruto 
                         Interno este año, pero vamos a crecer, tenemos 
                         confianza, tenemos fe, tenemos esperanza, tenemos 
                         fuerza, tenemos ganas y todos juntos lo vamos a poder 
                         hacer, todos los uruguayos juntos lo vamos a poder 
                         hacer. También cabe destacar la fuerte recuperación de 
                         la inversión tanto pública como privada, que creció un 
                         16% promedio anual, lo cual constituye un factor 
                         fundamental para incrementar la tasa de crecimiento 
                         económico de largo plazo y por supuesto la creación de 
                         empleo, así como la mejora de la competitividad de la 
                         economía. La inversión pública, pasó de representar el 
                         2,4 % del PBI en 2005, al 3,3% en 2008. Dentro de las 
                         inversiones públicas cabe destacar las realizadas en 
                         materia de puertos, de energía, de infraestructura 
                         vial, de agua y saneamiento, inversiones que 
                         contribuyen directamente al crecimiento económico, así 
                         como también, indirectamente, apalancando (esta palabra 
                         existe, la saqué del diccionario, apalancando existe, 
                         yo se que la van a ir a buscar algunos, existe en el 
                         Diccionario de la Real Academia Española); apalancando 
                         la inversiones privadas, sin puertos, sin carreteras, 
                         sin energía, no hay posibilidades de crecimiento 
                         económico, ni de creación de empleos. La inversión 
                         extranjera directa, por su parte, también ha presentado 
                         un notable dinamismo alcanzando cifras récord para la 
                         historia del Uruguay. En la década del 90, la inversión 
                         extranjera fue, en promedio de 135 millones de dólares 
                         anuales. Entre el 2001 y el 2004, subió al doble, 295 
                         millones de dólares anuales.  
                         En nuestro periodo de gobierno - y 
                         cuando digo nuestro periodo de gobierno los miro a 
                         todos ustedes, quienes están aquí, quienes están detrás 
                         de las cámaras, quienes están escuchando por radio o en 
                         el resto del mundo por Internet, porque esto lo hicimos 
                         entre todos los uruguayos -, en nuestro periodo de 
                         gobierno, dejando de lado a Botnia, esa cifra trepó a 
                         más de 1.000 millones de dólares anuales. Y si 
                         incluimos a Botnia supera los 1.200 millones de dólares 
                         anuales, y uruguayas y uruguayos, esto constituye una 
                         clara señal de los inversores en nuestro país, que aún 
                         continúa. 
                         El lunes último, en el Consejo de 
                         Ministros, firmé 29 estímulos o promociones a las 
                         inversiones en el sector productivo y de servicios para 
                         el Uruguay. El lunes último, 29 resoluciones de 
                         promoción de inversiones para el Uruguay, fruto del 
                         aumento del empleo y de los salarios. Y así también de 
                         las pasividades reales, como también de los ingresos no 
                         salariales, el consumo privado presentó un marcado 
                         dinamismo en todo el periodo de Gobierno.  
                         No vamos, por cierto, a hablar de 
                         ventas de autos cero kilómetro o de paquetes turísticos 
                         a Disney World, pero, según un informe fresquito del 
                         Instituto Nacional de Estadística del 3 de marzo de 
                         2009, referido al Indice de los Precios del Consumo, el 
                         IPC descendió 0.27 en febrero de 2009. Descendió.  
                         Los rubros de este Indice, de este 
                         IPC, no son suntuarios, sino que refieren a aspectos 
                         tan básicos como la alimentación, la vestimenta, la 
                         educación, la vivienda, el mobiliario, el transporte y 
                         el esparcimiento. 
                         Esta deflación del 0.27% registrada 
                         en febrero ubica la inflación anual acumulada entre 
                         febrero de 2008 y febrero de 2009 en el 7.93%, y 
                         esperamos en el resto del año estar en el rango que nos 
                         habíamos fijado de entre un 3 y un 7% de inflación para 
                         el Uruguay.  
                         Haremos algunas consideraciones 
                         sobre la temporada turística del verano 2009. Recuerdan 
                         ustedes que en octubre de 2008 decían por ahí “esta 
                         temporada turística va a ser un desastre”, “se cae a 
                         pedazos la temporada turística con esta crisis 
                         internacional”, “se termina la temporada turística en 
                         Uruguay, vayan cerrando los hoteles, las hosterías, que 
                         no van a alquilar nada”.   
                         Consideraciones preliminares, por 
                         supuesto, porque la temporada aún no ha terminado y no 
                         tenemos datos finales. Sabemos que los ingresos 
                         turísticos en enero de este año, en plena crisis, 
                         sobrepasaron los 270 millones de dólares, 40% más que 
                         en enero de 2008.  
                         Cuando recibimos el Gobierno los 
                         ingresos de todo un año por turismo en el Uruguay eran 
                         de 400 millones de dólares. En enero de este año –sólo 
                         en enero, sólo en un mes- fueron de 270 millones de 
                         dólares.  La última temporada fue de más de 1.000 
                         millones de dólares que ingresaron al país por turismo. 
                         Y esos ingresos no provienen 
                         solamente de los turistas extranjeros. Ahí también hubo 
                         y hay consumo uruguayo. Hay trabajo uruguayo. ¿O no? 
                         ¿Es que no había ningún uruguayo en Punta del Diablo, 
                         en La Paloma, en Punta del Este, en Pirlápolis, en 
                         Atlántida, en Colonia, en el corredor Termal, en el 
                         corazón del Uruguay profundo? Vamos, no pongamos cara 
                         de “yo no fui”. Capaz que todos no fueron a hacer 
                         turismo, pero muchos sí pudieron hacer Turismo Social 
                         también, esta vez, aquí en el Uruguay. 
                         Las exportaciones, por su parte, 
                         también registraron un importante crecimiento. Tanto la 
                         de bienes como la de servicios, avanzando al mismo 
                         tiempo en materia de diversificación geográfica de los 
                         mercados de destino. Hemos abierto muchos mercados en 
                         muchos países con los que no teníamos ningún tipo de 
                         intercambio comercial. Y veamos, no por analizar, por 
                         cierto, todos los rubros de exportación. Pero veamos un 
                         rubro paradigmático de nuestras exportaciones: la 
                         carne. 
                         En el año 2004 se exportaba carne de 
                         diferente tipo a 77 mercados, a 77 países. En el año 
                         2008 llegamos a exportar carne a más de 100 países y 
                         para el presente año tenemos firmes expectativas de 
                         ingresar con carne ovina a Corea del Sur, y con carne 
                         ovina deshuesada  a los Estados Unidos de Norteamérica. 
                         La calidad de nuestra carne permitió que la misma 
                         alcanzara récords históricos en materia de precios. Se 
                         llegó a pagar 4 mil dólares la tonelada de carne con 
                         hueso. Y el restaurante uruguayo, con carne uruguaya y 
                         asadores uruguayos, fue el más exitoso en la Expo 
                         Zaragoza 2008. ¿Vieron que se puede? 
                         Pero las cosas no suceden porque sí. 
                         Requieren poner una cierta cuota de inteligencia, mucho 
                         trabajo, mucha perseverancia y mucha confianza. Resulta 
                         claro que sin un manejo prudente y ordenado del gasto 
                         público no hubiera sido posible cumplir con los 
                         lineamientos programáticos de Gobierno, en particular 
                         con el compromiso del 4,5% del PBI para la Educación y 
                         con el financiamiento necesario, al mismo tiempo, para 
                         implementar la Reforma de la Salud, los planes 
                         sociales, las obras públicas y los estímulos a la 
                         inversión. 
                         Por otra parte, uruguayas y 
                         uruguayos, ésta prudencia y responsabilidad, además, 
                         fiscal, junto al adecuado manejo de la deuda, es lo que 
                         hoy nos permite, en la actualidad, no ser pro-cíclicos 
                         ante la crisis financiera global desatada a mediados 
                         del año pasado, evitando tener que recurrir a los 
                         tradicionales ajustes fiscales implementados por los 
                         gobiernos anteriores. En este período de Gobierno no va 
                         a haber ajuste fiscal. No serán los salarios un punto 
                         del ajuste. 
                         No sólo no se han adoptado medidas 
                         de ajuste, sino que se han realizado enormes esfuerzos 
                         por atender y contemplar la problemática de los 
                         sectores productivos más afectados por la crisis 
                         internacional y la sequía, adoptando un conjunto de 
                         medidas de apoyo, en particular, al sector lácteo, que 
                         quiero recordar en la tarde de hoy. 
                         Son 34 medidas. Yo sé que puede ser 
                         un poco cansador. Sólo las voy a anunciar. A partir del 
                         lunes próximo estarán explicitadas en profundidad en la 
                         página de Presidencia web de la República. Pero voy a 
                         hablar de las 34 medidas que hemos tomado. 
                         Primero: apoyo financiero a la 
                         construcción de obras de riego; Plan Sequía I, desde el 
                         principio del Gobierno, esto es cierto, con 833 
                         beneficiarios en los departamentos al norte del Río 
                         Negro, donde hay hoy aguadas, agua reservada, no sufrió 
                         el norte del Río Negro la intensidad de la crisis.  
                         Dos: financiación de instalaciones 
                         para aprovisionamiento de riego, se beneficiaron 593 
                         productores, casi la mitad de ellos en Canelones.  
                         Tres: se establecieron microcréditos 
                         a pequeñas unidades productivas. 
                           
                         Cuatro: se instaló el Plan Sequía 2, 
                         para la construcción de soluciones de agua sobre todo 
                         al sur del Río Negro. Con las intendencias de los 
                         departamentos al sur del Río Negro. Claro, uruguayas y 
                         uruguayos, algunos intendentes cuando les planteamos 
                         llevar adelante este Plan de Sequía para hacer aguadas, 
                         para hacer retención de aguas, dijeron no, no, nosotros 
                         vamos a invertir en otra cosa, vamos a hacer cordón 
                         cuneta, está bien, es la elección de ellos, pero 
                         después que no se quejen. Quienes hicieron aguadas 
                         tuvieron más agua que quienes no la hicieron.  
                         Cinco: eliminación de los suelos 
                         accesorios como de prioridad forestal.  
                         Seis: estímulos tributarios varios, 
                         no tengo tiempo para nombrarlos.  
                         Siete: creación del Fondo de 
                         Catástrofes Climáticas Granjeras, la Ley de Rendición 
                         de Cuentas 2006. Hoy los granjeros saben que hay un 
                         fondo que si hay alguna situación climática adversa 
                         tienen un fondo al que recurrir.  
                         Ocho: creación del Fondo 
                         Agropecuario de Emergencias, Ley de Rendición de 
                         Cuentas 2007 que nos permitió atender la emergencia 
                         agropecuaria que tenemos en este momento.  
                         Nueve: creación del Sistema de 
                         Información Ciudadana disponible en el suelo por 
                         seccional policial.  
                         Diez: autorización de pastoreo en 
                         calle, decreto 346 del 25 de septiembre de 2006.  
                         Once: registro de seis nuevos 
                         productos activos para el control de la langosta 
                         vigente desde el 15 de enero de 2009.  
                         Doce: subsidio para compra de 
                         raciones vigente desde noviembre de 2008 que ha 
                         beneficiado a 200 productores.  
                         Trece: financiamiento y distribución 
                         de forraje para ganaderos desde el 19 de enero de este 
                         año se han entregado 5.000 toneladas a 800.400 
                         productores, algunos de ellos las devolverán cuando 
                         puedan. No los estamos acogotando para que las paguen 
                         inmediatamente.  
                         Catorce: refinanciamiento de 
                         micro-créditos para productores afectados por sequía.
                          
                         Quince: nuevos micro-créditos a 
                         productores atendidos por el proyecto Uruguay Rural, 
                         con intereses y plazos muy favorables.  
                         Dieciséis: prórroga del pago de 
                         arrendamiento con vencimiento a octubre de 2008.  
                         Diecisiete: préstamos retornables a 
                         colonos para siembra de verdeos.  
                         Dieciocho: créditos del Banco de la 
                         República Oriental del Uruguay a productores lecheros 
                         bancarizados vigente desde el 1º de diciembre de 2008. 
                         Diecinueve: financiamiento para productores lecheros no 
                         bancarizados operativo desde el 15 de diciembre de 
                         2008.  
                         Veinte: suspensión de aportes 
                         patronales hasta mayo de 2009. Ley del 27 de enero de 
                         2009.  
                         Veintiuno: financiamiento a 
                         productores afectados por la sequía mediante fondos 
                         rotatorios cuya recuperación la seguirá utilizando la 
                         institución beneficiaria.  
                         Veintidós: financiamiento para 
                         pequeños productores familiares.  
                         Veintitrés: financiamiento 
                         parcialmente recuperable, apenas un 10 o un 20% van a 
                         tener que reembolsar productores lecheros, remitentes 
                         de hasta 1.500 litros diarios y queseros artesanales de 
                         hasta 1.000 litros diarios.  
                         Veinticuatro: financiamiento 
                         reembolsable a productores lecheros de más de 1.500 
                         litros diarios y queseros artesanales de más de 1.000 
                         litros diarios.  
                         Veinticinco: autorizaciones rápidas 
                         referidas al abastecimiento de semillas forrajeras para 
                         la próxima siembra.  
                         Veintiséis: licitación para compra 
                         de 3.000 toneladas de semillas forrajeras, ya están 
                         para llegar avena, redgrass de Estados Unidos, avena, 
                         trigo de larga duración en su producción.  
                         Veintisiete: exoneración impositiva 
                         para importación extra-Mercosur de insumos para 
                         alimentación animal.  
                         Veintiocho: flexibilización en la 
                         autorización del envío de ganado a ferias ganaderas.
                          
                         Veintinueve: habilitación de venta 
                         de carne congelada bajo ciertas condiciones y precios 
                         acordados, decreto aprobado y en proceso de 
                         implementación.  
                         Treinta: financiamiento para compra 
                         individual o colectiva de equipos para soluciones de 
                         almacenamiento de agua.  
                         Treinta y uno: Admisión temporaria 
                         de maquinaria para obras de riego.  
                         Treinta y dos: subsidio, no pagan 
                         los primeros 500 kilowatts consumidos por el universo 
                         de productores lecheros.  
                         Treinta y Tres: financiamiento del 
                         consumo de energía eléctrica a productores citrícolas. 
                         Está en implementación.  
                         Treinta y Cuatro: reparto de ración 
                         a productores avícolas, también en implementación.  
                         Treinta y cuatro medidas. Por ahí 
                         capaz que alguien sale a decir “es insuficiente”. 
                         Treinta y cuatro medidas. Yo pregunto –te pregunto a 
                         ti, Ernesto- les pregunto a todos ustedes después de 
                         haber enumerado estas treinta y cuatro medidas, ¿no les 
                         parece un tanto exagerado que algunos actores reclamen 
                         la renuncia del Ministro de Ganadería y Agricultura a 
                         causa de la sequía? ¿No les parece que tal reclamo es 
                         consecuencia de cierta exaltación?  
                         Yo diría, porque los uruguayos somos 
                         todos muy futboleros: comencemos a poner la pelota en 
                         el piso, levantemos la cabecita, comencemos a mirar 
                         hacia adelante con racionalidad, porque así tenemos que 
                         trabajar, con lealtad institucional, con seriedad, con 
                         responsabilidad, con compromiso republicano.  
                         Y pedimos esto porque cuando en la 
                         crisis de 2002 –que nosotros éramos oposición- hubo que 
                         actuar con lealtad institucional, con seriedad, con 
                         responsabilidad y con compromiso republicano, no 
                         dudamos un solo instante de hacerlo y de llevarlo 
                         adelante. Un solo instante.  
                         Pero, además de estas medidas hacia 
                         el sector productivo, hubo otras que se tomaron en 
                         otros ámbitos, por ejemplo, los Ministerios de Salud e 
                         Interior, OSE, UTE, porque la sequía no afecta 
                         solamente al ganado y a los productores agropecuarios.
                          
                         Continuando con la política de 
                         extensión en el suministro de agua potable en las zonas 
                         más remotas del Uruguay profundo, del interior del 
                         país, ahí donde pocas veces se llega. Se está 
                         ejecutando un programa de OSE para equipar con agua 
                         potable garantida a las más de 300 escuelas rurales y a 
                         más de un centenar de localidades pequeñas del 
                         interior. En este emprendimiento es un orgullo para 
                         nuestro país contar con el apoyo de un fondo 
                         establecido por el Reino de España para toda 
                         Iberoamérica y es un orgullo, además, que la primera 
                         adjudicación -por un monto de 12.200.000 dólares- haya 
                         sido para Uruguay.  
                         Pero hubo, además, personal 
                         municipal que trabajó denodadamente con el tema de la 
                         sequía y de los incendios. Personal policial, personal 
                         militar, el Ejército, la Fuerza Aérea. Todos lo vimos 
                         por televisión, que trabajaron denodadamente. Personal 
                         sanitario. Hubo bomberos realizando una tarea 
                         formidable y sacrificada y hubo un Sistema Nacional de 
                         Emergencia que funcionó adecuadamente. Hubo, además, 
                         responsabilidad y solidaridad de muchísimos uruguayos. 
                         Hubo uruguayos que, anónimamente, aportaron dinero para 
                         ayudar a otros uruguayos. A todos ellos nuestro 
                         reconocimiento.  
                         Pero volviendo a los aspectos 
                         económicos e intentando sintetizarlos en un concepto, 
                         digo, defraudamos a los agoreros de la catástrofe. 
                         Demostramos que un gobierno progresista sabe manejar la 
                         economía y que, incluso, lo hace mejor que gobiernos de 
                         otros siglos.  
                           
                           
                           
                         Pero si a la semana, a la semana de 
                         haber asumido el Gobierno tuvimos que resolver la 
                         crisis de COFAC. Tuvimos que resolver la crisis de 
                         COFAC y lo hicimos sin pérdidas para los depositantes, 
                         sin pérdida de puestos de trabajo y sin asistencia del 
                         Estado. Por primera vez en muchísimos años, si no en la 
                         historia del país, la crisis de una institución 
                         financiera no terminó con su liquidación, ni ocasionó 
                         otros efectos negativos. 
                         Parecería, en el tiempo, que esto es 
                         historia antigua, incluso para nosotros. Pero sucedió 
                         ayer, ahí nomás, hace apenas cuatro años. Pero no 
                         obstante todo esto que he dicho, uruguayas y uruguayos, 
                         no debemos perder de vista que en estos momentos nos 
                         enfrentamos a una situación financiera internacional 
                         compleja. Y más adelante me referiré específicamente a 
                         esta situación. 
                         Uruguayas y uruguayos, nosotros, 
                         cuando prometemos nos comprometemos. Prometimos cambios 
                         y estamos haciendo cambios. Cambios graduales, sí, pero 
                         estructurales también. Lo dijimos durante la campaña 
                         electoral, lo dijimos hoy aquí: quien crea que 
                         apoyándonos, las cosas o sus cosas van a cambiar de la 
                         noche a la mañana, que no nos apoye. En la construcción 
                         de los países, como en la construcción de una casa, en 
                         la construcción de un edificio, no hay milagros ni 
                         atajos. Pretender milagros o aprender atajos es 
                         irresponsable, cuando no, una excusa para que nada 
                         cambie. 
                         Y lo vinimos diciendo desde que 
                         asumimos el Gobierno: la tarea que la ciudadanía nos 
                         encomendó y que emprendimos es, metafóricamente, 
                         reconstruir la casa con la gente adentro. Este país, si 
                         lo asimilamos a un edificio, estaba partido desde el 
                         techo hasta las paredes y hasta los cimientos, ¿o 
                         miento, uruguayas y uruguayos? 
                         Había muchos requerimientos, muchas 
                         necesidades, muchas reivindicaciones valederas y 
                         auténticas de los ciudadanos. Había muchas urgencias, 
                         muchas esperanzas, muchas necesidades. En ese clima, 
                         comenzamos a reconstruir el país. Claro, hubiera sido 
                         muy lindo y muy bonito, para aquietar esas inquietudes 
                         y esas necesidades, que hubiéramos tapado las rajaduras 
                         de las paredes con un poco de hormigón, un poco de 
                         mezcla, enduido, pulimos, pintamos y en poquito tiempo 
                         hubiera estado hermosísimo.  
                         Y muchos hubieran aplaudido, 
                         hubieran dicho: “vieron, qué rápido arreglamos la 
                         cosa”. Pero hubiera venido cualquier vientito, 
                         cualquier temporal, y hubiera vuelto la rajadura a 
                         peligrar la vida de quienes vivían adentro. 
                         Y optamos por el otro camino. Que 
                         iba a llevar más tiempo para ver sus resultados. Fuimos 
                         a trabajar en los cimientos, allá, en lo más profundo, 
                         donde se ve poco cuando se hace mucho. Donde se 
                         requiere mucho tiempo y mucho dinero para recimentar un 
                         edificio. Y esa solidez, es la que nos permite hoy 
                         decir que podemos encarar la crisis financiera, 
                         económica, comercial y quizás hasta social, 
                         internacional, que tiene el mundo, mejor preparados que 
                         lo que estábamos preparados en el año 2002. 
                         Reconstruir una casa no es un 
                         lavadito de cara que se hace en una semana para que 
                         dure cinco años. Reconstruir una casa, es recimentarla, 
                         levantar pisos, picar paredes, hacer nuevas vigas, 
                         cambiar instalaciones eléctricas y sanitarias, en fin, 
                         uruguayas y uruguayos. Reconstruir una casa lleva 
                         tiempo y lleva dinero. Ojalá lo hubiéramos podido hacer 
                         más rápido y más pronto. Pero no fue una tarea fácil. 
                         Y reconstruir una casa con la gente 
                         adentro, requiere cierto acuerdo de trabajo y 
                         convivencia para que algunas incomodidades que genera 
                         la obra no deriven en una bataola entre los albañiles y 
                         los dueños de la casa. Y en eso estamos. Estamos 
                         haciendo cambios. Los uruguayos estamos cambiando. El 
                         Uruguay está cambiando. ¿Es que el Uruguay de hoy es 
                         igual al Uruguay del 2004? 
                         Podríamos citar muchos ejemplos  de 
                         ello, y en múltiples aspectos, pero nos centraremos en 
                         los dos siguientes: uno de ellos, cómo está cambiando 
                         la vida –uruguayas y uruguayos-, cómo está cambiando la 
                         vida de los sectores históricamente más desprotegidos 
                         de la sociedad, que era lo que más nos preocupaba. 
                         ¡Vaya si para nosotros fue un mandato que los más 
                         necesitados fueran los más privilegiados! ¡Vaya si fue 
                         un mandato! 
                         Y dos, cómo nos ven desde afuera, 
                         porque a veces desde afuera tienen otras perspectivas, 
                         y quizás nos ven mejor de cómo nosotros nos vemos desde 
                         aquí adentro.  
                         Amigas y amigos, quien más valora la 
                         libertad es quien no la tiene. Quien vive en ella, la 
                         respira casi sin darse cuenta.  
                         Quienes más valoran los programas de 
                         salud bucal y ocular, los programas de educación física 
                         obligatoria en las escuelas públicas de todo el país, 
                         quienes más valoran la universalización y el aumento de 
                         la asignación familiar, una prestación mensual entre 
                         700 y 1.000 pesos, según la escala de equivalencia 
                         establecida, que beneficia a unos 330.000 niños y 
                         adolescentes.  
                         Quienes más valoran que cada uno de 
                         los aproximadamente 300.000 alumnos y 13.000 maestros 
                         del sistema escolar público tengan su computadora. 
                         Quienes más valoran las 36.011 
                         soluciones habitacionales concretadas en este período 
                         de Gobierno, quienes más valoran los consejos de 
                         salarios o la nueva legislación laboral para 
                         trabajadores rurales y domésticos, o el nuevo régimen 
                         de jubilaciones y pensiones. 
                         Quienes más valoran el Programa de 
                         Aulas y Maestros Comunitarios o el Programa de 
                         Realfabetización de Adultos, quienes más valoran la 
                         reducción de las tarifas del transporte colectivo de 
                         pasajeros suburbano en un 15% e interdepartamental en 
                         un 7% y el boleto gratuito para los estudiantes.  
                         Quienes más valoran las 18.815 
                         oportunidades de inserción laboral y social 
                         comprendidas en los programas Trabajo por Uruguay, Plan 
                         de Emergencia y Uruguay Trabaja, Plan de Equidad.  
                         En fin, quienes más valoran esos 
                         beneficios, que en realidad son derechos básicos, son 
                         los cientos de miles –más de un millón de uruguayos- 
                         que no los tenían. ¡No los tenían! 
                         Son los que históricamente no han 
                         tenido voz y muchos de ellos no votan porque no tienen 
                         edad para hacerlo, pero tienen derechos que hemos 
                         tratado de respetar y cumplir con ellos. 
                         Y además, además, no creo 
                         –absolutamente, no creo - que los uruguayos no estén 
                         informados de lo que se hizo y se está haciendo. Aunque 
                         probablemente no conocen todo lo que se hizo o se está 
                         haciendo, probablemente no conocen todo. Esto que estoy 
                         diciendo es apenas una parte de lo que se hizo.  
                         Seguramente todos los uruguayos no 
                         conocen todo lo que se hizo. Pero no tengo dudas, no 
                         tengo dudas, hay muchos, cientos de miles, de uruguayos 
                         que saben lo que se hizo y lo que se está haciendo, 
                         porque lo sienten todos los días en sus propias vidas.
                          
                         Ellos no necesitan campañas 
                         publicitarias ni alambicados ni costosos informes 
                         técnicos para saberlo. Pero también es cierto, también 
                         es comprensible que haya uruguayos que tengan 
                         dificultades para dimensionar adecuadamente esos 
                         cambios. 
                         Quien ha estado bien alimentado 
                         desde el vientre materno, quien ha vivido desde la cuna 
                         el derecho a la alimentación, a la salud, a la 
                         vivienda, a la educación o a la recreación, puede tener 
                         dificultades para dimensionar lo que es vivir en carne 
                         propia el hambre, el frío, el querer estudiar, o 
                         trabajar y el no poder, el ser sospechoso de haragán, 
                         de bruto, de desprolijo o autor de cuanto delito se 
                         comete. Es comprensible que no lo entienda. 
                         Pero lo que es inadmisible, lo que 
                         es penoso, es que hayan quienes aún creen que los 
                         derechos son privilegios de algunos, más bien pocos y 
                         entre esos pocos, ellos, o que nieguen o se molesten 
                         porque se legisló la actividad laboral de los 
                         trabajadores rurales: ocho horas y convenio colectivo 
                         para los trabajadores rurales.  
                         Y para las empleadas domésticas. Es 
                         que ellos, los trabajadores rurales y las empleadas 
                         domésticas, ¿no lo saben? 
                         Se presta asistencia alimentaria a 
                         171.396 personas en situación de riesgo social y 36.822 
                         en situación de déficit nutricional, ¿ellos no lo 
                         saben? 
                         Hay 1.369.150 afiliados al FONASA, 
                         entre ellos los niños y adolescentes que antes no 
                         tenían cobertura, ¿ellos o sus familiares no lo saben? 
                         Trece mil compatriotas están 
                         recibiendo atención gratuita en el Hospital de Ojos y 
                         aquí mi agradecimiento público al Gobierno de Cuba y al 
                         pueblo cubano por el apoyo que nos han dado en 
                         implementar estas medidas. Cinco mil de ellos han sido 
                         operados gratuitamente en la Operación Milagro y ahora 
                         acá, en el Uruguay, y alguno a los 70 años de edad 
                         descubrió con emoción que el mar es azul. ¿Ellos no lo 
                         saben? 
                         Sí que lo saben, uruguayas y 
                         uruguayos, lo saben. Lo saben porque lo viven. 
                         Es penoso, por no decir miserable, 
                         negar, molestarse o alarmarse porque 151.918 escolares 
                         y maestros han recibido gratuitamente su computadora 
                         portátil y a fines de 2009 la totalidad de los alumnos 
                         y maestros del sistema escolar público estarán 
                         integrados activamente a un Plan CEIBAL que acaba de 
                         ganar el primer premio. Se lo ganó Uruguay, lo ganaron 
                         ustedes, a la excelencia del Gobierno Electrónico. Lo 
                         acaba de ganar Uruguay. Estos alumnos, la totalidad de 
                         estos alumnos y maestros estarán integrados activamente 
                         a un Plan CEIBAL  que significa una profunda innovación 
                         educativa y una vigorosa democratización en las 
                         posibilidades de la sociedad uruguaya para acceder a la 
                         información, el conocimiento, la comunicación y la 
                         recreación. 
                         Seiscientos seis mil cuatrocientos 
                         veintinueve alumnos de escuelas públicas de todo el 
                         país. Mil quinientos noventa y siete de ellos 
                         pertenecientes a escuelas rurales tienen cobertura 
                         odontológica gratuita en el programa de salud bucal 
                         escolar. ¿Y quién no tuvo un dolor de muelas? Y quienes 
                         saben lo que es sufrir un dolor de muelas, quizá decir 
                         dolor de muelas no es lo adecuado técnicamente, pero 
                         qué va a hacer. Dolor de muelas. Y quién no, en su 
                         momento, tuvo la atención adecuada que sufrir un dolor 
                         de muelas.  
                         Estos niños, muchos de ellos, habían 
                         sufrido múltiples episodios de celulitis, flemones, 
                         caries, dolores y no tenían con quién atenderse. Hoy 
                         tienen, gratuitamente. ¡Vaya si los niños, sus padres y 
                         sus maestros saben lo que ello significa!  
                         281.000 escolares participan en 
                         actividades enmarcadas en la Ley Nº 18.213 que 
                         establece la obligatoriedad de la enseñanza de la 
                         Educación Física en todas las escuelas públicas 
                         incluidas las rurales. Vaya si la comunidad educativa 
                         valora esta iniciativa y también los profesores de 
                         educación física, reconocidos hoy como profesionales 
                         universitarios y con pleno empleo. Vaya si ellos lo 
                         saben. 
                         51 Centros MEC están funcionando en 
                         todo el país, en el marco de una estrategia de 
                         descentralización, democratización y accesibilidad a 
                         contenidos educativos y culturales. Y otros tantos 
                         centros del BPS, de la DGI, de UTE, de ANTEL, funcionan 
                         en pequeñas localidades del Uruguay profundo. Ya no es 
                         necesario, para esos habitantes de esas localidades, 
                         trasladarse a la capital departamental para hacer 
                         determinadas gestiones. Esos ciudadanos, ¿es que no 
                         saben lo que ha hecho este Gobierno? 
                         El INAU, donde estamos haciendo las 
                         investigaciones correspondientes por las denuncias que 
                         hubo. Pero, atención, ya desde antes, cuando hubo que 
                         hacer investigaciones administrativas, aplicar 
                         sanciones, llevar adelante sumarios, se hicieron. Y las 
                         vamos a seguir haciendo todas las veces que sea 
                         necesario. Es un problema duro que tenemos entre manos. 
                         Sí señor. No hemos encontrado la solución definitiva. 
                         Sí señor. ¿Es fácil? No, no es fácil. Pero no nació 
                         ayer el INAU. Estos problemas no comenzaron ahora, 
                         estos son problemas crónicos. Por eso, llamamos a la 
                         lealtad institucional y a la responsabilidad y seriedad 
                         para tratar este tema. Y yo se que hay actores 
                         políticos de todos los partidos políticos del país que 
                         están dispuestos a trabajar. Bienvenidos sean. Les 
                         abrimos las puertas y queremos trabajar juntos para 
                         solucionar este problema de la niñez y la adolescencia.
                          
                         Pero el INAU atiende mediante 
                         diversos programas a 67.600 niños y adolescentes. Bueno 
                         es retener este dato: 67.660 niños y adolescentes, 
                         porque parecería que los únicos gurises del INAU son 
                         los alrededor de 200 que están, pobrecitos, privados de 
                         la libertad por disposición de la Justicia. Con ellos 
                         tenemos que trabajar mucho.  
                         Pero en el INAU también hay 
                         adolescentes y niños que han ganado Olimpíadas 
                         Estudiantiles, Olimpíadas en el deporte, en 
                         matemáticas, en ciencias sociales, olimpiadas 
                         regionales e internacionales. Tengamos cuidado cuando 
                         hablamos de los niños y de los adolescentes del INAU. 
                         No estigmaticemos, por favor. Cuando esos niños y 
                         adolescentes sean mayores, que no tengan vergüenza de 
                         decir que tuvieron que estar en el INAU. No los 
                         estigmaticemos, tengamos cuidado cuando hablamos y 
                         cuando decimos las cosas.  
                         Esto que acabo de decir de estos 
                         niños que han ganado estas olimpiadas, esto sí que 
                         generalmente no se sabe. No es noticia en un mundo en 
                         el cual parece que el dolor de unos es un espectáculo 
                         que consumen otros. Ésta es la realidad. Es penosa esta 
                         actitud. Es triste que se diga “vamos así o asá” o “que 
                         no se sabe a dónde vamos”. Vamos como venimos y 
                         seguiremos como vamos y si podemos ir un poco más 
                         rápido, iremos más rápido. Y si mañana alguien quiere 
                         usar esta afirmación para criticarnos o amedrentarnos, 
                         y vaya que en algunas oportunidades pretendieron 
                         hacerlo y se equivocaron, pues que lo hagan. Lo dije 
                         hace un rato y lo repito ahora por si no fui 
                         suficientemente claro: este Gobierno no es arbitrario. 
                         No lo es. Pero no es neutral. No es neutral ante la 
                         pobreza y ante la indigencia que aún castiga a muchos 
                         uruguayos, y que nos duele. En nuestro Gobierno hay 
                         indigentes y pobres. No hemos podido solucionar todo el 
                         problema, y lo reconocemos, y seguiremos trabajando 
                         denodadamente para superarlo.  
                         No es neutral respecto a la igualdad 
                         de oportunidades para todos, y estamos trabajando en 
                         esa dirección. No es neutral ante el desempleo ni ante 
                         la calidad del trabajo. No es neutral respecto a 
                         convivencia ciudadana y la seguridad pública. No es 
                         neutral ante la violencia doméstica. No es neutral en 
                         el combate a la droga y al narcotráfico. No somos 
                         neutrales ni somos ciegos.  
                         No todo es color de rosa en este 
                         periodo de Gobierno. Queda mucho por hacer. Siempre 
                         habrá muchas cosas por hacer, aúnen países 
                         desarrollados. Lo grave es no asumirlo o evocar 
                         soluciones demagógicas. Lo correcto es trabajar fuerte 
                         para irlas superando.  
                         Pero reitero, tampoco somos 
                         arbitrarios. Y eso, que no es un mérito, sino un deber 
                         de todo Gobierno, se reconoce dentro del país y se 
                         percibe, también en el ámbito internacional.  
                         ¿Cómo se ve al Uruguay desde afuera? 
                         Esto que voy ahora a leer no lo decimos nosotros 
                         Gobierno. Lo dicen desde afuera. Fíjense ustedes.  
                         Uno, un estudio de la Fundación 
                         Bertelsmann, Alemania, marzo de 2008, entre 125 países 
                         en vías de desarrollo Uruguay ocupa el primer puesto en 
                         lo referente a democracia. 
                         El estudio destaca como dimensiones, 
                         o variables presentes en la democracia uruguaya –y esto 
                         no es mérito de este Gobierno, es mérito de todos los 
                         uruguayos y de gobiernos democráticos anteriores 
                         también, hay que reconocerlo-, destaca el consenso de 
                         normas democráticas, la estabilidad de las 
                         instituciones, la separación de poderes, la existencia 
                         de elecciones libres y justas, la integración política 
                         y social, el derecho de asociación y la libertad de 
                         expresión, la defensa de los derechos humanos y las 
                         investigaciones y procesos judiciales en curso sobre la 
                         violación a los mismos durante el periodo autoritario. 
                         Dos, un reciente Informe de CEPAL, 
                         enero de 2009, sostiene que Uruguay muestra a fines de 
                         2008 “un cumplimiento adecuado de las metas del milenio 
                         fijadas internacionalmente” y califica de originales 
                         algunos de los componentes de los planes de emergencia 
                         y equidad que estamos implementando. 
                         Tres, en su Informe Mundial 
                         correspondiente al año 2007 la publicación británica 
                         “The Economist” ubica a Uruguay en el lugar 27 en el 
                         ranking mundial, según ordenamiento y funcionamiento 
                         democrático. 
                         Esa lista en la que ocupamos el 
                         lugar 27 es encabezada por los países escandinavos y en 
                         la misma España ocupa el lugar 16, Estados Unidos el 
                         18, Portugal el 19, Gran Bretaña, el 23, Francia el 24, 
                         Costa Rica el 25, Uruguay el 27, Chile el 30, Brasil el 
                         42 y Argentina el 54.  
                         Según este mismo Informe, Uruguay es 
                         el único país sudamericano con democracia plena. Así lo 
                         dicen ellos. 
                         Cuatro, otro informe de “The 
                         Economist”. Este de diciembre de 2008 –diciembre de 
                         2008, plena crisis económica financiera internacional- 
                         destaca que Uruguay, lo dicen ellos, no nosotros, podrá 
                         navegar por la tormentosa crisis mundial con menos 
                         turbulencias que otros países y que para el incierto 
                         2009 podría alcanzar un crecimiento del 3%.  
                         Tres por ciento. Por cierto que no 
                         es el casi 11% del 2008 pero no es el desastre que 
                         algunos pronostican, o lo que es peor, parecen desear. 
                         Y si acá viene la crisis le va a ir mal a todos, aún 
                         hasta los que desean que venga una crisis. 
                         Cinco y leo textual: “Un oasis en el 
                         desierto. Uruguay resiste el temporal económico 
                         internacional con un crecimiento económico superior a 
                         dos dígitos.” Una nota publicada el 22 de setiembre de 
                         2008 en El País de Madrid, en la cual se resalta que 
                         por sexto año consecutivo la economía uruguaya se ha 
                         expandido. 
                         Seis, así nos ven de afuera: el 
                         índice del clima económico en América Latina, elaborado 
                         trimestralmente por el Instituto Alemán IFO y la 
                         Fundación Getulio Vargas de Brasil, ubicó durante 2008 
                         a Uruguay en el primer lugar de clima económico en 
                         América Latina, seguido por Perú y Brasil.  
                         Siete, un informe del Banco J. P. 
                         Morgan, del cual da cuenta una nota publicada por El 
                         País de aquí, de Uruguay, el 9 de febrero pasado, 
                         sostiene textual “que las fuertes políticas llevadas 
                         adelante por el Gobierno de Uruguay están aptas para 
                         minimizar los riesgos de la crisis económica global y 
                         que en 2009 Uruguay seguirá creciendo pese a la 
                         recesión de la región”. 
                         Ocho, Uruguay miembro titular del 
                         Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, 
                         creado en el año 2006. A ese Congreso no se ingresa por 
                         orden alfabético o de antigüedad, se ingresa por 
                         méritos propios y reconocimiento de los demás. 
                         Nueve, Uruguay primer país de 
                         América Latina y el caribe en el cumplimiento de las 
                         metas fijadas por la OEA y otros organismos 
                         especializados en materia de Gobierno Electrónico. Esto 
                         no es un adornito, sino que hace a la eficiencia y 
                         transparencia de una gestión de los gobiernos y el 
                         progreso socio económico de los países. 
                         Diez (y ustedes van a ver con qué 
                         satisfacción voy a leer esta parte), Uruguay primer 
                         país de América y séptimo del mundo libre de humo de 
                         tabaco. En estos días, la Organización Mundial de la 
                         Salud, le va a entregar a la Ministra María Julia Muñoz 
                         la distinción mundial por el trabajo que se ha llevado 
                         adelante en el Uruguay, en este tema. Esto no es un 
                         lujito en un país con índices muy preocupante de 
                         cánceres vinculados al consumo de trabajo. 
                         Once, Uruguay preside el Grupo de 
                         Expertos de OEA en materia de lucha contra el 
                         narcotráfico y el lavado de dinero e integra la 
                         Comisión de las Naciones Unidas especializada en 
                         Estupefacientes. A esos cargos, que no son del 
                         funcionario de turno sino que son del país, no se 
                         accede así nomás. 
                         Doce, Uruguay primer país del mundo 
                         con sistema de identificación individual obligatoria 
                         del ganado bovino, trazabilidad, lo que permite acceder 
                         a los mercados cárnicos más exigentes. 
                         Y trece, Uruguay logra la 
                         calificación más alta entre 60 países productores de 
                         alimento, en una auditoria realizada por la 
                         Organización Mundial de Sanidad Animal. Así nos están 
                         viendo desde afuera. 
                         Uruguayas y uruguayos, acá estamos, 
                         pero ello no debe entenderse como “hasta aquí 
                         llegamos”.  
                         Aún restan doce meses al actual 
                         período de gobierno. Tiempo más que suficiente para 
                         hacer muchas cosas y vaya si hay muchas cosas por 
                         hacer. Vaya si es posible profundizar los cambios en 
                         curso, encarar otros desafíos o abordar nuevos 
                         emprendimientos. Hay que seguir y vamos a seguir 
                         gobernando hasta el último día como corresponde del 
                         mandato que ustedes nos dieron. A) Seguiremos con una 
                         política económica pautada por nuestro compromiso 
                         programático de compatibilizar la responsabilidad 
                         fiscal con la imprescindible transformación productiva 
                         y social que requiere nuestro país. B) Seguiremos 
                         mejorando la infraestructura y servicio del país. 
                         Profundización del canal de acceso al Puerto de 
                         Montevideo, ampliación del mismo con un nuevo muelle, 
                         inauguración de la nueva terminal del Aeropuerto 
                         Internacional de Carrasco, saneamiento en la Ciudad de 
                         la Costa, conexión costera sobre el Arroyo Garzón, 
                         interconexión eléctrica con Brasil, asunto que trataré 
                         el próximo martes con el Presidente Lula. No nos vamos 
                         a retraer en los trabajos que tenemos. Vamos a salir de 
                         esta crisis adelante trabajando, enfrentándola, 
                         comprometiéndonos, mirándola con optimismo, con fuerza, 
                         vamos uruguayos que podemos, los uruguayos podemos, 
                         claro que podemos. Dentro de pocas semanas vamos a 
                         inaugurar la Torre Ejecutiva, el ex Palacio de 
                         Justicia, nunca terminado durante décadas, dentro de 
                         semanas estará liberado al uso público. Dentro de 
                         algunos meses, en este período de Gobierno se van a 
                         abrir las puertas de la nueva sala del Sodre, la vamos 
                         a abrir después de varios años, décadas que no se 
                         hacía. El Edificio Libertad se transformará en un 
                         centro hospitalario para atender toda la patología 
                         traumática. Y con alegría anuncio que en el correr de 
                         este año inauguraremos el Instituto Nacional del Cáncer 
                         para que los enfermos más pobres del país y que venían 
                         a internarse, y yo lo sé, lo digo porque lo viví, en 
                         galpones tirados, en colchones orinados y sucios van a 
                         tener un local adecuado, sano, como debe ser, para 
                         tratar dignamente a estos enfermos. Y esto se lo quiero 
                         agradecer públicamente, porque lo hicimos con la 
                         donación y la colaboración del gobierno de la República 
                         Bolivariana de Venezuela y con el pueblo venezolano que 
                         donaron U$S 3:000.000 para hacer esta obra. Y esto no 
                         son versos ni promesas electorales, estas son acciones 
                         del gobierno que se han llevado adelante entre todos 
                         los uruguayos. C) Continuaremos gestionando el acceso 
                         de nuestros productos a nuevos mercados y, como factor 
                         clave para ello, consolidaremos el status sanitario del 
                         país ubicado ya entre los mejores del mundo. Seguiremos 
                         apostando a la innovación, a la ciencia, y a la 
                         investigación. Por todo esto, porque como decía bien 
                         don Alexis de Tocqueville:  “a medida que la economía 
                         de una sociedad mejora, las desigualdades se hacen más 
                         insoportables”. Esto nos obliga a trabajar cada vez 
                         más. Cuanto más mejoramos nuestra economía, más tenemos 
                         que trabajar para enfrentar y derrotar las 
                         desigualdades. Por eso, porque es necesario y posible 
                         crecer y distribuir a la vez mejor de lo que hemos 
                         hecho hasta ahora, continuaremos el proceso de 
                         transformación democrática al Estado porque los países 
                         se enriquecen de la mano del mercado, pero distribuyen 
                         la riqueza de manos del Estado mediante políticas 
                         públicas  fuertes, eficaces y eficientes. Seguiremos 
                         con el Plan de Equidad porque la igualdad no se espera, 
                         se construye y porque los países avanzan cuando nadie 
                         se queda atrás, cuando todos somos iguales ante la ley 
                         pero todos, sobre todo, somos iguales ante la vida. 
                         Queremos equidad, equidad territorial, equidad. 
                           
                         Equidad territorial, equidad 
                         intergeneracional y equidad de género. Esto lo dije al 
                         final, no por considerarlo menos importante, sino 
                         porque estamos en la víspera del Día Internacional de 
                         la Mujer. Desde aquí nuestro saludo a todas las mujeres 
                         uruguayas. Nuestro reconocimiento a su confianza y a su 
                         esfuerzo y nuestro compromiso en la lucha contra la 
                         violencia de género, contra el tráfico y la explotación 
                         sexual, contra la discriminación explícita o solapada 
                         que aún existe en todos los niveles de la sociedad.  
                         Vamos a seguir con el Sistema 
                         Nacional Integrado de Salud. ¿Cómo no continuar con una 
                         política que ya ha hecho realidad la cobertura médica 
                         integral de más de 700.000 uruguayos que no la tenían? 
                         No la tenían y hoy esos 700.000 uruguayos la tienen. 
                         Entre ellos, 435.000 menores de 18 años y 20.000 
                         mayores de 65 años. ¿Cómo no profundizar, uruguayas y 
                         uruguayos, un sistema que ya ofrece gratuitamente, 
                         gratis, controles preventivos a bebés menores de nueve 
                         meses, a madres embarazadas y a enfermos diabéticos, 
                         así como mamografías y papanicolao gratis?  
                         Sería bueno, me parece a mi muy 
                         humildemente, que sería bueno, que quienes ahora 
                         preguntan “¿por qué una tecnología sofisticada como el 
                         PET Ciclotrón debe estar antes en el sistema público 
                         que en el privado?” se preguntaran, por un instante, 
                         solamente, se preguntaran: “¿por qué estas prestaciones 
                         que ahora se ofrecen gratuitamente a la población no se 
                         ofrecieron antes?” No son tan caras ni tan complejas.
                          
                         Sería bueno que quienes pronosticar 
                         urbi et orbi el derrumbe del sistema nacional de salud 
                         ante la estampida que iba a provocar la apertura del 
                         corralito mutual, ahora dijeran algo. 20.000 personas 
                         decidieron en todo su derecho cambiar de mutualista o 
                         irse de ASSE hacia las mutualistas. ¿Y qué? ¿Hubo algún 
                         tumulto? ¿Alguna mutualista colapsó por esta medida? 
                         También hubo agoreros que pronosticaron que el sistema 
                         se caía en pedazos. Y ahí está, vivito y coleando.  
                         Uruguayas y uruguayos, una cosa es 
                         tomarse la vida en serio pero otra, no muy saludable, 
                         por cierto, es andar como dice mi querido compañero y 
                         amigo Mario Delgado Aparaín: “andar tragedeando la 
                         vida”.  
                         Cuatro: seguiremos aportando 
                         soluciones habitacionales para alcanzar 45.253 en 
                         febrero de 2010 y se habrán construido, también, 978 
                         viviendas para pasivos. Seguiremos con el Plan CEIBAL. 
                         El Plan CEIBAL es mucho más que una maquinita. Es una 
                         revolución profunda de esas que hacen temblar hasta las 
                         raíces de los árboles y cuya mención, en su momento, 
                         tanto escándalo provocó. Claro, no entendieron. Algunos 
                         no entendieron lo que queríamos decir cuando decíamos 
                         que iban a temblar hasta las raíces de los árboles. 
                         Capaz que andan por ahí, en algún parque público 
                         haciendo un pozo al lado de un árbol, para ver cómo 
                         tiemblan las raíces. Con estas cosas, como el Plan 
                         CEIBAL, es que en una sociedad tiemblan hasta las 
                         raíces de los árboles.  
                         Ya se han entregado 180.000 equipos 
                         y van a tener todos los niños escolares del interior 
                         del país, de Montevideo, de Canelones y sus maestros 
                         las computadoras. Y dentro de pocas semanas, en abril, 
                         comenzaremos a distribuir máquinas especialmente 
                         diseñadas para escolares con discapacidad visual. Los 
                         niños que no ven también tendrán su computadora.  
                         En el Uruguay, hoy todos tenemos 
                         derecho. Vamos a seguir promoviendo derechos. Porque 
                         los derechos son instrumento para dignificar la vida de 
                         la gente. Los derechos son la ética de la democracia. Y 
                         como la democracia no se construye sobre el olvido ni 
                         sobre la impunidad, seguiremos trabajando por verdad y 
                         justicia en lo que refiere a las violaciones a los 
                         derechos humanos, acaecidos durante el último período 
                         dictatorial que padeció nuestro país. 
                         Y voy a dar una primicia. Bien 
                         fresquita, de ahora, de hace unas pocas horas. Podemos 
                         anunciar que gracias al trabajo paciente de la 
                         Cancillería y de nuestro Embajador en Italia, Doctor 
                         Alberto Breccia, el Ministerio de Justicia Italiano ha 
                         dictado una resolución por la cual dispone que se 
                         proceda penalmente contra el señor Jorge Néstor 
                         Tróccoli Fernández, que se proceda por los hechos 
                         contenidos en la solicitud formulada por nuestro 
                         Juzgado Letrado de Primera Instancia en lo Penal de 19º 
                         Turno.  
                         Cuando dije último período 
                         dictatorial, no sólo lo dije por reciente, sino también 
                         por Nunca Más. Nunca Más, pero con memoria, con verdad, 
                         con justicia y reparación. Tal es nuestra convicción y 
                         nuestro compromiso. 
                         Uruguayas y uruguayos, esto yo sé 
                         que se ha hecho largo. Pero es muy difícil resumir 
                         cuatro años de gestión en unos pocos minutos. Es muy 
                         difícil. Podríamos seguir enunciando continuidades y 
                         profundizaciones de los cambios en curso, pero quiero 
                         referirme a algunas novedades que en rigor no son 
                         tales, pero a las cuales asignaremos especial atención 
                         en los meses venideros. 
                         Una de ellas es, obviamente, la 
                         crisis financiera global, una crisis sin precedentes y 
                         cuyas consecuencias y duración aún es arriesgado 
                         predecir.  
                         Ante esta crisis unos dicen que el 
                         capitalismo se enloqueció y no sabe a quien culpar por 
                         su locura. Mientras que otros han propuesto que los 
                         economistas de la Escuela de Chicago, debieran devolver 
                         el Premio Nóbel que en su momento recibió Milton 
                         Friedman. No vamos a entrar en esa polémica, pero algo 
                         está claro: colapsó el paradigma neoliberal. Se acabó 
                         el tiempo en que la economía familiar se comportaba 
                         como una empresa, las empresas como bancos y los bancos 
                         como fondos de riesgo. Se terminó. 
                         Y se terminó como lo estamos viendo, 
                         lamentablemente. La salida a esta crisis no será ni 
                         inmediata ni fácil y Uruguay no es ajeno a esta 
                         situación. Uruguay no está en la luna, está acá en la 
                         tierra. Si es una crisis global, sistémica, la vamos a 
                         vivir todos.  
                         Pero el Uruguay está muy bien 
                         preparado. La vamos a vivir, nunca lo negamos, nunca, 
                         eh. La vamos a vivir y ya hemos tomado medidas. La 
                         veníamos piloteando esta crisis, desde junio del año 
                         pasado y tomamos medidas desde mucho antes para 
                         fortalecer al país. Disminuimos muchas 
                         vulnerabilidades, esto nos permite encarar mucho mejor 
                         la crisis que está llegando. La salida no va a ser 
                         inmediata ni fácil y Uruguay no está ajeno a esta 
                         situación. 
                         Hay que tenerlo en cuenta. Hay que 
                         ser muy cuidadosos. Pero no hay que ser miedosos, ni 
                         quedar paralizados, ni caer en el dramatismo, ni 
                         sembrar dramatismo. No somos indiferentes a la crisis 
                         financiera global, pero no estamos indefensos ante la 
                         misma. Resulta imprescindible tomar conciencia del 
                         cambio de escenario mundial y de las restricciones que 
                         ello nos impone, lo que inevitablemente nos exige ser 
                         más prudentes aún con el gasto, exigiendo ahorros a los 
                         Ministerios y las empresas públicas, cuidando lo 
                         logrado y protegiendo los gastos prioritarios ya 
                         comprometidos con los que vamos a cumplir. 
                         Resulta imprescindible, también, 
                         proteger el trabajo y los ingresos de los uruguayos. 
                         Ello supone también combatir el peor impuesto que 
                         existe. Ese impuesto, no se llama Impuesto a las Rentas 
                         de las Personas Físicas, se llama inflación.  
                         Ya hemos tomado algunas medidas al 
                         respecto: medidas monetarias, fiscales, comerciales, 
                         acuerdo voluntario de precios, monitoreo de los mismos, 
                         información a los consumidores, etc. Los resultados 
                         están a la vista, la deflación registrada en febrero 
                         que mencionamos anteriormente es uno de esos resultados 
                         y, además, tranquilizante, por cierto. Pero no 
                         dudaremos, ni un instante, en tomar todas aquellas 
                         medidas necesarias para combatir este impuesto que 
                         afecta principalmente a la población de menores 
                         recursos. No serán esta vez los asalariados quienes 
                         paguen el costo de una crisis financiera internacional; 
                         no serán los trabajadores. 
                         Un apunte respecto a los efectos 
                         inexorables, pero amortiguados, que estimamos tendrá la 
                         crisis financiera global en Uruguay. En materia fiscal, 
                         uruguayas y uruguayos, no estamos en condiciones de 
                         adoptar más medidas económicas contra cíclicas, pero 
                         fruto de lo realizado hasta el momento, estamos en 
                         condiciones y podemos asegurar que vamos a evitar caer 
                         en políticas pro cíclicas del pasado que terminaban en 
                         un ajuste fiscal que ahogaba a los que menos tenían.
                          
                         Otra problemática que requiere 
                         especial atención es la abarcada en la expresión cambio 
                         climático. El cambio climático no es un fenómeno 
                         inédito y tampoco es un problema por venir o ajeno a 
                         nuestro país. Ha habido muchos, en los más de cuatro 
                         mil millones de años que se estima tiene nuestro 
                         planeta y varios de ellos fueron tremendos. El cambio 
                         climático que está ocurriendo se manifiesta en Uruguay 
                         en un gradual pero constante aumento de la temperatura, 
                         del nivel del mar y de las lluvias respecto a comienzos 
                         del siglo XX, así como en una mayor frecuencia e 
                         intensidad de ciertas emergencias climáticas: sequías, 
                         inundaciones, tornados, granizadas, etc.  
                         Tales manifestaciones repercuten, a 
                         su vez, en el hábitat y la salud de las personas, en la 
                         infraestructura, en el sistema productivo, en la 
                         actividad económica del país y, en definitiva, en sus 
                         posibilidades de desarrollo. De nada sirve negar o 
                         minimizar el cambio climático, ni acordarse de Santa 
                         Bárbara cuando truena.  
                         Pero tampoco sirven las visiones 
                         apocalípticas de este fenómeno. Al fin y al cabo, es el 
                         resultado directo e indirecto de la actividad humana. 
                         Es necesario sí, diseñar e instrumentar una estrategia 
                         de adaptación y mitigación, esto último ya lo estamos 
                         haciendo, para responder a los cambios que ya se han 
                         constatado y a los que sabemos que vendrán.  
                         La complejidad del desafío planteado 
                         y la necesidad de resolverlo adecuadamente implican 
                         miradas diversas y compromisos de largo plazo Políticas 
                         de estado que, en tanto tales, trascienden las 
                         competencias del Gobierno y los límites temporales de 
                         su mandato, que requieren la participación y el apoyo 
                         del sistema institucional y político, de la comunidad 
                         científica y educativa, de los agentes económicos, del 
                         mundo de la producción y el trabajo, de las 
                         organizaciones gremiales, de movimientos sociales, en 
                         fin, de todos los uruguayos.  
                         No partimos de cero. Uruguay ya ha 
                         trabajado en este tema. Uruguay aprobó en el 92 y 
                         ratificó en el 94 la convención marco de las Naciones 
                         Unidas sobre Climático, Es parte del protocolo del 
                         Kyoto de 1997 y de otros acuerdos internacionales. 
                         Ha realizado avances normativos de 
                         significación en este último tiempo. Entre ellos, las 
                         leyes de protección del medio ambiente y de 
                         ordenamiento y desarrollo territorial sostenible, los 
                         decretos referidos a gestión de residuos de envases, el 
                         Sistema Nacional de Áreas Protegidas, etcétera. 
                         Pero es necesario hacer más, en 
                         todos los ámbitos y entre todos. Por eso, el próximo 17 
                         de marzo yo mismo concurriré a una sesión del Congreso 
                         Nacional de Intendentes que se realizará en el marco de 
                         la Expoactiva 2009, para presentar lo que tal vez 
                         podría ser una propuesta preliminar de Agenda Nacional 
                         para el Cambio Climático y para el estudio de nuevos 
                         procedimientos, producción que estamos elaborando a 
                         nivel del Poder Ejecutivo. 
                         Ese material no es un tratado 
                         científico. No tiene carácter fundacional ni ecuménico, 
                         ni es finalista. Es, si se quiere, un modesto pero 
                         inexcusable aporte inicial del Gobierno a una tarea 
                         que, reitero, involucra a toda la sociedad.  
                         Por eso lo presentaremos ante el 
                         Congreso Nacional de Intendentes en el marco de una 
                         exposición directamente vinculada a la producción y a 
                         la innovación, en el departamento de Soriano.  
                         En estrecha relación con lo 
                         anterior, uruguayas y uruguayos, podríamos hablar de 
                         una tercera novedad: el Plan Estratégico de Desarrollo 
                         Energético, aspecto clave en cualquier estrategia de 
                         desarrollo sustentable. A partir de un estudio 
                         prospectivo detallado sobre oferta y demanda energética 
                         del Uruguay hasta el año 2030, encararemos un plan que 
                         asegure, diversifique la matriz energética, asegure el 
                         suministro y la eficiencia energética, priorice las 
                         nuevas tecnologías y los recursos renovables y preserve 
                         el medio ambiente.  
                         Sin energía no hay desarrollo 
                         posible, pero la disponibilidad de energía por sí sola 
                         no asegura el desarrollo. Hay que trabajar en esto, y 
                         lo estamos haciendo y lo seguiremos haciendo con 
                         responsabilidad de país y sentido progresista.  
                         Ya hay una comisión multipartidaria 
                         de técnicos que está estudiando si es viable o no 
                         utilizar la energía nuclear para generar energía 
                         eléctrica en el Uruguay. Sí o no, lo veremos entre 
                         todos los uruguayos.  
                         Y también se ha lanzado a nivel 
                         internacional, licitaciones para interesados que 
                         quieran explotar, ver, hacer la prospección del mar 
                         territorial uruguayo porque posiblemente, casi 
                         seguramente el mar territorial uruguayo, dentro del 
                         territorio soberano del Uruguay existan grandes 
                         reservas de gas natural y quizás también de petróleo. Y 
                         esta también es una muy buena noticia para los 
                         uruguayos y para el Uruguay del futuro. 
                         Una cuarta novedad a la que quiero 
                         referirme es el denominado Plan CARDALES. La sigla, 
                         inspirada en el nombre de la localidad pionera del Plan 
                         Ceibal, significa Convergencia para el Acceso a la 
                         Recreación y al Desarrollo de Alternativas Laborales y 
                         Emprendimientos Sustentables.  
                         Pero más allá de ese titulo 
                         interminable, el Plan CARDALES consiste en implementar 
                         un sistema que permite poner a disposición de todos los 
                         hogares uruguayos servicios de Internet, televisión 
                         para abonados y telefonía a un precio inferior al de la 
                         suma de cada uno por separado.  
                         Dado que hay un importante número de 
                         hogares uruguayos que no accede a varios o a ninguno de 
                         estos servicios, el Plan pretende constituirse en el 
                         vehículo a través del cual se asegure la conectividad y 
                         se brinde un servicio convergente básico de calidad a 
                         todos los hogares uruguayos.  
                         Este tipo de experiencia no es nuevo 
                         a nivel mundial, pero el Plan CARDALES se propone 
                         convertir al Uruguay en el primer país totalmente 
                         conectado y convergente.  
                         Para dar cumplimiento a tal 
                         objetivo, el Plan prevé la coordinación de acciones 
                         entre agentes públicos y privados, porque naturalmente, 
                         un emprendimiento de este tipo requiere inversiones y 
                         financiamiento. El Estado sólo no lo puede hacer y si 
                         lo hacen los privados, lo van a hacer para sólo un 
                         sector de la sociedad: el que puede pagar. Nosotros 
                         queremos llegar, con un procedimiento mixto, a toda la 
                         sociedad. Igualdad de oportunidades para todos. 
                         Podrá decirse que esto es un lujo, 
                         pero no. También se dijo, allá por la década del ‘30 o 
                         el ‘40, cuando ingresó la radio al Uruguay, que ese era 
                         un lujo para unos pocos. Pero fue una necesidad para 
                         todos los uruguayos y la tuvieron todos los uruguayos, 
                         cuando se desarrolló en el tiempo. También se dijo que 
                         la televisión, allá por la década del ‘50 del siglo 
                         pasado, ingresó al Uruguay, que era un lujo para unos 
                         pocos. Felizmente hoy está extendida a gran parte de la 
                         sociedad. Esto tampoco es un lujo. 
                         En el mundo actual la conectividad 
                         de los hogares, el acceso al mundo de las tecnologías y 
                         de la información y del conocimiento, no es un adorno 
                         del desarrollo, sino que constituye el núcleo del 
                         desarrollo. 
                         Queridas uruguayas y queridos 
                         uruguayos, aquí estamos y así seguimos. Haremos más, 
                         porque creemos en el futuro, creemos en la sociedad y 
                         creemos en la posibilidad de un futuro compartido. Eso 
                         al fin y al cabo, son las Naciones, un proyecto de 
                         futuro compartido. Y como el presente es futuro que ya 
                         llegó, acá estamos. Y hay que seguir. 
                         Seguiremos incluso en un año en el 
                         cual los uruguayos tendremos que dedicar tiempo y 
                         atención para tomar algunas decisiones muy importantes. 
                         Porque elegir al próximo Presidente de la República, al 
                         próximo Vicepresidente de la República, a los 
                         integrantes del próximo Parlamento Nacional, no es un 
                         detalle menor si se tiene en cuenta que los candidatos, 
                         más allá de su importante significación como 
                         individuos, expresan las propuestas programáticas, los 
                         compromisos de gobierno y las estrategias de país de 
                         sus respectivas colectividades. Por razones obvias, no 
                         incursionaré en el terreno político electoral, pero 
                         como Presidente de la República, en el marco de las 
                         competencias del cargo que ejerzo y por una razón de 
                         elemental respeto a la confianza y al mandato que 
                         ustedes han depositado en mí, quiero decirles lo que 
                         ustedes ya saben.  
                         Porque lo dije el 1º de marzo de 
                         2005, al declarar fidelidad constitucional ante la 
                         Asamblea General del Poder Legislativo: que trabajaré 
                         al extremo máximo de mis aptitudes, potestades y 
                         posibilidades, para garantizar a todos y cada uno de 
                         los uruguayos, el pleno ejercicio de sus derechos 
                         ciudadanos. El derecho al libre pensamiento, a la libre 
                         información, a la libre expresión, al respeto y a la 
                         tolerancia y no vamos a tolerar a nadie que quiera 
                         pisotear éstos derechos.  
                         Seremos implacables a quienes no 
                         quieran respetar el derecho de todos los ciudadanos a 
                         expresarse libremente, con respeto y con tolerancia. 
                         Así lo he hecho, desde aquel lejano 1º de marzo de 2005 
                         y así lo haré hasta el último día del mandato con el 
                         que ustedes me han honrado. 
                         Queridos compatriotas, probablemente 
                         ésta sea la última vez que me dirijo a ustedes como el 
                         Presidente de la República en el actual período de 
                         Gobierno.  Aquí estoy terminando mi comparecencia 
                         pública. Aquí mismo, en este mismo lugar, la empecé 
                         cuando participé por primera vez en un acto público de 
                         masas, hace veinte años. Permítanme, entonces, 
                         confesarles algo: si algún orgullo he sentido en estos 
                         cuatro años, es el orgullo de ser el Presidente de 
                         todos los uruguayos, de los blancos, de los colorados, 
                         de los frenteamplistas, de los independientes, de 
                         todos, de los que no tienen partido político. Pero como 
                         el orgullo por sí solo no sirve para mucho, también he 
                         sentido el agradecimiento, el compromiso y la 
                         responsabilidad de ser el Presidente de todos los 
                         uruguayos. Y hoy poder decirles que les agradezco, 
                         porque aquel 1º de marzo de 2005, en las escalinatas 
                         del Palacio Legislativo, les pedí “no nos dejen solos” 
                         y nunca nos han dejado solos. Muchas gracias, muchas 
                         gracias.  
                         Por eso, sin renunciar a mis señas 
                         de identidad y sin ignorar los buenos deseos o 
                         legítimos intereses de cada uruguayo, mis decisiones y 
                         acciones apuntan a lo que nuestro país necesita y a lo 
                         que podemos hacer entre todos. Y ¡vaya, si hemos hecho 
                         cosas entre todos! ¡Vaya, si estamos avanzando juntos!
                          
                         Estos avances nos han traído hasta 
                         aquí, pero hay que seguir adelante y vamos a hacerlo 
                         como hasta ahora, con ese aire sencillo tan propio de 
                         los uruguayos. Tenemos un hermoso país, uruguayas y 
                         uruguayos. Hagámoslo mejor aún. Tenemos un país de 
                         escala humana, consolidémoslo como país de desarrollo y 
                         bienestar humano. Tenemos un país con historia, pero 
                         tenemos derecho a un país con futuro. Ello implica una 
                         responsabilidad colectiva, porque la construcción del 
                         futuro nos involucra a todos, pero especialmente a los 
                         jóvenes. Tenemos una juventud preciosa. Tenemos 
                         científicos jóvenes de primer nivel. Tenemos jóvenes de 
                         cultura, tenemos jóvenes músicos y cineastas jóvenes 
                         reconocidos mundialmente. Hasta tenemos una campeona 
                         mundial de boxeo juvenil.  
                         Y tenemos, uruguayas y uruguayos, 
                         ese formidable semillero que son, lo voy a decir por 
                         primera vez, los ceibalitos. Ese semillero está 
                         germinando y con él crece el Uruguay del futuro “desde 
                         el pie”, como cantaba Alfredo Zitarrosa. Tenemos muchas 
                         razones por las cuales podemos sentir orgullo, 
                         compromiso pero también hoy podemos sentir confianza y 
                         tener esperanza.  
                         Permítanme resumirlas en una sola y 
                         única razón que también está acá: una razón que tiene 
                         cuatro franjas azules sobre un fondo blanco y un sol 
                         radiante en el ángulo superior izquierdo. Es esa 
                         bandera uruguaya que nos cobija a todos, que cobija a 
                         este hermoso país, que es hermoso.  
                         Piensen por un momento, uruguayos, 
                         recuerden aquella canción que dice: “en el Uruguay, 
                         cuando empieza a amanecer y aclararse el horizonte y se 
                         empieza a dibujar el negro perfil del monte”. 
                         Recuerden, uruguayas y uruguayos, lo hermoso que es 
                         nuestro país. Arriba el Uruguay. Arriba esa razón. 
                         Arriba esas banderas uruguayas. ¡Vamos uruguayos! 
                         Levanten esas banderas que desde lejos las quiero ver. 
                         Levanten esas banderas, uruguayos. Hasta siempre. ¡Viva 
                         el Uruguay!  |